treinta
Me levanto y agarro mi teléfono viendo qué no tenía conversaciones.
Tocan el timbre y voy rápidamente.
Antes de abrir estiro mis manos.
Es el Julio.
-M-Manuel.-
Entra llorando colocándose en mis brazos.
-¿Q-Qué pasa?-
Cierro la puerta y le beso la cabeza.
Sigue llorando y le digo otra vez.
-¿Qué pasa Julio?-
-Me tengo qué volver a Bolivia.- Dice llorando.
-¿¡Qué!? ¿¡P-Por qué!?-
-Porque mi papá me dijo qué no le gustaba Chile o algo así.-
-Pero como si tú hay vivido acá desde qué llegaste y es super tranquilo.-
-Lo mismo digo, traté de decirle qué no quería irme pero me dijo qué no y se enojó conmigo.-
-Tranquilo.- Lo abrazo y beso la cabeza.
-No quiero separarme de tí.-
-Mira, si tú papá está decidido no hay nada qué hacer, pero no por eso yo terminaré contigo. Hablaremos todos los días si es necesario. Y el tiempo qué te quede acá lo aprovecharemos al máximo-
-Es qué nos vamos hoy día.-
-¿¡CÓMO QUÉ HOY!?-
-Si y por eso vine para acá, porque dijo qué era una sorpresa y mi mamá se puso a pelear con él por no habernos avisado.-
-No te puedes ir hoy día, n-no.-
-Si, me tengo qué ir hoy, si no mi papá se va a enfadar mucho.-
-Te vas a quedar conmigo.-
-Tengo miedo qué te haga algo, mi papá es una furia cuando está enojado.-
-No me interesa, tú no te vas.-
-Perdóname Manu, no voy a hacer esto.-
-¿Qué cosa?-
-Me tengo qué ir, te quiero mucho.- Me besa.
-No te voy a dejar ir.-
-Lo siento.-
Sale corriendo a la puerta y se va.
Me pongo a llorar en mi cama.
¿Por qué soy tan yeta? ¿Por qué?
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro