Después de la ruidosa noche que a la chacal le tocó pasar, ella había llegado a ZPD bastante cansada, no había podido dormir en toda la noche, sus preocupaciones junto con sus temores estaban a flote, iba un poco desalineada pero eso no le importaba por ahora. Su camino fue largo, el ajetreo de todos los animales a sus trabajos por lo menos hacían que la pobre permaneciera despierta.

Ya en la estación esperó sentada en la oficina a que llegara dicho zorro, empezarían con el último día que estarían con el bisonte, eso en cierta forma alegraba a la chica, sin embargo el tener que reencontrarse con el Jaguar negro hacia que la pobre sintiera escalofríos recorriendo cada parte de su cuerpo. 

-Hoy será un día bastante difícil-  lo dijo instintivamente

Pronto la puerta se abrió, Patricia llevó su mirada a la puerta esperando a que fuera Nick, sin embargo era Judy quien venía con algunos documentos, pensaba trabajar por su cuenta para hallar más posibles pistas o tal vez algunas piezas claves para la investigación

-buenos días oficial Hopps

-Carrion, no sabía que estuvieras aquí ¿esta todo en orden?

-lo siento, es solo que estoy esperando a Nick para poder irnos a la encomienda que nos puso el jefe Bogo

-¿les puso una encomienda? ¿un trabajo especial?

-algo así...- en cuanto dijo eso, Patricia se encogió de hombros, el ambiente era un tanto incómodo, más por que no le había dado tiempo de tratar con nadie más que con el vulpino, ella deseaba que Nick llegara pronto, para poder salir de ahí, a ella le costaba mucho tratar con otros animales. Por otra parte, a Judy no le molestaba que Patricia estuviera cerca, quizás cuando tenga tiempo libre trataría de acercarse a Patricia, quizás hasta podrían ser muy buenas amigas

-Carrion, veo que te llevas bien con Nick ¿te agrada la compañía de mi amigo?

-si, él es un muy buen compañero y un muy buen zorro

-es muy dulce, bueno cuando quiere, es bastante gracioso y gentil, él y yo somos muy buenos amigos, espero que realmente te trate bien y que tú también lo trates bien

Un portazo hizo que ambas hembras observaran al frente, notaron que Nick había llegado, tenia unas gafas oscuras, pero por la forma en que había abierto la puerta el zorro, estaba mas que claro que él estaba molesto.

-Timidosita, andando tenemos trabajo por hacer

-¿sucede algo Nick?- al verlo de esa manera, Judy se alarmó, no era común ver a Nick molesto

-estoy bien Zanahorias, sólo quiero terminar con mi martirio... andando Patricia

Como si estuviera en problemas, Patricia siguió al zorro, en ningún momento cruzaron palabras, solo se limitaron a caminar hasta el auto de él.

•••

El camino fue silenciosamente incómodo, por alguna razón el zorro estaba de un pésimo humor, para la Chacal eso volvía aún mas agobiante el día, con mucho valor por fin habló la chica, esperando no arruinar nada o empeorar la situación 

-¿todo esta en orden?

-¿porque lo preguntas?- aquello erizó la piel de la chacal

-siento que algo anda mal y me gustaría saberlo

-no es nada- respondió secamente el vulpino -además de que no me gusta este nuevo trabajo de Bogo, desperdiciar oficiales en algo tan absurdo

-por suerte hoy es nuestro último día...- musitó muy por debajo, se limitó a ver por la ventana únicamente

De nuevo el ambiente se notaba muy incómodo incluso hostil por parte de ambos, tanto como Nick como Patricia no deseaban interactuar el uno con el otro así que dejarían que el día siguiera su curso, hasta que finalmente acabara...

-llegamos, a comenzar con nuestro martirio...

Ambos bajaron del auto del vulpino, se acercaron a la puerta, esta vez fue el jaguar quien los recibió, por su parte Patricia trató de no ser muy obvia en cuanto lo vio Sin embargo Nick notó como su compañera poco a poco fue ganando pánico

-me alegra que llegaran, él jefe ordenó que permanezcan en la puerta de su privado, tendrá una junta y no quiere que sea molestado por nadie ¿Quedó claro?
Ambos asintieron con la cabeza, entraron sin reprochar nada sobre el asunto, tanto Nick como Patricia se quedaron inmóviles en los costados del umbral, solo se escuchó como el jaguar dió dos toques en la puerta, para confirmarle al bisonte que los oficiales ya estaban ahí.

-"esto es demasiado raro"- pensó la canida cuando el felino se fue...

Un par de horas pasaron tanto Nick como Patricia se habían aburrido de estar parados, ninguno de los dos se dirigió la palabra, solo se quedaron en silencio, Nick comenzó a mostrar toda su apatía, realmente empezaba a odiar en trabajo en que estaba involucrado, miró de reojo a su compañera, ella estaba recargada en la pared, no parecía que le importara en lo mas mínimo, sin embargo notó que ella suspiraba de vez en cuando, hablaría con ella después, de la nada la puerta se abrió haciendo que ambos animales se sorprendieran, el bisonte por fin había salido, comenzó a caminar pero ahora rumbo a la  puerta de la salida

-¿que esperan? muevan sus huesudos traseros- en cuanto lo dijo los oficiales lo siguieron, sin cuestionar nada al respecto, el día sería largo y ajetreado...

***

Pasadas las horas por fin Nick como Patricia, podían descansar tranquilos, estaban en el auto de Nick, se regresaban por fin a la estación de la ZPD, por fin aquel tan desagradable y desgastante trabajo había terminado, el Vulpino se encontraba tranquilo y a la vez relajado, sin embargo notó a su compañera desganada, estaba en un estado mustio.

-Timidosita- trató de llamarla sin despegar la mirada del camino, sin embargo no recibió respuesta, fue hasta que el semáforo cambió para poder hacerla reaccionar -Timidosita

-Hmm oh lo siento ¿Me decías algo?

-¿Todo está en orden?- está vez Nick fue directo -desde en la mañana te he notado muy extraña ¿Pasa algo?

-no es solo que... No pasa nada de que preocuparse estoy bien- desvió la mirada, realmente ahora no quería hablar sobre eso

-sabes que puedes confiar en mí, o al menos que tengas prejuicios sobre nosotros los zorros entonces te pediré que bajes del auto... Es broma, bueno ¿Confías en mi?

-No, no, no es eso, es solo que... Si confío en ti pero, no quiero hablar sobre eso ahora

-¿tan malo es? Entonces lo entiendo

Patricia era un poco reservada en ese sentido, no era la clase de chica que contaba por las infortunias que estaba atravesando, ella solía callar toda su vida personal, tal vez por que sentía que no era necesario hablar sobre ella misma o quizás el hecho de que en toda su vida no tuvo mejores amigos a los cuales decirles. Sea como sea, aun con toda la confianza que le tenía al vulpino ella no hablaría sobre el asunto de su madre y mucho menos la desaparición de su hermano, sabía que Nick ya tenia suficientes conflictos, además de que el tenia sus propias preocupaciones como para escucharla ahora. Por otra parte, el vulpino quería saber por lo que su compañera estaba pasando , en cierta forma se había encariñado de ella, le recordaba en cierta forma a él cuando era niño, solo que mas callada y mucho más tímida, una sonrisa se le formó cuando recordó las incontables aventuras por las que pasó, eso era un grato recuerdo, sin embargo la sonrisa no fue demasiado duradera, puesto a que también recordó las desgracias, los malos ratos y todos aquellos que lo querían ver destruido, era una sensación amarga que recorría su mente, sin embargo eso le dio lecciones de vida, muy buenas, le dio amigos verdaderos... y también un amor imposible

-no es que me quiera meter en tu vida pero ¿iras a la cita con la mecánica?

el zorro rojo frenó de golpe, se le había olvidado que dentro de dos días tendría que ir a la cita con Skye, ni siquiera tenia planeado algo para ese día

-¡LA CITA! ¡SE ME HABIA OLVIDADO!- llevo unas de sus patas hasta la frente, realmente ese trabajo de Bogo le había hecho que se olvidara de todo 

-lamento mucho mi curiosidad... es solo que, acabamos de pasar el local y me acordé de su cita

-no pasa nada... de hecho, gracias por recordármelo- esta vez Nick se encontraba mas calmado -respondiendo a tu pregunta, cumpliré con la parte del trato, así que si, tendré una cita con Skye

Aun en sus pensamientos, Nick seguía conduciendo, por suerte era jueves por lo que solo tenia un día mas para soportar el trabajo, sin embargo ahora ya no tendrían que soportar al extraño bisonte y a su familia, eso aliviaba más al zorro, además un día mas de trabajo no seria tan agotador como los últimos 3 días.

•••

 El viernes fue como los días anteriores: repartiendo multas, pero ahora lo hacían en Sahara Square, había muchos infractores en ese día y los insultos no se hicieron esperar, sin embargo era parte del trabajo de ambos oficiales, Patricia se empezaba a acostumbrar, bueno no del todo pero, ya no le afectaba mucho el hecho de que la "blasfemaran" como si de una villana se tratara, simplemente trataba de que eso no le causara algún remordimiento mas. Justamente en ese momento, la chacal vio una camioneta estacionada, marcó la multa y justo cuando estaba apunto de dejarla en el parabrisas escuchó un grito proveniente de una tienda de artículos domésticos

-¡OYE TU! ¡¿QUE DEMONIOS CREES QUE ESTAS HACIENDO?!

Patricia se sorprendió al ver un zorro tan pequeño de color crema, al principio pensó que era un niño sin embargo se dio cuenta de que era un zorro de desierto, este de inmediato se dirigió a la chica

-¡mas te vale que rompas esa multa o si no!

-¿o... si no...? ¡¿QUE?!- dijo temiendo por que el zorro le hiciera algo, tal como pensó, el pequeño vulpino sacó de su camioneta un bate de madera, Patricia empezó a buscar su macana eléctrica, sin embargo la había dejado en la patrulla

-preciosa rompe esa multa ¡AHORA!

-¡NICK! ¡AYUDA!

-wow, wow, para tu tren ¿dijiste Nick?

Antes de que Patricia pudiera decir algo más, el ya mencionado zorro apareció, se puso en medio de ambos, tratando de calmar la tensa situación

-Finnick hace tanto que no te había visto

-lo mismo digo compadre... ¿Quién es la novata?- dijo señalando a la Chacal, quien estaba parada detrás del zorro rojo, procesando lo que estaba pasando frente a ella

-Es Patricia, es mi nueva compañera

-¿compañera dices? ¿Qué le paso a la pelusa con patas y orejas largas?

-no le llames así...- su mirada denotaba suficiente enojo -Judy u OFICIAL HOPPS para ti, esta en una investigación - se cruzó de brazos

-¿investigación eh? que lástima que no la tengas cerca, aunque tú nueva compañera no esta nada mal, es sexy -al escucharlo Patricia hizo una extraña mueca, si bien no era vergüenza, tampoco era una cara de pena- compadre tenemos que hablar más a menudo

-lo se, ahora ¿me dirás que hacías en esa tienda?

-larga historia, solo te lo resumiré... ¡NO ES DE TU INCUMBENCIA WILDE!

-oye, oye calma ese genio, bueno hagamos esto- Nick tomó la multa de las manos de Patricia- yo se que tú no quieres esto y yo se que mi curiosidad no es lo suficiente como para indagar sobre tu vida

-¿que quieres decir? habla claro

-yo romperé la multa si tu me dices que haces dentro de esa tienda...

-¿y si me niego?

-bueno, no solo recibirás la multa, si no que también te pondré cargos extras por: veamos, oh si, amenazar a un policía en servicio, por no seguir órdenes y por interrumpir en una investigación policiaca, así que decide amigo - Nick esbozó una sonrisa 

-ahora que eres policía te detesto más... - suspiró pesadamente, tenía la mirada con el seño fruncido, sin embargo no apartó la mirada del zorro rojo -de acuerdo, yo trabajo ahí

Nick no pudo evitar carcajearse, tanto como Patricia como Finnick lo miraron, Nick estaba que no se creía aquello, realmente debía ser una broma, nunca en toda su vida pensó que su compañero de estafas y mejor amigo, terminaría encontrando un empleo formal, de hecho, aquel zorro del desierto siempre lo ínsito a crear buenas formas de conseguir dinero rápido, fue por eso Nick no lo había tomado muy enserio

-¿de que te ríes Wilde?

-oh compadre es solo que, enserio, no te imagino con un trabajo formal

Finnick bufó, subió a la camioneta, sacó de ella un gafete donde decía que el era empleado de la tienda, se lo mostró al vulpino rojo, por su parte Nick quedó sorprendido

-¿ahora me crees? la situación se pone difícil comarada, ahora tengo que ganarme la vida de forma más "limpia"

-bueno un trato es un trato- dicho eso Nick rompió la multa frente a ambos animales - me gustaría poder hablar contigo más pero Patricia y yo tenemos cosas mas importantes por hacer, vámonos Timidosita- el vulpino se dio la vuelta para regresar a su patrulla temporal

-Nick, espera... ¿aún tienes tú viejo número?

-si ¿por que? 

-porque hay un asunto que me gustaría tratar contigo, pero, tiene que ser en un lugar apartado, ya sabes uno donde estemos a solas

-¿y por que no lo tratamos hoy?

-lo siento amigo, pero hoy no podré hacerlo... en cuanto tenga tiempo libre hablaré contigo a solas y en un mejor lugar

-de acuerdo... andando timidosita

Ambos comenzaron a caminar cuando Patricia volteo a ver al pequeño vulpino, miro como se despedía de ella mientras sus labios se juntaban haciendo un beso en el aire para después  guiñar un ojo, eso le dio escalofríos a la chica, Nick por su parte estaba pensativo, realmente no sabia que "clase de asunto" quería tocar su amigo con él, pero sea lo que sea, de algo estaba seguro, para que Finnick no le quisiera decir ahora era por que tenía cierta gravedad.

_____
Al día siguiente
_____

Era la mañana del sábado, Nick dormía plácidamente, por fin su tan ansiado descanso había llegado, por fin podría quedarse hasta la hora que quisiera bajo las tan sensuales sábanas, era lo que él mas amaba en toda su vida, dormir hasta tarde sin que nada ni nadie lo molestara, todo iba perfecto hasta que: el sonido de su alarma retumbó en cada rincón de su habitación, haciendo que el maldijera incontables veces, como pudo quitó la alarma, trató de volver a los atrapantes abrazos del sueño, sin embargo, por más que tratara de descansar su cuerpo ya no se lo permitía. Como ya no podía dormir, el zorro se levantó de su cama, miró el reloj (su endemoniado y estúpido reloj) que marcaban 9:01, decidió que tal vez seria bueno empezar con la rutina de limpieza, sin embargo... a los 5 minutos se encontraba en su sala, desparramado en el sillón pequeño, sobre su estómago tenía un tazón de cereal viendo las caricaturas, no es que el zorro fuera amante de la programación infantil, pero el programa de "Annie: la niña de las estrellas"  era uno de los pocos que le gustaba ver. 

En cuanto acabo su programa comenzó a buscar mas cosas por ver en la televisión, sin embargo, solo estaba la misma programación barata y de mala calidad que hay los fines de semana: infomerciales, comerciales de productos, noticias, películas que no fueron lo suficientemente buenas y uno que otro programa de mal gusto, sin pensarlo dos veces, apago el televisor, miró el reloj de su sala, marcaban 10:47 quizás ahora empezaría con la limpieza del hogar, se levantó sin ganas del sillón, tomó su plato y comenzó a lavarlos pero justo en ese momento, recordó la cita con Skye, nunca estableció la hora exacta, solo le dijo que pasaría por ella a su taller.

Sin pensarlo el vulpino rojo, subió a para alistarse, iría al taller de aquella zorra ártica, realmente no tenía algo planeado para ese día, pero tampoco quería estar fuera de su casa mucho tiempo, entre mas rápido comenzara con su trato más pronto volvería a la comodidad  de su hogar, además de que sería la mejor manera de quitarse el aburrimiento.

Tardó un poco en alistarse, pero por fin, el zorro estaba listo, usaba su fiel camisa verde junto con sus pantalones cafés, también usaba su tan querida corbata, justo antes de salir, tomo un abrigo verde, iría a Tundratown ya que posiblemente Skye había planeado algo para los dos en ese lugar, sin más salió de su hogar para dirigirse al taller.

***

Los rayos del sol se colaban por las aberturas de la persiana de su habitación, Skye dormía plácidamente, por suerte hoy era sábado por lo que Andrew llegaría más tarde, todos los días de la semana se habían quedado hasta tarde para seguir arreglando sus pedidos y tareas pendientes, por lo que hoy no tendrían mucho trabajo en el taller, sin embargo, su alarma sonó, ella aún tenía pendientes en su hogar por realizar antes de que llegara el caballo. se levanto como siempre, de un muy buen humor, sin cuidado aquella vulpina albina comenzaría con la limpieza, prendió el estéreo de su casa a máximo volumen, las ventajas de vivir separada de algunas casas, era que no tenía vecinos que le pidieran que bajara el volumen ni ella tenía que enojarse por lo mismo. Con el ritmo de su banda favorita comenzó su labor de limpieza, en menos de una hora ella ya estaría lista para el día que le esperaba.

Todo estaba saliendo como ella lo había planeado, a las 10:30 ella estaba abriendo su taller, no tardó en quitar la nieve de su entrada en lo que esperaba al equino, pronto el sonido del claxon de su asistente hizo que dejara de apalear la nieve acumulada.

-buenos días Andrew

-Generala... - sin más el caballo tomó una segunda pala para ayudarle a la albina, ambos terminaron pronto

-Andrew, hoy se entregan 5 carros, el señor Mandriguez vendrá a que le hagamos su cambio de aceite y el último que aun tenemos pendiente es para un ajuste de balatas, yo seguiré con la patrulla, mientras tu te encargas del volvo, las piezas que ordenaste llegaron esta misma mañana

-tal parece que hoy nos liberamos de mucho trabajo

-si todo sale bien, hoy podrás irte temprano

-al fin, sabe, detesto llegar tan noche 

Ambos animales comenzaron sus obligaciones del día, así fue hasta casi medio día, ambos trabajaban duros en sus respectivos labores, de pronto el sonido de un claxon hizo que la albina dejara de seguir reparando aquel automóvil de la policía, salió rumbo a la entrada de su taller, Andrew iba detrás suyo.

-¿más trabajo?- cuestionó el equino -sabe debería reconsiderar contratar a alguien más

-si y lo pagaré con parte de tu salario- le contestó seriamente la vulpina Ártica, se acercó lo suficiente a la ventana del copiloto -¿En qué puedo ayudarlo?

Justo en ese momento la ventana de aquél bonito auto azul fue descendiendo lentamente para sorpresa de la zorra Ártica, notó que el conductor era el oficial Nick Wilde

-Generala Skye ¿Nos vamos? O ¿Acaso pasé muy temprano?

Skye quedó impresionada, su cuerpo estaba inmóvil trataba de recordar el porqué aquel animal estaba ahí, al ver el comportamiento de la hembra, Nick únicamente comenzó a reír, no era una risa burlona, era todo lo contrario, era calmada y ligera

-Generala Skye ¿No me diga que lo olvidó?

-oh santas nieves... Si lo había olvidado, realmente pensé que tú...

-¿Olvidaría que hicimos un trato? Claro que no, yo soy un zorro de palabra, bueno entonces ¿Nos vamos?

Skye simplemente no supo que decirle, realmente no esperaba que aquel zorro rojo llegara o qué tan siquiera lo olvidara, sin embargo el trabajo la tenía muy estresada, miró a Andrew quien apenas si podía aguantarse la risa, miró de nuevo a Nick

-¿Podrías esperarme un par de minutos? Necesito arreglarme... Andrew ¿No habrá problema si te quedas solo un par de horas verdad?- dijo para después entrar a su taller y por ende a su casa, mientras tanto el equino miró molesto al zorro, se dirigió de nuevo al taller dejando solo a Nick, él en cambio, estaba como si nada, prendió el estéreo de su carro para escuchar ahora su selección de música.

Skye miraba su closet, por alguna razón estaba algo indecisa sobre que ponerse, aunque ella no era de arreglarse mucho para una cita, por alguna razón dudaba de cada prenda de la que tomaba, hasta que finalmente encontró una que era la adecuada, tomó su toalla para meterse a bañar ya que el olor a aceites y lubricantes para motor estaban impregnadas en su pelaje, no quería llegar con el olor de su taller a ningún lado.

Tardo al rededor de 15 minutos en alistarse, bajó lo más rápido que podía, Andrew quedó estupefacto cuando observó detenidamente a su jefa, ella vestía una camisa de algodón de manga corta de color azul claro, junto con un pantalón azul oscuro, llevaba puesto un reloj en su muñeca izquierda, tenía el collar en forma de estrella, la cual era de plata

-jefa... ¡No sabía que usted es una hembra! -dijo de manera sorpresiva, lo cual hizo enfadar a Skye

-¡Oye!

-jajaja solo bromeó... Pero ¿Tiene su teléfono con usted?

-Si ¿Por que?

-por si ese zorro intenta pasarse de listo con usted, si intenta hacerle algo mándeme un mensaje, active su ubicación y yo iré por usted de inmediato

-Andrew, tranquilízate, estoy segura de que llegaré antes de la atardecer, además dudo que me haga algo, no sabe con quién se mete si intenta hacerme algo

-sea como sea, tenga mucho cuidado

-estare bien, tu tranquilo, bueno te encargo el taller

Después de aquello, Skye se dirigió al auto de Nick, tocó un par de veces la ventanilla, ya que el zorro había subido el vidrio, sin embargo no tuvo una respuesta inmediata.

Nick estaba escuchando a un volumen considerado la canción de "stayin' alive", seguía el ritmo con sus patas apoyadas en el volante, al igual que con su cabeza. Fue hasta la tercera vez que se dió cuenta de que la hembra ya estaba ahí, quitó el seguro al igual que bajo el vidrio

-lo siento tanto, pensé que te demorarías - Nick no conocía a ninguna hembra que no demorara en arreglarse, bueno había una excepción y esa era Judy, sin embargo dejo de pensar en eso en cuanto la hembra subió sin reprocharle al vulpino, él por su parte, únicamente se encogió de hombros -¿Tienes algún plan a dónde debemos ir?

Skye le devolvió la mirada apenada, realmente pensaba que él era quien tenía algo planeado para los dos, Nick comprendió de inmediato que ella no tenía algo planteado

-bueno, pensé que tú tendrías algo en mente para pasarla juntos, después de todo fue tu trato

-de verdad lo siento, pero como verás, se me había olvidado por completo que vendrías... - se excusó ella

-tengo una idea, que tal si vamos a desayunar algo, tengo mucha hambre

-suena bien ¿A dónde iremos?

-a un excelente lugar- dicho eso el zorro arrancó, realmente quería pasar un agradable rato con Skye, un par de minutos más tarde, ambos llegaron a una rústica cafetería, el lugar era agradable para la hembra, era tranquilo y muy confortable, ambos llegaron hasta donde Nick la dirigió, fueron hasta una mesa para dos.

-oh cielos, este lugar es muy confortable- dijo la chica

-espero que te guste, la comida de aquí es sumamente deliciosa

No pasó mucho tiempo en que llegara una camarera, está reconoció al zorro policía que de inmediato comenzó a agradecerle el haberle salvado la vida, Nick por su parte trataba de calmar a la joven mangosta, por ahora solo quería un almuerzo tranquilo, Skye por su parte no pudo evitar sentir felicidad y bienestar, hasta que finalmente la mangosta paró dándoles a cada uno el menú.

-quiero la orden del emparedado de queso y pollo, con una taza de café expreso

-buena elección ¿Y usted señorita?

-me gustaría la ensalada de pescado con la guarnición correspondiente y de tomar quisiera un té helado de menta con moras

-enseguida se los traigo

Una vez que los dejo solos, Skye por fin pudo hablar con Nick, él en cambio se veía relajado y bastante tranquilo, no era como ella se lo imaginaba que sería

-háblame sobre ti

Eso hizo que el vulpino mirara extrañado a la hembra que tenía en frente -bueno ¿Qué te gustaría saber?

-platícame sobre ti, que te gusta hacer, que te gusta escuchar, algunos de tus gustos... Ya sabes cosas de ese tipo

-bueno, como lo has notado soy un zorro policía, tengo 29 años me gusta mucho la música refinada: las viejitas pero bonitas, soy amante de las moras amo esos frutos, también puedo llegar a hacer una que otra broma, la verdad es que tengo muchos gustos que no terminaría de nombrarlos ¿Y a tí?

-yo... Bueno, yo tengo 26 bueno casi 27 en tres meses... estudie ingeniería en mecatrónica y soy amante de la mecánica automotriz, soy de gustos más ruidosos en cuanto a la música, pero no me mal intérpretes ya que me gusta el rock ligero, de hecho mi banda favorita es Franz Ferdinand  los escucho desde que era una adolescente y bueno no sé qué más te gustaría saber

-¿Puedo preguntar algo?

-ya lo hiciste- dijo sonriendo -pero  házlo

-no me malinterpretes, la verdad nunca he visto hembras en la mecánica, y ahora que me dijiste que eres ingeniera ¿Por qué decidiste ser una mecánica? Pudiste llegar a ser más

-veras, es una historia realmente larga, pero puedo resumirla, cuando era niña mi padre era mecánico, trabajaba para una empresa de autos, toda mi infancia la pasé dentro de un taller mecánico... Hasta que nos mudamos de Zootopia, a mi padre lo transladaron a Canadá... Decidí no ejercer mi profesión por algunos problemas que tuve hace tiempo, problemas insignificantes ahora que los pienso mejor, así que regrese a Zootopia para trabajar en lo que me gusta desde niña: los autos

-lamento mucho si te incomodó mi pregunta

-¿Que dices? No, para nada, me alegra hablar sobre mi pasión, dime ¿Cómo fue que tú te hiciste policía?

Esa pregunta hizo que Nick la viera de forma automática, Skye tenía una sonrisa que en cierta forma le hacia sentir ternura

-todo comenzó con el caso de los aulladores, ayude a..

-no me recuerdes esa época, tenía planeado regresar pero durante esos meses me habían negado mi regreso, haciendo que gastara mi poco dinero a lo inútil... Lamento interrumpirte

-no te preocupes, también yo la pasé mal... Pero como te decía ayudé a resolver el caso de los aulladores, me volví policía poco después de que el caso se aclarara y bueno el resto es historia, pero una muy buena si me permites presumir

-debes tener muchas historias impresionantes

-algo asi- respondió alardeando él -me imagino que tú igual

-no del todo... Tal vez, pero son de cuando vivía en Canadá

La comida de ambos al fin había llegado, se dispusieron a comerla en silencio, sin embargo de vez en cuando alguno de los dos hablaba, era un rato agradable el que compartían, ya habían acabado su comida, pronto la vulpina Ártica notó un grupo de animales pequeños reunidos cerca del televisor, miró la pantalla para ver de qué se trataba, Nick por su parte no tardo en girar la cabeza.
En la pantalla estaba un partido de Rugby, ambos zorros se acercaron para verlo mejor, la mayoría de los animales reunidos eran mangostas, suricatas y zarigüellas.

"Bienvenidos a la semifinal de la copa nacional de Rugby, hoy los Thunderbolts se enfrentan a los Electroshock Mongoose, será una final sumamente electrizante ¿No crees Antón?"...

-¿Tanto alboroto por un partido de Rugby?- preguntó Nick

-no es cualquier partido de Rugby, este es la semifinal, dos equipos son de Zootopia y aparte es la primera vez que un equipo de mangostas llegan tan lejos- le respondió alegremente la camarera

-¿Un equipo de mangostas juega un deporte tan rudo?- está vez fue Skye la que preguntó sorprendida

-Si, mi hijo juega en él, la verdad me sorprendió muchisimo que el llegara hasta la semifinal... Estoy tan orgullosa de él- dijo la dueña del local

-¿Te gustaría ver el partido?- le preguntó por debajo él vulpino

-suena bien, pero ¿Tu quieres verlo?

-por mi, es igual si lo vemos o no

-veamos un poco, no creo que tengamos mucho que perder

Ambos tomaron una silla y se acercaron para ver mejor el partido, la semifinal era entre un grupo de Leopardos contra las nombradas mangostas, era una competencia reñida, aunque a los felinos le ganaban en tamaño a los herpéstidos, no lograban intimidarlos.

-aqui tienen- dijo la dueña del local al entregarles un platón lleno de alitas de pollo a ambos zorros -cortesía de la casa

El partido estaba interesante, aunque Nick no era de ver los deportes aquello había ganado completamente su atención, Skye por su parte estaba emocionada, al ver como el equipo de pequeños anotaban puntos se levantaba de su asiento, pero cuando el equipo contrario lo hacía ella simplemente bufaba molesta.
Eso le causaba de cierta alegría al vulpino, ver el entusiasmo de la albina le era emotivo.

Una hora más tarde, el partido estaba por terminar, al equipo de las mangostas les faltaba 5 puntos para ganar, si lograban anotar ellos ganarían, todos en el café estaban reunidos cerca de la televisión, el ambiente era cayado, silencioso casi espectral, se observó cómo uno de los Electroshock Mongoose tomó el balón y esquivó a dos leopardos de una barrida por debajo, aquel macho de mangosta, lanzó el balón a otro compañero, él corrió a la zona de anotación, sin embargo fue tacleado por un leopardo, pero, otra mangosta tomó el balón logrando anotar, tan pronto el árbitro la dió por buena, los pequeños mangostas se reagruparon para dar la patada que determinaría si ganaban o no... El balón de poco en poco siguió el trayecto trazado por la patada.

El único sonido era el respirar de todos los presentes

-¡NO PUEDE SER! ¡POR PRIMERA VEZ UN EQUIPO DE MANGOSTAS LLEGA A LA FINAL!- gritó el comentarista, las mangostas habían anotado, les habían ganado a un grupo de Leopardos, el triunfo hizo que todos en la cafetería comenzaran a festejar, Skye fue una de las que más se emocionó con aquella victoria, Nick le pareció bastante chistoso ver cómo la hembra Ártica comenzabá abrazar a las dos mangostas (madre e hija)

-¡Muchas felicidades!

-¡Postre de arándanos y fresas con chocolate para todos!- dijo la mangosta mayor

-bueno, Generala Skye, veo que tenemos que irnos

-Me parece perfecto

Ambos se dirigieron a la entrada para  pagar la cuenta, Skye había insistido en dividir el pago, algo que le hizo recordar a cierta coneja, sin embargo Skye era diferente en algunos aspectos, pronto ambos animales estaban en el auto del vulpino.

-¿tienes planeado hacer algo más? Generala Skye

Ella lo miró arqueando la ceja, realmente pensó que solo tendrían un desayuno y ya -Nick ¿Tu tienes algo más por hacer hoy?

-en realidad no, pero pensé que tal vez querías hacer otra cosa, yo tengo disponible toda la tarde- dijo de manera directa

-mmmm ¡Oh ya sé a dónde podríamos ir ahora!

-¿A sí? ¿A dónde?

-conduce de nuevo a Tundratown, te iré indicando por donde ir

Sin mucho el zorro comenzó a conducir, seguía las instrucciones que Skye le daba.

***

Un par de minutos, ambos estaban frente a un parque en el corazón de Tundratown, ambos comenzaron a caminar hasta que llegaron a una laguna congelada, había un puente de concreto en medio, era pequeña pero atravesaba el parque, lo que hacía que la vista fuera hermosa

-cuando era niña, mi padre solía traernos a mis hermanos y a mi a patinar a este lugar, los 4 solíamos hacer competencias de carreras, también solíamos tener partidos de Hockey, eran bellos días en aquel entonces

Nick observó cómo Skye sonreía al recordar viejos y quizás anhelados momentos -bueno ¿y que estamos esperando? Veo que te mueres por patinar en el

Simplemente Skye sonrió, Nick le devolvió la sonrisa, ambos estaban apunto de poner un pie en la congelada superficie cuando el sonido de un silbato hizo que giraran sus cabezas buscando de donde había venido

-¡USTEDES DOS! ¿QUE CREEN QUE ESTAN HACIENDO?- era la voz de un guardia, no era un oficial debido a que su uniforme era diferente, ambos animales vieron como aquel alce ya estaba frente a ellos

-solo queríamos patinar es todo 

-esta prohibido señorita

-¿a si? ¿desde cuando?- le refutó una muy molesta zorra ártica

-desde hace mucho, ahora puedo dejarlos ir con una advertencia... ¡no pongan una pata en el...!

Skye no le hizo caso, puesto a que ella ya estaba en el hielo patinando sin escuchar al alce

-Vuelva aquí- el alce entro para arrestar a Skye, pero cuando llego hasta ella, Nick se puso en frente de ambos para evitar que le hicieran algo

-oiga oficial, escuche, yo también trabajo para la seguridad, soy un policía, tal vez usted y yo...-

-un zorro de oficial... ¡JA! eso es lo mas estúpido que me han- no termino de hablar ya que Skye le había pateado en uno de los tobillos, el alce cayo del dolor, instintivamente, Nick tomó de la mano a Skye, ambos comenzaron a correr al auto del vulpino, detrás suyo estaba un molesto alce queriéndolos alcanzar, cuando al fin llegaron al auto del vulpino, entraron y sin ponerse los cinturones Nick arranco para evitar problemas con el "oficial". Ya en unas cuadras lejos, Nick estaciono su auto, ambos trataban de recuperar el aliento.

-¿porque lo hiciste?- preguntó el vulpino entre jadeos -¿porque lo pateaste?

Skye desvió la mirada -por que se lo merecía

-hablo en serio... por que lo...

-¡POR QUE DETESTO QUE SIGAN DICIENDO QUE LOS ZORROS NO PODEMOS EJERCER CIERTAS PROFESIONES!

Nick la observo más detenidamente, realmente no pensó que eso fuera una razón de enojo para ella, también notó como ella comenzó a encogerse, realmente no quería que Skye se sintiera mal.

-arruine la cita ¿verdad? lo siento yo... solo quería patinar, es algo que extraño mucho hacer, desde que era niña, cuando nos mudamos a Canadá yo... jamás volví a hacerlo

Esas palabras hicieron sentir pesar en Nick, realmente no se imagino que aquello en realidad tenia gran importancia en la zorra albina

-puedes llevarme a mi taller si lo deseas

-no, aún no

-¿disculpa?- por la forma tan seria que el zorro lo había dicho, Skye empezó a dudar si era bueno permanecer en el auto, desafortunadamente el auto tenia los seguros abajo por lo que le era imposible bajar, con mucho cuidado tomo su celular para mandarle su ubicación al equino

-tu querías patinar ¿no es así? bueno conozco un excelente lugar para hacerlo 

El zorro condujo a un lugar apartado de las viviendas, era terreno abierto, aun no había rastro de civilización, puesto a que había muchos arboles cubiertos de nieve, pronto el camino pavimentado se había acabado, Nick siguió conduciendo hasta unos 20 minutos, estaciono su auto, invito a Skye a bajar  también, ella miraba extrañada al zorro, sin embargo le hizo caso.

El vulpino traía puesto su abrigo, debido a que el frio podía sentirse un poco mas en esa parte, Skye por su parte seguía dudando sobre las intenciones del zorro, sin embargo cambio de parecer en cuanto notó la inmensa extensión de hielo frente a ella, era un enorme lago congelado.

-cielos es muy bello

-ahora podrás patinar a gusto y sentirte como lo hacías de niña- dijo el zorro 

-no se que decir...

-tal vez un: "Gracias Nick es muy considerado de tu parte" -esa ultima frase la dijo tratando de imitar la voz de la hembra 

-en definitiva es muy acertado, gracias Nick- Skye tomo de una de las patas de Nick y ambos comenzaron a patinar, sin embargo el zorro rojo caía de vez en cuando, no estaba tan acostumbrado a hacerlo, Skye por su parte parecía como toda una profesional, aunque de vez en cuando tropezaba, hacia años que ella no lo hacía, pero era un momento de felicidad para ella, era como revivir viejos tiempos. Se acerco hasta donde estaba tirado el zorro, quien había vuelto a caer mientras trataba de seguir de pie

-parece que necesitas ayuda

-¡¿enserio?! no me había dado cuenta- dijo de manera sarcástica y molesta 

-vamos, déjame ayudarte- Skye le ayudo a ponerse de pie, coloco uno de sus brazos alrededor del brazo de Nick, comenzó a desplazarse con él, de vez en cuando ella lo miraba, y el a ella, hasta que finalmente los ojos de ambos se encontraron, Skye esbozo una sonrisa, eso hizo que Nick comenzara a ganar confianza, el seguía el ritmo de ella sin que estuviera apoyado. Nick ya podía patinar por su cuenta

-lo estas logrando

-es muy fácil

Skye seguía patinando, pero ahora mas rápido, hizo un salto, para caer sobre una de sus patas, ella estaba tratando de hacer lo que sus hermanos le habían enseñado a lo largo de su infancia

-¡NO ES JUSTO! ¿Cómo pretendes que intente hacer eso?

-¿que cosa?- no se había dado cuenta de que había una parte de hielo levantada lo que causó que ella tropezara

Al verlo, Nick trato de ir por Skye - ¿estas bien?

-si no te preocupes, solo fue un pequeño tropezón

-¿estas segura?

-claro que si...- Nick la ayudo a levantarse -creo que ya deberíamos volver

-no me digas que por este pequeño tropezón se te quitarón las ganas de seguir patinando

-¡NO! es solo que pienso que tal vez ya es hora de volver

-oh vamos aun nos falta algo mas por hacer

-¿algo mas?

el vulpino se dirigió hasta la orilla, Skye trataba de averiguar que era lo que tenia planeado aquel policía, miró como trataba de arrancar un par de ramas de uno de los pinos, en cuanto volvió traía consigo dos ramas, le entrego una a la albina

-¿que significa esto?

-se me ocurrió tener un partido amistoso de Hockey, tal y como lo tenías con tu familia

-Nick eso es... pero hay un problema no tenemos un disco y tampoco tenemos porterías

-en eso te tengo la ventaja- sacó del bolsillo de su abrigo un par de bellotas -aguanta aquí- volvió a orilla para cargar un montículo grande de nieve, comenzó a repartirlos -perdona que no tengan color, aunque si gustas puedo darles algo, aunque seria de un tono amarillezco 

-¡oye que asqueroso!- dijo riendo aquella hembra

-¿entonces que dices? ¿te gustaría perder ante el gran Nick Wilde?

-acepto tú juego... sin embargo tú eres el que va perder rojito

-¿rojito? al menos yo tengo color, pequeña

Ambos ya se encontraban jugando aquel deporte, no cabe destacar que Skye le iba ganando, ya había anotado mas de cinco veces, sin embargo el zorro capto rápido, al poco tiempo ya le era escurridizo a la albina, ambos se estaban divirtiendo demasiado.

Así duraron por un tiempo, jugando, riendo y haciéndose mutuas bromas, el rato era agradable, realmente ambos la estaban pasando de maravilla, sin embargo una grieta hizo que Nick cayera, al verlo Skye se acerco hasta su lugar, el hielo donde estaba Nick estaba lo suficientemente delgado, el peso de ambos hizo que se rompiera, haciendo que ambos cayeran a la helada agua, ambos luchaban para salir de ahí

-¡mantén la calma! tratare de sacarnos a ambos- dijo la zorra quien , instintivamente abrazó a Nick y con él en sobre su espalda trataba de llegar hasta la orilla del enorme cráter de hielo, una vez ahí aventó el cuerpo de Nick y trató de subir, pero le era inútil, al verla con la poca fuerza que tenía el vulpino trató de ayudarla a subir a la parte congelada.

-tenemos que irnos- dijo una muy preocupada hembra, con mucho esfuerzo Skye cargaba a Nick, por suerte el había dejado su abrigo en uno de los arboles, en el estaba las llaves de su auto y los teléfonos de ambos animales, como pudo le puso su abrigo, la desesperación de ella le hizo eterno llegar al auto. Skye coloco con cuidado (y como pudo) al zorro en el asiento del copiloto, encendió la calefacción, ya que Nick temblaba de frio y necesitaba con urgencia recuperar algo de temperatura, aunque ella también tenia frio no era comparado con lo que estaba pasando el empapado zorro, Skye soportaba un poco mas aquella infernal y gélida sensación.

Arrancó lo mas rápido que el vehículo le permitiera, no conocía el lugar, solo seguiría la carretera hasta que llegara a alguna calle conocida para llegar a su taller, al no reconocer ninguna calle, freno de golpe, tomó su celular quizás podría trazar una ruta la cual seguir

-Andrew... - recordó al equino, sin pensar le estaba marcando 

-¿bueno? jefa ¿todo en orden?

-No, necesito que vayas por la tina que esta en guardada en el cobertizo, llénala con agua caliente... también necesito que me traces una ruta de mi ubicación al taller

-¿me dirá que sucedió?

-¡SOLO HAZLO!

No tardo mucho en que el caballo le colgó, por medio de un mensaje Skye le mando su ubicación, no tardó mucho en recibir la respuesta del equino, siguió a máxima velocidad dicha ruta, si Nick se ganaba algunas multas ella estaría dispuesta a pagarlas, aunque pensaba que por su trabajo de policía quizás se las arreglaría para que se las perdonaran.

Al cabo de un par de minutos Skye estaba en su taller, el caballo había salido para saber que le había ocurrido a su jefa, miró como ella cargaba a un semi inconsciente zorro, fue hasta ellos para ayudarlos, en su espalda acomodo a Nick.

-¿que fue lo que les paso?

-larga historia ¿Dónde esta la tina de agua?

-arriba- ambos subieron a toda prisa,  por suerte el agua seguía caliente, Skye ordeno a su subordinado que sumergiera al zorro en aquella tina, cuidando su cabeza, el obedeció, por suerte no tenia nada importante en sus bolsillos. Poco a poco el zorro rojo fue ganando temperatura corporal, poco a poco fue recuperando la movilidad de su cuerpo. Skye por su parte se dio un baño con agua caliente, para cuando Nick por fin recupero la conciencia Skye ya estaba alistada, estaba aun lado suyo, tenia la mirada preocupada

-¿como te sientes rojito?

-Andrew... no seas grosero

-yo... me duele el cuerpo ¿Qué fue lo que paso?

-caímos a la helada agua... oh Nick, pensé que... perdóname

-no... no te preocupes... estoy bien...- dijo tartamudeando 

-Nick, creo que será mejor que te quites esa empapada ropa, tengo prendas de mis hermanos, espero que te queden- acto seguido la hembra ártica salió en busca de ropa para el vulpino.

***

La tarde paso, Nick aún seguía en casa de Skye, ella le ofreció disculpas incontables veces e incontables veces Nick le decía que no pasaba nada, ahora tenia ropa limpia, tenia una camisa negra de manga larga, junto con unos pantalones azules, traía puesto una chamarra roja. Skye había preparado café para ambos, ella temía por la salud del zorro, de vez en cuando se sentía apenada, eso era notado por Nick

-oye de verdad, no pasa nada, te cuento algo, es una de las vivencias que me gustaría contarle a mis hijos mas adelante

-¿enserio?

-claro, me gustaría decirles que su padre toco el beso helado de un lago, además de que le gano a una hermosa zorra ártica

-oye, te recuerdo que fui yo quien iba ganando- replico divertida la hembra albina

-eso es mentira y eso bien lo sabes- miro la hora del reloj que tenia Skye en la pared del comedor -parece que ya es hora de irme, ya es algo tarde

-supongo que si, gracias por el buen día de hoy...- ambos fueron a la salida del hogar de Skye, no sin antes de que la albina le diera su ropa seca al zorro- gracias

-tu abrigo aun no se seca... Nick de verdad lamento mucho lo que paso

-Skye- dijo tomando sus hombros - tranquila, no pasa nada Linda, la verdad me divertí bastante, además fue mi culpa al llevarte a ese lugar, pero dime ¿te divertiste conmigo?

-la verdad, si y mucho, hace años que no lo hacia y fue como revivir mi época de infancia

-bueno, entonces recuerda eso y no el incidente... ¿no lo crees?

-si, tienes razón- Skye abrazo a Nick, el simplemente se quedo inmóvil -gracias por la cita fue, una bastante buena a mi parecer

-de nada, bueno debo irme, en cuanto pueda te regresare la ropa que me prestaste, debo irme

-no hay problema... Descansa Nick

-ten buena noche Skye

***

El vulpino por fin había llegado a su casa, se vistió para dormir, una vez en su cómoda cama comenzó a repasar todo lo sucedido en el día, realmente se la había pasado de maravilla, Skye era muy divertida y por lo poco que convivieron ella era una excelente chica, parecía que también era encantadora, su carisma era muy agradable, no pensó en conocer a una muy buena hembra, sonrió al recordar los gestos que hacia en aquella cafetería cuando veían aquel juego, realmente este día compensaba la tan agotadora y tan agobiante semana por la cual había pasado, todo estaba realmente bien, en eso su celular vibro, solo estiro el brazo para saber de que se trataba, en cuanto noto había un mensaje de un numero desconocido

"Gracias por el maravilloso día, de verdad me divertí muchísimo
S. Winter"

Nick no pudo evitar sonreír

"No hay de que, yo también me la pase fenomenal contigo, por cierto espero que pronto tengamos otra salida como la de hoy, descansa Skye"

Nick dejó aun lado su celular, ahora el cansancio le estaba ganando, realmente había sido un día lo suficientemente cansado para él, ahora quería dormir, si tener esa cita había sido una gran idea, después de todo. 

Continuara...

Hola a todos ¡por fin la cita de Nick y Skye!, como les dije, no tardaría mucho en subir el siguiente capitulo, como pudieron ver es el mas largo de todos hasta ahora, y antes de que me reclames, este capitulo ya le habíamos avanzado (por eso es que tardo menos) 

otra cosa que me gustaría tratar es:

¿Qué opinan si damos largos saltos de tiempo? o ¿prefieren que sigamos la historia pero con relleno? Es mas que nada les pregunto esto para saber que opinan al respecto

 bueno sin mas que decir espero leerlos pronto ¡HASTA LUEGO!