Capítulo 6
Días después...
Nerviosa, las piernas me temblaban. Sostuve con fuerza el oso de felpa en mis brazos y tomé sus orejas y pensé en él con amor.
<< Oh dios >>
<< Espero que le guste >>
Joey me había citado a los estudios de grabación. Él junto a los de su banda grabarían un par de canciones, para un nuevo disco y él tierno me había dicho que yo fuera a verlo ahí.
Solo pensé en él y volví a recordar, que habíamos hecho el amor, y sonreí con anhelos y amor por él.
Miré de nuevo el oso de felpa en mis brazos y sonreí con cariño.
Tras la ventanilla, vi a Joey, y él junto con los demás alistándose, volteó a mirarme y me sonrió. Mi corazón estalló de alegría.
El productor les indicó que comenzarán y Joey con los audífonos en su cabeza empezó a cantar.
Tenía la voz más bella, suave y fascinante del mundo. Me hizo estremecerme por él.
Joey cantaba con toda su pasión. Amaba cantar, era increíble; lo miré perdidamente enamorada y sostuve con más cariño el oso de felpa en mis brazos.
Lucía muy atractivo para aquella grabación. Era el hombre más perfecto, sencillo, tierno y lindo de todos.
Nunca había estado en un estudio de grabación y gracias a él, ahora lo estaba conociendo.
Cantaba, me miró y yo perdida en él, me sonrió con destellos y siguió cantando...
Salió del estudio de grabación, me miró contento y se me acercó. Yo le sonreí nerviosa, sujeté fuerte el osito y también me le acerqué; el corazón me brincó de alegría y de amor.
Nos sonreímos, lo miré toda enamorada y Joey me miró con ternura y miró el oso de felpa en mis brazos. Acarició mi mejilla.
_ Hola niña mía
_ Hola mi vida – sonrió tierno – Me encantó verte cantar. Eres grandioso
_ Vamos Jejeje, no es para tanto – dijo un poco avergonzado y yo lo encontré tan tierno así en esa faceta.
_ Claro que lo es. Cantas precioso – me acarició con más cariño la mejilla.
_ Niña mía
_ Jejeje – miró otra vez el oso de felpa en mis brazos.
_ ¿Y ese osito, hermosa?
_ Es para ti. Lo compré únicamente para ti. Te amo Joey
Me miró perdidamente y yo se lo entregué. Él me lo recibió con todo su cariño y me sonrió tierno, inmensamente feliz.
_ ¿Te gusta?
_ Nunca me habían regalado algo así, un osito. Es tan tierno y más porque viene de ti
Lo miré con el corazón a punto de salírseme del pecho.
_ Eres muy linda y dulce mi Emma. Créeme que este osito lo atesoraré siempre
_ Oh Joey
_ Te amo
_ Y yo a ti
Me aferró a él y ambos nos sonreímos y nos besamos. Nos abrazamos fuerte, muy fuerte, sin Joey soltar el osito de felpa, que yo le había regalado con todo mi amor.
Tomados de la mano, salimos del estudio de grabación, volvimos a sonreírnos y Joey me llevó a conocer la ciudad.
Él si me quería. Jamás lo había sentido, de parte de alguien, hacia mí y esa era la primera vez y era nada menos que con él, con mi amado Joey Tempest.
Tomados de la mano, caminábamos por un enorme parque, rodeado de árboles y pétalos, regados por la arena.
Hicimos un intercambio de miradas y él me sonrió tierno y contento. Apretó con más cariño mi mano, junto a la suya, y yo me perdí en sus lindos ojos. Se sentía el hombre más feliz de todos.
Volvimos a sonreírnos y yo no me pude resistir, y más que feliz, me apoyé en su hombro y él me miró con destellos.
Nos reímos y Joey me elevó en sus brazos y comenzó a darme vueltas. Yo me reí a toda carcajada.
_ ¡No Joey! ¡No!
_ ¡Jajaja!
_ ¡No!
Sin bajarme de sus brazos, me acercó hasta su rostro, yo le sonreí y a él le brillaron sus ojos. Recordó una vez más que habíamos hecho el amor y más vibró de alegría y me sonrió perdidamente enamorado.
_ Te amo mi Emma
_ Y yo a ti mi Joey
Nos sonreímos y nos besamos y él me abrazó con todo su amor.
Caminamos por otro encantador parque. Joey compró una paleta de frambuesa para él y para mí y ambos nos la comimos, frente a una estatua y nos sonreímos.
_ ¿De veras tienes que irte hermosa?
_ Si, ya sabes. Si yo vine aquí, fue solo porque mi amiga Romina me invitó, para olvidarme de lo que me pasó con Adrián
_ Si lo sé, pero – se detuvo – No quiero que te vayas – lo miré con tristeza.
_ Pero debo irme...
_ ¿Y sí te quedas aquí conmigo? – le sonreí con melancolía.
_ Me encantaría, pero tengo una vida allá en Chile, al igual que tú aquí – se entristeció y yo lo advertí.
_ Esto es tan difícil. Vine aquí para olvidarme y termino conociéndote a ti, como un bello sueño y me enamoró de ti – me sonrió con tristeza.
_ Tú has sido un hermoso sueño para mí, del que nunca podré olvidar – se me cayeron las lágrimas.
_ Joey
_ No quiero perderte Emma. Te amo
_ Y yo a ti
_ Me iré contigo – lo miré abrupta, incrédula y le sonreí con ilusión.
_ ¡¿Qué?!
_ Lo que oíste mi amor. En cuanto se termine la gira, iré por ti a Chile y me quedaré a tu lado para siempre
_ Oh Joey
_ Te amo Emma. Solo quiero estar a tu lado – sentí de pronto tristeza. Vi lejana esa posibilidad.
_ Pero ¿Y si no puedes, no puedes viajar allá a mi país y quedarte conmigo? – me sonrió tierno y levantó con cariño mi mentón.
_ Eso no va a suceder cariño. Te amo mucho para dejarte ir, así como así
_ Mi Joey
_ Iré por ti Emma. Te lo prometo
_ Ahí estaré esperándote entonces mi Joey
_ Te amo
_ Y yo a ti
Le dije con mis ojos llenos de lágrimas y él acercó mis labios a los suyos y me besó.
Volvimos a su hotel, comiéndonos otra rica paleta de frambuesa...
Le preparé su café cargado, como a él le gustaba y me senté a su lado con mi taza de té. Joey me sonrió.
_ Ha comenzado a hacer más frío ¿Volverás con tú amiga al hotel?
_... Eh si... supongo – sonrió.
_ ¿Y sí te quedas conmigo esta noche?
Le sonreí tierna y un poco nerviosa. La idea me había agradado.
_ Jejeje, bueno, está bien
_ Jejeje, ven aquí...
Me tomó de las manos y me aferró a él; yo me perdí en sus profundos ojos, él me sonrió y nos besamos.
Me abrazó y yo rodeé su cuello con mis brazos.
_ Eres realmente bella Emma
Me susurró, yo le sonreí y nos volvimos a besar. Luego él me cargó en sus brazos y fuimos a su dormitorio.
Besándonos, Joey besó y acarició todo mi cuerpo y yo perdida en él, él me miró con destellos.
Desnudos, yo estaba arriba suyo y él sonriéndome, acarició mi rostro y contempló mis pechos y todo mi cuerpo.
_ Te amo mi Emma
_ Y yo te amo a ti Joey
Volvimos a besarnos y él me rodeó en sus brazos y seguimos haciendo el amor así en esa dulce y romántica posición.
Abrasados, Joey acarició mi brazo y yo aferrada en su pecho, lo miré con alegría y él me sonrió todo tierno.
_ Soy tan feliz teniéndote así otra vez en mis brazos
_ Y yo lo soy aún más de que seas tú el que me tenga en sus brazos – sonrió vibrante y me abrasó con más cariño.
_ Niña mía
Yo lo miré y él me miró sereno y tomó mi mano.
_ Está no será nuestra última vez. Te lo prometo amor mío
_ Lo sé. Creo en ti
Joey me miró perdidamente enamorado, yo le acaricié su mejilla y nos besamos cerrando aquella promesa.
Días después...
De vuelta en mi país, volví a lo que era mi vida. Solo lo tenía a él en mi dulce recuerdo y mi rutina salía de la monotonía de siempre, pero a la vez lo extrañaba con todo mi corazón.
<< Mi amado Joey. Deseo tanto que ya regreses y estés aquí conmigo >>
Allá en Londres, otro gran recital había sido a su favor y él un poco cansado, dio un suspiro y se acercó a mirar la noche tras su ventana.
<< Mi amada Emma, si supieras cuanto te extraño >>
Volteó y miró el osito de felpa tendido sobre su cama. Lo tomó con cariño y sonrió tierno.
<< Mi Emma, mí amada Emma >>
<< Pronto estaré contigo. Solo espera un poco más niña mía y muy pronto estaremos juntos >>
Llovía y llovía en Santiago y yo sentada bajo un paradero, solo miraba caer la lluvia frente a mí y mi único pensamiento era él.
Así los días pasaron y yo con la ilusión, esperaba a que mí amado Joey regresara por mí. Era como un cuento de hadas, que yo sabía que muy pronto se me haría realidad.
Miraba el video, donde me había grabado el día del recital. Lo miró con atención una vez más y recordó cuando nos conocimos ese mágico día y sonrió con alegría y amor.
Miró cada curva de mi rostro y sonrisa, como si las volviera a mirar por primera vez y sus ojos brillaron.
<< Si supieras que he tenido este video de ti, además de todas tus fotos, todo este tiempo conmigo mi Emma >>
Una semana después...
Llovía sin parar en Santiago. Sonrió y miró transitar la gente; pensó en mí y elevó su sonrisa, tomó su equipaje y se dirigió a tomar un taxi.
Sin importar que estuviera lloviendo, salí a mirar el jardín, e ida en las flores y plantas, la lluvia me empapó. Eso no me interesó pues solo me quería sentir libre y recordé a Joey con amor.
De pronto escuché el timbre y, así toda empapada, fui a ver de quien se trataba.
Emocionada, mi corazón quedó perplejo. No lo pude creer y dije su nombre con afección y Joey me sonrió perdidamente enamorado.
_ Hola niña mía. Te dije que regresaría por ti – se me cayeron las lágrimas.
_ ¡Joey! ¡Mi Joey! ¡Eres tú!
Lo abrasé con todas mis fuerzas y él, todo tierno, me rodeó en sus acogedores brazos y acarició mi largo cabello.
_ Te dije que iba a regresar mi vida y aquí estoy, ahora solo contigo – acaricié su rostro.
_ Mi Joey
_ Te amo
_ Y yo a ti
Me sonrió y me cargó feliz en sus brazos. Me dio vueltas y vueltas y yo más que feliz, le sonreí toda enamorada en sus brazos y luego nos besamos.
Todos estábamos expectantes y emocionados a que empezara pronto el show.
Mi amiga y yo sentadas en primera fila, miramos el escenario. Yo estaba frente a su infaltable micrófono blanco y solo pensando en él, mi corazón y alma vibraron con nervios, dicha y mi eterno amor hacía él.
Todo el público inquieto, gritaban y aplaudían de la emoción. Nosotras sonreímos, y de repente se apagaron las luces, y yo más que feliz y nerviosa, la gente aplaudió más fuerte y ellos aparecieron. Mi aliento se detuvo y él me sonrió; sostuvo el micrófono y comenzó a cantar.
Todos gritaron, yo lo miré perdidamente enamorada y Joey cantando, él me sedujo una vez más con su suave voz.
Lo animé como la primera vez, años atrás y me sentí increíble. Me dejé atrapar por su increíble voz y él me miró y me sonrió todo feliz y enamorado.
Lo amé con todo mi corazón; todos, incluida mi amiga, cantaban sus canciones y Joey sonreía pleno. Era todo un artista profesional. Era el mejor.
No dejó de sonreír, me miró con destellos y yo perdida en él, Joey se me acercó y todos aplaudieron. Yo lo miré anonadada y a la vez dichosa y él me cantó solo a mí. Tomó mi mano con cariño y ambos sonriéndonos, Joey me siguió cantando la canción "Praise you".
Nos miramos y él me sedujo con sus profundos ojos celestes. Todos nos aplaudieron y nosotros, más que felices, volvimos a sonreírnos y Joey, junto con su banda, siguieron dando su magnífico show, al igual como sucedió aquel día, en que ambos nos conocimos y nos enamoramos a primera vista.
Fin.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro