N. Alex…

-Por el amor de Dios que te paso hijo? – mi madre se dirigió hacia a mi preocupada mientras mi padre y Cristian me miraban a lo lejos con cara de “ahora que hizo el imbécil de Alex?”

-Me caí cuando venía a casa mamá, no es gran cosa – digo incomodo, me madre empieza a pasar su mano por mi rostro.

-Pero esto se ve relativamente curado, quien te limpio la herida hijo? – pregunta mi mamá mientras se aleja de mi.

-Maya me la encontré afuera de su casa y me ayudo – digo un poco apenado, al ver a mi padre y al imbécil de Cris se asoman detrás de mi madre mientras tienen unas tontas sonrisas pícaras.

-Ay la pequeña Maya ayudó a mi bebe – trate de no hacer mi cara de dolor notoria cuando mi madre me abrazo. – Bueno hijo que te sea de lección, siempre fíjate por donde vas ahora ve a asearte para dormir, Cristian tu también.

-Bueno – subí a mi habitación seguido por Cristian el cual traía una cara seria, al entrar a mi habitación el también entró y cerró la puerta sin decir nada.

-Tu cuarto esta enfrente Cris – digo sin voltear a verlo.

-Que paso con Brandon? – pregunta serio mientras me ayuda a quitarme la chaqueta.

-Nada – digo viendo los rayones de mi espalda a través del espejo.

-Le diré a mamá, si no me dices que paso con ese idiota, hermano siempre que Brandon trata de provocarte nunca lo logra como es que ahora si lo consiguió – dice Cristian alzando la voz.

-Brandon dijo cosas de Maya, que quería verla sin blusa; contento? Ahora lárgate – me sentí incomodo al no escuchar palabra alguna de Cris.

-Ya veo pero hasta ella sabe la basura que habla de cualquiera hermano.

-Lose pero me molesto que no le tuviera ni una pizca de respeto Cristian, explote… - digo un poco desesperado mientras me ponía una camiseta.

-Bueno mira el lado bueno – dice Cris en tono burlón – tu chica te curo tus heridas – pone una sonrisa pícara ante su comentario.

-Ya empezamos de nuevo – volteo a verlo serio – no hay nada entre nosotros, entiende imbécil.

-Bien pero eso lo pones muy en duda al ver como te pones de exaltado – se encoge de hombros – aun que como te lo dije antes, no me sorprendería que te llegue a gustar.

-Creí que ya habíamos tenido esta conversación – rio al ver como trata de recordarlo.

-Cierto, ósea que este sería el momento para sacar los 15 dólares y la menta que tienes en tu billetera verdad?

-Exacto, y este es el momento donde te digo que dejes mis cosas de una buena vez y te vayas, que quiero dormir – digo abriéndole la puerta.

-Solo para que sepas – Cristian abre la boca y me muestra la menta – Me estoy comiendo tu menta! – levanta su mano frente a mi y deja caer mi billetera en mi mano y sale caminando de espaldas.

-Y el raro soy yo?! – pregunto al ver como entra a su habitación de retroceso.

-Pues si, eres el raro de la familia Alex – se asoma a su puerta – pero así te quieren mis padres.

-Si, te quiero también Cristian Blake – la seriedad de mi rostro hace que Cris caiga a carcajadas y se encierra en su habitación.

Al terminar de cambiarme para ir a dormir, veo a Maya que está en su teléfono con sus piernas apoyadas en su escritorio; al ver su pijama de panda empiezo a reír llamando su atención.

-De qué te ríes? – pregunta ella al levantar la mirada de su teléfono.

-Buscaba a Maya pero me encontré con un panda demasiado delgado – rio al ver a Maya levantarse de su silla.

-Esta haciendo un poco de frío – dice riendo mientras se pone el gorro que trae la pijama – y no tenia otra pijama.

La miro sonriendo, ella al voltear a verme sonriente cambia su rostro por uno más tierno.

-Aún te duele? – dice mientras toca su labio inferior.

-Un poco, me duelen más las de la espalda – digo encogiéndome de hombros.

-Me imagino pero ya sanará, tus padres te dijeron algo? – pregunta algo sentándose a la orilla de la ventana mientras se apoya en el respaldo.

-Pues no mucho mi mamá se preocupo, dije que vino la doctora Maya a curarme y se tranquilizó – digo riendo al ver su sonrojo.

-Al menos , te ahorre las horas de dolor – dice mientras mira su teléfono – bueno creo que te dejo ya es algo tarde, trata de dormir de lado para no hacer mucha presión sobre los rayones de seguro mañana ya habrán cicatrizado.

-Eso haré, Pasa buena noche pequeño panda.

Veo como ella rueda los ojos y cierra la ventana de su habitación, hago lo mismo y me acuesto, en medio de estar medio despierto y medio dormido, recordé la estupidez que hice con Maya; de donde rayos me salieron los huevos para acercarme de esa manera cuando ella estaba en el mueble de su cocina, si quería molestarla ya que cuando se sonrojada es gracioso pero ahora que lo pienso creo que quizá me pude haber pasado, tape mi cara con la cobija tratando de olvidar eso y ponerme a dormir.

Al levantarme por la mañana veo la hora eran las 9:00 am. Me dirigí al baño a lavarme la cara, me percate que la herida de mi labio estaba menos inflamada que el día anterior y estaba cicatrizando, me quite la camiseta e igual los rayones solo eran pequeñas rayitas rojas y pequeños puntos rojos donde se habían enterrado las espinas. Tome una ducha antes de que Cristian me sacara del baño al ir a mi habitación veo que él está hurgando en mis cosas.

-Ahora que quieres – pregunto mientras seco mi cabello con la toalla.

-Me prestas una camisa? – pregunta sin mirarme.

-No lavaste tu ropa anoche verdad? – me apoyo en el escritorio viendo como destruye mi closet.

-Si lave, pero se me olvidó ponerla a secar y digamos que no tengo ropa para la tarde – dice mientras saca una camiseta que esta al fondo de mi closet – entonces.. Me la prestas?

-Bien, pero regrésamela – cierro la puerta en cuanto Cris salió, termine de cambiarme, al bajar las gradas logró ver a lo padres de Maya que estaban en la sala con los míos.

-Buenos días – saludo al padre y abrazo a la madre de Maya.

-Buenos días para ti también Alex, como te sientes? – me pregunto el padre de Maya tomando asiento de nuevo.

-Muy bien señor gracias – me dirijo hacia mis padres – Buenos días mis hermosos progenitores – le deposito un beso a mi madre en su cabeza y choco los cinco con mi padre.

-Que linda manera de llamarnos hijo – dice mi madre riendo de lo que había dicho.

-Hijo iremos con los padres de Maya a ver el locales en venta – dice mi madre mientras los cuatro se ponen en pie.

-Esta bien – digo mientras les abro la puerta.

-Podrías terminar de arreglar la mesa, para el almuerzo Maya llegará en un rato ya que alguien le dijo a habría un almuerzo – me dice mi madre mientras los demás salen.

-Lo siento – digo dándole una sonrisa apenada mientras me rasco la nuca.

-Ya que, volvemos a medio día – mi madre deposita un beso en mi frente y se va.

Me puse a ordenar algunas cosas en el patio de atrás, cuando aparece Cristian comiendo mientras se sienta en una de las bancas

-No me vas a ayudar? – lo miro serio.

-No, lo estás haciendo muy bien Alex continua así – alza su pulgar en señal de “muy bien” mientras guiña el ojo.
Estaba por decirle algo cuando tocó el timbre.

-Podrías ser tan amable de tan siquiera abrir la puerta.. – le digo a mi hermano que no ha movido ni un pelo desde que tocaron el timbre.

-Alex ambos sabemos que contigo no soy amable – me acerque a el mientras tronaba mis nudillos – sabes que iré abrir hermanito uno de los dos tiene que estar guapo para recibir a las visitas.

Escucho la voz de Maya saludando a Cris desde la puerta, poco a poco escucho que se dirige para acá.

-Buenos días,  como te sientes? – pregunta Maya mientras me da un beso en la mejilla.

-Que como se siente!? Maya que no vez que le partieron la madre a este idiota? – dice Cris al oír el comentario de Maya.

-Buenos días Maya, ya estoy un poco mejor, las heridas están cerrando – digo ignorando el comentario de Cris el cual optó por simplemente rodar los ojos e irse a la sala.

-Te ayudo en algo? – pregunta ella al ver la mesa arreglada a medias.

-Si por favor – río y le extiendo una esquina del mantel blanco para la mesa, ambos la extendemos hasta cubrir la mesa con ella.

Maya terminó de poner algunas decoraciones en la mesa mientras yo sacaba los platos al patio. Veo como los ojos de Maya se vuelven aún más claros al contacto con el sol.

-Si te pones en el sol tu ojos se ven mucho más claros de lo normal – digo mientras quito un mechones de cabello de su rostro y voltea a verme.

-Eso también me lo dicen mucho – dice ella regalando me una sonrisa, pero luego de unos cuantos segundo pone su vista en mis ojos y pone sus manos en mis hombros haciendo que me baje un poco para quedar a su altura.

-Como es que tus ojos son grises y los de Cris azul oscuro? – pregunto sería.

-Mis abuelos por parte de papá tenía ojos azules y mis abuelos por parte de mamá los tenían verdes y grises, así que es más genético nuestro color de ojos – la miro mientras sonrió – como los tuyos, si yo no mal recuerdo los tuyos eran grises de pequeña.

-Cierto, recuerdo que mis padres me llevaron al hospital por que pensaban que estaba ciega – ríe al recordarlo – pero con el tiempo se tornaron de este color.

-Pero ese color me gusta en ti – digo dándole una mirada tierna, ella se sonrojada al escuchar eso y me sonríe, al girar mi cabeza hacia la ventana veo a Cris que tenía una cara pícara pero no de las burlona esta era extraña solo se le miraban los dientes de arriba.

-Oye enserio quiero a Cris, pero que esta haciendo? – Cris se percata de que Maya lo miraba y simplemente se limitó a sonreír apenado y desaparecer de la ventana mientras yo reía a carcajadas.

-Quieres un poco de agua? – pregunto de repente.

-Si, gracias – dice Maya, voy a la cocina y me encuentro con Cris tomando agua.

-Uno tenía que ser el guapo cierto? – digo riendo.

-Cállate – dice serio y se va a la sala.

Al salir no me había percatado de lo linda que se veía Maya con ese vestido blanco. Me acerco a ella ya que ella estaba de espaldas no me había visto salir.

-Acá esta el agua – digo en un susurro cerca de su oreja lo que hizo que volteara a verme entre molesta y asustada.

-Que haces? – dijo tapando su oreja un poco molesta.

-Tu agua – trato de no reírme al extender el vaso.

-No podrías ser normal y decir Maya aquí esta tu vaso o simplemente tocar mi hombro? – dice un poco molesta.

-Shh tranquila pequeña fiera – Estuvo a punto de golpearme pero al ver mis golpes se detuvo.

-Recuérdame golpearte cuando te cures – me limite a reír cuando escucho las voces de nuestros padres salir al patio.

-Hola chicos, bueno de seguro tienen hambre no? – dijo mi madre.

Cada uno tomó asiento en la mesa en espera de él almuerzo.

-Como les fue en la búsqueda del local mamá – dice Maya mientras toma asiento a mi lado.

-Oh muy bien cariño, vimos un lugar demasiado grande para el negocio verdad Mariana? – dice la madre de Maya dirigiéndose a la mía.

-Si Lauren, solo es de esperar a que todo salga bien en este proyecto para poder conseguir ese local – mi madre venia con una sonrisa al poner los platos de comida sobre la mesa.

-Todo les va a salir bien mamá – digo sonriendo.

Empezamos a comer y a conversar la comida estaba realmente buena, una de las cosas que le agradezco a mi padre es que se haya casado con mi madre que hace una excelente comida.

-Quieren postre? – pregunta mi madre después de un rato.

-Gusta de le ayude? – Maya se levanta de su siento y va hacia la cocina.

-Gracias cariño, si por favor toma– dice mi madre mientras le da los platos a Maya

Veo a Maya acercase con dos platos de pastel.

-Ojalá no vayas a tirarme el postre encima de nuevo – digo mientras le deja un plato a Cris. Ella solo rodó los ojos y si fue a traer los platos.

-Toma – se sienta al mi lado mientras pone el pastel en la mesa.

-Gracias – empezamos a comer del postre, se estaba poniendo un poco tarde y empieza a sonar una canción desde la cocina.

-Amor recuerdas esa canción? – dice la madre de Maya.

-Como no olvidarla, vengan! – los padres de Maya seguidos por los míos se levantaron de sus asientos y empezaron a bailar, me limite a ver a Maya quien reía al ver como bailaban, luego volteo a verme a mi.

-Adoro a nuestros padres – dice Maya sonriendo.

-Bueno pequeña Maya, le gustaría bailar con el más guapo de los Blake – digo levantándome y tomo la mano de Maya quien me miraba un poco sorprendida.

-El segundo más guapo Maya – dice Cris sin quitar la mirada de su teléfono.

Maya simplemente se empezó a reír y tomó mi mano, fuimos hasta donde estaban nuestros padres y la tomé de la cintura mientras ella rodeaba su brazos alrededor de mi cuello.

-Desde cuando bailas Alex – dice Maya mirándome mientras sonríe.

-No lo sé Maya, así que si te piso perdóname – ella ríe ante mi comentario, extiendo mi mano con la suya para girarla y quede yo detrás de ella.

-Pues para no saber lo haces bien – dice eso y regresamos a como estábamos antes.

-Bueno al menos no te iras a casa lastimada – digo acercándome un poco más a ella.

-Que bueno saberlo – se ríe ante mi comentario y seguimos bailando un rato más hasta que una gran ráfaga de viento hizo que Maya se detuviera.

-Frío? – preguntó mientras pasó pongo mis manos en sus hombros, Maya se limita a asentir

-Vamos adentro? – le digo a Maya que está hecha un bollo

-Si, me voy a morir de hipotermia – dice riendo.

Entramos a la casa con Maya, ella se fue a sentar a la sala, subí a mi habitación en busca de alguna manta, al encontrarla baje y rodee a Maya con ella hasta quedar frente a ella mientras me ponía de cuclillas para estar a su altura.

-Mejor? – levantó el mentón de Maya para encontrarme con su ojos color miel, su suave piel y esos labios rosados que sonreían, al pensar en eso me aleje un poco de ella y me levante rápidamente.

-Quieres algo de tomar?....

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Este fue el cap. Del viernes 😂♥️ espero les haya gustado.

Comenten que les pareció. 🌵✨

Linduras la nueva portada que ver la hicieron los de Grupo Creators. Hacen bonitas portadas ✨❤️

Y por último les digo que ya tengo instagram esta pobre lose, pero van haber muchas cosas bonitas ahí ✨♥️
Vayan a seguir la cuenta, bye ❤️