Il mío amore perdido y otras cantatas olvidadas [VII]
¿Recuerdas cuando éramos poesía?
Juntos formábamos las rimas
más perfectas
del universo.
Ningún otro poema
era capaz de igualarnos.
Pero ocurrió algo.
Me di cuenta de que para ser un poema
no es necesario rimar.
Y entonces tú te diste cuenta.
Y yo buscaba versos libres,
mientras tú intentabas ligarlos.
Es como jugar a los dardos
con jabalinas de piedra.
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro