-Entonces te reencontrarse con, Castiel??

-El mismo, hermanita.

-Y que pasó cuando lo viste, de que hablaron, como se conmporto con tigo??- las preguntas de mi hermana eran muy rápidas que no entendía nada.

-Luna, calmate. Cuando lo vi, vinieron a mi memoria muchos recuerdos, entre ellos nuestro primer mes de novios. Hablamos de porque se encontraba en Argentina y se comportó sereno pero frío a la vez- suspire- a cambiado mucho.

-No es de estranñar después de 7 años, Sol- replicó mi hermana.

-Si, esta incluso más alto y formado..- mire hacía ambos lados de la cafetería, antes de decir otra cosa- se a vuelto más bueno que nunca- dije en un susurro.

-Creo aue ver a Castiel de nuevo, abrio las puestas de su pasado, ¿verdad?- inquirió Luna, desde la otra linea.

-Si, no te equivocas. Hermana, tengo que colgar te llamo más tarde- dije para presionar la tecla roja y colgar la llamada.

Me dirigí a mi pequeña oficina a seguir trabajando. Tal vez, trabajando estra, mantendría a Castiel, lejos de mi mente.

-Sol..- Evi, entró a mi oficina- el jefe nesesita que orientes a uno de nuestros músicos, sobre el dinero que recibiría.

-Claro Evi, aslo pasar- dije con una sonrisa.

-El es Castiel, un guitarrista nato- y con eso mi sonrisa se fue al carajo, creando una mueca- los dejo para que se informe- Evi, antes de salir le lanza a Castiel, una sonrisa coqueta. Pero el no se inmutó.

-Parece que tienes una admiradora..- dije seca.

-Si..-sonrió cínicamente- tal vez, la invite a salir.

-Bien por ti- dije sin importancia.
Este chico, quiere calarme. Pero esto no se quedara así. Me levanté de mi asiento y rodee el escritorio. Me recoste en la pared asiendo la pose mas sexy que se me ocuria y ojee el currículum de Castiel.

-Entonces usted Sr.Castiel, no fue a la Universidad- seguí mirando y me mordi el labio- a asistido a varios conciertos como guitarista y recibió una recomendación de nuestra empresa- levante la cabeza para verle a los ojos y el estaba mirando descaradamente mi cuerpo. Sonreí internamente, por a ver causado esa excitación en él- mis ojos están aquí, Sr.Castiel. Que cree que esta mirand??- pregunte coqueta.

-Perdón por mi atrevimiento, Sra.Sol. Pero tengo que decirle que si no fuera una de mis jefas ya la estaría follando, sobre ese escritorio- dijo con voz ronca, y una mirada llena de deseó.

-Creo que eso no podrá ser, al menos que nos veamos fuera de la empresa. Que le pareces si vamos a el restaurante italiano que hay a unas cuadras de aquí. Y me podrá contar sobre ese deseo de follarme en este pequeño espacio- el sonrió pícaro y se levantó de el asiento.

-Hoy a las ocho, te veré hay- se dirigió a la puerta para salir pero lo detuve.

-No quieres saber sobre tu salario, para eso as venido aquí??- cuestione.

-En realidad quería verte, en mi contrato dice cuanto me van a pagar- me guiño un ojo y salió.

Pero que pedazo de imbécil. Me engaño y yo lo invite a salir.

Bueno al menos voy a poder pasar tiempo con el... verlo me a reconfortado y me a echo volver al pasado. Creo que aún me gusta.

Pero eso no puede ser porque para mi suerte, tengo novio.