JJ.

Enzo me dejo en la residencia casi a las 7:30 pm, estoy exhausta, no ha sido un día fácil, en ningún sentido, me dejo caer en mi cama e inevitablemente Eryx llega a mi cabeza, observo mis manos, mis dedos para ser más específicos y sonrió un poco, se veía preocupado mientras curaba mis quemadas. Eryx se ve lindo cuando sonríe, pero hablo de esa sonrisa honesta, sincera, dulce, no la arrogante que suele tener pintada en la cara que provoca borrársela a puñetazos.

Dios ¿Qué se supone que debo hacer? Sé que esta celoso y creo que tiene razones para estarlo, necesitaba salir hoy con Enzo para aclarar las cosas con él y decirle que lo nuestro no está llevándonos a ningún lugar, ósea me lo paso genial con el pero lo veo y lo siento más como un amigo, además que ha sabido respetar tanto mi espacio que aunque debo reconocerlo Enzo es atractivo, esta jodidamente bueno también, termine viéndole como un amigo.

Lo que no se ahora es que hacer respecto a Eryx, sus hermanos dicen que habla en serio y dudo mucho que ellos mientan al respecto, pero y si ellos también se equivocan y termino más enredada de lo que debería y me hace daño. No quiero ser otra imbécil más enamorada de Eryx Wolf.

Mierda, ¿enamorada, será que lo estoy? A ver si nos ponemos a analizarlo, el cachorro me gusta más de lo que cualquier otro chico me haya gustado en la vida, eso debo reconocerlo, porque siempre estoy pensando en él y termino relacionando todo con él, ¿pero y si solo se trata de la curiosidad que le tengo y el deseo que despierta en mí?

Rayos, por primera vez en mi vida no se qué hacer respecto a un chico, siempre estoy muy clara en ello, si me gusta salimos y si durante ese tiempo surge algo genial, lo vivo, solo que Eryx es la antítesis de mi perfil de chico perfecto, justo hasta que se quita la careta y es ese chico divertido, amable y dulce que ambos sabemos que puede ser.

Me levanto de la cama y observo la habitación vacía, Maddy y yo tenemos días sin vernos, la muy descarada no sale ahora del departamento de Tyler, en cualquier momento nos salen con que vivirán juntos. Rio por lo bajo ante la idea, vivir con un chico es un paso muy grande y aunque a ellos los veo súper estables con la única persona con la que he compartido piso es con Jacop.

Pensar en el me da nostalgia, hace algunas semanas que no se nada de él, le he enviado sms y responde pero tan frio y distante que honestamente deje de hacerlo, debo darle espacio, cuando se sienta listo para regresar lo hará, así es el. Ojala esa chica Lana este haciendo de las suyas con él y puedan tener una bonita relación.

Camino hasta el armario y busco una franela más cómoda de la que tengo, iré a la cafetería por algo de comer, tengo que ponerme al día con las asignaciones, pero lo hare más tarde. Tomo el teléfono y algo de efectivo, me doy una mirada en el espejo y pues no estoy tan mal, es sábado por la noche, todo el mundo aquí debe estar de fiesta, como siempre.

Desciendo las escaleras frente al edificio de la residencia y me detengo de golpe cuando veo el deportivo estacionado, Eryx me mira a través de sus gafas, con expresión seria, niego con la cabeza y camino hasta él. ¿Desde cuándo estará aquí?

– Hola – digo una vez me acerco al auto, ni siquiera me mira.

– Hey – responde secamente

– ¿Cómo está el abuelo? – pregunto de inmediato, el cierra los ojos y suspira.

– mejor, está loco por regresar a casa y ya comenzó a hacer bromas – rio al escuchar aquello porque fue lo único que hizo mientras estuve en la habitación con él y Eros.

– si, lo se – digo sonriendo, finalmente desvía sus ojos hasta los míos y me ve serio, sus ojos brillan con rabia pero también con otro sentimiento que no se identificar

– ¿estuviste con él? – pregunta con curiosidad

– sí, entre con Eros y estuvimos un buen rato conversando – hago una pausa y suspiro – me pregunto por ti – el suspira y desvía sus ojos

– No tenía ánimos de ir y verlo en esa cama, sabiendo que no va a poder volver a caminar – dice con pesar.

– ¿tienes hambre? – pregunto cambiando de tema abruptamente, el rie por mi cambio y me ve con curiosidad

– ¿Qué estás haciendo conmigo Williams? – pregunta en ese tono bajo, que solo me hace desear besarlo. Pasan algunos segundos en los que solo nos observamos

– Nada – susurro, el ríe y me señala el interior del auto

– sube, vayamos por algo de comer, yo invito – dice mirándome fijo, lo dudo un momento y recuerdo el sms, me cruzo de brazos y frunzo el ceño

– no, hasta que te disculpes – le espeto, el frunce e; ceño y me ve mal

– ¿disculparme? No he hecho nada por lo que deba disculparme JJ

– Oh claro que sí, que hay de ese sms de texto temprano – su cuerpo se tensa ligeramente y mira al frente

– Es lo que pienso y no voy a retractarme – dice esta vez sin mirarme, suspiro frustrada porque ahora tampoco sé que hacer, fue mi idea decirle para ir a comer, quedaría como una inmadura si ahora le digo que no

– está bien, pero que sepas que esas palabras dolieron – digo sin poder controlarme, sus ojos buscan los míos con rapidez y con sorpresa

– ¿en serio? Porque no me lo pareció, sonreías bastante – pongo los ojos en blanco mientras rodeo el auto, abro la puerta y le espeto antes de sentarme

– que conste que te acompaño porque la idea fue mía y sino parecería una nina mimada al rechazarte – él sonríe con arrogancia y asiente.

– ¿Qué quieres comer? – pregunta esta vez mirándome serio

– cualquier cosa, tengo hambre, me va bien alguna hamburguesa o algo – digo sin mirarlo.

– se dé un lugar que quizás te guste – comenta poniendo en marcha el auto y sacándonos del campus.

Después de algunos minutos en silencio, Eryx está en el centro, lo veo buscando lugar donde aparcar con la mirada y luego de algunos minutos y vueltas, conseguimos un lugar.

Cuando desciendo del auto, al igual que él, finalmente puedo darme cuenta de lo genial que se ve, lleva un suéter manga larga tejido, un jean y las gafas, es primera vez que lo veo llevarlas fuera de casa y debo decir que se ve extremadamente sexy. Un modelo soñado por cualquier mujer, él se gira para verme y sonríe con arrogancia.

– ¿Qué? – pregunta con picardía

– nada, estas demasiado arreglado y mírame – digo apreciando mi simple vestimenta que consta de un capri y una franela gigantesca que era de Mike de System of a Down súper desgastada, anudada en mi espalda, mis converse y un moño desenfadado.

– Te ves bien tranquila, además no es un local lujoso, te va a gustar – comenta un poco más animado.

Camina junto a mí y después de unos segundos andando, entrelaza nuestras manos, lo miro de reojo y ambos reímos porque hemos hecho exactamente lo mismo.

– ¿te molesta? – pregunta con curiosidad y niego, en realidad me pone nerviosa andar así con él.

– No, está bien – el ríe y asiente

Andamos unos cinco minutos más y finalmente se detiene ante una entrada que parece la de un parque, con verga de metal rodeada de enredaderas y todo, sonríe y tira de mi para entrar, cuando traspasamos la puerta mi sorpresa es grande, es un restaurante hermoso, el interior simula un bosque. Wow jamás imagine encontrar un lugar así aquí.

– ¿te gusta?

– Es increíble – él sonríe y asiente

– este lugar lo conocí por mi mama, hace un tiempo solíamos cenar todos los viernes en familia y tratábamos de hacerlo en distintos lugares, por lo que terminamos descubriendo casi que todos los restaurantes de la ciudad – comenta con ánimos

– ¿Qué paso con Olivia en el hospital? – pregunto una vez encontramos una mesa en medio de un claro, rodeada con flores.

– Mi mama es – hace una pausa y mueve su cabeza de un lado a otro – complicada, no es una mujer con un carácter fácil y tendemos a chocar porque me parezco mucho a ella en algunas cosas – concluye

– ¿Por qué no querías ir al hospital si ya habías dicho que estarías allí? –

– JJ solo lo dije para que tú y mis hermanos no se pusieran pesados – responde mirándome mal – ahora cambiemos de tema, ¿Qué tal Lombardi? – dice con ironía

– nada, solo intento animarme, no me gustan los hospitales, traen malos recuerdos – susurro, el frunce el ceño y luego suspira

– Disculpa – elevo mis ojos buscando los suyos

– ¿Por qué te disculpas?

– te arrastre a esta situación sin pensar en cómo esto podría afectarte – dice mirándome con pesar

– No te preocupes, sigo aquí porque puedo y quiero – tomo sus manos que están entrelazadas frente a el sobre la mesa – es más fácil cuando tienes algo de compañía, así que tranquilo, estaré bien

– ¿pensaras lo que te propuse? – pregunta esta vez mirándome tan fijamente que me siento intimidada

– no se Eryx... – hago una pausa y desvió mis ojos – no confió mucho en ti – el ríe y se echa atrás en la silla

– lo sé, de eso se trata, dame la oportunidad de que puedes hacerlo – hace una pausa y sonríe – ¿Cuándo es tu cumpleaños? – pregunta en tono divertido, yo frunzo el ceño, de que va ahora?

– dentro de algunos meses, el 12 de Noviembre ¿Por qué?

– curiosidad, venga pidamos algo antes de que me dé mas hambre – dice tomando un menú del tronco hueco que esta sobre la mesa.

– vale

Después de algunos minutos ambos hemos decidido comer lo mismo, hamburguesa especial con papas fritas extras, unas bebidas y el postre dijo que sería una sorpresa, se está comportando amablemente, no hay rastro del idiota que deje en el hospital.

– JJ, te puedo preguntar algo – dice mirándome algo nervioso – pero tienes que ser honesta – agrega con rapidez

– Mmmm cada vez que preguntas eso temo lo que vayas a preguntar – digo mirándolo con perspicacia, el ríe

– ¿Enzo y tú se han besado? – pregunta y comienzo a reír a carcajadas.

– venga Eryx ¿es una broma verdad?

– no, solo tengo curiosidad de saber que tanto avanzo contigo, no es como si tuvieran dos días saliendo – comenta tomando una papa frita de la comida que acaban de dejar frente a nosotros, sonrió por su obsesión por las papas y lo imito, él sonríe y luego me anima a continuar con un gesto de su cabeza

– no creo que sea curiosidad nada mas

– soy un tipo curioso – comenta en tono divertido por lo que exploto en una sonora carcajadas y a los segundos me acompaña

– y después la curiosa soy yo ¿no? – el continua riendo y prosigo – solo salimos cachorro, nunca llego a pasar nada entre nosotros el sí sabe mantener su palabras – digo con ironía, él se atraganta un poco pero sigue riendo y comenta entrecortadamente

– ese fue un golpe bajo – rio

– tu eres el experto en golpes bajos cachorro – continuamos riendo y por alguna razón noto que últimamente cuando estamos juntos las peleas han disminuido y las risas abundan, aunque sean producto de comentarios ácidos o a costa el uno del otro.

Finalmente paramos de reír y comenzamos a comer, de vez en cuando Eryx me lanza miradas curiosas y picaras, pero no dice nada, solo sonríe de esa manera picara y dulce que tanto me gusta. Sonrió todas las veces en que lo hace y por alguna razón siento mariposas en la pansa, un nerviosismo tonto que me hace sonreir aun más. Dios creo que me estoy enamorando de este egocentrista de mierda.

– ¿pasa algo? – pregunta mirándome serio

– eh, no ¿Por qué?

– de repente pusiste cara de preocupación – comenta escudriñando mi expresión y sonrió

– No, es solo que acabo de darme cuenta de algo – comento tratando de restarle importancia y limpiando la comisura de mis labios que se llenó de salsa.

– ¿de qué? – pregunta con interés y lo veo, el me mira y nos miramos serios

– Tienes una linda sonrisa – comento en voz baja, él sonríe ampliamente y luego niega con la cabeza

– sabes que no te creo ¿verdad? – rio porque sé que fue una mentira horrible.

– olvídalo, no te diré – el rie aun más y se inclina hacia el frente con esa sonrisa pícara que insita a besarlo

– acabas de darte cuenta que te enamoraste de mi ¿verdad? – abro mis ojos como platos y el ríe, me uno a él y niego con la cabeza

– Eres un egocentrista de mierda – volvemos a reír, pero ambos sabemos que lo que acaba de decir es la purita verdad, me enamore como una tonta del idiota, egocentrista de mierda que toda mi vida he criticado.

Eryx.

La mirada de JJ en este momento me llena de placer y de felicidad, sus ojos brillan y se ven justo como los de Dante cuando observa a Nat, se enamoró de mí y no se había dado cuanta y que lo acabe de notar estando frente a mi lo hace aún mejor, saber que siente cosas por mí me hace estar seguro de ella, aunque sé que será todo un puto reto hacer que lo admita, el que ya lo sepa es un avance.

– ¿quieres regresar a la cabaña? – pregunto aun con la sonrisa estúpida que se ha instalado en mi boca desde que vi ese brillo en sus ojos, ella ríe y niega con la cabeza

– Tengo que ponerme al día con las asignaciones – rio y me encojó de hombros

– también yo, venga hacemos los trabajos juntos y así nos hacemos compañía, se que Maddy está con Tyler lo que les falta es mudarse juntos – comento riendo, esos dos cada día están en plan más serio y me agrada ver a uno de mis amigos así.

– ni que lo digas, tengo varios días sin verla, creo que me ha cambiado por el – comenta fingiendo estar dolida y rio

– JJ creo que siempre ha sentido cierta preferencia e inclinación por la polla de Tyler dudo mucho que seas capaz de darle lo que él le da – recalco con picardía ella comienza a reír a carcajadas, me uno a ella y ambos reímos como tontos, sosteniendo nuestras pansas.

Nos vemos como dos dementes riendo sobre nosotros mismos, no sé que es lo gracioso del momento pero no podemos parar y el saberlo nos causa más risa. Después de algunos minutos, una camarera se acerca a nosotros con una sonrisa en los labios nos ve divertida y por supuesto pasa lo que siempre pasa cuando uno de nosotros está presente

– veo que se divierten, pero sabes guapo, podrías pasarlo muchísimo mejor conmigo – comenta la camarera sin ningún tipo de tapujos

Las carcajadas de JJ se intensifican, no entiendo porque pero le causa gracia que esta chica este haciendo esto, las veo sorprendido a ambas, a la camarera por tener tal atrevimiento, a sabiendas que estoy con una chica y podría ser mi novia y estar saliendo con ella y a JJ por estarse riendo aun más.

– nena eres un encanto, tienes dos poderosas razones que estoy seguro disfrutaría admirar si te quitara el sujetador, incluso tu boca me hace pensar cosas bastante cochinas, pero como veras justo ahora estoy acompañado – digo con una sonrisa pícara, la risa de JJ se va esfumando conforme hablo – por la chica más excitante y sexy que he conocido en toda mi puta vida y créeme he visto mujeres hermosas y sexys, pero ninguna como ella y no es por darte un desplante, pero no tengo ojos ni cabeza para mirar a otra parte si ella está conmigo o mejor dicho – continuo esta vez buscando los ojos de JJ que me ven con sorpresa y deseo – si ella acepta estar conmigo – la declaración y la magnitud de mis palabras no deja solo con la boca abierta a la camarera, también a JJ

La miro serio, el momento paso de ser sobre el deseo de la camarera, a ser sobre nosotros, solo de ella y yo, en este instante ya no existe nadie más, solo tengo ojos y cabeza para ella, sus mejillas se han tornado rosadas y atrapo su labio inferior entre sus dientes, lo chupa sin apartar sus preciosos ojos azueles de mí y en serio daría cualquier cosa, por estar con ella a solas para poder besarla con ganas y hacerle saber cuánto la deseo, cuanto provoca y despierta en mí y cuanto me importa.

Sus ojos siguen fijos en mí, el tartamudeo de la camarera, me hace regresar un instante, pero sigo ignorándola, no quiero perderme este instante, esta conexión con JJ, la chica finalmente se da cuenta que está sobrando se gira y se va, dejándonos solos una vez más, JJ libera su labio y esta vez los humedece ambos, tentándome.

Sonrió de lado, me levanto y camino hasta a ella, me dejo caer a su lado, mientras sigue con sus mirada mis movimientos. Su labio inferior se pierde una vez más dentro de su boca, dios si supiera el efecto que eso causa en mí no lo haría tan seguido

La sujeto de la mejilla y con mi pulgar hago cierta presión para que lo libere, nuestros ojos no pierden el contacto, cuando lentamente me acerco a ella, siento como su respiración comienza a acelerarse y antes de poder alcanzar sus labios y besarla me detengo, sus ojos se desvían a mis labios y vuelve a morder los suyos

– JJ, no hagas eso... no tienes idea de lo que me pone cada vez que muerdes tus labios así – susurro con voz ronca, la dureza en mi pantalón comienza a hacerse presente y creo que es momento de sacarla de aquí y llevarla al auto.

Ella sonríe con arrogancia y susurra

– solo cállate y bésame cachorro – esas palabras suenan malditamente sexys saliendo de sus carnosos labios, no lo dudo ni lo pienso un segundo.

Estrello mi boca a la de ella, que busca la mía con ansias, con necesidad y con una pasión desmedida, ambos olvidamos donde estamos, que hay personas a nuestro alrededor y que estamos en un lugar público. El beso es tan intenso que nuestros dientes chocan, mis manos se mueven con desesperación sobre su cintura atrayéndola a mí y por un instante el suficiente para hacerme reaccionar, me separo con rapidez y la observo, sus labios están mas rojos y sus ojos muestran cierta sorpresa por la interrupción

– No – susurro entrecortadamente gracias a que mi respiración es agitada – aquí no, además – digo sonriendo – no voy a follarte – ella pone sus ojos en blanco y muerde una vez más sus labios, se que lo hace por contenerse y por deseo, cosa que me fascina, esta tan deseosa de esto como yo.

– Eres un egocentrista de mierda – rio y niego con la cabeza

– lo soy, pero no voy a follarte no porque no quiera, sino porque simplemente no es el momento – dejo un beso sobre sus labios y me separo de ella, me quito las gafas y paso mis manos por mi cara, acomodo el bulto en mi pantalón y suspiro, tomo una vez más las gafas me las coloco y la enfrento, sus mejillas siguen rojas y su pecho sube y baja con rapidez aunque su respiración comienza a acompasarse

– salgamos de aquí, te llevare a casa – susurro desviando mis ojos de los suyos y sacando mi cartera para dejar 100 $ sobre la mesa, la tomo de la mano y tiro de ella, sin pararme a mirar a ningún otro lado, la saco del restaurante y la guio de regreso al auto, abro a distancia el mismo y luego su puerta, le doy paso para que suba, cosa que hace sin rechistar o mediar palabras.

Rodeo el auto y subo junto a ella, la observo un segundo, barriendo no solo su expresión sino su cuerpo que transpira deseo, lujuria, sexo. JJ en este preciso instante transmite puro sexo, de ese que tienes con pasión rudeza y con fuerza, de ese que te deja jadeante y cansado hasta la mierda pero satisfecho hasta la maldita medula. Enciendo el auto y sin más le espeto.

– vayamos por tus cosas – ella asiente y sonríe un poco, no se qué demonios vaya a pasar esta noche, pero estoy seguro que sea lo que sea, será algo épico e inigualable, lo que le dije a la camarera es cierto, JJ despierta sensaciones y sentimientos en mí que nunca ninguna chica había logrado despertar y sé que le pasa lo mismo, sus ojos me lo dicen, sus besos me lo confirman y sus manos me lo transmiten.

Maldita sea, muero por hacerla mía, por meterla en mi cama y follarla hasta que su pequeño y sexy cuerpo no de más, pero aun así me pida que continúe. Mierda creo que esta noche será un poco complicado parar.

Nota del auto: ok ok ok,por favor no me maten ni me odien! Sabían que terminaría el capitulo aquí, jajajajaja díganme que piensan? Creen que terminen acostándose? Despues de ese momentazo en el restaurante, que creen que pase, conociéndolos como lo hacen, que creen que pasara. El próximo capitulo debo decirlo estará interesante y no exactamente por las razones que creen, de hecho estoy segura que quedaran mas picadas de lo normal, pero no me odien por fis! Un beso enormísimo, les amo con locura y un secreto, ame escribir este cap!