A la mañana siguiente me levanté temprano, desayuné y me alisté para empezar mi trabajo.

Me dirigí a la habitación de Annabella y para mi sorpresa no se encontraba en su cuarto. Solo estaba María limpiando y ordenándolo todo.

-Buenos días María, ¿sabes dónde se encuentra la princesa?.

-La princesa está en el campo de entrenamiento junto con el príncipe señorita-. Me respondió educadamente.

- ¡Cómo siempre escapando de sus responsabilidades!-. Expresé astiada.

- Voy a buscarla. Tiene que ocuparse de los preparativos para la celebración por su matrimonio. ¿Quieres venir conmigo?. Me gustaría que nos conociéramos más. Voy a decirle a otra sirvienta que termine de limpiar-. Le pregunté.

- No yo... Tengo que terminar este trabajo y mi madre se enojaría si me ve, vaya usted señorita Melissa-. Dijo María de forma tímida y cabizbaja.

- Está bien, continúa entonces. Nos vemos después-. Comenté mientras me retiraba.

No sé si María es demasiado dedicada a su trabajo o le tiene mucho miedo a su madre, pero de lo que estoy segura es que quiero ser su amiga.

Me dirigí al campo de entrenamiento. Y encontré a Annabella muy cómoda disfrutando de unas galletas mientras veía al principe sentada en las gradas.

- ANNABELLA. ¿Qué estás haciendo aquí?-. Dije molesta.

- Sabes que hoy es la celebración por tu matrimonio y te encuentro aquí tan cómoda. Tenemos que preparar los vestidos, seleccionar las decoraciones del salón y otras cosas más.

- Tranquilízate Melissa- dice despreocupada-ya habrá tiempo para esas cosas. Lo importante ahora es lo guapo que se ve mi amor entrenando-. Comentó mientras miraba a Daniel con ojos de amor.

- No hay tiempo para esas cosas. Vámonos, la fiesta es hoy-. Dije mientras trataba de levantarla.

- Melissa siéntate tu también y disfruta de las visitas. ¡Espera! ¿Ese no es Lion sin camisa?-. Comentó Annabella maliciosamente.

Dirigí mi mirada a los caballeros buscando a Lion. Y quedé maravillada con el panorama frente a mi.

Su espalda ancha, sus brazos musculosos , su pecho trabajado. Todo su hermoso cuerpo estaba delante de mí, no podía quitarle la vista de encima. Sabía que tenía un cuerpazo para morirse y su estatura también es un factor a su favor. Pero verlo todo sudoroso por el entrenamiento y sin camisa ¡UFFF!

- Es... Está bien.Creo que una hora más no hará daño, pero solo una hora me oíste-. Comenté mientras me hacía la desinteresada y me sentaba junto a ella.

Mientras tanto unos caballeros estaban conversando mientras veían a las Damas.

-Oye Harry -. Dijo un caballero rubio de hermosa apariencia.

-¿Que te pasa ahora William? ¡ Concéntrate en el entrenamiento!-. Habló Harry mientras golpeaban sus espaldas entre si.

-¿No te parecen muy hermosas aquellas Damas que nos están observando?-. Comentó William con una expresión pícara en su rostro ignorando por completo el regaño de Harry.- Especialmente la del pelo castaño claro. Debería hablar con ella. Se ve que es nueva-. Expreso mirándola fijamente.

- Ya estámos terminado. Puedes dejar tus comentarios para cuando estés solo, por favor-. Dijo Harry mientras reviraba sus ojos.

- ¡Niñato!. Por cosas así sigues soltero.¡Morirás virgen! Después verás como se seduce a una mujer-. Habló William confiado.

- ¡WILLIAM! -. Se escuchó la voz fuerte de Lion- Más entrenamiento y menos conversación. Darás 13 vueltas al campo después del Entrenamiento-. Comentó de forma autoritaria.

Después de un rato, El Príncipe Daniel se dirigió a La Princesa.

- ¿Cariño me viste? Hoy me esforcé el doble porque estabas aquí-. Dijo Daniel todo agitado por el ejercicio.

-¡Si mi amor, te viste increíble! Parecías un héroe de cuentos de hadas. Hiciste que me volviera a enamorar-. Comentó Annabella mientras se le acercaba.- Vamos tienes que tomar un baño estás todo sudado. Ni se te ocurra acercarte a mi estando así.

- Si amorcito -. Expresó mientras se marchaba obedientemente junto a Annabella.

En ese momento William se le acercó a Melissa.

- ¿Hola Linda eres nueva por aquí, verdad?-. Dijo con una expresión coqueta.

- Soy la dama de compañía de la princesa. Si me disculpa , tengo cosas que hacer-. Respondí de forma incómoda por su coqueteo.

- Espe...

- Señorita Melissa- . Habló una voz fuerte pero amable interrumpiendo a William.

Reconocería esa voz donde sea. Me voltié y al ver a Lion lo saludé.

- Lion , hola. El entrenamiento estuvo...

- Increíble-. Dije mirando fijamente sus abdominales.

- ¿Como se encuentra su tobillo?. Preguntó Lion.

- Está Bueno... Digo está bien. Unos días de descanso y estoy como nueva-. Respondí alzando mi rostro.

- Me alegro, eso es muy bueno. Aún así debe seguir cuidándose-.

- Si usted lo dice -. Expresé con una mirada embobada.

- Señorita -. Interrumpió William.

- WILLIAM -. Exclamó Lion mirandolo seriamente.

- Señorita disculpe mi falta de cortesía pero me tengo que retirar. Cierto Caballero tiene que darle 13 vueltas al campo de entrenamiento-. Dijo Lion mientras arrastraba por su camisa a William.

Es tan lindo, hasta cuándo arrastra a alguien se ve guapo. Voy a seguir con los preparativos para la ceremonia. Pensé mientras me dirigía donde Annabella.

-William jeje. Así que así es como se conquista a una chica verdad, jajajajaajaja-. Expresó Harry mientras se reía burlándose de lo ocurrido.

- Idiota, ella no me rechazó-. Dijo William negando lo ocurrido.- Obviamente ella está coladita por nuestro capitán. No entiendo sus gustos, pero bueno si le gusta él es porque debe ser rarita. Aunque ahora que lo pienso...- dice poniendo una sonrisa maliciosa- esto será Interesante.

- Si como tú digas. Pero nada cambia tu penosa actuación jajaja-. Siguió Harry riéndose de el.

Al caer la noche, antes de que empezara el baile nos encontramos Annabella y yo probándonos los vestidos que habíamos seleccionado en su habitación.

- ¿Me queda bien este? -. Preguntó Annabella mientras se probaba un precioso vestido verde que combinaba perfectamente con su cabello rojo.

- Te ves increíble.- le digo sinceramente- pero también ponte este collar. ¡Combina con tus ojos color esmeralda.

- Es verdad. ¡Queda precioso!-. Expresó alegre la princesa.

- ¡Tu ponte el rojo!- me dice- Te queda hermoso ese color por tu pelo castaño oscuro.

- Y ahora que estamos listas. ¡Vamos para la fiesta!-. Dijo festejando.

TOC- TOC

Se escuchó el sonido de alguien tocando la puerta.

- ¿Daniel eres tu?-. Preguntó Annabella .

- Si querida, ¿puedo entrar?-. Preguntó Daniel.

- Claro mi amor.

Daniel abrió la puerta y corrió directo a Annabella, la abrazó fuertemente mientras la besaba y le decía lo hermosa que estaba. Caminé hacia la puerta dándole espacio a los tortolitos, cuando me encontré a Lion con su barba afeitada y un traje elegante frente a la habitación.

- Buenas noches, Señorita Melissa.

- Lion , estás tan guapo. Ese traje te queda de maravilla-. Dije mirándolo maravillada.

- Gracias Señorita Melissa. Usted también se encuentra radiante esta noche.

- ¿Le gustaría ser mi pareja en el baile?-. Me preguntó directamente.

- Claro, sería todo un honor -. Respondí emocionada.

Lion se acercó a mí mientras me ofrecía su mano.

- Mi Dama-. Dijo haciendo una reverencia.

-KYAAA-. Grité internamente mientras caminábamos todos juntos hacia el baile.

Al llegar nos presentaron a muchas personas de la alta sociedad. Estaba en las nubes mientras me aferraba al brazo de Lion.

Hasta que ocurrió un suceso inesperado.

- LIONNN-. Gritó una voz chillona.- ¡Estás aquí! Tenía tantas ganas de verte-. Dijo una chica de cabello rubio y con un cuerpo voluptuoso mientras se aferraba al brazo de Lion.

- ¿DISCULPA? ¿Quién eres y por qué sostienes el brazo de mi compañero?-. Dije molesta mientras me aferraba más a su brazo.

- ¿ Disculpa?. Eso debería preguntarte yo a ti. ¿Qué haces con mi futuro prometido?.

-¿QUEEEEEE?-. Grité estupefacta.

Continuará....