Capítulo 9
Antes de nada aviso que este capítulo es subido de tono y que hay contenido sexual. Si seguís leyendo es vuestra propia responsabilidad. Y ahora sí pueden comenzar a leer.
Ada
Tengo que darme prisa en salir del lugar donde convivimos mi amiga y yo desde hace unos meses. Ella aún está trabajando y yo quiero ir a ese club que he descubierto por casualidad mientras daba un paseo. Ella durante mis escapadas piensa que voy a un grupo de apoyo para mujeres maltratadas, cuando la verdad es bien distinta. Debo de decir que me costó mucho salir a la calle después de lo que me pasó con mi ex aquel día en el centro comercial. He tenido muchas pesadillas al respecto, porque tenía miedo a encontrarme lo en todos sitios o que me estuviese siguiendo. Desde el día en que perdí mi bebé lo tuve más claro que nunca y le he hecho llegar los trámites de divorcio a través de un buen abogado. Quiero verme libre y no volver a saber de él. Solo pensar por todo el sufrimiento que he pasado durante años por su culpa, se me encoge el corazón. Ahora veo que en realidad nunca me quiso y que era una venda que tenía en mis ojos para no ver la verdad. Me gustaba pensar que en realidad era así, porque no le iba bien en su trabajo, pero que en el fondo me quería. Lo que jamás se me ocurrió pensar es que mientras yo me esforzaba por hacerle feliz él se estaba revolcando sabe Dios con cuántas.
Flashback
Eres una maldita estúpida porque has tenido que presentarte en el parque de los bomberos justo hoy. Dice nervioso mirando para todos los lados.
Yo me acerco a él mientras intento abrazarle.
— No te enfades cariño. Solo he hecho la compra y te he preparado ese plato que tanto te gusta. Como hoy me has dicho que tienes doble turno y no podrás venir a comer he decidido acercartelo. Disculpa que si he osado a venir para que tus compañeros se metan contigo. No creí que les importase...
—¿Que no creíste? Tu sabes que ahora seré el hazme reír del parque. Ninguna mujer se ha acercado aquí, a no ser por alguna emergencia. Me has dado un susto de muerte al pensar que ocurría algo—suelta furioso y bastante nervioso de lo habitual.
—Perdóname. Yo quería darte una sorpresa y no pensé en las consecuencias. No volverá a pasar—le digo marchándome con los ojos llenos de lágrimas y dándole un beso en la mejilla para coger el coche.
—Eso espero—dice cerrando la puerta tras de sí y volviendo a junto de sus compañeros para seguir riéndose por alguna anécdota.
Fin del Flashback
Que estúpida he sido. Además, nunca me ha presentado a ninguno de sus compañeros, razón de más para pensar, que seguro que tenía por amante alguna de sus compañeras de parque en aquella ocasión y no quería que la viera, para que la otra pensara que estaba sin compromiso. ¡ Como he podido estar tan ciega! Seguro que se reía de mí a mi espaldas mientras se hacía el macho con sus colegas. Tengo que intentar olvidar el pasado y aprender de mis errores. Ahora usaré a los hombres como últimamente lo he hecho, en ese club tan exclusivo, donde llevo una máscara y dejo salir la fustración que tengo a través del sexo con desconocidos. Allí nunca sabrán mi identidad y podré desahogarme con quién me plazca, tomando precauciones claro está. No quiero ser una incosciente y coger cualquier enfermedad venérea.
Me dispongo a preparar mi mochila cuanto antes porque mi amiga y compañera de piso no sabe a qué me dedico últimamente. Seguro que se escandalizaría, pero es lo que mejor me hace sentir y me está haciendo salir de este hoyo que yo misma he cavado al juntarme con gente indeseable. No quiero que me juzgue y que piense mal de mí por hacer lo que hago. Más adelante cuando esté mejor intentaré explicárselo para que logré entenderme. Cada persona conseguimos exteriorizar nuestros pensamientos de alguna forma y ésta es mi manera de hacerlo.
Ya estoy en la calle apurando porque ya empieza a oscurecer. La noche en sí siempre me ha dado respeto, sobre todo cuando estoy sola. Hay mucho loco suelto por ahí intentando hacer maldades y tengo que tener cuidado. Al llegar, le digo la contraseña al portero y me sumerjo en mi nuevo mundo mientras voy a cambiarme a los vestuarios que hay habilitados con duchas, por si quieres asearte después de cada acto. La verdad que parece que hoy está bastante concurrido. Hay más gente de la normal, pero yo no espero ni un minuto más y después de ponerme mi máscara, me meto en la sala que últimamente frecuento y cuelgo la máscara correspondiente en la puerta.
Al llegar, veo una pareja que lo está pasando realmente bien. Ella le está haciendo una felación, mientras él agarra sus cabellos para profundizar más en su boca. La chica parece que está disfrutando y el hombre no para de gemir, imagino que estará a punto de llegar al éxtasis. Yo después de ver ese espectáculo tan placentero, decido ponerme encima de la cama que está libre, para darme placer, porque la anterior visión me ha puesto muy excitada.
Meto mi mano entre uno de mis pliegues y empiezo a trazar círculos, mientras con la otra me pellizco uno de mis pezones. Noto una suave luz en la habitación, así que imagino que alguien ha entrado o estará observando para decidir que hacer, si quedarse o meterse en otra habitación, pero me da igual ahora mismo estoy tan excitada que intento proseguir para darme placer, para intentar acabar con mi cometido mientras no haya nadie disponible. A los pocos segundos, noto el colchón hundirse cerca de mí, así que imagino que alguien ha venido para quedarse. Intento girarme para ver de quien se trata pero su gesto me lo impide cuando mete su cabeza entre mis pliegues. Con su lengua, reactiva todo mi sistema nervioso. La verdad que se le da especialmente bien. Tomás jamás me lo había hecho de esta forma, la verdad que no solía hacerlo, solo cuando estaba demasiado bebido y animado.
¡Oh Dios mío! Este hombre tiene una lengua de oro. ¡Estoy a punto de llegar al clímax y aún apenas ha empezado!. Digo hombre, porque mientras él da mimo a mi monte de Venus, yo no puedo dejar de tocarle y he notado que tiene unos buenos músculos.
A los pocos segundos, estallo en un profundo clímax. ¡No me lo puedo creer!. ¡ Me ha encantado! Debe de estar acostumbrado a hacer estas cosas y seguro que en su vida privada, tiene a varias mujeres babeando por él. ¡Menudo portento! Menos mal que no puede ver lo colorada que estoy en este momento, porque la máscara nos cubre sino me moriría de vergüenza.
Al acabar, viene hacia mí para besarme pero yo se lo prohíbo. Nunca he besado a ningún hombre desde que he frecuentado este sitio. No por nada, sino porque no quiero involucrarme más de la cuenta. Quiero que sea solo sexo para que mi corazón no sufra, porque desde siempre he sido muy enamoradiza. Aunque los tiempos hayan cambiado prefiero prevenir antes de que en un descuido me vuelva adicta a alguien.
El hombre parece saber por dónde voy, pero no decide rendirse tan fácilmente y empieza a besarme por todo mi cuerpo. Lo hace con mucho mimo, como si de verdad fuésemos una pareja consolidada. La verdad que esta noche me está sorprendiendo para bien. Me dejo llevar por su besos y caricias y al poco rato, tiene uno de mis pechos en su boca. Yo no paro de gemir porque ese gesto y como me lo está haciendo me encanta. Con la lengua va trazando círculos, mientras que de repente captura mi pezón sin previo aviso. No paro de arquearme, debido al placer que estoy sintiendo y que este desconocido me hace sentir. De repente veo como se separa de mí. Una pena me invade por la perdida de contacto, pero me recompongo enseguida al ver que es para coger uno de los preservativos que hay encima de una de las mesillas. Lo abre, se lo coloca un poco lento para mi gusto, pero después de lograrlo, me la introduce de una estocada y me penetra hasta el fondo. ¡ Dios mío que sensación tan placentera! ¡ Es colosal! Es como si nuestros cuerpos estuvieran hechos el uno para el otro. Desde que frecuento este sitio, jamás me había sentido así. Nunca había conectado tanto con alguien. Sus embestidas cada vez son más seguidas y los dos no paramos de gemir. Él se acerca hacia mí, supongo que para intentar descifrar en mis ojos si de verdad estoy disfrutando o por lo contrario estoy fingiendo, ya que aquí muchas lo hacen, porque alguno no da la talla, pero no es el caso. Me pierdo en sus ojos y me dejo ir llegando al más maravilloso clímax que jamás he sentido.
He visto el arcoiris y a los unicornios danzar en él. Jamás me he sentido tan satisfecha y ahora empiezo a conocer el significado del buen sexo. ¡ Qué engañada estaba! Yo pensé que Tomás y yo funcionamos bien en la cama las pocas veces que lo hacíamos, pero después de mantener sexo con este hombre ese mito se ha caído para siempre.
Él se levanta, supongo que para ir a asearse y a tirar el preservativo a la basura. Intento retenerlo, pero mi cuerpo no me reacciona. Me gustaría volver a sentir cada descarga de la mano de ese hombre misterioso, pero mi razón lo deja ir después de sopesar lo unos segundos. No quiero involucrarme más, aquí somos desconocidos y así lo seguiremos siendo. Yo también me voy a dar una ducha. Lo necesito para quitarme esta sensación de abandono y recomponerme. Por hoy estoy servida, así que me visto y me dirijo a casa, mientras una bonita sensación me invade.
------------------------------------------------------------------Hasta aquí otro capítulo. Es un poco fuerte pero espero que lo hayáis disfrutado.♥️. Cuando lleguemos a los 350 votos subo otro. Si que si quieren llegar cuanto antes compártanla. En breve espero tener otra portada porque ésta no me convence. Nos leemos.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro