Terminando de contar solo quería dormirme pero aún faltaban dos de mis sentimientos que contarán cómo eran, pero ellos solo se peleaban entre si, ahí solo me pongo a recordar cómo encontré a esos sentimientos mientras ellos se peleaban por una tonta competencia de quien contaba primero su sentimiento.

Fue luego de que salimos del volcán, todos estaban más que felices, la Verdad nos guiaba a todos, el odio siempre caminando solo, la celos siguiéndolo a todos lados, la locura mas loca que nunca con el amor, el deseo y la pasión mejor no digamos como andaban...

La conclusión es que todos caminamos unos minutos llegando a una zona donde el piso era de oro y plata, todo dividido, llegando a una casa muy grande, donde tenia muchos muebles, con trofeos de primer lugar, y de segundo.

—¡Estamos el la casa de los hermanos! —decía la conciencia mientras entrábamos todos— aquí vive el triunfo y su hermana la Envidia —termino de decir la conciencia, tocando los trofeos, los cuales solo noto que los de primer lugar brillaban demasiado.

Pasando por la casa no encontraron ningún sentimiento, en eso se escuchan unas voces que venían peleando.

—Mejor es escondernos, para escuchar lo que dicen —dijo la verdad abriendo una pared cual tenia doble fondo, que servía para escuchar escondidos dentro de los muros.

—¿Qué es esto? ¿Por qué hay esto aquí? ¿Por qué nos escondemos aquí? —dije preguntando.

—Es la pared doble que hizo Creatividad porque siempre veníamos a visitar a la Envidia, nos escondemos siempre acá para que el Triunfo no nos vea, porque el Triunfo no tiene amigos, por eso nos escondemos aquí —Dijo la verdad.

—Pero la envidia que yo sepa casi nunca tienen amigos —solo añadí.

—¡Silencio! Solo escucha —dijo la Conciencia, la Verdad se puso también a escuchar, la Locura simplemente estaba muy abrazada del amor no le importaba nada más, el Amor solo estaba tranquilo, el Odio odiaba estar parado muy incómodo, la Celos solo lo miraba a los ojos al Odio muy apegada a él, el deseo y la pasión mejor no digamos como estaban...

—¡Otra vez gane el primer lugar! No eres rival para mi —dice el triunfo muy feliz entrando a la casa.

—Si, yo gane el segundo lugar otra vez pero algún día ganare un premio del primer lugar —dijo la envidia, muy decaída pero con un espíritu de seguir adelante.

—No, nunca tendrás el primer lugar de nada, mientras yo este vivo —dijo el Triunfo haciendo bajar el autoestima de su hermana. Su voz era muy fuerte, sentía como tenía aires de grandeza y superioridad. Después de eso él solo se fue votando su trofeo al suelo.

—¡Calma yo te cuidare! —susurra la envidia, dejando su trofeo de segundo lugar y alzando el trofeo de su hermano. Luego añade con un aliento decaído y ánimo muy bajo. —¡Quedaras como lo mereces! bien brillante y hermoso — limpiándolo solo mira los demás trofeos— algún día tendré algo que diga que yo soy el primer lugar de algo, como envidio a mi hermano que no valora sus premios —susurraba la envidia mientras miraba los trofeos con unos ojos lagrimosos, después solo agarra el de ella y lo pone junto al trofeo de su hermano

El Triunfo vuelve donde ella al escuchar que hablaba sola.

—Limpiaste mi trofeo de nuevo, que bien mínimo así tocas un primer lugar, el mío —decía con risa, esa risa fingida de una burla innecesaria.

—No digas eso, yo algún día tendré algo mío, un primer lugar que tú jamás conseguirás —decía la envidia mientras sus lágrimas salían lentamente.

—¡Nunca tendrás un primer lugar de nada! Siempre serás la envía de mi triunfo, serás mi sombra cuando tape la luz —alardeaba el triunfo muy serio.

—Yo tendré algo algún día, ya veraz —dijo la envidia con animo bajo, su ánimo bajaba hasta el suelo.

—Que no, nunca —dijo el triunfo alzando la voz.

En eso decido salir de aquella pared porque no me gusto como hablaba el triunfo, aunque no tenia algunos sentimientos como la ira, pero si podía razonar y saber que estaba mal lo que le decía a su hermana.

—Ella tiene un primer lugar que tu nunca tendrás —decía, en ese momento estaba guiado del sentimiento la Verdad.

—¿Qué cosa, quién eres tú? —dijo el triunfo.

—Mi nombre es Leonel, tu hermana tiene el primer lugar en mi corazón, ella tiene mi cariño o más que tú en eso ella te gana y tú nunca la superaras —dije sintiendo amor— Yo seré su hermano, ya que tú no la quieres, solo le das insultos y bajas su animo, cuando ella lo debería tener muy alto —dije, mientras agarraba la mano de la envidia.

—No te creo que seas Leonel, quién me lo confirma y yo la quiero a mi hermana pero primero quiero a mis logros —resalto el Triunfo.

—El es Leonel —Dijo la verdad saliendo de la pared.

—¡Yo lo confirmó! —Dijo la locura , con el amor.

—Y yo igual, con mi novio el odio te lo confirmó —Dijo la celos.

—No me mires yo odio esto —Dijo el odio.

Todos salieron menos el deseo y la pasión por que... Luego la envidia abrazo a Leonel

—¿Eres tú? Si lo eres, volviste, no sabes cuanto te extrañe, siempre supe que tenia algo mío o un logro mío —Dijo la envidia.

—Disculpa, estuve ganando trofeos para ti mientras regresabas —Dijo el triunfo.

Yo no entendía nada, entre todo solo les pedí que si querían acompañarme, obviamente no podía pedirles que cambien ese era su propósito en este mundo, ambos aceptaron seguirme, desde ese momento el Triunfo comenzó a sentir envidia, por saber que la envía había ganado un poco más de cariño sintiendo por primera vez la envidia triunfo, el triunfo de estar cerca mío y tener un poco más de cariño.