Ignoré su pregunta y recorrí todo el apartamento. Es bastante grande y lujoso, y las ventanas están descubiertas, dejando a la vista toda la ciudad llena de luces. Las ventanas largas me recuerdan a la habitación de Lux en la casa de Harry. Me da miedo asomarme en estás ventanas porque estamos en el último piso del hotel y le temo a las alturas.

"Entonces me debes una palabra mágica por haberte salvado del policía, pequeña maleante." Su voz me sobresaltó, me giré para quedar frente a él y le sonreí.

"Gracias." Él me devolvió la sonrisa, es muy bonita y parece un hombre amable.

"¿Dónde están tus verdaderos padres?" Preguntó tomándose su barbilla.

"Mi mamá murió, y mi papá está aquí." Respondí simple. Él fruncio el ceño.

"Lamento mucho lo de tu mamá." Hizo una mueca con la boca.

"Está bien, ya pasó. Con el tiempo duele menos." Me encogi de hombros.

"Entonces, ¿tu papá está en el hotel y te permite correr libremente por los pasillos y entrar en habitaciones de personas desconocidas? Eso es muy peligroso, hay muchas personas malas en el mundo, no puedes entrar en cualquier habitación para jugar a esconderte." Me reprendió y bajé la cabeza.

"Mi papá no sabía que yo estaba corriendo, yo no entré en cualquier habitación, y tampoco estoy jugando a esconderme." Se cruzó de brazos.

"De igual manera debe estar muy preocupado buscándote..." Lo interrumpí.

"No. Él ya me encontró." Mi papá fruncio el ceño aun más y yo comencé a reír, es muy gracioso.

"No entiendo, a ver... Dijiste que él no sabía que estabas corriendo. ¿Cómo te encontró si todavía estás en mi habitación?" Puse los ojos en blanco. Tiene muy poca capacidad de análisis.

"Yo soy tu hija." Dije finalmente. Él levantó una ceja y soltó una risita extraña. No sé si está riendo o llorando. Está muy tenso.

"¿Qué?"

"Mi nombre en Georgina Payne y tú eres mi papá." Su expresión se puso seria y dejó de reír.

"¿Quién dices que es tu papá?" Murmuró.

"Tú eres mi papá." Negó con la cabeza.

"No. Eso no puede ser." Me paré frente a él.

"Si, es cierto."

"¿Una hija? No. Es ridículamente imposible." Volvió a reír con el ceño fruncido. "¿Quién te trajo hasta aquí?"

"Vine sola porque te quería conocer en persona. Ya te había visto en la pantalla, pero quería conocer al hombre que me trajo al mundo. Tú." Él abrió la boca para decir algo, pero volvió a cerrarla. Todavía tiene cara de confusión. Tomó aire por la boca antes de responder.

"Dejame corregirte, los hombres no traen niños al mundo, las mujeres lo hacen. Y yo solo he tenido tres novias en toda mi vida y ninguna de ellas tiene hijos..." Lo interrumpí.

"El nombre de mi mamá era Barbara." Sus pupilas se dilataron.

"Diablos. Barbara Parker." Se tomó el puente de la nariz y suspiró profundo. "¿Por qué me estoy enterando ahora? ¿Por qué ahora y no el día que naciste? ¿O el día que supo que estaba embarazada?" Levantó la mirada hacia el techo. "¡POR EL AMOR DE DIOS, BARBARA! Esto es muy cruel. Es horrible." Bajé la cabeza, ocultando mi rostro. Él piensa que soy horrible. Estaba a punto de llorar cuando agregó algo más. "Tú no eres horrible, tú eres linda. No hablaba de ti, decía que la situación es horrible." Dijo mirándome con ternura y sonreí.

"Gracias."

"Pero tu mamá cometió un error al guardar este secreto. Es cruel, ¿sabes? Yo no quiero conocer a mi hija cuando tiene... ¿Cuántos años tienes?"

"Siete."

"¡Cuando tiene siete años, por Dios! No es la manera correcta de conocer a un hijo. Esto no es justo para mí, y mucho menos para ti." Negó con la cabeza. "Perdón. Quiero que sepas que yo nunca supe que tu madre estaba embarazada de mí. Yo no quise abandonarte ni estar ausente en tu vida. Yo no tenía idea. Perdón." Ahora tiene cara de sufrimiento.

"Está bien."

"No, no está bien. Soy una mala persona, me siento como un imbécil. Yo..." Tragó fuerte. "Yo no soy un capullo, no sería capaz de abandonar a una mujer embarazada y no responder ante eso. No soy esa clase de persona y me siento horrible al saber que indirectamente lo hice. Perdoname." Comenzó a sollozar y supe que estaba llorando cuando se cubrió la cara con ambas manos.

"No llores, yo te perdono." Dije para tranquilizarlo y luego lo abracé cuando noté que seguía llorando.

"Gracias, eres muy considerada... Pero yo no puedo perdonarme. Me siento mal. Yo pude ser un buen padre y tu madre no me dio la oportunidad de intentarlo." Otro sollozo.

Tal vez él si es mi papá. Yo soy muy llorona, igual que él. Tenemos algo en común.

"Puedes ser un buen padre todavía. Mi mamá murió... Y te necesito." Hice puchero. Mi papá se quitó las manos de la cara y se inclinó hasta quedar a mi altura. Me tomó por los dos hombros antes de hablar.

"Aquí me tienes." Se limpió las lágrimas y volvió a sonreír. "Y siempre me tendrás." Asenti con la cabeza.

Él se alejó y entró en una de las habitaciones, pero no tardó mucho tiempo.

"Georgina, ¿dónde están tus maletas?" Preguntó. Yo miré a mi alrededor pero me di cuenta que no traje mi maleta conmigo. La dejé en la casa que rentamos para las vacaciones. Dejé toda mi ropa y también mis juguetes. Me golpeé en la frente con la mano antes de responder.

"No tengo." Él levantó ambas cejas sorprendido.

"¿No tienes? Oh por Dios. ¿Estás en la calle sin nada? Que horror, seguramente no has comido en semanas. ¿Que clase de monstruo soy?"

"No eres un monstruo, los monstruos son feos." Una sonrisa se dibujó en su cara. Luego sacó su teléfono de su bolsillo.

"Voy a pedirte algo de comer, debes estar hambrienta. Te dejaré pedir. Dime lo que quieres comer." Lo pensé cuidadosamente.

"Helado de fresa con chispas de chocolate." Respondí.

"Eso no. Primero tienes que comer, comida nutritiva. Eso que nombraste es un postre y tu debes comer para alimentarte."

"Oh, entonces quiero... Puré de papas, con hígado de res cocido, ensalada de frutas, papas fritas con salsa de tomate, y jugo de mango." Él sonrió, entonces supe que había hecho una buena elección de comida nutritiva.

"Eso es algo que yo pediría. Pediré lo mismo para mí." Dijo marcando un número en su móvil.

"Pero no estamos en un restaurant." Comenté observando todo a mi alrededor.

"Pero lo pediré a domicilio. En el hotel tenemos un restaurant, y podemos pedir lo que sea para comer en las habitaciones." Abrí la boca sorprendida y él rió.

"Tú eres el dueño del hotel, ¿verdad? Por eso el hotel tiene tu nombre y te permiten comer en tu habitación."

"Así es. Pero cualquier persona puede pedir comida desde su habitación, no sólo yo. Es una gran ventaja para nuestro hotel." Dijo colocándose el teléfono en el oído. "Habla Liam, quisiera pedir mi cena. Ésta noche tengo una invitada especial." Me guiñó un ojo.

~*~

Terminó el concierto y Zayn siguió buscando a Gina hasta por debajo de los asientos. No podía haber salido de allí. Todavía el lugar no se desocupaba, las personas corrían de un lugar a otro, dificultándole la búsqueda.

"Señor, su esposa está preguntando por usted y su hija." Anunció el guardaespaldas de Perrie. A Zayn se le subió el corazón a la garganta.

"No le digas nada de esto... Gina se perdió." Confesó nervioso. "Perrie está embarazada y si se entera de esto le puede dar un ataque. Entonces yo sería el peor padre del mundo por perder a un hijo y matar a otro que ni siquiera ha nacido, todo en un mismo día." Tiró de su cabello con fuerza.

"¿Entonces que le digo?"

"Dile que salimos de compras. Yo no volveré sin la niña, Perrie nunca sabrá que se perdió. Voy a encontrarla. Debo encontrarla." Dijo reteniendo sus lágrimas. "Fue mi culpa... Nunca puedo hacer nada bien. ¿Tu no la has visto? ¿En los camerinos, o por alguna parte corriendo? Tal vez le gusta jugar a esconderse, no lo sé." El guardaespaldas negó con la cabeza.

"No. No la he visto." Zayn gruñó, frustrado. "Le diré a su esposa que no lo he visto por aquí."

"Muy tarde. Ya lo estoy viendo." La voz de Perrie lo tomó por sorpresa. "¿Cómo pudiste perder a Gina?" Zayn abrió los ojos como platos. El guardaespaldas se quedó para cuidarlos.

"No lo sé, yo sólo... Hicimos una promesa. Ella me buscaría en la tienda de hot dogs al salir del baño. Yo me confié, pero nunca llegó a la tienda." Bajó la cabeza.

"Oh por Dios. Sabía que algo malo estaba pasando. Zayn, tenemos que encontrarla antes de que sea más tarde. Casi son las nueve de la noche."

"¡Lo sé! Ya la busqué aquí pero no está. Y también les pagué a unos policías locales para que me ayudaran con la búsqueda, y no han encontrado nada."

"Salgamos de aquí." Dijo Perrie tomando la mano de Zayn y corriendo hacia la salida.

Salieron a la calle y se preguntaron a dónde habría podido esconderse, pero ninguno tuvo una respuesta.

"Tal vez deberíamos buscar en el hotel de Liam." Propuso Perrie, señalando el hotel frente a ellos.

"No. Un hotel no es precisamente el lugar preferido donde un niño querría refugiarse. Tal vez un parque o un centro comercial, pero no un hotel aburrido." Opinó. Perrie asintió con la cabeza.

"Pero podríamos pedirle ayuda, él nos ayudaría a encontrarla más rápido." Zayn se negó.

"No. Liam debe estar muy ocupado planchando sus corbatas y construyendo más hoteles en la misma localidad. ¿Quién construye tantos hoteles en un mismo lugar? ¡No es necesario!" Perrie levantó una ceja. "No necesitamos su ayuda. Buscaremos en todos los parques y centros comerciales de la ciudad." Dijo caminando lejos del hotel.

"No sé hasta que extremo puede llegar tu orgullo." Perrie lo siguió.

Esperaban encontrarla antes de la media noche. Pero terminaron de buscar a las 2:00am, sin ningún resultado. Ambos se quedaron durmiendo en un hotel cercano esa noche, para continuar con su búsqueda al día siguiente.

~*~

Una chica entró en la habitación de mi papá con una bandeja rodante, dejándola en medio de la sala. Él le agradeció y le dio unos billetes antes de despedirla y desearle buenas noches.

Él movió la bandeja y yo lo seguí hasta el comedor. Dejó los platos en la gran mesa, y luego abrió una silla, invitándome a sentar. Yo lo hice y él se sentó frente a mi.

"Buen provecho, Georgina." Dijo levantando su copa, así que yo levanté mi jugo de mango. Él soltó una risita antes de chocar mi vaso con su copa y beber de ella. "¿Con quién vives?" Preguntó.

"Por ahora vivo contigo." Tomé un cuchillo para intentar cortar el hígado. Mi papá comenzó a toser, ahogándose, y rápidamente me quitó el cuchillo de las manos.

"Deja eso, yo lo corto. Puede ser peligroso." Asentí con la cabeza. "Ahora vives conmigo, ¿pero antes con quién vivías?"

"Con una pareja." Me cubri la boca en cuanto dije las palabras. Él dejó de cortar el hígado para mirarme.

"¿Te escapaste? Eres traviesa." Me encogí de hombros y él siguió cortando.

"Quería conocerte."

"Y me halagas, pero no quiero tener problemas con la ley. Deberíamos ir a la estación de policía y contarle tu historia. Esa pareja debe estar buscándote mientras tú estás aquí conmigo. ¿Ellos son tu familia? ¿Familia de tu madre?" Negué con la cabeza.

"Familia adoptiva." Respondí rápido.

Mi papá terminó de cortar el hígado, y rodó el plato hacía mí. Lo cortó en muchos pedazitos como lo hacía mí mamá. Sonreí al recordarla.

"Gracias, papá." Dije y él asintió con la cabeza.

"No hay problema."

El resto de la cena transcurrió en silencio. Él no volvió a hacer más preguntas y me sentí aliviada por eso. Mañana trataré de convencerlo de no ir a la estación de policías.

Me mostró una habitación para instalarme y lo primero que llamó mi atención fueron los cuadros colgando de las paredes. Autos lujosos, barcos, motos, aviones.

"¿Son tus autos?" Pregunté señalando uno de los cuadros.

"Si, todos son míos." Dijo orgulloso.

"¿Y también los aviones y los barcos?" Asintió.

"Sip. Tengo un yet, un helicóptero, un yate, una moto acuática, tres autos, una limusina, y una moto." Abrí la boca impactada.

"¡WOOOW! Lo único que te falta tener es un camión de mudanza, un camión de basura, un tractor, un tanque de guerra, un submarino, un autobús, un camión de bomberos, un transporte escolar, y un cohete." Dije impresionada. Él soltó una carcajada fuerte.

"También los tuviera si quisiera, pero no los necesito." Caminó hacia la enorme cama en el centro de la habitación y abrió la manta. "Ven a dormir."

Me quité los zapatos y salté sobre la cama. Él me cubrió con la manta y me observó de pie.

"¿Algún día me llevarás a viajar en todas esas cosas? Menos en el yate. No me gustan los barcos. Me dan miedo. Yo no sé nadar... Pensé que sabía hacerlo, pero he perdido la práctica."

"Por supuesto. Podrás viajar conmigo en todo lo que quieras, y te enseñaré a nadar para que aprendas a surfear." Dijo. Yo me quedé en shock y él comenzó a reír. "Descansa."

Apagó la luz y salió de la habitación. Estoy feliz de estar aquí, mi papá parece un hombre muy divertido. Me muero por aprender a surfear.

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Aquí tienen nuevo capítulo. No lo subi antes porque no lo había terminado. ¿A quién le gustó el capítulo? ¿Que les pareció la reacción de Liam? Compartan su opinión, me gusta leer sus comentarios :))

Capítulo dedicado a:

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