Rompe, rasga, corta.

Cuando mi casa se derrumbó

con aqueste cruel temporal...

Todo lo que había se desmoronó

y nada pude recuperar.

Todos esos recuerdos perdidos

llenos de polvo quedarán.

Y todo cuanto un día construimos

quedo, hueco, y sordo morirá.

Cuando mi alma se derruyó

con aquesta fría soledad...

Todo lo que había en mí se diluyó

entre el agua cristalina del mar.

Todos esos momentos eternos,

tibios y secos, marchitos quedarán.

Y todo cuanto un día prometimos

como losas se fragmentará.

Cuando mi corazón se partió

con esa temible heroicidad...

Sentí cómo algo dentro crujió,

y jamás volvió a ser igual.

Todos esos latidos de invierno

eternos, lentos, débiles se pudrirán.

Y todo cuanto un día te dije

entre las tierras de fango se ahogará.