Capítulo 17: El asalto final
Un tiempo antes, Weavile se encontraba persiguiendo el vehículo que se llevaba a Articuno, quien había sido convertido en estatua por la Cazadora J. El Siniestro intentó detenerlo atacando con todos sus movimientos, pero el vehículo no se detuvo.
-¡Maldición! ¡Esto no está funcionando!- reclama mientras persigue el vehículo saltando por las ramas de los árboles de fondo -Ya lo tengo- se le adelanta.
Mientras, dentro del vehículo. -Jaja es inútil, nunca podrá dañar nuestro vehículo blindado- dice un cazador.
-Jaja si- responde su camarada cuando de pronto se escucha algo romperse- ¿Qué fue eso?- voltean a ver la mercancía.
El vidrio que rodeaba a Articuno había sido destruido por la Hoja Aguda de Fomantis, quien se mantuvo oculta debajo de las alas del legendario después de ser convertido en estatua.
-"¿¡Qué es eso!?" ¿¡"Cómo llegó ahí!?- preguntan los cazadores sorprendidos.
Fomantis salta de la plataforma y baja el interruptor del "platillo" gigante donde se encontraba Articuno.
Lo que genera que la superficie del plato libere unas ondas que revierten el efecto de "metalización" regresando al legendario a la normalidad.
-¡Muy bien Fomantis!- la felicita Articuno orgulloso, para luego encarar a los cazadores -¡Prepárense para ser congelados hasta los huesos!- los amenaza abriendo las alas haciendo que el vehículo empiece a congelarse desde su interior.
-"¿Qué hacemos ahora?" "¡Hay que capturarlo, o la jefa nos dará de comer a Salamence!"- concuerdan y sacan sus Pokeball, pero un frenado brusco los hace caer.
Weavile había congelado el camino con Ventisca haciendo que el vehículo resbale y chocase contra unos árboles -¡Funcionó...!- exclama Weavile cansado.
Articuno toma a Fomantis y con Ala de Acero manda a volar la puerta trasera del vehículo y sale volando un poco.
-¡Maestro!- clamó el aprendiz -¡Cómo pudiste dejar que te capturen!- cambio de un tono contento a uno molesto.
-Simple. Bajé la guardia- ríe leve -Pero no volverá a pasar ¿A dónde fue ese Dragón?-.
-Lo perdí de vista cuando vine a rescatarte. Pero parece que tenías todo controlado- Weavile sonríe leve.
-No pude haberlo hecho sin Fomantis- le sonríe -¿A dónde vamos ahora?- consulta Articuno.
-Debemos reagruparnos. Quedamos en vernos en la mansión si nos separamos- responde Weavile.
-Muy bien, sube- dice Articuno y este lo hace, luego despega y vuela hacía la mansión.
El conductor del vehículo sale de la cabina y se baja para llamar a su comandante en jefe -Señor... la mercancía ha escapado...-.
Mientras tanto en la mansión, Glaceon había llegado y encuentra el escenario destrozado.
-¿Qué fue lo que pasó?- pregunta confundida y vería a los cazadores en el suelo -(Así que también vinieron a este lugar...)- pensó inquieta en posición de alerta.
-Una seño... una señorita de enormes garras vino y los derrotó- le cuenta Buneary.
-Ya veo... (¿De enormes garras? El único así es Weavile)- pensaba Glaceon.
-Dijo llamarse Sneasler... o algo así- comenta Budew.
-No la conozco...- mira los alrededores- (Parece que soy la primera en llegar. Espero que los demás estén bien)- mira hacía la ventana.
Finalmente, gracias al afecto que sentía por Riolu y sus deseos por salvarla, Hex había evolucionado en Sylveon.
-¡Pero es imposible...!- clamó el Dr. Mengueche -Aunque tengas un movimiento Hada, necesitas formar una fuerte amistad con algún entrenador ¡Y tú no tienes ninguno!- explica sorprendido.
-¡Qué importa eso!- ruge Hydreigon -¡Solo tengo que aplastarlo!- se rodea de energía dragón tomando la silueta de uno.
-¡Espera Hydreigon!- advierte el Dr. pero su Pokémon se lanza con Carga Dragón cayendo sobre Hex pero solo consigue empujarlo por su inmunidad de tipo.
Sylveon es arrastrado pero resiste el empuje enterrando sus patas en la tierra, y lo aleja con Viento Feérico desde sus listones.
El Dragón Siniestro recibe un buen daño -¡Idiota, los ataques Dragón no afectan a Sylveon!- lo regaña su entrenador -¡Usa Triataque!- ordena y su Pokémon lo lanza desde sus tres cabezas.
Hex daría un gran salto con suma gracia para esquivar, libera energía tipo hada estando en el aire, creando la ilusión de una luna detrás suyo para cargar su movimiento más fuerte, Fuerza Lunar y se lo lanza a Hydreigon.
Dicho ataque se hacía cada vez más grande e impacta de lleno en el Dragón Siniestro.
Generando una gran explosión que se oía a lo lejos -¿Que fue eso?- pregunta Weavile quién volaba con Articuno.
-Viene de allí. Puede ser uno de nuestros aliados- comenta el legendario.
-Cierto, echemos un vistazo- se dirigen allí.
Al llegar se encontraron con Sylveon, quien se quitaba el chip de rastreo de la nuca con sus listones, lo tira al suelo y pisa con sus patas destruyéndolo -¿Hex, eres tú?- consulta Weavile y salta hacia él.
-¡Weavile sensei...! Si, soy yo- responde hasta ver a Articuno -(¡Es él de hace rato...! Espero no nos coma...) pensó Hex preocupado.
-¿Hm? Tranquilo, es un amigo- levanta la vista -¿Quién es él?- pregunta Weavile con seriedad al ver al científico desmayado sobre su Pokémon debilitado.
Hex regresa a su forma Eevee -Pues...- procede contarle todo lo sucedido entre ellos.
-Ya veo...- Weavile tenía una gran rabia -Ese desgraciado... no merece siquiera vivir- camina hacía el científico.
-Esto se pondrá bueno- dice Articuno mientras Fomantis se sube en su cabeza.
-¡Espera...!- Hex se interpone en su camino.
-¿Qué ocurre? ¡Ese sujeto te causó mucho sufrimiento, no!?- exclama enfadado.
-Lo sé... pero ya me saqué el chip ¡Ya no podrá encontrarme!- responde Hex.
-Eevee...- lo llamaba el Dr. recostado sobre Hydreigon -Ven conmigo... yo te hice quién eres.... tú fuerza me la debes a mí, tu... ¡Me perteneces!- autoproclama hasta ser congelado por la Ventisca de Weavile.
-(Tienes suerte de que haya niños aquí...)- pensó el Siniestro para luego mirar a Hex quien parecía desanimado por sus palabras.
-¡Ni se te ocurra creerte todo eso!- advierte Weavile mientras se le acerca -No es tu culpa que experimentaran contigo. Tienes una habilidad única, pero fuiste tú quién la entrenó y mejoró para hacerla suya- dice firme y coloca su mano sobre la cabeza de Hex.
-Más allá de eso, eres un Eevee... amigable, tierno, juguetón, inocente...- lo acaricia un poco -Así que no te sientas diferente a los demás, Hex- aparta la mano.
Eevee se conmueve y suelta unas lágrimas -Weavile sensei...- se limpia la cara -¡Tiene razón...! ¡Soy Hex, un Eevee capaz de evolucionar en cualquiera de sus formas, pero también soy un Eevee común y corriente...!- grita a todo pulmón y se desploma en el piso agotado.
-Justo en el momento más emotivo- comenta Articuno decepcionado.
Weavile carga a su aprendiz y camina hacía su maestro -Si, debe estar cansado. Por ahora vayamos a la mansión- propone y luego vuelven a dirigirse allí.
Mientras tanto, la Cazadora J llegaba al sitio donde su nave había estacionado, lugar dónde los cazadores que debían traer al legendario debían esperar -Más les vale tener una buena explicación- advierte ella bajando de su Salamence y estos le cuentan lo sucedido.
-Lamentable. Solo tenían una tarea- J les daba la espalda -No hay nada que hacer. Váyanse a Digimon inútiles- caminando hacía su nave.
-NO0o- niegan estos para luego subir a la nave también.
A lo lejos, Sneasler sentada veía la enorme nave desde la rama de un árbol -Una fuerte señal de poder legendario proviene de ese sitio- sosteniendo su detector -Espero que sea lo que busco- se deja caer de la rama.
Articuno llega a la mansión y aterriza en el patio frontal. Weavile sostiene a Hex y baja de un salto, luego vería como Glaceon salía -Glaceon ¿como les fué?- refiriéndose a su parte del plan.
-Nos fue bien pero... ¿¡Qué hace el Come Glaceon's aquí!?- exclama mirando al legendario.
-¿Qué? Tranquila, es un aliado. No sé comerá a nadie ¿verdad?- mientras lo mira.
-Si. Aunque no me vendría mal un bocadillo- decía Articuno mientras Fomantis se mostraba un poco.
-(No se la comió)- pensó Glaceon al verla -(Quizá no sea tan malo...) ¿Y qué le pasó a Eevee?- pregunta al verlo desmayado.
En eso llegaría Lucario caminando con el ojo dañado -Ya estaban aquí...- viéndolos a todos.
-Lucario... ¿Riolu no está contigo?- consulta Glaceon hasta ver su cicatriz.
-¿Qué le pasó a tu ojo?- pregunta Weavile serio.
-Fue uno de los Pokémon de esa cazadora...- responde rápido -Riolu no está conmigo ¿Por qué? ¿¡No está aquí!?- le pregunta a Glaceon.
-(Me lo temía...) No te altares... Riolu andaba buscándote con Hex, pero como ves él volvió y ella no...- revela algo incómoda.
-¿¡¡Qué cosa acabas de decir!!?- grita Lucario alterado incomodando más a Glaceon.
Hex despertaría por los gritos y se bajaría de Weavile -¡Lucario... Riolu fue capturada por esa cazadora!- revela sorprendiendo a todos.
-¿¡Se enfrentaron a esa humana!?- pregunta Weavile.
-¡Estaba contigo...!¿¡Y no pudiste protegerla!?- cuestiona Lucario acercándose a Eevee.
-¡Todo sucedió muy rápido...! ¡Escuché la voz de Weavile sensei, fuimos allí y ella nos disparó con algo extraño!- explica Hex apresurado.
Pero Lucario seguía muy enfadado así que Weavile se interpone en su camino -¡Apártate!- exige.
-Si quieres llegar a él, tendrás que pasar por encima de mí- advierte el Siniestro y Lucario se detiene.
-Tranquilízate. Esa humana es muy peligrosa, es un milagro que Hex pudiera escapar- menciona al haberla enfrentado -Mejor guarda tus fuerzas para rescatar a tu hermana- propone Weavile.
-(Me siento un tonto ahora) Si... tienes razón- Lucario se calma -Vayamos ahora-.
-¡Yo también voy!- proclama Hex -¡Conseguí nuevas evoluciones...!- ilumina su cuerpo para mostrarles pero continúa en su forma Eevee -¿Eh?-.
-Parece que no das más- dice Weavile -Lo hiciste muy bien hasta ahora Hex. Pero te quedarás aquí-.
-¡Pero yo también quiero rescatar a Riolu...! ¡Fue capturada por mí cul-!- expresa Eevee pero un rápido golpe de Weavile en la nuca lo interrumpe.
Dejandolo desmayado. -¿Por qué fue eso?- pregunta Glaceon confundida.
-No quiero que siga arriesgándose en su condición. Tampoco quiero que vea lo que haremos allí- dice un Weavile serio -Andando-.
Artícuno se pone en dirección y dobla sus patas, esperando que los demás suban -Adelante-.
Lucario asiente con la cabeza -Glaceon, por favor cuida de los niños de la mansión- le encarga para luego subirse en el lomo de Articuno junto a Weavile y Fomantis.
-Está bien- accede la Eeveelution mientras los ve despegar e irse volando.
-Estén atentos. Esa enorme nave debería ser fácil de encontrar- avisa el Siniestro.
-¡Bien!- (Allá voy, hermana)- pensó Lucario decidido.
En ese instante, la nave de los cazadores furtivos despegó y voló sin rumbo aparente.
-¿Hacía dónde nos dirigimos, señor?- pregunta el piloto.
-Solo mantengan la altura. Estoy segura que esos Pokémon que se nos interpusieron, vendrán por este trofeo- responde la Cazadora J sentada en su lugar con la estatua de Riolu al lado.
Y efectivamente, el grupo los encontraría -¡Allí está!- anuncia Lucario y Articuno dirige su vuelo hacía la nave.
-(Es como si nos estuvieran mostrando dónde están...)- pensó Weavile con cuidado.
-Señor, el objetivo se aproximan a gran velocidad- informó él encargado del radar de la nave.
-Excelente. Lleven a Riolu al cuarto de mercancías. Está vez atraparé a esos Pokémon- proclama J y se dirige a la compuerta superior.
Articuno aterrizó en el techo de la nave, donde la compuerta se abriría y la Cazadora J saldría.
-Seguirme hasta aquí fue muy valiente, pero no los dejaré marcharse- advierte sacando a Salamence de su Pokeball quién ruge con fuerza.
Weavile y Lucario pasan de ellos y entran por la compuerta a gran velocidad -...- J los ve pero los deja ir -De todos modos ellos no me interesan. Tú eres el objetivo- mirando a Articuno.
-Aunque me viera majestuoso, fue incómodo estar convertido en estatua. Les mostraré convirtiéndolos en esculturas de hielo ¿Les parece?- amenaza el legendario abriendo sus alas.
-¡No si antes te horneamos primero!- grita el pseudolegendario y usa Lanzallamas.
Articuno planea sobre el Lanzallamas y usa Ala de Acero iluminando sus alas.
Para luego golpear a Salamence en toda la cara y luego mantener distancia.
Dentro de la nave, el dúo de Sinnoh recorría un largo pasillo a través de la nave, hasta que un montón de cazadores los interceptaron.
Antes de que reaccionen, Weavile usa su velocidad para provocarles cortadas con sus garras sin importarle si hacía cortes mortales, haciendo que caigan desmayados.
-Bueno, se lo merecían- menciona Lucario aún enfadado.
-Por eso no quería que Hex viniera- continúan su marcha hasta encontrar un camino dividido.
-Separémonos- propone Weavile.
-Está bien. Yo iré por la derecha- Lucario se adelanta.
-Bueno, tocó la izquierda- Weavile va por allí.
Al ver la inmensidad de la nave, Lucario se detiene para intentar algo -(No tengo tiempo para revisar toda la nave)- procede a cerrar los ojos para intentar percibir el Aura de su hermana.
Desde el cuarto de mercancías, Riolu emanaba algo de aura -(¡La encontré! ¡Es leve pero está muy cerca!)- se dijo para luego ir hacía el cuarto pero cierto Pokémon lo sorprende.
-¿Vienes por más? ¡Está vez no te dejaré sobrevivir!- menciona Drapion abriendo los brazos.
Paralelamente, Weavile recorre el otro pasillo -(Este lugar es enorme para buscar entre dos)-.
De pronto una Pokémon salía por sorpresa desde una esquina y le da una rápida patada -¿No tuvieron suficiente?- pregunta Sneasler vivaz, creyendo que eran más cazadores.
Weavile recibía la sorpresiva patada haciéndolo retroceder, pero mayor fue su sorpresa al reconocer al Pokémon que tenía en frente.
-¿¡Ma-maestra Sneasler!?- exclama sin poder creerlo.
En el exterior, Articuno y Salamence tendrían una batalla aérea muy pareja -Fue suficiente- la Cazadora J se pondría seria y toca la Piedra Llave que traía en su brazalete.
Delante de Salamence aparece una Salamencita que libera unos rayos de luz que se conectan a los emitidos por la Piedra Llave, causando que el cuerpo de Salamence brille y consiga Mega Evolucionar soltando un rugido y su símbolo de Mega Evolucion sobre él.
CONTINUARÁ
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