— Abre tu corazón, intenta arriesgarte y déjate llevar.

                    — ¿Hablas de esas idioteces de amor juvenil?

                    — ¿Sabes? Cuando me enamore de ella, siempre arriesgamos el uno por el otro. Ella no creía que era posible enamorarse, sobre todo de un robot. Pero el amor que te puede brindar un algoritmo puede ser igual de humano como uno. No pude creer que el amor era arriesgar todo, pensar en el otro y protegerlo, pero supongo que solo aprendiste la parte superficial del amor, que fue la euforia y el compartir momentos, pero, es más. El amor puede llegar hasta un punto álgido en que terminas haciendo evolucionar a tu pareja, pero por eso tendrás muchos problemas, pero que servirán para evolucionar la relación y lograras eso.

                   — ¿Eso quiere decir que amo de una manera inmadura?

                  — Cualquier humano ama de una manera inmadura, el punto es cuanto quieres evolucionar tu amor. Y el amor que desarrollaste con Connor fue el amor incondicional, eso quiere decir que mejoro un poco pero aun requiere evolucionar.

Akihiro abrió de nuevo el reloj de bolsillo y dio una mueca.

                   — Entiendo.

Cerro el reloj.

                    — Eres un cupido muy idiota, pero agradezco tu intención, llegaste a algo.

Se fue del lugar y fue que llegó a la habitación. Connor estaba con el peluche de pollo amarillo, al parecer lo había dejado afuera de la mochila después de todo. Eso dejaba con la sensación de culpa en Akihiro. De esta manera empezó a jugar con sus manos.

                     — Todos tus regalos me han gustado.

Connor levantó su mirada algo despistado, pero miró a Akihiro. Le dio una suave sonrisa.

                   — ¿Y porque solo el pollito?

                   — Porque necesitaba acordarme de algo que me alegara.

                   — Pero si casi no sonríes.

                    — El que no sonría no es símbolo de disgusto, solo que siempre he sido reservado.

                    — Bueno, sino fuera por tu belleza, al conocerte te creería alguien raro. Pero eres demasiado inteligente y yo me di cuenta de eso.

Akihiro se ruborizo suavemente y agachó su mirada. Connor notó eso y empezó a reírse, le tomo el rostro y lo miro a los ojos.

                    — A decir verdad, no creo que estes enojado conmigo, pero siempre me ocultas algo, conozco tu presente, pero no conozco tu pasado, siempre que te miro, eres pensativo, pero no me dices lo que piensas.

                    — ¿Y tu que sueles pensar?

                    — Pues antes de todo esto, pensaba en otro invento útil para la sociedad, pensaba en un robot dron que ayude a la gente mayor, sobre todo porque ellos no saben conectarse al mundo virtual y están solos. También pensaba en ti y como podría descubrir tus misterios. Aunque lo ultimo lo sigo pensando.

                   — Mis misterios... son cosas que nunca he dicho por mas de diez años. No he podido decirlo, solo usar algo para explicar todo.

                   — ¿Y lo tienes?

                   — No...

Connor lo miro y empezó a reírse.

                  — No importa, mientras nos tengamos uno al otro. De mi parte, te serviré fielmente, mientras no me abandones.

Connor le tomo la mano y le sonrió suavemente.

                  — Estoy a tu merced, seré lo que deseas.

Akihiro empezó a verlo como actuaba cortésmente, era tan dulce. Pero, otra vez venia aquel pensamiento. Recién lo había platicado con Motka, se había armado de valor, pero no pudo más, sus lágrimas empezaron a mostrarse desde sus ojos.

                   — ¿Aun si por mi culpa murieras de una manera fatal y tu familiares y amigos me culparan a mí?

Connor levantó su mirada confundida y trató de consolar a Akihiro, pero Akihiro se alejaba.

                   — ¿A que te refieres? ¿Qué quieres decir?

                   — Por mi culpa todos sufren por mí, perdí a gente por mi culpa, casi moriste por mi culpa, todos creen que te secuestré. Jugué con muchos corazones... y con el tuyo... ¿Por qué no sientes odio o asco hacia mí?

Connor abría sus ojos, estaba entendiendo la verdad de todo. Estaba aliviado porque al menos si lo ama, pero no estaba tranquilo por lo que decía.

                  — Aki, no puedo sentir asco por ti, eres mi héroe, tu eres el amor de mi vida.

                  — ¡No soy nada de eso!

Dejo todo en silencio por ello.

                  — Tuve que recurrir a cosas que ni yo mismo se que son, solo te quería por sexo ¿Aun así me quieres? ¿Aun así? Yo... yo no te merezco...

Akihiro se fue la habitación, tomando su mochila y se fue corriendo. Connor lo trato de alcanzar, pero entre el personal y la gente perdía de vista a Akihiro. Lo vio salir, así que salió. Motka miro hacia el y Connor lo miro.

                  —  ¿Qué rayos le pasó? Solamente hablamos y empezó a llorar. ¿Qué le dijiste?

                  — Hablamos sobre que debía decir lo que siente... pero siente culpa al parecer...

                  — ¿Acaso no me ama?

                  — El amor suele ser complicado, sobre todo cuando hay un trauma de por medio.

                  — ¿Akihiro tiene un trauma?

                  — Si, pero es algo que debes resolver.

                  — ¿Y entonces porque nos ayudas sino puedes decir nada?

                  — En primer lugar, por la confidencialidad, segundo, estoy preocupado por él. Esto lo único que diré, el no fue quien te salvo la primera vez, aunque lo hayas visto luchar con ellos.

Connor pensó y miró la nieve caer.

                   — ¿Nieve en otoño?

                   — Suele ser raro, pero ocurre en rusia, aunque solamente será en la noche y con el sol se derretirá. — Aunque se puso mas serio. — Akihiro se dirige al norte, pero es mejor si te indico desde la conexión que tuve con tu celular donde quedó.

El celular de Connor abrió la aplicación de mapas y lo siguió, el corrió en la nieve, no sabía que era difícil de caminar en la nieve, nunca le había tocado caminar en la nieve pese al clima inestable en Inglaterra. Así que finalmente el termino buscándolo, pero no podía encontrarlo. La nieve podía ser muy estorbosa para la vista.

Pero volvió a escuchar la canción. Esa canción que hablaba de melancolía y tristeza. Tal vez podía entenderlo un poco, porque el probablemente se sentía completamente vacía, sin importar su circunstancia, lo entendía. El perdió a su abuelo, pero al menos tuvo el suficiente apoyo de la gente que de verdad lo apreciaba, pero no todos tenían la oportunidad igual que él.

Estaba Akihiro caminando, obteniendo una expresión de vacío debido a lo que había hecho. Estaba empezando a pensar en la forma de resolver todo por su propia cuenta.

Connor miraba su silueta y corrió, hasta que dio con su brazo, el cual tomo.

                  — ¡Aki!

Akihiro mostró sorpresa de eso e intento huir, pero Connor empezó a oponer fuerza y no pudo irse.

                  — ¿Enserio quieres seguir con esa farsa? ¿Después de esto?

                  — No es una farsa, sobre todo porque con lágrimas admitiste la verdad de todo.

Akihiro bajo su mirada e hizo una mueca.

                  — Eres un idiota...

                  — No importa lo que me digas, porque yo seguiré contigo. Me importas demasiado, porque tu has demostrado que te importo y que me quieres, aunque no lo admitas. — Tomó su rostro y levantó su mirada. — Sin embargo, no es por mí, es por ti, que te exijo que me digas porque niegas todo esto, cuando tu mirada brilla cuando me miras, cuando te preocupas por mi y tu mirada se apaga, cuando lo hacemos y me pediste que te abrazara, cuando te ruborizas cuando te elogio, cuando me protegiste, hasta cuando estábamos juntos, tu siempre buscabas mi compañía, tal vez si fue así como pensaste en un principio, pude notar que en nuestra primera cita algo hizo que siguieras con esto y dejaras que siempre te acompañara. Ahora que tus sentimientos brotaron, entiendo la confusión, pero también necesito que te deshagas de lo que ata del pasado.

Akihiro bajo las cejas y miro a otro lado.

                   — Yo... tengo esto.

Akihiro reprodujo un audio de su celular.

                   — Un auto a gran velocidad irrumpió un cruce de peatones, teniendo el saldo de un muerto, el cual fue identificado como Yuu Ito de edad de 15 años, los presuntos asesinos habían robado dinero de una caja de valores, siendo perseguidos por la policía fueron a exceso de velocidad y no dieron aviso a la gente en el momento en que llegaron y atropellaron al joven, venia acompañada de su amigo Akihiro. Lamentamos la perdida a sus amigos y familia.

Connor empezó a pensar un poco y le quito el celular a Akihiro. Akihiro se alarmó rápidamente.

                    — ¿Pero que haces?

                   — Eliminando esto.

Le dio su celular, había eliminado el vídeo y Akihiro quedo en silencio.

                   — Quiero que lo digas tú, de tu propia voz. — Le tomo la mano. — Pero en un lugar cálido.

Lo había devuelto a la habitación y lo llevó a un baño caliente en el baño, mientras Connor le tallaba la espalda.

                   — No era necesario que incluso me bañaras.

                   — Haría todo por ti, yo mismo lo dije.

Akihiro miraba a sus piernas desde el agua semi transparente. A veces mostraba su vieja actitud de adolescente, curioso por su entorno y alrededor. Pero ahora quería decirlo todo a Connor. 

                   — Cuando era niño, siempre estuve solo, era callado y reservado, prefería observar la naturaleza o leer un libro, por eso los niños me veían como un bicho raro y terminaban molestándome. No se cuanto había aguantado porque era niño, pero lo sentí una eternidad. Pero, ahí fue que un niño problema me defendió de unos bravucones y me ofreció su ayuda. Desde ese momento aprendí a apreciar a alguien mas que a mi mamá, ese era Yuu, mi primer amigo y mi mejor amigo por 10 años.

                     — Crecimos juntos como confidentes, le ayudaba a sus tareas y evitar a que reprobara mientras el me defendía de los niños que me querían molestar. Era un buen intercambio que también era la mejor amistad. Pero en algún momento, cuando ambos teníamos 15 años, Yuu pensó que no solamente sentía cariño hacia a mí, sino que me amaba. Así que un día lo decidió y se confesó conmigo de la manera mas insólita, esperó a nuestra reunión de amigos, donde comíamos dulces extranjeros y me besó. Ahí empezamos nuestro romance, aprendí muchas cosas de eso, incluso tuve mis primeras experiencias sexuales.

                      — Todo era color de rosa, hasta que llego aquel día fatídico día, habíamos paseado de nuevo a hurtadillas de nuestras madres y teníamos un día de novios, cuando íbamos a un restaurante, cruzábamos cuando era nuestro turno. Pero empezó a escucharse un auto en exceso de velocidad, las personas se dieron cuenta y se fueron corriendo. El único que no se había dado cuenta... era Yuu.

Akihiro recordó las escenas, el brazo mutilado. Sus lagrimas salieron de sus ojos. Apretó sus ojos y sus puños, no podía para de llorar.

                     — Lo peor de todo eso es que no puedo olvidar que aun sostenía su brazo, pero ya no estaba con Yuu, porque el había sido aplastado, todo un escenario sangriento a mis ojos tuve. — Dijo con voz temblorosa. — Después de todo esto, todos me culparon, y yo... yo...

Akihiro recordaba cuando vio la noticia, el ser mencionado como su amigo lo dejaba muy débil, cuando se entero la madre de Yuu.

                  »— ¿Tu y Yuu tenían un romance?

                  »— Por favor Azami, comprende que Akihiro y Yuu estaban solo cruzando la calle cuando el semáforo peatonal les dejo pasar.

                   »— ¡Cállate Haruko! ¡Este niño raro atrajo a mi hijo a los malos pasos y por eso murió de esa manera sangrienta!

Le dio una cachetada a Akihiro y su Haruko detuvo a Azami, casi llegando a una confrontación física.

                   »— ¡Aléjate de mi hijo! ¡Y aléjate de mí!

                   »— ¡Si! Me alejare de estos de ustedes par de raros... Nunca dejare que más de los míos se acerquen a ustedes...

Akihiro quedaba completamente en blanco en ese momento, nunca lloró por la muerte de Yuu, porque tragó todos esos pensamientos negativos y quedó en blanco muy buena parte del tiempo. Hasta que aprendió sobre su adicción al sexo y el descubrimiento de el mundo virtual, ni siquiera aprendiendo sus talentos en la informática.

Connor quedó impactado. Miraba a Akihiro llorando sin parar, era como si fuera la primera vez que llorara oficialmente por él. Ahora entendía parte de porque Akihiro tenia culpa.

Ahora en ese lado, podía al fin entender el porque de sus motivos.