Capitulo 13
Narrador omnisciente.
Minho muy tranquilamente paseaba por el bosque, a paso lento y con sus manos en su espalda. Cómo no tenía nada que hacer se ponía a recorrer el bosque, aunque lo conociera de punta a punta.
No había nada nuevo. Todo se encontraba igual que siempre, todo en su respectivo lugar.
No era nada emocionante realmente, seguía siendo el mismo bosque de siempre, y aunque así fuera minho seguía viendo con neutralidad aquel lugar.
No le disgustaba, pero tampoco es que le encantará.
Por un lado era un lugar calmado, dónde podía estar tranquilo siempre y nunca era molestado, podía convivir con las otras criaturas fantasmales que ahí existían, aunque muchas no fueran. Las únicas criaturas que no podía aguantar eran las que dañaban, aquellas que solo se centraban en hacer daño. Cómo la que había atacado a jisung, en ese momento no le quedó otra que eliminar a esa criatura. Pues nadie podía tocar o dañar a jisung.
Pero regresando a lo otro.
Por el otro lado ya estaba un poco cansado de lo pacifico que era el bosque, se volvía aburrido y triste. El había estado solo por mucho tiempo, si no fuera porque jisung se cruzó en su camino quizás ahora mismo estaría deprimido como antes lo estaba.
A él le gustaría abandonar el bosque para poder estar siempre al lado de Jisung. Sus habilidades no eran suficientes, podía hacer muchas cosas y estar pendiente de Jisung, pero no estaba siempre con el. Solamente podía estar junto a él cuando hacía presencia en el bosque, pues minho no podía salir del bosque.
Pero no podía hacer nada al respecto.
Aún así no se lamento y siguió su caminata con tranquilidad.
(...)
En otro lugar, jisung estaba tranquilo sentado en el patio de su escuela.
Hoy tocaban clases para jisung, y claro que el asistió, no podía y no debía faltar, su madre siempre le dijo que si faltaba le dejaría un día sin salir a jugar, así que no faltaba por nada del mundo. Ahora su madre no estaba y no se daría cuenta si faltaba, pero aún así asistía porque no tenía nada mejor que hacer.
Jisung estaba sentado a un lado de todo, el casi siempre estaba apartado, salvo las veces que Félix se acercaba y le hablaba, ahora veía a Félix desde lejos, el siquiera lo había volteado a ver. Así que este receso lo pasaría solo.
Y de regreso al salón.
Jisung se sentó en su lugar, junto a la ventana como siempre y siempre solo ya que nadie se sentaba junto a él.
A los pocos minutos entro la profesora y empezó a pasar lista.
Mencionando a todos sus compañeros, el esperaba su turno para decir presente, tardo en llegar a la J pero finalmente después de unos minutos llegó su turno.
—.Han JiSung —Dijo en voz alta, mientras leía el nombre. Ella levantó su lapicera para marcar el pequeño espacio que había junto al nombre.—
Jisung al ver eso reaccionó más rápido.
—.¡Aquí estoy! —Dijo rápidamente en voz alta, mientras alzaba su mano derecha. El miro con atención lo que la profesora hiciera.—
Aquella mujer levanto la vista y se fijó en jisung, lo observo por unos segundos y luego bajo la mirada nuevamente, tras suspirar volvió a lo suyo y continuo pasando lista.
Jisung confundido miraba a la profesora pero tampoco quiso darle la gran importancia, no sentía que fuera la gran cosa.
El miro hacia la ventana mientras escuchaba que nombraban a más de sus compañeros.
Veía como el viento movia las hojas de los árboles, sentía tranquilidad por ver aquello, le transmitía calma.
Lástima que cuando la profesora finalizó tuvo que salir del aula, a lo que los demás alumnos comenzaron a charlar en voz alta. Era todo un lío ya que había quienes se levantaban, jugaban y gritaban.
Habían perturbado la tranquilidad de Jisung.
El escondió su cabeza entre sus manos y cerro sus ojos con fuerza. El por algunas razones comenzó a sentirse decaído.
Primero porque extraña a su madre, le duele pensar que al regresar a casa ella no estará ahí. Y segundo porque hoy se sentía muy de lado, felix ni siquiera le había hablado, solo lo miro algunas veces.
El apretó sus labios con fuerza al sentir que su pecho dolía.
"Oh mí dulce niño, ¿Que ocurre? Te siento triste"
Apareció de la nada aquella voz, esas palabras retumbaron por la cabeza de Jisung, pues era de ahí de donde se había oído.
Era como una aparición mágica, había llegado la persona perfecta en el momento perfecto, según jisung.
—.Yo... —Comenzo jisung con un tono bajo. El levantó un poco su cabeza y se quedó mirando a la nada.— No... No me siento muy bien...
Hablaba decaído, no traía su tono típico, aquel tan tierno tranquilo. Minho preocupado no tardó en responderle.
"¿Por qué mí dulce niño? ¿Quieres contarme?"
Su preocupación conmovió a jisung, más el no podía soltar lo que quería decir, no con facilidad.
"Puedes venir al bosque si te sientes más cómodo, aquí siempre serás bienvenido y y yo siempre escucharé lo que tengas que decir..."
Jisung quiso llorar por escuchar algo tan bonito, pues realmente nunca le habían dicho algo parecido.
El habría aceptado, de no ser por un pequeño detalle.
—.Pero... Mis clases —Solto en susurro con gran desilusión. Nuevamente escondió su cabeza con tristeza y pesadez.—
Minho no sabía si reír por ternura o llorar por tristeza al haber escuchado eso.
"Mí niño, ya dejaste tu presente. Aparte no creo que nadie note tu ausencia, no con todo el ruido que hay en tu salón"
En parte tenía razón, pero el no podía irse así como así. Sin avisar o hacer algo.
Contra ese pensamiento minho tuvo que luchar para convencer a jisung. Estuvo un rato intentándolo hasta que finalmente jisung no muy seguro de lo que haría acepto.
El con cuidado tomo su mochila, con gran lentitud se levantó y con sigilo se movió hacía la puerta. En todo momento observo a sus compañeros y al parecer ninguno se dio cuenta del escape de Jisung.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro