Hola.Les dejo dos capítulos más,y con ellos una disculpa por el retraso en mis respuestas a sus comentarios(los que valoro inmensamente).Me pondré al día cuanto antes.

Ya falta poco para terminar.Gracias por acompañarme en este comienzo de final.Besos.

El horror y la incredulidad persistieron por un momento más en el rostro de Pilly-kabiel .Luego se obligo a salir de esa agobiante parálisis,indicándole a Hariel que tomara en sus brazos a Sel,para llevarla con Uriel o Lumiel,lo cual él hizo raudamente,mientras ella alzaba vuelo a su lado,dejándole a Lilly-Naiel la tarea de dar aviso a Miguel de lo que estaba sucediendo.

Volaron con rapidez,dejando un rastro carmesí detrás de ellos, producto de la sangrante herida de su amiga,que a cada segundo iba empalideciendo más ,mientras luchaba con tenacidad para mantener la conciencia.En esto Pilly la animaba, tomando su mano y rogándole que resistiera.

Verla así le trajo recuerdos amargos,evocaciones dolorosas en las cuales el cuerpo sin vida de su amiga a lo lejos, le desgarraba el alma. Esta era una imagen que cargó con una tremenda angustia y culpa,por ser ella parte de aquellos que se levantaron en rebelión. Pero ahora era todo distinto,estaba allí,junto a ella,y fuese lo que fuese que había motivado a Abadón a hacerle daño,según lo poco que dejaron entrever sus palabras,ella estaba dispuesta a enfrentarlo de este otro lado,del lado de la luz.

Antes de llegar a la Zona de curación,donde buscarían a los sanadores, vieron a Uriel bajando las escaleras del templo.Descendieron frente a él,quien los miró confundido hasta que notó la hemorragia incesante que brotaba del vientre de la ángel.

-¿Que le sucedió?-les preguntó él ,mientras la tomaba de los brazos de Hariel,para sostenerla en los suyos,a la vez que se arrodillaba para apoyar el peso de la joven sobre su regazo-¿Quien le hizo esto?.

-Parece que fue...Abadón-le respondió Pilly con voz nerviosa, hincándose al lado de ellos-Es una locura,lo se,pero es lo que ella logro decirme.

Uriel la miro un segundo consternado por su revelación,para luego apoyar una de sus manos sobre la profunda herida mortal.

Ella lo vio cerrar sus ojos por un momento para concentrarse en su tarea,pero poco después los abrió revelándolos cristalinos por la emoción.

-Es tarde Pilly...Perdió mucha sangre...No puedo hacer nada-murmuró quedo, sin dejar de observar a la agonizante ángel-.

-¡¿Que¡?¡No!-gritó ella con el corazón ardiéndole en el pecho-Por favor,inténtalo...Uriel,por favor-.

Su amigo acerco su mano manchada de sangre para tocar su brazo,y con ese gesto lograr que lo mirara,y sobre todo que lo escuchara.

-Mírame,es tarde...Despídete de ella,no soportará mucho más-.

Pilly seguía negando con la cabeza,no podía resignarse,no podía verla morir de nuevo.

-Pero...-dijo ella,mientras en su mente buscaba una forma,una esperanza-.

-Hazlo Pilly-le urgió Uriel,dejando que de sus ojos avellanas brotaran un par de lagrimas.

Respirando profundo, Pilly-kabiel se acerco al rostro de su amiga y lo acaricio suavemente,mientras miraba sus ojos,ante vivaces y alegres,ahora turbios y apagados.

-Esta....bien...Tranquila-articuló Sel con un evidente esfuerzo.

-Te amo amiga,eres una persona bella y especial...Tu amistad a sido un regalo que no merezco-le dijo entre cuantiosas lagrimas.

-Tú te....mereces todo Pilly-le respondió ella,arrastrando las palabras-Por-porque eres valiente...una guerrera-.

Ella se quebró y no pudo decir una sola palabra más,solo sostener su manos y sollozar.

Vio que Sel llevaba con un último esfuerzo sus ojos a Uriel,y con ese aliento final,le dirigía unas palabras que llevaba guardadas y escondidas,esperando el momento adecuado,uno que no llegaría jamás.

-Uriel...eres un sueño...y ahora podré soñarte eternamente-.

Y dicho esto se durmió.

Uriel la apretó contra su pecho,mientras Pilly lloraba con las manos en su rostro sobre el pecho de Hariel, quien la abrazaba dándole consuelo.

Fueron unos minutos largos,desoladores y dolientes.

Hasta que se escucharon pasos correr a ellos,y la voz de su líder que murmuró algo entrecortadamente al ver la terrible imagen .

-No puede ser...la querubín me aviso pero...¡Oh padre santo!-.

Pilly levanto sus enrojecidos ojos a Miguel, quien los miraba acongojado.

-Sel dijo que fue Abadón...Que trajo algo o a alguien,no lo se bien-le explicó ella obligándose a no derrumbarse.

-Abadón-repitió Miguel, y luego un brillo de angustiante comprensión refulgió en sus ojos verdes-Luzbell...Debemos encontrarlo... Uriel lleva a Sel al templo. Pilly-kabiel,Hariel acompáñenme.

Pilly volvió a tomar aire,luego se acerco a su amiga y deposito en sus cabellos castaños un beso,y solo se quedo mirándola mientras Uriel alzaba vuelo llevando entre sus brazos su cuerpo,que sabia en algunas horas se desvanecería para convertirse en una luz perpetua.

Se secó el rostro con la manga de la túnica y tomando a Hariel fuerte de la mano,ascendió por los aires celestiales detrás de Miguel.

Surcaron la distancia hasta la Zona alta,siguiendo el palpito de Miguel. Luego de aterrizar en el marmolado suelo,se desplazaron con prisa por los pasillos,hasta llegar a esa habitación  que era la ultima. Miguel abrió sin más, y se adentro raudo buscando a su esposo,llamándolo en cada habitación que revisaba.

-No esta aquí...No se donde...-decía, cuando una voz que gritó su nombre se oyó al parecer desde afuera.

-¡Miguel!-.

Con gesto extrañado,al mismo tiempo que alarmado,su líder paso al lado de ellos sin decir una sola palabra.

Pilly y Hariel lo siguieron, después de dirigirse una mirada cargada de desconcierto.

Ni bien traspasaron las puertas,los rostros de los angeles afuera,junto a sus exclamaciones, fueron los que les anticiparon la tórrida escena que se plasmaría frente a ellos.

Abadón,aquel llamado ángel de la muerte,sostenía con fuerza los dos brazos de Luzbell,el cual parecía sufrir un intenso dolor, producto de la esquelética mano que se posaba sobre su redondeado vientre,mano de aquella mujer que Pilly reconoció como una de las hechiceras que vio en el Infierno.

-¡Suéltalo ahora mismo!¿Que demonios crees que haces?-le increpó Miguel, adelantándose a ellos.

-Lo obligo a hacerse cargo de sus actos,y de sus promesas-siseó Abadón sin emoción alguna en su voz-Tu amor es una criatura mentirosa,y manipuladora,jugo conmigo y con ellos,yo no lo dañare,pero no evitaré que ellos lo hagan...Se lo merece-.

-Ya no esta en él el poder,ya se lo quite-murmuró la escuálida mujer,poniéndose en pie-.

-Dámelo a mi Ariadne,yo no fallaré-le respondió Abadón y tomó de su mano una esfera nebulosa y negra que brotó del cuerpo de Luzbell,quien cayo inconsciente al suelo.

Miguel se elevó y desempuñando su espada se abalanzó sobre él,pero no logro hacerlo antes de que este presionara aquel poder oscuro que fue quitado de Luzbell sobre su pecho,y con ese acto todo en él se cubriera de una negrura que fue ascendiendo por su cuerpo desde sus pies ,y hasta su cabeza.Cuando abrió los ojos para defenderse estos estaban completamente negros.

La batalla entre los arcángeles comenzó,a la vez que se abrían innumerables portales,de los cuales los condenados más malignos y peligrosos del Averno hacian acto de presencia abordando desde ellos.

Pilly,y Hariel,al igual que los demás ángeles ,tambien entraron en contienda,batiéndose con los tenebrosos recién llegados.La cantidad que emergió no parecía tener fin,y sumado a ellos,los demonios al mando de Abadón,tambien se hicieron presentes,dejando conocer en segundos el bando que habían elegido al lanzarse en contra de ellos.Estos últimos eran muy fuertes y hábiles,por lo cual la lucha campal que se había suscitado en los Cielos,era realmente feroz.

De lejos,Pilly-kabiel vió a Rafael y a Graciel caer sin vida,y a otros sufriendo graves heridas.Algunos demonios tambien se hallaban inertes en medio de charcos formados con su propia sangre.

De reojo observó a Miguel y a  Abadón,con fuerza y destreza similares,seguir en pugna sin descanso.

Un embate violento la hizo caer de espaldas de repente, y pudo ver con cierto temor, como un inmenso demonio levantaba una espada sobre ella para terminar con su existencia,cuando ya la hoja descendía,otra similar salio por su vientre,al mismo tiempo que una nueva surgía por su garganta.Dos espadas muy reconocibles para ella,de las cuales,corroboró que Hariel era el dueño,cuando el ser del infierno cayó de rodillas y luego se desplomó con gran estruendo.

-¿Estas bien Pilly?-le dijo él,acercándose y tendiéndole una mano.

-Lo estoy...-Gracias-le decía,y se interrumpió al ver que Lilly-Naiel era acorralada por dos condenados con expresiones macabras en sus rostros deshechos-Ayúdala-.

Hariel siguió el dedo impaciente que señalaba a la querubín y ascendió veloz para ir en su defensa.

Pilly alzo su espada y se dirigió decidida a un demonio que se acercaba peligrosamente a Magdiel con sus malvadas intenciones reflejadas en su tez oscura.

-Déjala en paz y enfréntame,maldito monstruo de la tinieblas-le gritó para distraer de su querida guardiana la atención de este.

Lo logró, y él cambio su rumbo para acercarse con rapidez a ella,pero antes de que llegara,todo se detuvo. Pilly observó extrañada el estático trance en el que todos se habían sumergido,todos menos ella.Cada uno en su lugar y su posición,completamente inmóviles.

¿Que...?-articulo azorada,y ahí la vió aparecer.

Elviria,con su vestimenta violácea como su largo cabello,igual de misteriosa que aquella primera vez,se materializó frente a ella.

-Elviria-susurró al reconocerla,pero sin comprender su repentina aparición.

-Me equivoque-fue lo primero que ella dijo-Quise creer que había una esperanza....Él,Luzbell,siempre sera el vórtice del caos,sino lo produce él,por él se produce.Lo lamento Pilly-kabiel,pero destruiré este inicio fallido,dejando solo la otra linea de tiempo-.-

-¿Que?...¡No!...Los venceremos...Danos la oportunidad-le respondió Pilly,alzando su voz.

-Ya lo vi,y no lo harán,serán masacrados por las criaturas infernales,y estos destruirán todo a su paso.Espere creyendo...pero ya no puede atrasarse más -vaticinó el Ojo del Cosmos.

-Pero,el Padre no lo permitirá,el se levantará y...-insistía ella,pero Elviria la interrumpió.

-Lo hará,y los desintegrará a todos y a cada uno de ellos,aún a su arcángel rebelde,pero por haber sido muertos con magia oscura y maldita fraguada en los Infiernos,no podrá resucitarlos a ustedes,y este hecho lo sumirá en una pena tan grande,que con el paso del tiempo logrará consumirlo,hasta hacerlo perecer.Los ama demasiado,su amor de Padre no soportará la perdida.Luego de su muerte, muchos seres poderosos y ruines,pelearán por su trono,esto traerá desolación al Universo,e incontables muertes.No tengo elección ángel de Dios,aquel futuro que conociste,aunque doloroso para ti y para muchos otros,es por demás preferible al que alcanzaría a todo lo creado,si persistimos en este.-

-Pero,debe haber...-suplicó Pilly-Por favor,tiene que existir otra manera.

-Lo siento Pilly-kabiel...No debí intervenir en primer lugar...Mi decisión fue errónea,fui soberbia al querer torcer el necesario orden de las cosas.Aquel otro futuro es triste,pero en el se conservan los Cielos,aun hay ángeles que evocaran su raza,Uriel ,Finniel,tú,y también querubines y serafines...Ciclio no destruirá el Universo,lo regirá sin clemencia,pero pasado el tiempo con una firme justicia...Tu hijo esta allí...-.

-Pero a él lo perderé-intervino ella-Perderé de nuevo a Hariel.-

-Lamento que así sea...Pero quizás así deba ser-.

Con un profundo pesar y una pena que no le permitía articular una palabra más,Pilly cayó de rodillas.

Miró en su mente ese futuro que quiso cambiar y no pudo,temiéndole,pues lo conocía duro y difícil.

Decidió evocar el rostro dulce de Elián,como haría en ese tiempo venidero para poder sobrellevar su vida, día a día.

Elviria,levitando a unos centímetros del suelo, alzo su brazos y puso sus ojos en blanco,y todo comenzó a desvanecerse.De a poco se desintegraba todo a su alrededor. Ángeles,demonios,condenados,las estructuras,la realidad.Miró su mano,y notó que se deshacía de a poco,aunque sin causarle ningún dolor.

Levantó la mirada y vio a Luzbell desmayado en el suelo.Nunca sabrían que alguna vez llevo vida en su vientre,que alguna vez lo suyo con Miguel fue posible,que alguna vez  la bondad vencería a la maldad en su corazón. Nunca sabrían que pudo ser transformado por el amor.

Llevo sus ojos a Magdiel,ya nunca más la vería reprenderla amorosamente. No la vería negar con la cabeza y suspirar al enterarse de otro de sus cuestionables hazañas.

Ni a tantos más.Pues a la distancia,de miles, solo sobrevivirían tres,aparte de los serafines y querubines que no descenderían de los Cielos nunca más.

Ya la mitad de su cuerpo no existía,y con medio ser se atrevió a mirarlo a él.Era lo correcto,pues eso seria ella en ese porvenir sin Hariel,solo medio ser que sin mucho esfuerzo podía convertirse en nada.Hermoso,fuerte,valiente...su héroe,su gran amor,su amigo ¿Como ponerle un solo titulo a ese hombre que en su vida los tuvo todos?.

-Te amo-le murmuró a su quieta figura-.

Ya el olvido la alcanzaba, dejando a esa otra Pilly devastada como único referente de su existencia ¿Podría recordar aquella, estas vivencias alternas?...Deseaba creer que si. Vio tanto mas en los que la rodeaban en ese tiempo,vio lo que pudieron ser,vio como un simple hecho puede cambiarlo todo.

Una mirada final,a Elviria frente a ella,pero antes de perderse para siempre,oyó una voz,mas bien un quejido esforzado y gutural.

-No...-siseaba-No,esta es nuestra oportunidad.

Era la hechicera que vio al lado de Luzbell,quien rompiendo de una manera casi imposible el impuesto letargo,se acercaba detrás de Elviria que concentrada no la notó moverse,hasta que salio a la altura de su corazón su mano ensangrentada con su corazón latiendo aún en ella.

Pilly ya no tenia labios que expresaran ese sonido de asombro y horror que cimbró dentro suyo.

Se desvaneció por completo,envuelta en el temor mas profundo.