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¿No se supone que son amigos?

Alguien empezó a asomarse, de esta manera en cuestión de tiempo alguien abrió. Era un chico de tez morena con cabello chino, pero en corte de ambos lados, dejando a ver su flequillo acomodado de un lado, sus ojos eran marrones claros y era alto, al mismo tamaño de Connor.

                    — «Debes ser el encargado del programa ¿Dónde está Jacob?»

Akihiro logró entender eso, entonces cerro suavemente sus ojos y los abrió para verlo a los ojos.

                   — TinyJacob

Los ojos del chico brillaron y fue directamente abrazarlo.

                   — ¡Jacob! Es bueno al fin conocerte. — El chico hablaba también ingles fluido. — Soy Ronny...

Akihiro abrió los ojos en sorpresa y dio una sonrisa conmovida, correspondió el abrazo.

                   — Me llamo Akihiro Bishuda. — Akihiro sacaba varias lágrimas.

                   — Yo me llamo Elías Sandoval. — Se interrumpió. — Marco Elías Sandoval García

Connor empezó a ponerse molesto y los separó a ambos. Aunque sacando una sonrisa.

                   — Disculpen la interrupción, pero soy su novio. Sino sabias. 

Elías quedo pasmado y miro a ambos.

Tomeo se acercó nervioso hacia Motka.

                   —«Creo que ya hay problemas.»— Dijo con una voz temblorosa.

                   — ¡¿Novios?! — Volteo a ver a Akihiro. — ¿Por el me habías rechazado?

                   — Ro... Elías... sucedieron cosas cuando perdí mi identidad y...

                   — ¡Y entonces planeabas restregármelo en la cara! ¡Por un carajo, tu me lloraste para que te dijera donde vivo!

La gente que pasaba y los vecinos veían curiosos la discusión.

                  — No, Elías, por favor tenemos que hablarlo con tranquilidad.

Motka se puso en medio y miro a todos.

                  — Akihiro tiene razón, se tienen que platicar en calma todo esto, sobre todo porque tengo cosas que necesito que Elías tenga consciente.

                  — ¡¿Y que quieres que sepa si estoy siendo vilmente engañado?! — Elías miro con enojo a Motka.

                  — Se que te sientes muy enojado, pero estas llamando mucho la atención.

Elías empezó a ver a su alrededor y suspiro mirando abajo.

                  — Pasen...

Pasaron todos a la casa de él, pero Elías le tomo el brazo a Connor.

                  — Mejor cuida tus pasos, güerito, resolveremos asuntos personalmente.

Connor lo miraba algo abrumado, pero se jalo para que lo soltara.

Todos se sentaron en la sala y Tomeo miraba las decoraciones de la vitrina.

                   — ¿Por qué tienen trastes con polvo en una vitrina? Honestamente los usaría para comer con ellos.

                   — ¿Y quien es ese idiota?

                   — Es Gun...

                   — Pero soy Tomeo, también soy japones como Akihiro.

Elías se le quedó mirando con una expresión de confusión y dio un suspiro tenso.

                   — Mejor deberías quedarte viendo tu celular.

                   — Honestamente no me son divertidas las redes sociales, adoro hackear cuentas... — Se tapó la boca.

Elías mostro una mueca mas molesta.

                   — ¿Qué rayos no aprendes nada?... ¿Pero que debo de esperar de un idiota que participa en las orgias publicas en la calle virtual?

Tomeo encogió los brazos y fue directamente a su celular.

Elías entonces se sentó en el sillón. Dio un suspiro.

                    — Entonces... ¿Cuál es el nombre del encargado de esas comunicaciones?

                    — Motka. No precisamente intervine con los Ellex.

Motka se descubrió su cuello sin piel, demostrando que es un robot.

                   — Un robot autónomo, no solía conocer alguno así... ¿Qué fue lo que te dio autonomía?

                   — Un virus, un Troyano Rootkit, modifico en total mi conciencia y ahora el virus vive en mi haciendo que tenga libre albedrio. Puedo contagiarlo, pero siempre tuve la orden implícita de no contagiarlo, por el bien de la humanidad.

Elías entonces miro a Akihiro, se notaba la molestia en su rostro.

                  — ¿Y como rayos este tipo salió en medio de todo esto?

                  — Soy Connor.

                 — Connor, por favor... — Akihiro menciono.

                 — Suéltalo, Akihiro. — Elías insistía.

                 — Este tipo de temas podemos resolverlos en privado.

                 — No, quiero escucharlo de tu boca y ahora mismo. — Elías se cruzo de brazos. 

Connor dio una mueca molesta y miró a Elías.

                 — Vamos... Yo conocí a Akihiro cuando chocamos y después tuve su número, el me quiso solamente por sexo desde nuestra primera cita, en algún momento encontré desesperado a Akihiro y casi por huir de su casa, yo lo seguí y fui golpeado a casi a muerte por unos mercenarios a consecuencia, pero me salvo pese a todo. Después de eso, Akihiro estuvo cuidando de mí. Entonces conocimos a Motka, que después de una pelea, el me ayudo a al parecer conquistarlo y por eso ahora somos oficialmente novios.

Elías bajo una ceja un poco exaltado y entrecerró sus ojos.

                 — ¿Y porque no lo dejaste sabiendo todo eso?

                 — Porque yo sé de lo que significa ser fiel e incondicional a alguien. Algo que un niño berrinchudo con quien hablo no conoce.

La madre de Elías llegó, donde fue hacia Connor y le tomo el hombro. Uso su traductor desde su celular y le dio una suave sonrisa.

                 — Lamento... la actitud de mi hijo.... No se que pasó... para que... se... pusiera... así.

Connor dio una suave sonrisa. Levantó la mochila suya y la de Akihiro. En símbolo de preguntar donde dormirían.

                 — «Que ambos tengan habitaciones separadas.» — Miro a Tomeo y a Motka. — ¿Pueden dormir juntos?

La mama de Elías se fue con Connor.

                 — No necesito dormir, suelo estar acostumbrado a dormir a las afueras.

                 — Si duermes en las afueras en México lo único que vas a conseguir es que perderás tu funcionalidad. Entonces deberías dormir en el sillón.

Motka aceptó lo que dijo Elías con un suave movimiento en su cabeza.

                 — Y Tomeo ¿Qué planeas hacer?

                 — ¿De que hablas?

                 — De que sino cometerás otras estupideces como el de exponernos como cuando Connor estuvo bailando en el mundo virtual.

Tomeo mostró una expresión de sorpresa y empezó a brincar de la emoción.

                  — ¿Connor era el que bailaba el Moonwalk con apariencia de Christian Grey? — Dio un suspiro feliz. — Ahora admiro a alguien más...

Todos sacaron muecas demostrando que Tomeo dijo otra idiotez.

                   — ¿Dónde hay algún super?

                   — Hay un Super a dos cuadras si vas hacia el sur.

                   — Mejor veré el mapa en internet.

Tomeo sacó su celular y se fue. Motka miro hacia Akihiro y Elías.

                   — Debería dejar que hablen a solas... Investigare en el sitio, no se sorprendan si aparezco en la azotea.

Motka se fue de la misma manera que Tomeo, dejando a solas a Akihiro y a Elías.

                   — Muy bien, ya estamos solos. Dime realmente lo que pasó.

Akihiro miro a un lado y volvió a mirarlo.

                   — Si, fue así...

                   — ¿Y entonces porque fuiste llorando conmigo?

Akihiro lo miro firmemente.

                   — ¿Recuerdas lo que hice con el ransomware? Muy bien, la razón por la que Connor sobrevivió fue porque también mi poder se manifiesta de manera física. Motka puede testificar como casi lo rompí. El asunto es que mis sueños me fueron a guiar finalmente a ti. Eres mucho mas experimentado que yo, aunque esto esta fuera de los límites.

                  — ¿Y suponías que te ayudara sabiendo que amas a otra persona?

                  — Esto esta mas allá de amarte o no, la vida misma me esta empujando a hacer algo de lo cual no se si estoy listo.

Elías miro a otro lado, entrelazó sus propias manos y agacho la mirada.

                  — Entonces ¿Tu tienes poderes? ¿Sabes como usarlos?

                  — La única forma que logre activarlos fue en... pensando en Connor.

Elías tenía una expresión de tensión.

                  — ¿Y porque necesitabas mi ayuda? Connor ya te da la ayuda suficiente.

                  — Porque tu conoces mas sobre todas las cosas que ocurren en este mundo, tu eres el mas experimentado en el campo.

                  — Apenas tengo 27 años, no soy experimentado ni nada. A penas conozco la situación... con estados unidos...

Elías dio un suspiro, se paró y miro a Akihiro.

                   — Se que debería ayudarte en algo, pero ahora me siento confundido... Después de todo, hubiera querido ser yo quien curara tus heridas con ese chico...

Akihiro bajo sus cejas y miro al suelo.

Akihiro fue a seguir los pasos que hizo Connor al ser guiado por la mama de Elías. Entonces vio su mochila en un lado y Connor en otra habitación.

                  — ¿Por qué nuestras mochilas están separadas?

                  — Elías le dijo que estuviéramos solos.

Akihiro se sentó a un lado de Connor y suspiró.

                   — ¿Por qué nunca me contaste que ese mejor amigo realmente quería algo contigo y porque no le contaste sobre mí?

                   — Porque era algo difícil, supiste como estaba apurado. Sin embargo, yo...

                   — No digas nada, saber la verdad es mejor que vivir en una mentira. Lo importante es que ahora puedo entender tus sentimientos. El quererme por sexo no creo que haya sido precisamente eso, creo que te enamoraste ligeramente de mí, pero no podías verlo con todo lo que te pasaba. Ahora este tiempo en exilio solo te ha hecho pensar en lo que sientes.

                   — ¿Y qué debería hacer con Elías? Nos separó en camas.

                   — Solo esta enojado, pero al final de cuentas solamente tienes que dejar que acepte la realidad, es un proceso de duelo.

Akihiro seguía con las cejas abajo y Connor solamente le toco suavemente su mentón. Akihiro le sonrió suavemente y finalmente ambos se besaron.

En el momento de cariño entre ambos, Elías se asomó y ambos se exaltaron.

                 — Deberían ir a comer en lugar de intentar algo...

En la mesa, Akihiro y Tomeo quedaron algo confundidos con el guiso. Mole con arroz rojo. Sobre todo, por las tortillas. Connor tenia bastante curiosidad por las tortillas, pero las comía con gusto.

                 — Coma... — Dijo la mama de Elías a Motka.

                 — «Soy un robot, no necesito comer» — Motka dijo. 

Connor dio una sonrisa nerviosa y miró a Akihiro y Tomeo. 

                 — La tortilla se enrolla y se come como pan, miren. — Connor comió una cucharada de arroz y dio una mordida a su pan.

Akihiro empezó a intentarlo, pero se había manchado con el mole. Elías le dio una servilleta y miro un poco frio a Akihiro.

                 — Límpiate o el mole se pegará en tu ropa. — Elías dio secamente.

El resto del día fue incomodo, incluso en la manera en que se habían despedido Akihiro y Connor, debido a que siempre estaba mirando Elías.

Después de mucho tiempo era la primera noche alejado de Connor, se sentía solo y un poco vacío. Se abrazó a si mismo.

                — Recuerda que te amo, y que velare por ti aunque estemos lejos uno del otro. — Esas fueron las palabras de Connor antes de irse a dormir.

Akihiro empezó a mirar en el techo decorado como picos chicos y suspiro.

En algún momento del sueño, estaba en un escenario de jardín, con Connor, entonces sentía como lo tocaba en su parte baja, no podía evitar excitarse, después sintió como lo besaba. Quería hacerlo con él, pero entonces sintió algo mal. Fue entonces que intento despertar, lo intento con fuerza.

Y dio un suspiro agitado, Elías estaba encima de él, tocando su parte baja con la mano y muy cerca de él.

                   — ¿Qué estas haciendo?

                   — Deberías guardar silencio, todos duermen... disfrutaremos estando a solas...

Elías trató de besarlo, pero Akihiro lo trato de empujar, Elías se puso muy duro y evito que Akihiro lo empujara.

                   — Siempre desee tocarte en la vida real... déjame mi sueño cumplir...

Le robo otro beso y Akihiro trataba de empujarlo, pero eso hacía que Elías solo lo forzara más, hasta el momento en que sacó su parte intima a su vista. Akihiro estaba asustado.

                   — Elías, Elías, no lo hagas... tu y yo somos amigos... no rompas esa confianza...

                   — Akihiro, si ya la confianza esta rota...

Akihiro estaba mucho mas asustado, pero en ese momento pensaba en las lindas palabras de Connor, pero su cuerpo estaba siendo tocado de una manera que no quería, unas lágrimas salieron, pero Elías estaba tan anonadado en tocarlo y estar dentro de él.

Fue el momento esencial de concentración de Akihiro, pensar en los lindos momentos con Connor, pero también pensar en que estaba siendo traicionado por su mejor amigo.

                   — ¡YA DEJAME!

Creo una onda explosiva que empujó hasta la pared a Elías. Pero entonces empezó a retumbar toda la casa, habiendo luces parpadeando, Akihiro estaba con lagrimas en los ojos. Elías empezaba a tener miedo, puesto que Akihiro tenía otro semblante. 

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