Llevamos caminando horas en la maldita nieve y no encontramos rastro de nadie, hemos decidido separarnos en dos grupos Chase, Jason y Víctor juntos, y el otro grupo está conformado por Lina y por mi.
–No puedo ver nada con toda está nieve– dijo Lina mi compañera–¿Cómo logras ver tu con esta nieve?, y lo más importante ¿Cómo demonios se supone que vas a rastrear los cuerpos?

No paraba de hacerme preguntas, es que no se puede callar, así uno no se puede concentrar.

–Es que no me piensas contestar– deje de prestarle atención para solo fijarme en la nieve y así siguió un buen rato en todo el camino– Oye llevo hablando media hora y no me estás escuchando, qué educación te dieron tus padres.

Ya no podía más.

Mi paciencia había llegado a su límite.

En el primer descuido del escuadrón voy a meterle la cabeza en la nieve para que cierre su bendita boca.

–Callese, que no me puedo concentrar si sigues hablando– la fulmine con la mirada.

–Así que no eres muda, por cierto mi nombre es Lina.

–Ya lo sé, no tienes por qué decírmelo– no quiero ser una maleducada, pero ya no la soporto–Mi nombre es Delaya, ya ¿feliz?

–Lindo nombre por cier...– de la nada se callo y no entendía porque– ¿es-eso es un cuerpo?– apuntó una dirección no muy lejos de nosotras– se está moviendo.

Entonces lo ví.

Era un cuerpo, pero no cualquier cuerpo, era un guardia o lo que quedaba de él.

Ahora solo era un infectado.

Se hallaba sobre otro cuerpo devorando lo que quedaba de él, era una escena asquerosa, creí sudar frío.

–Escúchame bien Lina, vas a ir con los demás y les avisarás que encontramos a uno de los guardias– le susurré para no llamar la atención del infectado– yo lo distraigo para que puedas escapar y tener tiempo,¿me escuchaste?

–No te puedo dejar sola, y-yo no puedo, tengo miedo– estaba a punto de llorar y no sabría cómo consolarla.

-–Si puedes, solo respira, no va a pasar nada Lina– le dije para ir hacia el infectado– Corre!!– grité tan fuerte para llamar su atención del guardia y viniera hacía mí.

La ví correr con su bengala con lágrimas en los ojos, ahí supe que estaría bien.

Pero no contaba con que habría dos infectados, no uno si no dos y lo que devoraban era al parecer un rain o lo que se distinguía de él.

Uno de los infectados se dirigía hacía mí y mi bengala, yo estaba lista para atacar al igual que mi cometa.

Preparé mi arco y flecha dirigiendolo hacía su corazón.

Apunte y justo en el blanco, falta uno.

Pero el otro no se movió, se quedó ahí viéndome, eso fue de lo más extraño.

Cometa se encontraba alterado, como si algo no estuviera bien, y entendí el porqué, había un bengala a unos cuantos metros de nosotros, pero estaba infectado.

Creí que era mi imaginación, no podía estar pasando esto.

Imposible, no creí que eso fuera posible.

Los animales no se infectan o eso creí cuando él bengala se dirigía a toda velocidad hacía nosotros, entonces pude ver qué había un guardia montando a la bengala.

Cometa dió un rígido grotesco hacía él bengala, listo para atacar.

–Cometa vete y no vuelvas– escuché como me gruño en respuesta– es una orden, debes acatarla– me chilló, no se quería ir, así que no tuve más opción y prendí la pistola y disparé.

No iba permitir que lo lastimaran, me bajé de él, ví como corría hacia otra dirección asustado y empecé a correr hacia los infectados lo más rápido que pude.

El animal infectado se dirigía a mi a toda velocidad, tirando rugidos horribles, lo único que se me ocurrió fue deslizarme debajo así que eso iba hacer.

En el momento justo que el animal tiraba a morderme agarre mi cuchillo y me deslice por debajo del animal, para abrirle el estómago a la bengala, no se si fue la adrenalina, pero en el momento que la bengala se desplomó me lanze hacía el infectado que yacía en el animal ya herido, clavándole el cuchillo varias veces por la espalda, desgarrando la piel, soltó un gruñido de dolor pero yo seguí con mi tarea de abrirle toda la espalda.

Sentía como era tirada con fuerza, y ví al otro infectado sobre mi tratando de morderme, lo golpeé con el arco con todas mis fuerzas. El animal se trataba de levantar, mientras el otro infectado se repone, me dirigí hacía el guardia que me intento morder y le metí el cuchillo por la garganta se quejaba por el dolor pero no le di tiempo de recomponerse porque lo saqué y lo volví a meter pero en su cráneo está vez, su cuerpo cayó en un golpe seco a mis pies, lo empuje de una patada y me dirigí hacía el otro infectado.

Lo golpeó con mi pie y hago uso de todas mis fuerzas para sacarlo de la bestia, cae de la montura dándome la espalda y rueda unos metros lejos de mi, corro hacia él antes que se reponga, lo agarró por el pelo y le rebanó el cuello, me lanza un golpe que logro esquivar, le propinó un puñetazo y le vuelvo a enterrar el cuchillo está vez en el ojo intenta rasguñarme, pero soy más rápida y le entierro por última vez el cuchillo en el cráneo.

Ahora me toca encargarme de la bestia, así que saco mi pistola, voy hacia la bengala y me pongo frente a ella, lo único que hago es apuntar en la cabeza.

Lo que recibo en respuesta es una mirada de dolor, no puedo hacerlo y pensar que ese podría ser mi cometa.

Tengo que ser fuerte, fui criada para matar, solo es un infectado más tengo que matarlo y con ese último pensamiento apretó el gatillo,se escucha un disparo, después de ello un silencio doloroso.

–avec honneur, sans pitié nous venons te tuer– dije nuestro lema– Que leurs âmes reposent en paix– susurré con dolor.

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Se escuchaba de lejos a alguien correr o mejor dicho unas pisadas en la nieve a toda velocidad hacía los del escuadrón.
Se ponen alerta cuando ven a alguien corriendo hacia unos metros donde se encuentran ellos.

–¿Ven eso?– se le escucha decir a Víctor antes de bajar de su bengala

–Qué demonios se supone que es– comenta molesto Jason haciendo la misma acción que Víctor– es que uno no puede estar tranquilo, como joden encerio.

–No lo se pero estén alertas– dijo el más grande de los tres, Chase también se bajó de su bengala armado.

Esa mancha que veían a lo lejos empezó a tomar forma y se dieron cuenta que era un bengala, no, no era uno sino dos bengalas, uno tenía a su jinete el otro no se hallaba un jinete que lo monte.

Jason y Víctor sintieron terror por imaginar algo que sabían que había una probabilidad de que pasara.

Las bengalas se fueron acercando y uno de ellos se dirigió a Jason y empezó a chillar de dolor. Ahí supo Jason que su peor pesadilla empezaba a cobrar vida, su pequeña no se hallaba sobre su bengala, Lina llorando a mares y balbuceando cosas incoherentes sobre los brazos de Chase, Víctor había quedado pálido imaginando lo peor, Jason por fin reaccionó pero no de la mejor forma, agarró a Lina por los hombros y le empezó a gritar.

-¿Dónde está?¿dónde demonios está Delaya?- la zarandeó con algo de fuerza para que reaccionara- Responde mi maldita pregunta- le gritó fuera de sí.

-Y-yo, e-ella- balbuceó torpemente Lina intentando zafarse del agarre de Jason.

Pero Jason no se iba a detener, estaba fuera de sí mismo, se encontraba desesperado de que algo le hubiera pasado a su pequeña. Pero lo que al final dijo Lina los dejó en shock a todos.

-Infectados - logró decir con un poco de nerviosismo.

Jason sintió que se le derrumbó el mundo e imagino lo peor, sintió miedo, miedo a perderla y no volver a mirar esa sonrisa, no mirar sus ojitos, le prometió siempre estar y protegerla, no pudo cumplirlo, no pudo proteger a su pequeña hermana.

Cayó de rodillas en la nieve, creyendo perderla para siempre.

Por otro lado estaba Víctor que se negaba a creer que la chica que ama se hubiese ido, así como si nada, no le pudo decir todo lo que sentía, mientras Chase intentaba traer a la tierra a Jason, entendía su dolor de imaginar perder a su hermana.

Lina por otro lado se tranquilizó para por fin poder decir lo que sucedió.

-Estábamos hablando, bueno solo yo porque ella parecía ya hastiada de que siguiera hablando-tomó una respiración para poder seguir hablando- pero de repente me calle y a ella se le hizo raro, se volteo a verme y me preguntó qué pasaba, yo le apunte dos cuerpos a unos cuantos metros de nosotros, ella enseguida se puso alerta, se acercó un poco y vimos que era un infectado, era uno de los guardias- los ojos de Lina se le llenaron de lágrimas- ella dijo que me fuera y que pidiera ayuda, ella lo iba a distraer para que yo pudiera huir, me negué pero ella insistió.

-La abandonaste- dijo con odio Jason.

-Y- yo no la abandone, e-ella me dijo qué.. - fue interrumpida por Jason de manera abrupta.

-Si lo hiciste joder - le dijo con dolor en su voz - Solo tenías una tarea, una maldita tarea y era proteger a los rastreadores!! - le gritó tan fuerte, que los otros dos se sobresaltaron- Tu debías estar ahí, no ella, si algo le llega a pasar será tu maldita culpa- escupió con veneno Jason a Lina.

-Perdon - se escuchó decir a Lina y Jason la miró con odio.

Pero los demás estaban inmersos en sus pensamientos, están pensando que hacer ya que la bengala de Delaya se encontraba inquieto.

Jason se percato de que el único que sabe dónde está Delaya es su bengala.
Se acercó a ella- ¿sabes dónde está, verdad?- cometa gruño en respuesta- llevanos con ella- le dijo antes de montarse en su bengala para seguir a cometa y los demás lo siguieron.

Llevaban ya dos horas corriendo y sentía que la preocupación terminaría por matarlo, sintió sus esperanzas desvanecerse cuando de la nada cometa paro y empezó a rugir con fuerza y arranco a correr hacia algún lugar en específico, decidieron bajarse de las bengalas, es cuando vio un cuerpo tirado en la nieve lleno de sangre negra pensó lo peor pero cuando se acercó bien se dió cuenta que era un infectado con una flecha justo en el corazón, a unos pasos más encontraron a un infectado con dos agujeros, por la forma en que fueron hechos los cortes uno en el cráneo y otro por la posición Jason suposo que fue atravesado con un cuchillo en la garganta, los demás vieron a lo lejos un bulto enorme se acercaron todos, se sorprendieron cuando vieron que era una bengala infectada, Jason se fijó que tenía abierto el estómago y una bala en el cráneo de un calibre 60, por la profundidad de la bala supo que había sido disparada en una pocision cerca del animal, a unos cuantos metros encontraron dos cuerpos más uno con varios cortes en la espalda rebanado por el cuello, con un agujero en el ojo izquierdo y un agujero en el cráneo, el otro como si lo hubieran mutilado con los órganos fuera y mordidas por todo el rostro, pero en lo que se fijaron fue el traje y el escudo era de un rain, eso era imposible, ellos no traspasan sus fronteras, hasta ahora.

-Imposible ¿que hace un rain en nuestras tierras?- exclamo Víctor

-Lo más seguro es que esas ratas quieren algo- dijo Chase con odio, para nadie era un secreto que los rain eran odiados por todo el clan lighting, por traición.

Lina por si parte solo estaba pendiente de Jason que miraba por todas partes en busca de algo o más bien alguien.

Su mirada se detuvo en un cuerpo tirado en la nieve que se encontraba más alejado de los demás que tenía a su lado una bestia empujando con su pata el cuerpo que no sé inmutaba, Lina rápidamente se acercó a Jason y lo tomo por el hombro, el se sorprendió y ya iba a empezar a refutar cuando ella le apunto un cuerpo a lo lejos, lo único que hizo el fue correr hacia ese cuerpo y tirarse abrazar el cuerpo con todas sus fuerzas.

Los demás fueron corriendo hacia el y quedaron helados, era Delaya, parecía muerta, estaba helada y pálida, sin color alguno con los ojos cerrados se veía tan bella incluso cuando parecía sin vida aquel cuerpo que ilumino por días a muchas personas, que trajo esperanza a la gente, aquel cuerpo aguerrido que luchaba por su vida se hallaba innerte.

Jason por otro lado se encontraba con lágrimas en los ojos apunto de romper en llanto, con una opresión en el pecho al imaginar que su pequeña se hallaba muerta en sus brazos se le rompió el corazón al no encontrar señal alguna de su pulso.

-Laya por favor abre tus ojos- exclamo Jason con un nudo en la garganta y con lágrimas de dolor en sus ojos verdosos- pequeña por favor no me hagas esto, abrelos una vez más- susurro con dolor en el alma mientras se aferraba de él cuerpo de ella como si su vida dependiera de ello.

Mientras con Víctor, se hallaba destrozado, con el corazón en el puño sin imaginar que algo haci podía llegar a pasar.

Tosió y escupió sangre por la boca, era Delaya, tenía un pulso débil pero estaba viva.

Jason la abrazó con delicadeza y la besó en la frente mientras se repetía así mismo que ella estaba viva, que se había quedado con él.

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Abrí los ojos y lo que ví fue a J.J abrazándome y besando mi frente varias veces.

¿Qué rayos pasó? ¿Porqué siento como si un carro me pasó encima? Parece como si hubiera tomado dos barriles de coñac, siento mis piernas entumecidas y mi cuerpo duele como los mil demonios.

-Oye J.J sé que me amas pero dame un poco de espacio, siento que me aplastan los pulmones- le dije con cierto pesar.

Él se separó inmediatamente de mí y se limpió el rostro con su mano, ¿acaso él había estado llorando?, sea quien sea que lo hizo llorar va a pagar muy caro por ello, me fijé en dónde estoy y con quién y ví a todo el escuadrón mirándonos Chase con una sonrisa, Lina con una mirada de disculpa y Víctor con lágrimas en los ojos acompañado de una enorme sonrisa, había visto bien, ¿Víctor con lágrimas en los ojos?, ¿acaso eso era posible?, el mundo se está acabando y yo no estaba enterada.

-No vuelvas a hacer eso Laya, nos tenías muy preocupados-escucho que carraspea- me tenías muy preocupado- me susurra antes de abalanzarse a mi y abrazarme.