Maratón 1/?

6 de Noviembre | 10:23:59

Entro en la comisaría y me encuentro a Connor hablando con la recepcionista, una androide ST300.

—Buenos días Connor. —digo mientras me acerco a él.

—Buenos días (T/N).

—¿Vienes a ver a mi padre?

—Sí, pero la recepcionista me dijo que no está aquí.

—Muy típico de él. —suspiro. —Sígueme, te llevaré a su mesa. —Caminamos hasta una sala llena de mesas y policías. —Es esta. —digo y señalo una mesa con una placa que pone "Teniente Anderson".

—Gracias. —dice el androide.

—De nada. —sonrío. —Si necesitas algo estoy en aquella mesa. —señalo una mesa cercana. El androide asiente, me siento en la silla y empiezo a mirar archivos sobre divergentes.

Varios minutos después decido ver a Connor; está observando las cosas de mi padre, quizá quiere saber cosas sobre él. Sinceramente, Connor es muy adorable e inocente.
Mi padre se acerca a su mesa y escucho lo que dicen.

—Me alegro de volver a verlo, teniente —dice Connor mirándolo.

—¡Ay, dios! —mi padre no dice nada más ya que es interrumpido por otra persona.

—¡Hank! ¡(T/N)! —nos llama el capitán Fowler. —¡A mi despacho! —una vez dice eso, vuelve a entrar a su despacho.

Mi padre y yo entramos en su despacho y nos sentamos; Connor entra, cierra la puerta y se queda de pie detrás de nosotros.

—Cada día me llegan diez casos nuevos con androides implicados. Siempre hemos tenido incidentes aislados, como señoras que pierden a sus criadas androides y mierdas así. Pero ahora, nos están llegando informes sobre agresiones e incluso homicidios como el tío de anoche. Ya no es sólo un problema de CyberLife. Ahora es una investigación criminal y tenemos que resolverla antes de que nos estalle en las manos. —Fowler mira a mi padre y después me mira a mí. —Quiero que investiguéis estos casos para ver si hay alguna relación.

—¿Por qué nosotros? ¿Por qué debemos ocuparnos de esta mierda? —pregunta mi padre. ¡Yo no sé una mierda de androides, Jeffrey! Si apenas sé cambiar los ajustes del móvil.

—Todo el mundo está a tope. —contesta Fowler. —Estáis perfectamente cualificados para una investigación como esta.

—¡Y una mierda! —grita mi padre. —Lo que pasa es que nadie quiere investigar a esos putos androides y se lo encasquetais a mi hija y a mí. —se levanta de su asiento.

—CyberLife ha enviado un androide para ayudarnos en la investigación. Es un prototipo de última generación. Será vuestro compañero. —dice Fowler mientras mira a mi padre.

—¡No, ni hablar del tema! ¡Mi hija y yo no necesitamos compañero y menos un pringado de plástico!

—Hank, ¡de verdad me estás empezando a cabrear! ¡Tienes que hacer lo que yo te diga y cerrar la puta boca!

—¿Sabes lo que esta puta boca quiere decirte? ¿Eh? —dice mirando a Fowler.

—¡Ya basta! —grito mientras me levanto de la silla. —Estoy cansada de que hables siempre por los dos, sin ni siquiera saber lo que yo pienso. Si no quieres hacer esta investigación, lo haré yo sola. —dicho eso, salgo del despacho dando un portazo y vuelvo a mi mesa para seguir trabajando.

Minutos después mi padre sale enojado y Connor va detrás de él. Decido ignorarlos y seguir con mi trabajo. De repente escucho un golpe y miro de donde proviene; mi padre ha estampado a Connor contra la pared de cristal y lo tiene agarrado de la camisa. Sin dudarlo, voy hacia ellos.

—Oye, capullo. —dice mi padre. —Si por mí fuera, te tiraría a un contenedor y le prendería fuego. Así que deja de fastidiarme o me vas a cabrear de verdad.

—Papá, ¡déjalo en paz! —digo mientras lo alejo del androide.

—Teniente. Sargento... —dice Chris captando nuestra atención. —Eh... Disculpen la interrupción. Tengo información acerca del AX400 que atacó al tío de anoche. Se le ha visto en el distrito de Ravendale.

—Estamos en ello. —dice mirando con odio al androide y se marcha.

—¿Estás bien Connor? —le pregunto, preocupada.

—Sí, gracias. —responde y me sonríe. Es la primera vez que lo veo sonreír, es la sonrisa más bonita que he visto nunca.

—D-Debemos irnos. —Connor asiente y salimos del departamento para al auto de mi padre.