La mañana transcurre normal, hoy conocí a Rosalya, Alexy y Melody. Entre otros estudiantes. Pero mi hermana Sol, se llevo mejor con Rosalya, y no me sorprende ya que ambas tienen el mismo carácter. Yo me hice muy amiga de Melody y Violetta.

Violetta está enamorada de Alexy, y la verdad es que no fue nada difícil de adivinar. Pero me dijo que es gay.

Porque los chicos más lindos son homosexuales??

Y Melody esta enamorada de Nathaniel, y ella no creo que se de cuenta de lo evidente que es. Enserio, ella babea por el. Me sentí algo triste cuando me lo confesó, no se porque.

Las clases de la mañana finalizaron y me dirigía al comedor con Violetta. Pero a mitad de camino, me dijo que tenía que guardar sus cosas en su casillero y que me alcanzaba después. Me dirigí a el comedor con paso ligero.

-Ohh!!- por poco caigo al piso, por una mochila que estaba en medio del pasillo. Pero unos brazos me agarraron a tiempo.

-Estas bien??- esa voz. Levante la vista y vi a Lysandro.

-Si gracias, buenos reflejos- me enderecé y me quedé platicando un rato más con Lys, asta que llegó Violetta y nos dirigimos al comedor escolar.

En la clase de música...

En la clase de Música el profesor nos puso en grupos de cuatro y teníamos que componer una canción.
En mi grupo estaba Lysandro, Melody, Nathaniel y yo.
En el grupo de Sol, estaban Castiel, Violetta y Armin.

Narra Sol:
Después de media hora a ninguno se nos avía ocurrido nada para la estupida canción. Armin estaba en su consola de videojuegos, Castiel en su guitarra tocando una canción que no era para la clase y Violetta estaba sugiriendo palabras y frases que yo rechazaba porque no me parecían buenas. Cuanto quisiera que Luna me ayudara, ella es mejor para escribir.

Narra Luna:
Era divertido escribir esta canción y más cuando Lysandro y Nathaniel son buenos con las fraces.

-Muy bien Luna!!- me felicito Lys por una frase que sugerí.

-Si eres muy buena en esto- me dijo Melody, pero parecía que su sonrisa era forzada. Estaría celosa. No ella no es así.

-Si, serias una buena escritora- dijo Nathaniel.

-Gracias chicos, pero cada uno puso su granito de arena.

-Termino el tiempo alumnos, entreguen el trabajo y nos vemos en la siguiente clase- nos aviso el profesor y todos salimos.

En la siguiente clase me senté con Sol y me contó que no les fue muy bien con la canción. Terminaron entregando un poema que escribió Violetta.

Cuando salimos de la última clase sentí como alguien me sostenía fuertemente el brazo. Me giré por acto reflejó y vi a Amber. Voltee a ver a Sol quien estaba en mis mismas condiciones. A ella la estaba sujetando Debra.

-Que quieren??- pregunté lo más educada que podía, pero simplemente no podía ocultar mi tono frío.

-Solo queríamos decirles que lo hemos pensado- me soltó el brazo y Debra, hizo lo mismo con Sol- decidimos que pueden estar en nuestro grupo- dijo tan engreídamente que me daban ganas de vomitar en sus palabras.

Narra Sol:
-Gracias por la "oferta"- hice comillas con mis dedos- pero no nos interesa pasarnos con Barbies de plástico- escuche risas a nuestro alrededor, toda la clase estaba ahí, viendo como rechazábamos a las "populares".

-Se van a arrepentir..- dijo la idiota de Debra para después salir del instituto con Amber.
Luna y yo no le tomamos importancia.
Y seguimos nuestro camino.

(...)

Al día siguiente...

Estábamos Rosalya y yo en el gimnasio del instituto. Viendo a los chicos jugar baloncesto.

-Te quedaras hay sentada??- dirigí mi vista a donde provenía la voz. Era Castiel.

-Que tiene de malo- me cruce de brazos.

-Dijiste que eras buena en el baloncesto..- me lanzo una pelota de baloncesto sin ninguna delicadeza- quiero verlo con mis propios ojos.

Todos los de el equipo me miraban, pronto me vengaría de Castiel, por hacerme sentir inferior. Pero primero le demostrare a esos "deportistas" lo que puedo hacer.

-Bien, prepárate pelo de menstruación porque, limpiaré la cancha con tu sangre- dije para ver cómo el equipo se reía por mi comentario. Antes de que pudiera responder yo ya avía hecho una canasta desde las gradas, donde estaba sentada.

-Ohhhhh- gritaron los de el equipo, por mis fabulosos reflejos.

-Fue un tiro de suerte, no te volvería a salir aunque lo intentaras- dijo Castiel burlón.

-Yo no tengo que hacerlo..- recojo la pelota de baloncesto y se la tiro- tú debes intentarlo.