-No es justo, no pueden alejarnos de nuestro hogar y de nuestros amigos!!- dije a mis padres con un tono evidente de enfado.

-Lo siento Sol, pero es una decisión tomada.

-Papá, sé que estamos siendo muy egoístas en este momento pero entiéndenos, tenemos un estilo de vida que, no queremos abandonar..- dijo mi hermana Luna, con una tranquilidad sorprendente, está más pasiva que yo por esta situación.

Nuestro papá consiguió un ascenso en su trabajo. Y su nueva oficina está lejos, en otra ciudad.

-Luna, por más educada que seas, y Sol por más que insistas, la decisión ya está tomada. Iran a un nuevo instituto llamado Sweet Amoris.

Mi hermana y yo dejamos de insistir. Era obvio que está conversación no tenía sentido.

Una semana después...

Hay estábamos mi hermana y yo, en nuestro nuevo instituto. Por mi parte estaba con una careta de querer que, me tirasen a un volcán. Y mi hermana como siempre, mostraba una sincera sonrisa y se le notaba relajada.

Narra Luna:
POR FIN!! estamos en el instituto.
Después de que nuestro padre nos dijera a que instituto íbamos a asistir, me puse muy contenta. Me mostré molesta y frustrada ese día por mi hermana, ya que ella eventualmente no quería irse y abandonar nuestra vida cotidiana, pero lo cierto es que, ese mismo día investigue sobre el instituto Sweet Amoris y tienen unos increíbles contactos con universidades privadas privilegiadas y la verdad es que me puse muy contenta.

Entramos al instituto, yo mostrándome serena y calmada y mi hermana a rastras.

-Auhh!!- escuche un quejido detrás de mí, era mi hermana que estaba tirada en el suelo.

Narra Sol:
Cuando íba caminando unos pasos detrás de mi hermana, escucho los pasos de alguien corriendo. No le tomó importancia y sigo mi camino.

Auhh!!- alguien me empujó por atrás y caí al suelo.

-Te caíste??..- dijo una voz burlona al frente de mi. Claramente de un chico.

-Noo, el piso estaba triste y decidí darle un abrazo..JODER si!! me caí porque, me empujaste..- Levante la vista para ver quién era el idiota que me empujó y por unos segundos me congelo. Ese chico es muy lindo..no sexy.

-Tranquila, solo fue un accidente..- dijo mi hermana para calmar la tensión entre nosotros.

-Si, además tú estabas en el medio del pasillo- dijo él, claramente con desagrado.

-QUE!!- me levante del suelo- tú estabas corriendo en el pasillo- me defendí.

-¿Y? las tablas de planchar como tú, apenas se notan- dijo con una sonrisa.

-Mira pelo rojo, no te metas con migo- lo amenacé.

-Porque, que me vas a hacer??. cosquillas con tus brazos de fideo- volvió a reírse. Me estaba poniendo de los nervios.

-Castiel, déjalas en paz..- dijo una voz serena detrás de nosotros. Gire sobre mis talones y vi a un chico con traje.

Narra Luna:
Siento como mis mejillas empiezan a tornarse de un color rojizo. Estaba sonrojada. Ese chico rubio con traje, era muy guapo.

-Hola..- nos dice a las dos- soy Nathaniel y él cabello de regla aquí presente es Castiel- se presentó, cortes mente.

-Como me llamaste delegaducho de quinta!!- gritó..Castiel, si creo que así se llama.

-Ustedes son las nuevas alumnas del instituto, verdad??- dijo Nathaniel, ignorando la mirada asesina de Castiel.

-S-Si..somos nosotras..-dije para después presentarnos- soy Luna y ella es mi hermana Sol.

-Bienvenidas, completaron el papeleo de inscripción??- preguntó otra vez cortésmente.

-Si, pero todavía nos queda elegir un taller..- le dedique una sonrisa sincera.

-Bueno, casualmente aquí tengo los papeles que necesitan. Pueden elegir dos clubs si quieren.

-Con uno basta, gracias- dijo mi hermana con una careta. Era obvio que no estaba ilusionada con la idea de los clubs.

-Elijo el de jardinería- dije para después firmar el papel que me extendió Nathaniel.

-Yo el de baloncesto- dijo mi hermana y yo firmé por ella.

-Baloncesto?? las tablas de planchar como tú no deberían jugar, te puedes romper una uña- dijo burlo Castiel a mi hermana, era evidente que el y mi hermana no se iban a llevar muy bien.

-Para tu información soy muy buena en el baloncesto- se defendió Sol.

Era cierto mi hermana era buena en casi todos los deportes. Y era tremendamente fabulosa en el baloncesto. Creo que Castiel se va a quedar con la boca abierta cuando vea a mi hermana jugar.

El sonido de la campana interrumpió nuestra "conversación" y Nathaniel en ese momento nos entregó un papel con nuestros horarios.

Si.

Estamos en las mismas clases. Qué bueno. Veo a mi hermana y tiene una cara de cansancio. No creo que le importe mucho cuales son nuestras aulas. Los tres fuimos al salón de clases porque Castiel dijo que no quería coger la clase de la señora Delanay y no insistimos en que viniera.