Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capítulo 15.2: Un giro inesperado

Luego de unas semanas, el Dr. Loco me dio de alta. Yo parecía una hermosa muñeca, hasta mi cicatriz del abdomen del accidente había desaparecido. Gio tenía razón en dejarme confiar en aquel Doctor, porque la verdad era que mi cuerpo, estaba más hermoso que nunca.

-Podrás esconderla de todos... menos de Leo, y lo sabes -escuché que le dijo el Dr. Loco a Gio.

-Leo tiene mejores cosas que atender en estos momentos. -dijo Gio secamente.

Nos fuimos del consultorio del Dr. Loco y una vez en el auto , suspiró.

-Te ves mucho más bonita Lucy, casi no pareces la de antes.

-¿Tu querías cambiarme? -pregunté un poco sorprendida.

Me tomó la cara con ambas manos.

-Siempre has sido linda, y esto que hicimos, fue porque Rey, Alonso y Leo te andan buscando. De hecho, necesito enseñarte algunas cosas para que ellos no sospechen nunca, y ya sabes que puedes confiar en mi, ¿sigues en el juego?

«¿que podía salir mal a partir de ahora?»

-¿Qué clase de cosas vas a enseñarme?

Me llevó a un casino que se titulaba: Sirenas Lombardi. Un casino bastante lujoso que tenía varias mujeres bailando en ropa interior en tubos de metal. Otras iban desnudas sirviendo cerveza, pero lo llamó mi atención enseguida fue: todas esas mujeres tenían la misma forma de cuerpo que yo. Eran fotocopias de mi silueta, senos y glúteos grandes, narices puntiagudas, y cinturas de avispa. ¿Acaso el Dr. Loco las había operado a ellas también?, era evidente que si. Gio me tomó del brazo y me llevó con una chica que servía algunos tragos.

-Hola Eugene, te tengo una recluta nueva.

-¡Hola guapetón!, ¡Hay pero que hermosura me has traído!, por supuesto, aquí vamos a enseñarle todo. ¿quieres que rebeca te haga el baile que siempre te hace?

Tres cosas me llegaron como una buena bofetada: la primera, que Eugene era un hombre trans, y que en definitiva era muy hermosa. La segunda, ¿Iba a trabajar en un burdel?, y la tercera, más importante, ¿Rebeca siempre le hacia bailes a mi chico malo?

El se puso un poco nervioso e intentó cambiar la conversación, pero justo en ese momento, llegó una chica, ¡completamente desnuda!

-Gio, cariño -la chica lo beso en la boca y lo rodeó por el cuello con sus brazos. Sus senos los apretó en su pecho y le sonrió pícaramente - Hoy me siento muy caliente, digamos que mi cuerpo te necesita y tu siempre sabes que hacer.

Gio me vio y retiró sus brazos.

-Rebeca, hoy te traigo una alumna.

Yo no sabia que hacer, salir de ahí corriendo era una buena opción, pero justo en la entrada del casino, Rey y Alonso acababan de aparecer.

-¡Si Rebeca!, ¿Cuándo puedo empezar?

Rebeca y Gio ( que esperaba otra reacción de mi parte), se sorprendieron. Pero ella, de mala gana me llevó a la parte trasera del casino.

-Vendré por ti, lo prometo - me susurró Gio, su rostro se había endurecido. Sabía que me había roto el corazón con lo que acababa de descubrir, porque mi querido chico malo, era un mujeriego.

Eugene y Rebeca me dieron ropa interior negra y me explicaron algunos movimientos.

-No debes dejar que toquen tus partes. Solo recibes el dinero. Eres bailarina exótica, no una puta, ¿entiendes?

-Yo no se bailar en el tubo.

Ambas se echaron a reír ante mi comentario. Yo no sabia que era tan gracioso.

-No vas a bailar en el tubo. Las principiantes bailan en la caja anónima. Es un cuarto donde no verás a tu espectador. Pero el si puede verte a ti. Debes moverte al son de la música. y luego, la caja se abre y debes colocarte unas vendas. La caja anónima se hizo porque si bailas y le gustas al espectador, el te deja dinero en el bikini. Sino, bueno, ¡ja!, deberás mejorar.

Rebeca me enseño algunos movimientos sensuales que podía hacer, porque al parecer, empezaba esa misma noche. Yo me preguntaba, ¿Cuándo vendría Gio?, lo último que vi fue que se encontró con los otros chicos, pero me sentía vendida a un circo.

En el salón de maquillaje y vestuario, una foto de Ana bailando en el tubo llamó mi atención. Le pregunté a Eugene sobre ella y me dijo con pesar

-La mejor bailarina que hemos tenido. Pero el apuesto de Leo se la llevó de aquí y no la volvimos a ver.

-Hasta donde supimos, quedó embarazada pero la pobre perdió al bebé -dijo una chica que se vestía y se colocaba unas medias panty.

-Pues yo escuché que Ana, siempre le bailaba al señor Lombardi, así que primero fue por el hijo y también por el -dijo Rebeca.

Eugene le lanzó un zapato a Rebeca.

-¡Niñas!, no digan tontearías que las paredes escuchan. Recuerden que el señor Lombardi es nuestro jefe -bajó la voz-, y si se entera de estas conversaciones, no volveremos a ver la luz. Así que a trabajar -dijo un tanto molesta.

Yo me vi en el espejo con la lencería. De verdad me gustaba mucho como había quedado mi cuerpo. Era otra. Algo en mi había cambiado. Me sentía sensual, erótica, empoderada...me sentía diva. Me colocaron en un cuarto pequeño y empezó a sonar una música suave. Yo no veía nada. No bailé por unos segundos, pero luego vi el reflejo de una mano masculina con un reloj a través del vidrio. Retrocedí y salí de ahí. ¿Qué estaba haciendo?, Gio me había condenado al meterme ahí.

-¿Qué estas haciendo? -preguntó Eugene histérica.

-No quiero hacer esto, yo...¡quiero irme de aquí! -empecé a llorar.

Eugene me abofeteó y me agitó un poco.

-Si quieres salir de aquí, debes bailar. Hacer que uno de ellos se enamore de ti. Que te rescate, si no lo haces, te matan, ¿entiendes?

-No...Gio me viene a buscar, solo déjame hablar con el.

Rebeca entró y su mirada cómplice con Eugene me lo dijo todo.

-Gio nos ha traído a todas aquí. Todas hemos sido sus amantes, este es su casino, ¿entiendes?, de aquí no sales al menos que te metan una bala en la cabeza ... o uno de los que te vea bailar te compre. Así de simple -se acercó a mi de forma amenazante-, eres un objeto, su juguete, como todas. Primero nos hace ser hermosas, y luego nos hace trabajar para el.

Aquello no tenía sentido para mi. El me había tratado muy lindo las ultimas semanas, me había salvado de ahogarme, me había rescatado de Leo, me había mandado a operar, y ahora era su...

-Eres su presa. Como todas nosotras. Solo Ana ha salido de aquí, pero ella es una en miles.

Mientras yo procesaba todo y sentía como mis lagrimas brotaban de mis ojos, me tomaron por los brazos y me llevaron nuevamente al cuarto oscuro. La música empezó a sonar. Mi vida había cobrado un nuevo giro, uno donde no sabia como salir. Así que al ver de nuevo el reflejo del hombre, empecé a bailar. un poco torpe al principio pero luego me dejé llevar por la música, y al terminar, el vidrio no se abrió. Me acerqué al vidrio y vi al hombre irse de la sala. ¿Qué pasaría ahora?

Rebeca y Eugene me explicaron que si no me dejaban dinero, no comería esa noche. Esa era mi nueva casa, mi nueva prisión. Y la regla era sencilla: bailar para vivir. Si no me daban dinero, no comía. Gio no podía haberme hecho esto, después de todo lo que pasamos. ¿Qué clase de hombre era el?, realmente si era un chico malo.

Entonces ahora, la nueva Lucy, debía aprender a sobrevivir en ese casino.

NOTA:

Gracias por leer a todos mis lectores.

Me gustaría que me apoyaran en mis redes sociales

Instagram: @papelylabial
Tiktok:. @gabyorozco154

Twitter: @papelylabial1

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro