Capítulo 6

— ¿A dónde vamos? — murmuro entre dientes

— A mi casa, ahí vas a poder limpiarte la sangre, solo pido que colabores un poco Fanett.

— ¿Colaborar?

— Sé que no me tienes respeto ni temor, pero necesito que finjas que es así — me observa de reojo — por fis...

— Dices cosas así y luego preguntas porque no te tengo respeto — ruedo los ojos y río de manera mínima

— Por favor... está gente piensa que soy débil y tengo que demostrarles que no es así, puedo ser capaz de hacer lo mismo que mi hermano.

— Para ganar el respeto de tus empleados debes de matar a alguien — me encojo de hombros

— En estas últimas horas juntos me cuestiono si es mejor llevarte a psiquiátrico.

— Es lógica Cassian — me acomodó en el asiento para poder observarlo
— Necesitas que te respeten y esa es la manera más fácil, el primero que cuestione tu autoridad le desgarras el cuello.

— ¿Qué manía tienes con los cuchillos? Es mejor una pistola.

— Es parte de mi código si vas a quitarle la vida a alguien al menos ten la decencia de que su sangre quede en tus manos, además es divertido y no cualquiera puede hacerlo bien.

— ¿Qué otras cosas van en tú código de honor? — esboza una sonrisa

— No confiar ni en tu otra mano, utilizar armas de fuego solamente si es necesario, no matar a niños a menos que sea sumamente necesario, no lastimar animales y no delatar ni traicionar.

— ¿En serio animales? — enarca la ceja

— ¿Algún problema al respecto? — saco mi último cuchillo escondido en mi pantalón y lo clavo en el tablero del auto haciendo que de un salto

— ¿Estás loca? Olvídalo hasta la pregunta es absurda, yo mismo fui el que te dije que estaba en contra del maltrato animal.

— Cierto, lo dejé pasar — tomo el cuchillo

— ¿Si no confías ni en tu otra mano por qué si en mí? Por lo que sé nuestras familias eran enemigas.

— ¿Acaso me estas pidiendo que te asesine? Porque si es así estaría complacida de seguir tus deseos — esbozo una sonrisa — No confío en ti pero ambos estamos siendo cazados además en uno de los días en que estabas inconsciente gracias al alcohol logré insertar un chip en tu nuca y con presionar un botón tu cabeza puede explotar.

— Fa...Fane...t...t — dice tartamudeando — Por favor dime que es broma.

— Si te hace sentir mejor puedo decirlo, pero lo mío no es mentir.

Observo como Cassian comienza a temblar, pero no quita su vista del camino. Será divertido cuando sepa que no es cierto.

No confío en nadie y mis padres son una prueba clara por la cual no debes de confiar Cassian no se miraba como alguien malo más bien era ingenuo y dudo que sea una fechada nadie es tan buen actor.

Aun así, mantengo mis preocupaciones si él da un mal paso estoy preparada para hacer que se desangre lentamente.

— Con respecto a no delatar ni traicionar, ¿esto ya está implícito no?

— Ay Cassian, te sorprendería cuantas veces puedes salir traicionado en este negocio.

— Cass — dice con una sonrisa en el rostro

— Cassian — me limito a decir

— Dime Cass, Cassian suena muy serio.

— Si te digo Cass siento como si le hablará a un perro y el punto es atemorizar — ruedo los ojos

— ¿Puedo hacerte una pregunta?

— No creo tener opción.

— ¿Cuántos años tienes?

— Veintidós — digo en un murmuro

— ¿Y qué has hecho en veintidós años? Porque dudo que hiciéramos lo mismo en ese tiempo.

— No tengo recuerdos de toda mi vida tal vez desdé los siete años. Todo era normal hasta que cumplí catorce comencé a estudiar en casa y mis padres me llevaron maestros para enseñarme todo tipo de defensa desde batallar con armas de fuego, armas blancas o combate cuerpo a cuerpo.

— Yo a mis catorce estaba feliz por cenar hamburguesas — esboza una sonrisa — Pensándolo bien aún es así, tuve una vida normal estudié, tuve amigos, salí de fiesta, no me quejo mi hermano siempre me cuido.

— Me toca preguntar ¿por qué nunca hablas de tu padre? Siempre es de tu hermano.

— Mi madre murió de cáncer cuando tenía diez y mi hermano dieciséis, lo único que pidió mi madre a mi padre fue que no me metiera al negocio y lo cumplió, pero mi hermano ya estaba dentro. Creo que siempre supo que este momento llegaría y me preparaba indirectamente. Nunca tuve una gran relación con mi padre era toda una
joya — dice con sarcasmo — Lo único bueno que hizo por mi fue cumplir la petición de mi madre lo demás siempre fue mi hermano por el sigo vivo.

— Lo lamento, lamento que mis padres hayan matado a tu hermano — murmuró

— ¿Acaso eso es un sentimiento emanando de ti?

— No exageres Cass solamente pedí disculpas, se le llaman modales — ruedo los ojos

— No tienes que disculparte Fane, ese era su destino, si no lo hacían tus padres lo iba a hacer alguien más.

— Nunca más en tu vida me vuelvas a llamar Fane no creo que quieras morir tan rápido — digo entre dientes

— Deberías respetar a tus mayores — dice ofendido

— ¿Cuántos años tienes, veintitrés? — enarco la ceja

— Exactamente y eso significa que soy mayor.

— El mayor llorón de todos sí, pero con un poco de entrenamiento podemos arreglar eso.

No dice nada más, pero esboza una sonrisa lo cual me hace pensar que le gusta la idea, llegamos a una reja plateada con un "P" en el escudo.

— Soy Cassian — habla de manera seria al monitor que se encontraba antes de la reja

— Señor Pernelle que gusto volver a saber de usted — dice con una voz dulce de una señora del otro lado del monitor

Las puertas se abren dejándonos pasar por aquel largo camino adornado de árboles.

— Por favor Fanett recuerda lo que te dije.

— Sí, lo entendí, tengo que hacer la mejor actuación de mi vida para lograr fingir que te tengo el mínimo respeto — abro la puerta del auto y bajo

Es una gran casa, llena de ventanales que a simple vista se puede observar junto al color gris metálico de las paredes, aunque las enredaderas le daban el color verde de la naturaleza, hay unas estatuas afueras y varios hombres con armas en las puertas.

— Ayúdame a bajar las cosas del auto vamos a tomar uno mejor.

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Hola amigos ¿Qué opinan?

Yo realmente amo esta historia para serles sincera