Dedicado a: rene-dreyar

¡Felicidades!👏🌹

Rogue y Cobra

No se esperaba que la casa de Lucy fuera tan grande, a decir verdad era una mansión. Parece que todos en esté mundo eran adinerados menos ella.
Igual no importa, Juvia esta bien con su forma de vivir, no necesita lujos, ni fama, es feliz así... O por lo menos casi feliz, aún siente un vacío en su corazón como si algo le hiciera falta y no estara tranquila hasta que descubra que es... Hasta que recuerde su pasado.

–Lo mejor será que toquemos el timbre –sonrió Kushina, que tranquilamente apretó el botón de la especie de comunicador, al decir quien era la puerta gigante fue abierta.

–E-Etto... –Juvia se puso nerviosa entrar a lugares así le daba miedo, se sentía indefensa por decirlo así.

–No pasa nada, vamos Juvia todo está bien –la peli-roja le sonrió amable, Juvia suspiro para calmarse y le siguió. Ambas caminaron por lo que parecía una pradera hasta llegar a la mansión, sin embargo un hombre alto las detuvo cuanto quisieron entrar.

–¿Se les ofrece algo? –preguntó, Juvia alzó la mirada era tan alto, sus facciones tan serias y esos músculos gigantes lo primero que se le vino a la mente por verlo fue King Kong.

–Vinimos a ver a Lucy Heartifilia –hablo calmadamente Kushina, mientras que Juvia sólo se apego a ella ocultandose por el susto.

–No puede atenderlas, váyanse –las miro fríamente, Juvia se sobresalto ¿en serio era tan agradable Lucy? Con este tipo de guardias empezaba a dudar sobre ello.

Kushina sonreía, ni se inmutó. De la nada cambio su rostro, enojandose Juvia creyó que se encenderia en fuego por lo que retrocedió no le gustaba mucho la violencia... Excepto en películas o series pero simplemente porque es actuación ¿no?

–¡¿Con quien crees que estas tratando?! –tomó al hombre por su atuendo acercandolo a la altura de ella; mientras lo apretaba con fuerza –DIJE QUE VERÍAMOS A LUCY ¡¿NO LO TIENES CLARO?! A L-U-C-Y –deletreo lo último muy molesta mientras empezaba a moverlo de un lado a otro.

–Tu si que no cambias ¡Siempre eres tan divertida, una fiera! –dijo riendo a carcajadas intentando apartarla, por primera vez Juvia vio como calmó su semblante el guardia.

–¡Y tú como te atreves a tratarme de desconocida, Estarossa! –lo soltó molesta aún, pasando a cruzarse de brazos.

–Ah... s-se conocen –dijo Juvia, entrando más en confianza.

–Claro, Juvia él es uno de los guardias de la mansión. Heartifilia es una familia con muchas influencias –suspiro y la observó señalando al guardia –te dije que mi hijo venía aquí a veces, en ese tiempo él estaba.

–De echo llevo praticamente una vida aquí –dijo más tranquilo después de tanto reírse.

–¿Cuánto tiempo? –empezó a tener curiosidad Juvia.

–Lo suficiente, lo siento señorita pero no es de caballeros revelar el tiempo o sabrían mi edad.

–Yo pensaba que eso era sólo de mujeres –se puso las manos en las caderas Kushina, Juvia río leve –siempre es así, a mi tampoco me lo ha dicho nunca Juvia.

–Debe tener mucho tiempo entonces –volvió a reír Juvia, insinuando que debía ser muy viejo.

–Verdad que sí, ademas se le nota lo viejo que es –le siguió Kushina bromeando, ambas rieron al mismo tiempo. Estarossa fruncio el ceño.

–Vinieron aquí a ver a la señora Heartifilia, no hablar de mi edad –se dio la vuelta abriendo una de las puertas de la gran mansión. Las mujeres asintieron y le siguieron.

–Tranquila Juvia, parece un amargado y lo sigue siendo... Pero no es alguien malo, siempre cuida de los miembros de la familia Heartifilia –sonrió.

–Juvia al principio le dio miedo pero es agradable –dijo confiada.

–Aunque no tanto como su hermano –ríe –es mayor pero solía jugar mucho con mi hijo.

–Ya basta, las escucho y es aquí –se detuvo en una gran puerta que estaba entre-abierta –la señorita las debe estar esperando.

–Ve tú Juvia, debes tener algo importante que decirle –dijo Kushina y le entregó las revistas sonriendo, Juvia se preocupó –esta bien, tranquila ve.

La peliazul asintió y algo asustada entro, Estarossa cerró la puerta en el acto.

–¿Por qué no le dijiste que la conoces? –pregunto la joven mujer, el hombre la miró serio –Tu mirada me lo dice todo.

–Órdenes de Lucy Heartifilia –se mantuvo sereno –en esta casa nadie recuerda a Juvia Loxar, nadie recuerda su amiga de infancia... Eso ordenó.

–Vaya... Pues que triste.

–Bienvenida Juvia –la rubia se levantó de su escritorio, camino hacia ella lenta y tranquila, tenía elegancia eso causaba admiración en la peliazul –te estaba esperando.

–Mucho gusto Lucy-san –hizo una reverencia.

–Aquí no hacemos eso –sonrió un poco, negando con una de sus manos.

–A-Ah... E-Eh si lo siento... Es costumbre –se sonrojo y extendió las revistas, la rubia lo recibió –esto se lo manda Kushina-san.

–Gracias –lo fue a colocar en su escritorio, Juvia vio a una pequeña dormir en un sofá. Por su rostro dedujo que esa debía ser Wendy.

–Asumo que estas aquí por esto –se volvió acercar a ella y extendió una pequeña caja de regalo. Juvia dudo un poco, luego lo tomó para no ser descortes.

Juvia observó detenidamente la pequeña caja de regalo, alzó la vista cuando lo había guardado y miro a Lucy –Juvia quiere hacerle una pregunta... ¿Lucy-san de que conoce a Juvia?

Lucy bajo la mirada no pensaba que le preguntaría eso tan rápido pero tenía que decir algo, su flequillo tapaba su rostro, su labio temblo por un momento antes de responder –E-Éramos... Amigas... Muy cercanas.

–¿Ah en serio? Que emoción, Lucy-san parece ser buena persona –sin darse cuenta Juvia la tomo de las manos sonrojandola leve –Juvia lamenta no recordarle, pero hará su mayor esfuerzo para que suceda.

Lucy la miro a los ojos, suspiro y puso una mirada triste, volteo a otro lado para no verla a la cara –Sabes preferiría que no lo hicieras... No me recuerdes Juvia.

–¿Por qué? –interrogó con mirada confusa.

–Porque yo te hice mucho daño, hay cosas de las que me arrepiento. Lo siento –suspiro, se soltó del agarre de Juvia y cerró los ojos.

–Lucy-san... Eso no importa Juvia no le guardaría rencor, Juvia quiere hacerlo, quiere recordar.

–Hazlo con los demas pero conmigo no, Juvia –la miro seria, la peliazul bajo la mirada desanimada.

Hubo un silencio incómodo, Lucy decidió romperlo, no le gustaba mucho recordar el pasado... Fue muy egoísta lo que le hizo a su amada amiga.

–Una vez que abras esa caja sabrás quién es tu stalker, ambos compartían el mismo objeto sólo que de cierta forma diferente –hablo Lucy –ya no habrá más misterio Juvia.

–Todo... ¿Todo terminará? –dijo entre asustada y emocionada, Lucy asintió. –Una pregunta más... ¿ella es Wendy? –señaló la pequeña dormida en el sofa.

–Si, es Wendy Marvel, ha decir verdad también era muy apegada a ti. Te quiere mucho como a una hermana mayor, quería verte pero se quedó dormida esperándote... mejor así casi no ha dormido en tanto tiempo –le sonrió de forma nostálgica mirando a la pequeña –te conoce casi como tu stalker.

–¿Por qué? ¿es familiar de Juvia o algo así? Es muy adorable, Juvia quiere saber de ella.

–Ella es... la hermana adoptiva de tu stalker.

–Entonces ella sabe sobre Stalker-san...

Lucy la miro interrumpiendola y luego negó –no la involucres Juvia, aún es una pequeña niña.

–Si Juvia lo siente, gracias por su colaboración Lucy-san –dio otra reverencia, cuando iba a dar la vuelta la rubia la tomo de la muñeca.

–Juvia... Nunca olvides, si el destino te cambió –susurro cerca de su oído.

–¿Eh? Juvia no entiende Lucy-san –la volvió a mirar, ella le soltó la muñeca.

–Lo entenderás cuando lo veas. Por ahora cuidate Juvia –la chica sonrió, la peliazul hizo lo mismo. Se despidió una vez más, disculpandose por no haber hablado con Wendy y acabo por irse de la mansión con ayuda de Estarossa que la guió a la salida.

Camino solitaria por las calles, decidió detenerse un momento y saco la caja. Tenía miedo SÍ, ansiosa SÍ, quería saberlo SÍ... Tenía tantas emociones que no sabía que hacer. Así que temblorosa abrió la caja, quería que todo acabará de una vez y saber quién es su verdadero amor, no quería seguir estando vacía.

Cuando abrió la caja, vio un pequeño collar con la inicial J, ¿J? De Juvia... Lucy le dijo que ambos compartían el mismo objeto sólo que diferente.
Luego recordó que ella tenía la inicial N cuando encontró aquella foto de Natsu.
Natsu... Natsu... Natsu... El nombre resono en su cabeza.

–Nunca olvides, si el destino te cambió –repitió las palabras de Lucy... Y entonces ocurrió.

Su cabeza empezó a dolerle como si palpitara de alguna forma, se la agarró dejando escapar varios quejidos, sentía como su cuerpo temblaba... Varios flashback empezaron acumularse en ella, imágenes una tras otras, recuerdo tras otro.

Wendy, Gajeel, Levy, Erza, Lyon, Mirajane, Zeref, incluso una chica llamada Mavis.
Meredy, Lucy...

–¿Natsu... s-sama? –pronunció, le dolía, le dolía mucho no sabía como pararlo. Sus lagrimas empezaron a caer como cascadas.

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–Jushi, esto representa que nunca olvidaras que el destino te cambié –dijo con una sonrisa, colocando el collar con la inicial N, en su cuello.

Ella se veía tan feliz, tan completa, tan reluciente a su lado. Se dio la vuelta y le puso el collar con la inicial J al peli-rosa.

–Juvia no lo olvidará Natsu-sama –sonrió y le abrazó expresando lo mucho que le amaba, él correspondió.

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–¡JUVIA CUIDADO! –escucho un grito, pero era tan lejano no podía concentrarse no podía distinguir cual era la realidad y cual era un recuerdo. No podia dejar de llorar, no podía moverse. El dolor era cada vez más y más insoportable.

–P-Para, p-para, para por favor –se repetía a si misma, no queria seguir sintiéndolo, era una tortura.

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–¿Por qué Natsu-sama? ¿por qué? –retrocedió al ver esa escena que la dejo completamente devastada. No pensaba que las personas que quería tanto sería capaz de traicionarla de esa forma.

–Juvia, de verdad lo siento mucho... No quería hacerlo fue un impulso no es su culpa –mencionó la chica totalmente preocupada.

–Juvia espera yo no... –Natsu intentó acercarse, ella lo abofeteo sin dejarlo terminar.

–¡Juvia te odia Natsu! –gritó entre lagrimas y salió corriendo. Sin importarle su llamado.

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–¡JUVIA MUÉVETE! –el grito se hizo más cercano, ella estaba inmóvil en medio de la calle, no sabía en que momento había sucedido su cuerpo estaba sufriendo de un parálisis, reaccionó cuando escucho el sonido del camión. A la velocidad en que venía se le era muy difícil frenar.

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–¡NO! ¡YA APARTATE! –se lanzó sin pensarlo. No no lo odiaba como para quererlo muerto... Lo amaba demasiado, por eso se abalanzó empujandolo acabando por recibir el golpe.

El carro la había atropeyado en lugar de su amado. Ella lo había salvado...

–¡JUVIAAAA! –él la llamo. Ella le miro una última vez, él estaba llorando con algunas heridas, agachado cerca de ella.

–J-Juvia... se alegra de haberlo salvado... N-Natsu-sama –dio una pequeña sonrisa, hasta que perdió completamente la conciencia, la sangre que derramaba en ese momento destrozó al joven por completo. Que no dejaba de gritar y de llorar mientras que las personas de su alrededor llamaban una ambulancia por lo ocurrido.

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¿Y ahora se iba a repetir ese accidente? Cerró los ojos esperando el impacto no podía hacer nada en ese momento. Quizás su vida terminaría ahora ¿no? ¿era mejor así no?

–Lo siento, lo siento... Juvia prometió algo y no lo cumplió –susurró. Abrazandose a sí misma esperando el impacto una vez más –Juvia lo olvido.

Lamento la tardanza tuve asuntos escolares pero ya acabaron...
Me pondre al día, también con el especial para Stan lee aún tienen tiempo de participar💕
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🌸¡Adivina!

Nota: Estarossa elegido por Taka_Roc
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Espero les haya gustado.
Nos vemos en el próximo cap.
Sayonara minna💙