En días fríos, abrazos cálidos.
TamaNeji + leve NatsuNeji.
Semi-AU + OoC.
Capitulo único.

Dedicatoria a: YulichanYellow

Te lo debía hace mucho Yuli perdón el retraso... Y el atraso también ajsjsjda.

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—¡Allá voy Tamaki!

Amajiki sale disparado del pasillo, corriendo como si su vida dependiera de ello. Quiere evitar a toda costa ver atrás porque sabe que lo primero que sus ojos enfocaran serán los pechos de Nejire rebotando mientras lo persigue.

Se siente todo un degenerado al imaginar aquella escena.

—¡De-Dejáme en paz! —le pide casi a gritos mientras busca refugio detrás de Mirio, quien por el brusco movimiento de Tamaki para usarlo como escudo humano su gorrito de navidad se había caído.

—¡Agh! Espero no se haya ensuciado —dice Mirio sacudiendo la gorrita roja y volviéndose a colocarla— Tamaki ¿por qué no te dejas abrazar de Nejire? ¿Te das cuenta el privilegio que posees? —le pregunta luego de ver como Nejire se habia detenido para abrazar a Yuuyu y otras amigas que estaban en la sala común de los dormitorios.

—¿¡Pri-Privilegio!? —le espeta un tanto alterado ¿a quién se le ocurría que el que una chica le abrazara fuese un privilegio?

—Sí. Muchos chicos mueren por un abrazo y quizás algo más de Hadou y ella muere por uno tuyo. Ya dejáte abrazar hombre ya sabes lo que dicen, en días fríos abrazos cálidos.

Tamaki tiembla, no no y no, Nejire era demasiado linda y cálida para tenerla tan cerca suyo. Seguramente lo arruinaría y ya vivía con suficiente depresión como para agregarle el hecho de haber arruinado todo con su crush.

Pero técnicamente en ese momento lo estaba arruinando ¿verdad?

—No puedo Mirio —susurra cobardemente. A veces el mero hecho de hablarle sin parecer una maraca le requería mucho esfuerzo.

Togata iba a decir algo cuando los brazos de la aludida lo envuelven con energía, ante ellos sonríe.

—¡Qué bien que tú si te dejas abrazar Togata! —dice Nejire con toda la intención del mundo de que el individuo con espíritu de maraca atrás del rubio la escuchara. Tamaki siente que se encoge en su lugar.

—Veo que estás muy amorosa hoy Hadou —sin quitar esa característica sonrisa de su rostro Mirio corresponde el abrazo de Nejire y deposita un pequeño beso en su cabeza a la vista de Tamaki.

Vamos, haz algo Amajiki. Pide a gritos la mente del rubio. Pero ni siquiera tratando de provocarle hace que Tamaki salga de su zona segura.

Pero no era que no le importase, en realidad Tamaki sabía a la perfección que las acciones de Mirio para con Nejire no iban más allá del amor fraterno.
Sin embargo no contaba con la llegada de un invitado especial.

—¡Hola a todos que tal! —sonrisa sacada de un comercial de Colgate, chaqueta universitaria y ese cabello tan blanco como la nieve. Sí, Amajiki no tenía ni idea de quién era ese tipo que había entrado como si nada al dormitorio y que había provocado que Nejire soltara rápidamente a Mirio para correr a por él.

—¡Natsuo! —la escucha exclamar mientras se abalanza a él y lo abraza con toda emoción. Natsuo siente su corazón palpitar con emoción y no se demora en corresponder aquél gesto.

—¡Nejire! Gracias por invitarme. Te ves muy adorable con ese gorro —dice mientras sacude un poco el pompom blanco con forma de esas ondas que producía el quirk de Nejire.

—Muchas gracias —un casi imperceptible sonrojo se muestra tan fugaz como la seguridad de Tamaki en esos momentos.

—Mirio ¿quién es ese? —pregunta Amajiki con mucha desconfianza.

—¿Qué no lo estás viendo? Es tu rival.

—¿Ri-Rival? —inquiere atónito.

—Sep. Por lo que veo es muy amigable con Hadou.

—Oh... —un aura oscura y llena de depresión lo rodea al instante.
Mirio le abraza alrededor del cuello para darle ánimos.

—Hey, tranquilo. Estoy seguro que no son nada más. Pero creo que deberías ir dando pasos adelantándote Tamaki. Y que mejor manera de empezar a dar esos pasos es yendo y abrazar por ti mismo a Hadou.

—No pue-...

—Claro que sí —le interrumpe mientras lo empuja con energía hacia Nejire.

Y ahí va, tomando el valor de quién-sabe-dónde y la abraza por detrás inclinando su cabeza para dejarle un beso tan fugaz en su mejilla pero que habían sido lo suficientemente atómico para revolver todo en el interior de la chica.

—Lo siento —es lo único que puede salir después de haber hecho tal cosa. Sus mejillas se sienten calientes y está seguro que hasta sus orejas delatan el sonrojo que tiene. Nejire se da vuelta a cómo puede para encararlo y sonreírle.

Natsuo sólo puede ver la escena con cierta incomodidad, porque puede percibir la química que hay entre ellos con sólo ese intercambio de miradas.

Vaya, y él quería invitarla a salir ese día.

N/A: Me siento mal por ese final jsjsjs.