Yoongi siente que se está volviendo loco debido al silencio.

El apartamento luce totalmente distinto sin las cosas de Taehyung en él; mucho más vacío y sin vida. Además, el silencio permanente es algo a lo que Yoongi simplemente no podía acostumbrarse con facilidad, no cuando la personalidad vibrante de su mejor amigo siempre había hecho de todo el lugar lleno de vida, de risas y música.

Aquello no deja de ser irónico, luego de mucho tiempo quejándose de como las cosas de su mejor amigo se cruzaban en su camino o como muchas veces le pedía que guardara silencio porque necesitaba dormir tras una larga noche en el estudio. ¿Por qué sólo hasta ahora le molesta el silencio y la sobriedad que siempre anheló durante los años que ambos compartieron en ese apartamento?

La respuesta resulta sencilla, pero molesta de admitir: porque ese ya no es el hogar de Taehyung y él tiene que asumirlo, aunque no es fácil en absoluto y el orgullo duele más que cualquier cosa.

Es por eso que ahora pasa más tiempo en el estudio, encerrado en el pequeño espacio, sin recordar comer y enfocado por completo en sus programas de mezclas y sus libretas llenas de letras desordenadas que solían ir de un tema para otro, pero que últimamente se centran en temas como la traición y el engaño.

.- ¿No te he llamado hoy? - el tono de preocupación es lo que hace que mire a Jungkook, sentado frente a él con esos enormes ojos que brillan como si tuviesen en el fondo una constelación - Creo que deberías intentar llamarlo, Yoongi.

Están en una cafetería cercana al campus universitario, Yoongi se animó a sí mismo en ir por Jungkook para que tuviesen una cita luego de largas semanas de silencio incómodos sentados en el sofá del apartamento, tratando de rellenar en algo los vacíos que se hacían cada vez más profundos entre los dos y evitando a toda costa, el tema de Taehyung porque Yoongi se sentía cada vez más lejano a ello y Jungkook se mostraba, cada día, más obsesionado con eso.

.- Es que digo... por lo menos podrían hablar por teléfono, ¿no? - su novio murmura mientras sus dedos juguetean con las servilletas, mirándole antes de morderse un labio con algo que él identifica como nervios - No sé, podrían contarse qué han estado haciendo estos días, así a lo mejor te dice dónde está.

A Yoongi le gustaría que eso fuese una opción, pero es realista y sabe que no lo es, sabe que sí Taehyung no contesta al primer intento su llamada, es porque no quiere hablar con él y, mucho menos, contarle qué está pasando en su vida. Ha intentado llamarlo muchas veces ya, en medio de la noche cuando el cansancio ya es demasiado y permite que sus murallas personales flaqueen, que extrañe más que nunca a su mejor amigo y su risa.

Pero, como cada intento, no hay una respuesta ni una llamada de regreso.

Pensar en dónde y en qué podría estar haciendo Tae sólo termina en dolor de cabeza porque sabe, sin ningún tipo de duda, que está con alguno de esos amigos que a Yoongi no le agradan y de los que siempre trató de alejarlo. Saber eso sólo provoca que su orgullo duela más porque Taehyung, su mejor amigo, los eligió a ellos por encima de él y no entiende por qué.

.- Hyung...

.- Escucha, mi amor - le interrumpe al final, sus manos pálidas atrapando las de Jungkook sobre la mesa y consiguiendo que aquellos ojos se fijen realmente en él, por primera vez en todo lo que llevan de la cita - ¿Por qué no nos centramos en nosotros hoy? No creo que logremos mucho hablando de Tae incluso en nuestras citas.

Jungkook hace un mohín, descontento con la propuesta y ni él mismo se entiende. Semanas atrás, lo único que hubiese pedido es una cita con Yoongi, un momento sin que su novio estuviese hablándole de alguna composición nueva que le estaba dando problemas o de un tema lejano a ellos como pareja. Antes, Jungkook hubiese dado todo en el mundo para ser el centro de atención de su novio, pero ahora... simplemente no se sentía correcto.

¿Acaso se debía a que Taehyung había desaparecido de la nada luego de que Jungkook se había acostumbrado a una rutina juntos? ¿O se trataba del orgullo herido que se escondía en la sonrisa de su novio, que no dejaba de sostener sus manos mientras pretendía que tuviesen una noche en la que no había pasado nada? ¿A Yoongi realmente le importaba tan poco la situación con Taehyung?

No lo tenía claro, pero sí sabía que no se sentía bien.

.- ¿Es así de fácil para ti? - la pregunta sale antes de que Jungkook la piense, tan sólo deja que sus sentimientos lleven la corriente, aunque sabe que no es precisamente la mejor de las situaciones - Todo el tiempo me decías que Taehyung es tu mejor amigo, que no habría nada en el mundo que no harías por él y ahora... simplemente pretendes que hagamos como si nada. ¿Eso te parece correcto?

Yoongi se recuesta en el asiente, evitando cruzarse de brazos porque lo que menos desea es una discusión con su novio. Jungkook solía ser demasiado apasionado, pero él simplemente no entendía por qué parecía sentirse tan ofuscado por cómo se habían dado las cosas con Taehyung, ¿qué esperaba que hiciera? ¿Qué saliera corriendo a buscar a Taehyung y le rogase que volviese a casa? Min Yoongi nunca haría eso, con nadie.

.- Sí eres así con quien dices que es tu mejor amigo... - sigue hablando Jungkook, inflando su pecho por la respiración que se hace cada vez más rápida, cada vez más incontrolable como las emociones que lo asaltan - Sí eres incapaz de ir a buscarlo y preguntar tan sólo... tan siquiera el por qué de sus decisiones, entonces... ¿cómo sería conmigo? ¿Qué harás sí un día decido hacer lo mismo? ¿Vas a dejar que me vaya sin intentar preguntar por qué me voy?

La voz de Jungkook se quiebra en la última palabra y Yoongi observa con asombro sus ojos cristalizarse levemente antes de que el menor gire su rostro, bajando la mirada y no dejándole ver lo que sea qué sucediese en las constelaciones al fondo de sus ojos. La pregunta del menor le ha dejado sin palabras ni maneras de entender cuál es su razón de ser.

Jungkook es lo más cercano al amor que ha sentido en mucho tiempo, años quizás.

Su llegada a su vida le recordó lo que se sentía enamorarse de manera lenta, conociendo al otro con paciencia y placer, además de que había traído a su vida de regreso la necesidad de esforzarse y comprometerse por la felicidad del otro; la simple sonrisa de Jungkook le recordaba a diario lo increíble que se siente en una relación seria después de tantos años de haber terminado con ex novio, por allá en su adolescencia.

Después de aquella relación, Yoongi había creído que no habría nada más en su vida, no que valiese la pena y se había refugiado en la idea constante de que todos iban a abandonarle tarde que temprano, que él haría que lo dejasen. Tal y como había sucedido con Taehyung semanas atrás y como sucedía ahora con Jungkook, que se levantaba de la mesa al notar su silencio como una respuesta, una que no auguraba nada bueno.

.- Sí, no me detendrías... ¿v-verdad?

Yoongi es incapaz de responder, ni siquiera puede levantarse porque la escena se le hace demasiado conocida, demasiado como para no ser dolorosa.

Lo ve salir con los hombros encogidos hacia delante, su mochila golpeando contra su espalda por lo rápido que camina y su cabello oscuro revuelto que a él tanto le gustaba peinar con sus dedos mecerse con cada paso que lo aleja de él. Jungkook no se gira a mirarlo y él no esperaba menos de su novio, no después de conocer de cerca la firmeza que Jungkook ponía en cada una de sus decisiones, incluso sí dolían.

La escena es casi idéntica y duele incluso más que la primera vez que la vivió.

Sí hay algo que Taehyung odia de ahora vivir con Bogum es que el apartamento de su ex novio está el doble de lejos de la universidad y debe tomar un autobús para llegar.

No es que el viaje fuese realmente malo, para empezar ni siquiera era demasiado largo, sólo un par de minutos antes de que el autobús se detuviese en el complejo de apartamentos de lujo en el que vivía ahora, además que aprovechaba para llamar a casa y poner al día a sus padres sobre lo qué hacía; simplemente la falta de costumbre le abrumaba.

.- ¿Vendrás estas vacaciones, cariño? - la voz de su madre suena emocionada al otro lado de la línea y eso provoca una cálida sensación en su pecho, imaginando el rostro amado de su mamá sonriendo para él - Tus hermanos estarían encantados de verte.

Taehyung sonríe sin poder contenerse, estirando su cabeza fuera del paradero para ver sí el autobús ya llegaba: .- Creo que sí, mamá. Depende de cómo termine mis últimas materias, pero todo va sobre ruedas.

.- Estoy segura que te irá bien con todo, tengo un hijo muy inteligente y responsable. Lo educamos bien - es lo que dice ella, más emocionada que antes - Además, podrías invitar a Bogum a venir contigo. Hace mucho que no lo veo.

La mención de su exnovio con aquella emoción en la voz de su madre sólo le provoca una sonrisa aún más grande: .- ¿Sí sabes que me estás pidiendo que lleve a mi ex?

.- ¡Es el mejor chico del mundo! - chilla su madre, como sí le regañase por poner en duda el por qué debería de invitar al estudiante de actuación y es que Taehyung sabe que sus padres adoran a Bogum y el sentimiento es mutuo - ¿Y es raro que lo traigas a casa de tus padres para vacacionar cuando ya vives con él?

.- Touche, mamá - responde, poniéndose de pie cuando el autobús gira en la esquina - Voy a comentarle, supongo que no tendrá problema. Sé que sus padres no lo esperan, aunque... ¿qué dices sí llevo otros amigos?

Pensar en sus padres conociendo a Jimin y los demás es gracioso porque sabe que amaran a sus amigos de la misma manera en que él los quiere, aunque muchas de las cosas que suelen hacer juntos serían cosas que no podrían hacer en casa de sus padres. Sin embargo, la idea no resulta desagradable y, más bien, es algo que le gustaría que pasara.

.- ¡Eso sería genial, cariño! Después de tanto tiempo teniendo sólo a Yoongi - ssi, es bueno que tengas más amigos - su madre habla con cariño, sin saber que la sonrisa en su rostro se borra por la verdad que se oculta en sus palabras, el cómo durante muchos años sus padres sólo conocieron a Yoongi, cómo él mismo se cerró a conocer a otros - Sólo avísame y verás que haremos una cena increíble, puedo decirle a tu abuelo que consiga hortalizas frescas...

Su madre continúa hablando, pero Taehyung ya no escucha nada.

Sus ojos están fijos en la figura que camina hacia el paradero, abrazándose a sí misma y con el rostro sonrojado por un llanto silencioso. Taehyung quiere girarse, pensar en que no falta mucho para que el semáforo cambie y el autobús que le llevara a casa llegue, sin embargo, es incapaz de no reaccionar, simplemente no puede ignorar porque sabe quién es, sabe que es Jungkook y que él nunca podría darle la espalda.

Quisiera poder hacerlo, pero...

.- ¿Kook? - le llama alzando la voz lo suficiente para llamar su atención, los enormes y tiernos ojos del menor mirándole con sorpresa a unos metros de distancia, su cuerpo tenso al reconocerlo - ¿Jungkook?

.- Tae...

El susurro del menor no lo escucha, en cambio, sólo le ve acortar la distancia con rapidez y es incapaz de reaccionar cuando los brazos musculosos y fuertes del menor de los dos se cierran alrededor de su cuello, abrazándolo con tanta fuerza que por un momento Taehyung sintió que el aire desapareció de su cuerpo y no tenía nada que ver con que se trataba de Jungkook, de su calor y su aroma frágil, pero encantador.

.- Estás temblando - consigue decir cuando se sobrepone de la sorpresa, sus propios brazos rodeando la figura del menor y apretándola contra sí - ¿Has estado llorando? ¿Qué pasa?

Jungkook no responde, un sollozo escapando de su garganta a la vez que negaba con la cabeza, enterrando su rostro contra el hombro del mayor, aferrándose a él como sí fuese lo único en el mundo. Siente sus ojos hinchados, sus labios maltratados de tanto mordisquearlos para evitar sollozar y todo su cuerpo se encoge con dolor, incapaz de saber sí sigue triste por lo que sucedió con Yoongi o feliz de haberse encontrado con Tae.

Las luces del autobús les iluminan brevemente en el paradero, recordándole a Taehyung a donde iba y que aún tiene el teléfono en la mano, su madre seguramente hablando al otro lado. El suspiro muere en su pecho cuando cuelga con esfuerzo, anotando mentalmente que tendrá que inventar una excusa para su madre en la futura llamada y que, al mismo tiempo, debe tomar una decisión.

.- ¿Quieres ir conmigo? No necesitamos hablar de lo qué pase, tengo algunos videojuegos y podemos...

.- S-si...

Ninguno de los dos dice algo, Taehyung tan sólo se encarga de separarse lo suficiente para detener el autobús e indicarle al menor que subiese, pagando el pasaje de ambos con su tarjeta de transporte. El autobús iba lo suficientemente vacío como para que nadie notase el rostro enrojecido del menor, ni su gesto de preocupación genuina.

Nadie repara en ellos sentándose hasta el fondo, hombro con hombro y en silencio, tampoco nadie nota cómo su corazón parecía detenerse cuando Jungkook entrelaza sus manos y, por el resto del camino, permanece con su cabeza sobre su hombro, apoyándose en él.

Ya tenía ganas de volver con ésta historia porque estamos entrando en todo el arco central. :3

¿Qué opinan ustedes? ¿Qué se imaginan que viene? Yo puedo decirles que ya está todo planeado a términos generales y, por ello, ya puedo comenzar a visualizar cómo voy a hilar las cosas, qué personajes faltan por hacer su entrada y qué secreticos van a salir a la luz. ;)

Oh, eso me lleva: ¿quién creen que es el ex de Yoongi? Será importante en lo que se viene, así que quién lo adivine primero (o la historia qué tiene con Yoongi), se llevará una dedicatoria en el capítulo en que sale a la luz.

No siendo más: espero sus opiniones e hipotésis.

Gracias por leer.