— Esto no me sabe a nada...

                 — Que raro... yo lo saboreo como si nada...

En ello empezó un sonido agudo en la cabeza de Jacob, él se tomó su cabeza. Ronny se alertó.

                 — Jacob ¿Qué pasa?

                 — No sé... creo que es...

Jacob dijo unas palabras inaudibles por ser irregulares.

                 — ¿Qué?

                 — Que...

Empezó a tener más fallos, a tal punto de que su perfil empezaba a fallar. Eso alerto demasiado a Ronny.

                 — ¡Jacob!

Ronny pudo ver con sus propios ojos como Jacob se desvanecía sin que el pudiera hacer algo con su tablero de código madre. Quedó atónito, y apretó sus puños.

                 — ¡¡¡JACOB!!!

~Después~

                — ¿Qué rayos hizo con Jacob? — Ronny levanto de la camisa al millonario, estaba muy molesto. — Jacob perdió su identidad, no ha vuelto y todo empezó desde su estúpido trabajo especial.

                 — ¿Cree que estaba coludido con el equipo oficial? — Mostró un proyector de sus finanzas, todas en caída. — Mi empresa quiebra, mis empleados se están amotinando contra mi, y lo peor es que el código que hizo Jacob volvió a aparecer como uno hecho por un niño...

Ronny lo soltó y miro al suelo, estaba deshecho por dentro y su propia mirada lo delataba.

                — Por tu mirada puedo decir que... tu sentías algo por el... lo siento...

                — No solo era eso... — Miro a los demás en el bar, tenían un semblante decaído. — Jacob se volvió una leyenda ... — Puso su mano sobre su fuente. — Ahora soy el único que queda... Estoy completamente solo...

...

                — ¿Qué rayos hago en el avión?

                — ¿Acaso olvidaste lo que paso? Déjame darte unos recuerdos.

Mostró como el derroto de una manera tan simple a los guardias. Akihiro suspiro mirando hacia abajo.

                 — ¿Mataste a alguien?

                 — ¿Tenia que fijarme en eso? Vaya, en ese caso no lo se... ¿Mas de 5?

Akihiro apretó los puños y termino por distraerse en la vista de la ventana.

~Hace 2 horas~

Akihiro... no, su personalidad aterrizó en un aeropuerto, miro al bulto que era Connor y suspiro un poco apático.

                 — ¿Enserio por este desperdicio de oxígeno, Akihiro me cedió un poco de control? Parece que el idiota se esta enamorando, pero es mío ese idiota.

Fue a la taquilla y miro el menú de vuelos. Con su habilidad activada podía tener cuentas matemáticas de manera increíble, era mejor que cualquier algoritmo ejecutado por una computadora, sobre todo porque tenía emociones. De esto, supo como ir al destino que mas le ayudaría.

Actualmente en los aeropuertos existía la posibilidad del teletransporte, una opción mas práctica para evitar problemas que solían pasar en los vuelo y quienes lo controlaban tenían la posibilidad de estar en el mundo virtual controlando los problemas, pero debían de seguir algunos humanos para el mantenimiento, y quienes temieran al teletransporte, porque el riesgo del teletransporte era muerte o desviamiento de los componentes humanos, aunque era un medio de transporte bastante usado, solía ser bastante delicado.

Pero el había elegido ir a la zona de aviones, esto era para evitar ser rastreados.

Cuando fue su turno, una amable mujer rubia lo atendió, ella era los pocos que gestionaban de manera física.

                — Buen día joven ¿A dónde quisiera arribar?

                — Dos boletos a Volgogrado, en Rusia. De primera clase.

La mujer miro a la persona que cargaba. Estaba algo desconcertada.

                — ¿Y que le pasó al?

                — Unos criminales lo buscan y lo ayudé, ahora tengo que refugiarlo ¿Otra pregunta?

La mujer solo miró con extrañeza a el y empezó a registrarlos.

                — ¿Sus nombres?

                — Akihiro Bishuda y Connor Ellies.

                — Un hombre embosco a las fuerzas especiales con misteriosos poderes, fue identificado como Akihiro Bishuda, quien llevó a un rehén identificado como Connor Ellies; mejor conocido por ser el creador del innovador invento MedikTeK. El hombre fue considerado como peligroso y recomendamos llamar a las autoridades si es encontrado.

La mujer se asustó cuando miró la imagen del presunto y miro a Akihiro. Pero también el inclinó la mirada y dio una suave sonrisa.

La mujer intentó tomar el teléfono, pero solo con un movimiento de ojos hizo que lo soltara.

El puso su mano sobre la barra y entrecerró suavemente sus ojos, sin dejar su sonrisa.

               — Vamos nena ¿Enserio crees en esas noticias vendidas? Los idiotas nos emboscaron, casi mataban a este chico sino hiciera nada, soy su héroe. Y a mí me quieren matar por solo revelar la verdad y ayudar a la gente. Pero claro, ese multimillonario de pacotilla solo busca lavarles el cerebro y sigan en su mundo de ensueño que solo es una mierda distopica y una esclavitud mundial. —

Dio un suspiró con los dientes e hizo un movimiento con sus dedos, sacando los boletos y haciéndolos levitar a sus manos. E inclino su mirada.

                — No te amenazaré, no soy malvado como la mayoría de los millonarios hipócritas, en cambio te daré una interrogante ¿Acaso esta bien lo que haces o harás? Ya sabes la verdadera versión, solo falta que tu pienses, aunque sea por primera vez.

Se fue del lugar y la mujer empezó a checar lo que hizo. Le sorprendió como pudo haber pagado, en un solo movimiento.

Ya estaba en el avión, cambiando la cuenta a otro banco del mundo desde el celular de Akihiro.

                — Este idiota cree que Tailandia es un buen lugar, estarán en dictadura, pero son diplomáticos... mejor Corea del Norte.

Un robot llegó a servirles comida y miro al robot. Actualmente ya no existían aeromozas, solamente solían haber tres humanos en total a cargo del avión, el piloto, el copiloto y el encargado de servicio, que era quien vigilaba a los robots.

Los robots a cargo de servicios podían verse tan mecánicos o podían asimilar una apariencia humana, aunque normalmente de manera un poco tétrica, la gente siempre ha visto más su utilidad más allá de su apariencia.

              — ¿Puedes curar a mi amigo? Parece muy herido.

El robot encontró las palabras como un comando y revisó a Connor con un láser escáner.

              — Se encuentran múltiples heridas, una hernia en el estomago, una costilla rota y otra hernia en la columna. Posee diferentes laceraciones, moretones y desgarres de musculo. Desafortunadamente solamente se podrán tratar las heridas superficiales.

               — Entonces encárguese de eso, yo me encargare de lo demás.

               — En un momento tendré los materiales de curación.

El solo empezó a mirar a Connor y suspiró.

               — Tengo que entregarlo en una pieza... ya que...

Tomó su cabeza y emanó un aura dorada, donde hacia brillar por dentro el cuerpo de Connor, lo curaba, mas en especifico estaba compartiendo sus poderes de curación rápida a Connor por unos minutos, hasta sentir que estuviera bien. Empezaba desde dentro para afuera, así que dejaría que el robot le empezara a suturar y curar sus heridas.

Se puso su cinturón y llegó el robot, rápidamente saco varios brazos para atender las heridas.

Sin embargo, el tiempo para el estaba por terminar, y era algo que no podía controlar, pues lentamente cerraba los ojos, así fue como se durmió.

El robot había terminado de curar a Connor.

                — Esta listo la curación de su amigo... — Detectó que estaba durmiendo.

El robot sacó dos cobijas para ambos, y le puso un antifaz para dormir a Connor.

~Ahora~

                — Así que no te atreviste a lastimar a mas gente...

Akihiro en todo lo que había jugado, visto, las personalidades múltiples no se preocupaban por la personalidad principal, es como si esa personalidad por mas sádica que fuera tuviera misericordia por los demás, era extraño, lo único de esto que no le agradaba era que tenia que lidiar con dolores de cabeza y que lo acechara tanto, parecía tanto a esa novela visual...

                   — Por dios... no soy tan débil como ese chico ficticio de cabello azul.

Miro su reflejo en la ventana y recordó su mirada, con los ojos dorados de antes, en una transición.

                   — Sin embargo, si conociera controlar esos poderes, tal vez podría incluso controlar a mi gusto la tecnología... podría inhabilitar el NexusFairy... liberaría a todos...

Ahikiro miro a otro lado frunciendo sus cejas.

                    — Pero solamente soy un uno mas en esta sociedad ciega.

Akihiro solo suspiró y dejo que las punzadas de dolor bajaran, mientras esperaba que fuera el momento para bajar.

Sin embargo, Connor empezó a moverse, estaba despertando.

Akihiro se acercó suavemente a el e inclino su mirada hacia él. Connor estaba en un principio confundido, pero al ver el rostro de Akihiro, sonrió suavemente.

                  — Aki... eres mi héroe...

Akihiro tomo del pecho de Connor y solo miro a un lado, pero de todas formas se mostraba preocupado.

                  — No soy ningún héroe.

                   — Antes de que pudiera la consciencia de tantos golpes, vi como gritaste para que me dejaran...

Akihiro abrió los ojos, la sabia con más detalle lo que hizo, al menos antes de haber derribado a todos.

                   — ¿Y que paso después?

                    — Ese grito creo una onda que nos derribó, pero tu fuiste inmune a ello. Después ya no pude ver más. Pero supongo que te las arreglaste para que pudiéramos irnos en avión. Por cierto ¿A dónde vamos?

                    — Volgogrado, Rusia.

Connor trató de levantarse, pero solamente sentía dolor, Akihiro solo poso su mano sobre su pecho para acostarlo y mostró angustia en su expresión.

                    — Recibiste una golpiza que te pudo haber matado, por favor...

                     — Perdón...

Aun así, Connor mantenía un semblante feliz, sobre todo cuando sus ojos se encontraron con las de Akihiro.

Akihiro en cambio al encontrarse con su mirada, solo se volteo y frunció sus cejas. Recordaba el porque le dejo a el tomar el control y era por Connor.

Era algo que no podía soportar pensar, en que después de que Ronny estuvo por conquistarlo, que pensara en el de otra forma, que las acciones de otra persona le estén flechando. Pero al mismo tiempo pensaba que si pudo haberlos detenido y evitar la muerte de Connor, podría ser posible que pudiera dejar que Connor empezara a enamorarlo... pero en realidad era algo complejo, sobre todo con lo que estaba conociendo.

Hablando que sabe que tiene una segunda personalidad, el aborrecido millonario esclavizador de verdad es un dictador como siempre fue mencionado, el tiene poderes de los cuales no sabe en lo absoluto y probablemente los que lo amenazan con que no debe distraerse deben pertenecer al mismo orden de ese millonario. Era complejo.

                   — Queridos pasajeros, por favor ajusten sus cinturones, estamos a punto de aterrizar.

Cuando bajaron del avión, se empezó a sentir bastante frio, era ligeramente mas que en Inglaterra. Así que solo Akihiro suspiro y empezó a ayudar a Connor a bajar, era más difícil estar así, pero lo prioritario era ir a un hotel en especial que mantuvieran su secreto, pero confiaba en que los rusos no dejarían tan fácilmente que los mercenarios de ese hombre fueran con él.

Desde la creación de los Ellex, fue bastante polémico, países cuestionables, China, Rusia, Corea del Norte e incluso Israel cuestionaron el hecho que eran muy aprensivos y rechazaron usarlos, en cambio crearon su diferente tipo de Ellex, pero sus actividades en la vida real no se vieron afectadas.

Eso mismo llevó a que rechazaran ciertas leyes que son indispensables para otros países, parecieran buenas, pero realmente benefician a otros a orden mundial, por eso es que fueron emboscados, por esas leyes de doble filo.

Al salir del aeropuerto, pidió un taxi, uno de los pocos transportes que todavía pedían personas. Akihiro no sabia ruso, pero sabia que, si hablaba inglés, podría hacer que se molestara, solo intento algo.

                  — «¿No le molesta si habló Japones?» — Dijo Akihiro en japones.

                  — «Bueno, eso es mejor que el inglés» — Dijo el taxista.

                  — «Lléveme al hotel de mas confianza que conozca para personas que son perseguidas por ese millonario»

El taxista elevó una ceja y lo miro desde su retrovisor.

                  — «Así que usted también... Lo ayudaré.»

El taxi arrancó y se fue del lugar.

Sin embargo, alguien los seguía, estando desde arriba del techo del aeropuerto, brinco para poder seguirlos mientras iba al techo de otros edificios, pero eso mismo indicaba que no era una persona, era demasiado ágil y fuerte para serlo.