Manu: ¿Como está la herida?

Martin: Bien, boludo, no te preocupés tanto, no me voy a morir por una herida.

Manu: Ya, bueno.

Estaba sentado al lado de la feña, conversando un rato, pero me acordé de qué tenía qué hablar con él Alfred. Menos mal que estabamos en recreo. Lo empiezo a buscar, bajo las escaleras y me lo encuentro.

-¡Alfred!-

-Dime.-

-Quiero hablar contigo un poquito.-

-¿Ya te lavó la cabeza ese Argentino?-

-Ehmm. Primero, se dice lavar el cerebro y Segundo No.-

-Es que ayer como te lo llevaste a tú casa.-

-Si lo traje a mi casa fue porque le dejaste heridas.-

-Seeeeh.-

-Es enserio y para qué no pensi' qué "Me lavó el cerebro"... No me quizo decir nada al respecto y me dijo qué te preguntara a tí.-

-Mira, el problema fue por tí, no te diré más.-

Me empieza a abrazar.

-¿C.. Como qué fue por mí?-

-Preguntale a él si quieres saber más, si te lo dice obvio.-

«Me besa»

Me aparto y le digo.

-¡¿Por qué me besaste?!-

-Porque te ves muy lindo.-

-No puedo, lo siento.-

Salgo corriendo, yendo al baño a lavarme la boca porque literal, para mi el Alfred es un hermano grande. No lo es, pero yo así lo veo.

Supongo qué te bese tú hermano grande de esa forma no es placentero.

Me lavo bién la boca y aparece él Martin.

-Así qué el gringo lo consiguió.-

Lo miro con enojo y le digo.

-¿Qué cosa?-

-Darte un beso y conquistarte.-

-¿Qué weá estay diciendo? ¿Conquistarme? ¿Porqué crei' que me estoy lavando la boca aweonado?-

-Ah, es por él.-

-¡¡SIPO JETÓN!! E.. Esperate, ¿Tú lo viste todo?-

-Todo.-

-Ahora las cosas encajan, él dijo qué la pelea fue por mi, apareciste tú y me dio un beso. Martin... ¿Por qué fue la pelea exactamente y qué tuve que ver yo?-

Se queda callado.

-Yapo Martin, ¿Qué tengo qué ver yo?-

-No puedo, enserio.-

-¡Puta la huea! Si la pelea fue por mí, al menos tengo derecho a saber...-

-Si querés saberlo, preguntale a él.-

Se va caminando como si nada.

¡Ah no! Estos weones se pasaron.

Pero ya se me ocurrió algo.

Les mandaré un mensaje a los dos diciéndoles qué tengo que hablar y ahí ninguno de los dos me va a poder decir qué preguntale al otro.

Soy un genio.