Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capitulo XIV : ¡Malditos secretos!

Flashback

Me encontraba en mi recámara preparándome para dormir cuando escuché un ruido provenir del portón así que deje de hacer lo que hacía y salí a ver.

—¡C-camus! ¿Qué pasó? — pregunté al verlo empapado —  ¡cielos entremos ya!— dije mientras lo metía a la casa.

— M-milo lo siento — sollozó mientras temblaba y sus lágrimas caían.

Lo cubrí con la manta que estaba sobre el reposabrazos del sofá y lo llevé a mi habitación.
Se dió un largo baño de agua caliente, le ofrecí algo de mi ropa, se cambió y se recostó en la cama.  Sabía que no estaba bien, era obvio, así que decidí no preguntar nada y esperar a que él se sintiera mejor, con el ánimo y la calma para contarme que pasó. Me recosté a su lado a velar su sueño, porque al ver su estado yo no podría ni conciliarlo.

.
.
.

— Camus — chilló al ver que serían las once y éste no se levantaba. — Amor arriba. 

— Hmmm — pereció aún con los ojos cerrados.

— Despierta, iremos a desayunar y luego a comprar algo de ropa — señaló pero este no reaccionaba — Cam — insistió sin respuesta alguna —  Maldita sea, ¡CAMUUSS! — gruñó tomándo el recipiente con agua y dejándolo ser sobre el rostro de su novio.

— AHH!! ¡M-milo! — gritó molesto — ¿A ti qué carajos te pasa?

— Aquí el molesto debería ser yo — demandó con el ceño fruncido — llevas dos días así; me voy a trabajar y quedás en cama, regreso y aún estas ahí, tirado como un ácaro .  Y en verdad es irritante así que te bañas rápido y bajas. — terminó y salió de la habitación. 
Camus estaba molesto por la reacción de Milo. Tiró el pichel al suelo y se levantó de inmediato, para luego azotar la puerta del baño con fuerza.

[ De regreso a casa]

— Milo, no te dije nada para no arruinar tu salida— indicó cuando éste parqueo el auto frente a ka casa — pero deberías disculparte ¿no crees?.

El rubio lo miró — Cam no me voy a disculpar — aclaró con una sonrisa ilusa — sí escuchaste lo que te dije luego de bañarte ¿no?, te das cuenta de como me siento al verte así, me preocupas.

— Milo tú tampoco sabes como me siento yo. Así que por favor, no me juzgues

Milo rió un poco — No te estoy juzgando cielo.  Sólo no me gusta verte así —

— Si me juzgaste y lo peor es que crees que lo sabes todo por eso lo haces.  Pero no es así — señaló bajando del auto algo enfadado por el comportamiento del rubio —  no tienes porqué actuar de tal forma. 

La sonrisa de su pareja despareció — Será porque no me lo dices, si hablaras conmigo no tendrías quejas — gruñó activando la alarma del vehículo — Deja ya el drama,  Camus. 

Camus abrió la boca y giró — Jódete —  le aventó las bolsas de ropa en la cara y entró a la casa. Milo se frotó la sien ahogándose en su propio coraje. ¿Qué le pasaba?  Llega pidiéndole disculpas, luego duerme días enteros,  salen y se molesta con él,  cuando lo único que le dijo era la verdad.

— No puedo con él — dijo pateando la bolsa y entrando al auto — no así.

[ En la noche]

Milo recién había llegado y no logró divisar a camus por ninguna parte, así que salió al jardín trasero y ahí estaba, sentado a la orilla del pequeño estanque.

Flashback

Era una noche fría y tormentosa, me encontraba en su habitación alistando mis maletas cuando Saga llegó.
Puedes irte a donde quieras, con tu amado si quieres — río azarosamente — pero donde sea te encontraré.
.
.
.

— Cariño lo siento — pidió el rubio al ver a Camus sumido en sus pensamientos — acepto que me pase,  en verdad discúlpame — Camus le asintió levemente — Dime que pasa — pidió tiernamente . Habían estado peleados rodoel día y aún no sabía que era lo que le sucedía— por favor cielo, en verdad me preocupas.

— M-milo tengo miedo — expresó con ambas manos entrelazadas cerca de su boca, para así tener mejor acceso a sus uñas rojas — N-no estamos seguros.

— ¿Es porque soy... —

— Si — interrumpió sin pensar. —  T-te buscan y ahora a mí — añadió despertando de sus pensamientos. — Yo no puedo ponerte en peligro.. Y.. —

Milo lo tomó de la barbilla y lo llevó hacía él para besarlo, dejando que esas hermosas pupilas llorosas lo deleitaran un segundo.

— Te quiero como a nada en este mundo Camus— añadió Milo tomando su mano — Y sé que te asusta todo esto, pero no te preocupes por mí. 

— Milo no, es que tú no sabes... —

— Yo te protegeré — musitó con una sonrisa.

— Tú no sabes nada Milo — dijo en tono fuerte, soltando su mano — por eso no quería hablar del tema contigo —  eso realmente molestó al Heleno.

— Lo ves Camus . ¿Cómo voy a saber si no me dices nada nunca y cuándo lo haces, es a medias? — señaló poniéndose de pie — en verdad me jode que tengas tantos secretos y no te tomes la amabilidad de contar conmigo cuándo alguno te molesta y ¿sabes qué? Ya no más — añadió haciendo que camus lo mirara con angustia —  pensar que quería pasar mis mejores momentos junto a tí , en esta casa, pero si no confias en mí, entonces no  te acerques, déjame ser y no me mortifiques a mí también con tus puterias. 

— ¿Milo a donde vas? — preguntó poniéndose de pie con lágrimas en su rostro.

— Dormiré fuera unos días. Si eso es lo que quieres está bien.  Dejaré que te asfixies solo en ese mundo de mierda que tanto ocultas. 

*********************************************

Suikyō se encontraba en su oficina buscando pistas que pudiesen ayudar contra Thanatos. Ciertamente se tomaba en serio el papel de proteger a Shion y eso era porque lo amaba profundamente.

—¿Puedo pasar? —

— ¡Que es esa pregunta Shion! pasa — indicó mientras arqueaba sus labios —  ¿en que te puedo ayudar?.

— Bueno sabes lo de Milo cierto — preguntó el lemuariano mientras se acercaba al escritorio.

— Si, Dohko habló con migo hace unos días — señaló afable — no sé de que te preocupas, sabes que no diré nada. Claro, Shaka se enterará, pero no será por mí.

Shion tomó asiento — Admito que te agradezco eso Sui, pero en realidad venía a otra cosa — hizo una pausa con un tono más seco —D-dohko y yo—

— ¿Están, ya sabes jun... ?—

—N-no, bueno no lo sé — interrumpió — dijo que quería acercarse a mí, pero no lo sé, aún no sé que somos — rió un poco.

— ¿Y? ¿Qué te inquieta?

— Tú, no quiero lastimarte , aunque quizá ya lo hice —

Suikyō se puso en pie y camino hasta la silla de Shion, se sentó en el escritorio frente a él y tomó su mano — Para tí no es un secreto lo que siento, bueno creo que para Dohko tampoco —musitó sonriente, mientras Shion lo miraba con tristeza — y aún así, no soy tu felicidad.

El peliverde bajó su rostro. Le había tomado demasiado aprecio a Suikyō y verlo ahí sentado, aguantando con un nudo en la garganta el hecho de que el hombre que amaba amara a otro y besara a otro, era doloroso .

— Suikyō lo siento yo..— lo miró con los ojos aguados .

— Shhh — susurró el de ojos púrpuras — Yo le dejé el camino libre, quiero verte feliz.  Y créeme que estar aquí a unas palabras de llorar no cuenta. 

— No quiero que te alejes — bajó la mirada hasta el pecho del chico — ahorita necesito todo el apoyo posible, pero antes que nada sabes que eres importante para mí — sollozó.

— Oye , estoy contigo, nadie te lastimará — frunció sus labios — ni a mí tampoco.

— Quiero que estés bien, me encantaría no ser quien soy _ Shion no levantó su mirada — Me asusta — tartamudeo — es algo muy delicado, es Milo de quien hablamos...

— Cariño, ¡¡HEY!! — lo tomó del rostro — mírame a los ojos, jamás,  jamás voy a dejarte.

****************************************

— Realmente es extraño — comentó abatido— nunca me cuenta sus cosas, siempre soy yo el que tiene que lamerme los pies, y sabes que odio eso.

— Calma — dijo Dohko mientras le daba un trago — puedes quedarte aquí el tiempo necesario, lo sabes.

— Sí lo sé, pero es que ese no es el punto — realmente el rubio no lloraba porque ya sería el colmo — Es sólo que hay algo de él que no me llena,  no termina de convencerme — suspiró mirando a Dohko con rostro inquisitivo — a la mierda.  Yo qué sé . ¡Salud!— levantó el vaso y dejó que su garganta se quemara con la bebida. 

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro