Me levanté muy temprano con unos pensamientos en la cabeza, ¿qué había sucedido anoche? ¿Qué es lo que yo había escuchado? ¿Acaso eso pasó en verdad? tendría que ponerme manos a la obra si quería averiguarlo y muy pronto. No vaya a hacer que el chico de anoche tenga mucha razón y estemos en peligro. Principalmente tengo que actuar como si nada, para que ninguno de ellos se dé cuenta de que yo sé algo, me levanto porque ya era muy tarde para ir a la preparatoria, cuando ya me estaba alistando, tocan la puerta de mi habitación:

— Oye, ¿ya estas lista? — preguntan.

Era Thomas quien hablaba desde el otro lado de la puerta parece que hoy también me esperara para irme con él.

—Ya casi estoy lista sólo me faltan algunas cosas — suspiro

— Está bien, te espero abajo — indico.

Se fue y yo me puse un poco nerviosa, no sabía cómo iba a reaccionar yo frente de esos chicos, por suerte los demás hermanos que se han ido a la universidad, tomo mi mochila y salgo de mi habitación, camino hacia la sala donde Thomas me está esperando, lo veo sentado ahí sólo, pensé que estaría con mi madre, casi ya no la veo, sé que tengo sólo pocos días aquí pero se alejado un poco de mí, me duele admitirlo.

—Estoy lista, vamos — le hago señas con la mano

—Está bien — se levanta del sillón.

Ya íbamos vía a la preparatoria, Thomas me mira y sonríe yo también le sonrío sólo para que no piense que algo malo está pasando o que yo estoy actuando raro.

—¿Hiciste la tarea? — pregunto, poniendo una mano en su bolsillo.

—Si la hice ayer — respondí — estaba un poco difícil ¿y tú? — le sonrió.

— La verdad no pude — suspira — estuve haciendo otras cosas y se me a olvidado hacerla ¿Me la podrías prestar? — baja la cabeza un poco avergonzado.

Pensé en una cosa, mientras me hablaba, ¿será que estaba haciendo anoche era esa extraña reunión con esos chicos, y por eso no pudo hacer la tarea? Así que lo que yo había visto no era un sueño, de manera amable accedí a prestar la tarea.

—Claro está bien — le sonrió — pero solo por hoy ¿okey?

— Gracias eres un amor — me da un beso en la mano- lo siento, me he emocionado — admite.

— Por nada — me ruborizó — no tienes que disculparte.

—Oye no podre almorzar contigo hoy — me avisa — tal vez mañana ¿puedes?

— Está bien — le hago un guiño.

¿A dónde irá después que salgamos de clase? para saltarse el almuerzo sea donde sea yo iré tras él. Llegamos al salón y la profesora inmediatamente pidió la tarea por suerte ya Thomas lo había copiado él me sonríe en forma de agradecimiento yo le devuelvo la sonrisa, él se sienta un poco alejado de mí. No sé por qué pero siento que esa reunión de anoche lo hizo cambiar un poco, de pronto la voz de la profesora me hizo volver a la realidad y dejara de pensar por un largo rato, nos pidió que formáramos grupo de 3 personas, me pare de mi puesto y dirigí al de Thomas, cuando le iba a pedir para que formará parte de mi grupo, unas chicas se me adelantaron y se lo pidieron obviamente yo tendría que buscar otro grupo con personas que no conocía pero no me voy a preocupar por eso ahorita tengo que almorzar y ya me está pegando un poco de hambre, mi estómago ruge un poco, pero también tengo que perseguir a Thomas- recordé. Al salir del salón me dirigí a mi casillero para sacar algunas cosas y por casualidad me encontré con Erick el chico que ayer dejé sin decirle nada, así que me detuve en el pasillo para saludarlo y disculparme con él por lo que había sucedido ayer.

—Hola buenas tardes — lo saludo a lo lejos.

— Hola hermosa — me da un apretón de manos — ¿Qué tal tu día?

— Esta muy bien no me quejo —sonreí— ¿y el tuyo?

— Genial — me hace un guiño.

— Oye quiero disculparme contigo por lo de ayer. Por irme así de la nada ya que tú te ofreciste guiarme hasta mi casillero, y no me dio tiempo ni de agradecerte así que gracias por eso — vuelvo a sonreírle.

—No hay porqué darlas Gracias hermosa, además aquel chico te arrastro, ni siquiera te pido permiso yo siendo tú no me la pasaría mucho con él, sigue mi consejo por favor — pone la cara un poco seria.

— Gracias pero él es mi hermanastro, así que estaré con él, vivimos juntos no se puede hacer nada — me río.

— ¡Qué! — Lo dice muy sorprendido — no puede ser que estás viviendo con él ¿porque? Aléjate de él.

—¿Porque? esque sucede acaso pasa algo malo — me sorprendo.

El al ver mi expresión, cambia de tema inmediatamente, como para tratar de evadirme obviamente me di cuenta, pero no le quise tocar el tema ya que yo lo averiguaría de cualquier forma, recordé que a esta hora Thomas se iría así que me despedí.

—Lo siento, pero ya me tengo que ir hablamos luego — me volteó

Me voy muy de prisa sin voltear hacia atrás. No quiero perder de vista a Thomas, justamente cuando voy saliendo de la preparatoria, él se monta en un carro donde hay varios chicos, no lo podía dejar ir. Si se iba no sabría lo que están planeando, así que como pude pido un taxi y le dije que lo siguiera. Para que no sonora muy extraños le dije al chofer que estaba siguiendo a mi hermano que se está acabando de escapar de clases, para que el chófer no me viera como una sospechosa, el carro siguió por un largo camino como de 35 minutos más o menos no veía la hora en que se detuviera, cuando por fin lo hizo se detuvo en un edificio no se veía muy abandonado pero tampoco había mucha gente. Le dije al chófer que se detuviera, un poco distante de ellos, le pague el dinero y me bajé del vehículo. Cuando Thomas ingreso al edificio yo lo seguí pero a una larga distancia de donde él estaba y los demás no pudieran verme, estando adentro pude ver que había como casi unas 30 personas eran más que las de noche, pensé.

Así que tenía mucho más miedo, de que me vieran, me escondí detrás de unas cosas de gimnasia y escuché hablar sobre una obra que harían y que estaban ensayando se suponía que era de criaturas y terror, era una sorpresa por eso lo estaban haciendo allí.

La verdad estaba sorprendida, había hecho tanto para nada, ya que era una simple obra de teatro, todas las cosas que habían venido a mi mente yo me lo estaba imaginando todo. Creo que puse mi imaginación a volar cuando escuché esas palabras anoche, creo que visto muchas películas y por eso creí en algo que en realidad no existía, estaba muy apenada porque empezaba a sospechar de esos chicos y creía que eran malos.

Pensaba hablar con mi madre para irnos, pero los estaba juzgando mal además Thomas no ha hecho nada para qué yo piense así del, no se creó que me deje llevar, tuve que esperar un poco a que se distrajeran, para poder salir sin ser vista obviamente siguieron hablando sobre su obras, sus preparativos, todo lo que tenía pensado hacer, después de cómo aproximadamente 15 minutos los chicos salen de allí, era mi oportunidad para salir también. Cuando logro salir, ya iba a cierta distancia del edificio, suena mi celular, al sacarlo de mí bolsillo puedo ver que era Thomas el que me estaba llamando, me puse demasiado nerviosa pero contesté:

—Hola — respondí con tono voz un poco bajo para que no me escucharan.

—Hola ¿ya has almorzado? ¿Te parece si comemos algo? — puede notar alegría en su voz.

—No he podido almorzar he estado haciendo tareas — le explico — si me parece bien, pero ¿no estarías ocupando esta tarde? — pregunto para disimilar un poco lo que he hecho.

—Me desocupe más antes de lo previsto — escucho la voces de los otros chicos despidiéndose — bueno voy para allá nos vemos — cuelga.

No puede ser sólo tenía unos cuantos minutos para llegar antes que él. Así que agarre otro taxi, al subirme al auto pude ver por el retrovisor, cuando él se subía al carro con sus amigos, sólo iba un poco más adelante, estaba rogando que no me viera si me llegaba a pasar por el lado no sabría cómo actuaria o no sabría cómo el reaccionaria, y que pensaría de mí si eso llegaba a suceder. En ese momento pensé " tengo que llegar antes que él".

Por suerte se detuvieron en una cafetería, por el camino así pude llegar antes que él, al ver que el auto se detenía deje salir un suspiro de alivio, y comencé a tranquilizarme, me recosté en el asiento del copiloto, que estaba muy cómodo, cuando el taxi llego a la preparatoria. Fui directo al baño, abrí la llave del lavado, deje que mis manos se mojarán por completo y las pases por mi cara, los nervios que tenía me hicieron sudar un poco, luego de mojarla, pase una toalla húmeda, me arregle un poco, saque un perfume de mi bolso, me lo coloque y salí hacía el salón.

Cuando entre Thomas estaba parado frente mi asiento hablando con unos chicos, me acerca a él.

—Hola ¿listo para comer? — pregunto.

— Por supuesto te estaba esperando — responde.

Él y yo subimos de nuevo a la azotea, para comer en el lugar más tranquilo y hermoso de la prepa, ya que casi nadie la visita, es por eso que muy callado, y se pueden escuchar con claridad el canto de las aves nos sentamos y sacamos nuestras comidas para compartirlas, ya que habíamos traído platos diferentes, el tenia emparedados y yo unos panqueques con miel.

Conversamos solo un poco, terminamos de comer y nos fuimos directamente a casa ya que nuestra última hora de clases, fue suspendida debido a que el profesor enfermo.

Llegue a casa y fui a mi habitación puse mis cosas en la cama me cambie y baje a cenar hoy tocara pizza, todos estaban en la mesa esperándome, tome asiento y comenzamos a comer.

—¿Cómo les fue hoy chicos? — pregunto Robert.

—La universidad es un asco nunca nos dejan respirar — respondió Stefan con un tono exhausto.

—Opino lo mismo que Stefan, esta semana estaremos más atareados debido a que habrá una feria histórica — añadió Lucas.

—Ni hablar de eso, ya me tienen hasta el tope, me han pedido que ayude con las decoraciones del gimnasio, y de mi aula — responde Hide — estoy muy agotado — admitió.

—Bueno, nuestro día ha sido menos atareado, no tuvimos clases en nuestra última hora, porque el profesor enfermo — hace una mueca — lo único atareado que hice hoy fue arreglar unos preparativos para un evento que se hará muy pronto en la prepa — añadió Thomas.

—Bueno, creo que es bueno estar aun en la preparatoria — concluyo — aunque sé que no nos falta mucho para nosotros estemos allá — lo digo viendo mi trozo de pizza.

—Debes de estar feliz hija — dice mi madre — me pondré muy feliz cuando pases a la universidad — sonríe.

—Gracias mama, lo sé — sonrió.

—Veo que todos están trabajando duro — dice Robert — los felicito por eso.

—Bueno termine — me levanto de la mesa —permiso.