Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capítulo 3

IIMPORTANTE: La historia ha sido publicada por la Editorial Samarcanda, del Grupo Lantia Publishing, por lo que solo puedo dejar los primeros 8 capítulos en la plataforma. ¡Dale una oportunidad y no te arrepentirás! Y si te han gustado estos primeros capítulos o ya las has leído, no olvides dejar un comentario, recomendación, like o cualquier otra muestra de apoyo. Vuestra difusión es mi mayor recompensa.

Puedes adquirirla pidiéndola en tu librería habitual, en Amazon, Libros.cc, GooglePlay, Kobo, Agapea, El Corte Inglés, iTunes, La Casa de Libro, Fnac:

Físico: https://www.amazon.es/En-Busca-Esperanza-Marina-Tirado/dp/8417103686/ref=tmm_pap_swatch_0?_encoding=UTF8&qid=&sr=

Ebook: https://www.amazon.es/En-busca-Esperanza-Marina-Tirado-ebook/dp/B07HHG95GR/ref=tmm_kin_swatch_0?_encoding=UTF8&qid=&sr=

GRACIAS por vuestra comprensión, por vuestro apoyo, por creer mucho más en mí de lo que yo lo hago, pero sobre todo, gracias por hacerme volar. ¡Os adoro!

....................................................................... 

¿Recordáis que os iba a ir diciendo los puntos que llevaron a algún puerto esta historia? ¿No? Pues os lo dije. Y sí, estoy de acuerdo con ustedes, en el capítulo anterior no os di la brasa con esto... Para mi defensa diré que hasta este momento no tenía ningún punto al que quisiera llamar "punto número tres". Pero lo he encontrado, atentas y atentos, es sublime:

Punto número tres: No le des color a lo que no lo tiene, dale importancia a lo verdaderamente importante.

¿Qué? ¿Cómo os habéis quedado? Pues sí, señores y señoras, lo he descubierto porque he discutido con Clara y porque se me ha caído algo al suelo. Sé que suena raro, pero os cuento...

"No hables con borrachos"... Es lo que me dijo por teléfono Clara a la mañana siguiente de hablar con Alex. Exactamente fue hace dos horas y de este modo:

—¿Pero a ti qué coño te pasa? ¿Cómo te digo que no hables con extraños y menos con borrachos?

Casi pude imaginar cómo al otro lado de la línea, sus ojos se achicaban hasta parecer dos rayas oscuras. Sí, ese gesto que ya os conté y el cual me da un pelín de miedo.

—Te quieres relajar. No parecía tan borracho, estaba aburrido y no tenía con quien hablar. No es tan malo. Además, parece buen tipo, es militar y le gustan los perros. No creo que me mate y más desde tan lejos.

—No me gusta. ¿Qué es eso de aparecer de la nada? Así no se conoce a la gente por casualidad. A las personas te las encuentras por la calle y te chocas con ellas...

—Sí, porque vivimos en una película —la interrumpí—. Ya que estamos, al chocar con la persona en cuestión, se nos podría haber caído algo de las manos y al recogerlo juntos, nuestras manos podrían rozarse y de ese modo tener una conexión asombrosa.

—Eres insufrible cuando te pones en modo escritora.

—Desde lo de mi abuela no escribo y lo sabes.

—Pues igual ya es hora.

—Pues no quiero.

—Entonces, ¿para qué estás en tantos grupos de escritura en Facebook?

—Tampoco son tantos. Además, mayormente lo que hago es leer lo que los demás comparten.

—Al modo poco egoísta.

—¿Cómo?

Prepararos, porque hasta este momento de la llamada, habíamos estado hablando en un tono normalito, pero de repente y sin venir a cuento, entramos en la famosa competición de "haber quien grita más" elevando cada vez un poco más el tono hasta acabar a grito pelado.

—¡Nada!

—¡No, ahora dilo!

—Pues que si lees lo de los demás y perteneces a esos grupos, podrías compartir lo tuyo también.

—¡No me apetece!

—Pues eso, ¡que es muy poco egoísta de tu parte!

—¿Me estás llamando egoísta?

—Pues mira, ahora que lo dices...

—Pues estupendo, me parece perfecto.

—¿El qué, eh?

—¿Eh, de qué?

—¡¿Eh?!

—¡¿Eh?!

—¡Adiós!

—¡Adiós!

Y ahí se acabó nuestra conversación esta mañana.

¿Puede que esté un poquito molesta por eso? Puede, no lo niego. Pero es que me ha llamado egoísta. ¿Lo soy? No lo creo. ¿Una persona egoísta cuida a su abuela enferma hasta el último día de su vida? No, una persona egoísta la hubiera dejado en una residencia o algo así.

No creo que sea egoísta y punto. Ella sabe mejor que nadie todo lo que pasé en el último año de vida de la persona a la que más he querido y sabe lo que he pasado en este último año sin ella. ¡Ella lo sabe! Lo sabe.

¿Ya no recuerda como fue ese año? Mi amiga lo debe de recordar. Me tiré las veinticuatro horas del día con ella en ese hospital. Así que, cuando alguien me llama egoísta... ya puede ser Dios, me jode, me jode bastante.



Dos horas después de "la discusión" con Clara, estoy muerta de calor. Me bajo de mi bici y admiro el paisaje. Mi respiración es acelerada y quema en mi garganta. Los músculos de mis piernas arden.

Me he metido una buena paliza en bici, pero esto lo recompensa. La adrenalina hace que mi cuerpo se sienta feliz. El aire en la cara es lo mejor de todo y si ya el camino te muestra paisajes como esté... Bueno, entonces el mundo parece un poquito más bonito.

Un campo de trigo seco, del color del sol, se extiende ante mí y se mece por el viento simulando las olas del mar. El sonido que produce es placentero y los cantos de los pájaros hacen que la estampa sea ideal... Está atardeciendo y el cielo ha decidido vestirse hoy con tonos rosados. Mi abuela decía que eso era porque la virgen estaba planchando. Sonrío, no puedo evitarlo.

Se respira tranquilidad. Aquí el mundo se ha parado y la calma del momento hace que tome aire y lo suelte lentamente. No sé si esto es lo que todos denominan "paz", pero se le parece bastante, ¿no creéis?



Cuando llego a casa, estoy reventada, me ducho, como y me pongo a ver una película de esas malas que echan los domingos por las tardes. Me encantan. Mira que son malas, pues me las veo. Es verdad que después las critico, pero me gusta quedarme dormida con el sonido de fondo de una película cutre... Venga, que no pasa nada, cada uno tiene sus cosas raras.

Una hora más tarde me despierta el sonido del móvil y lo cojo aún soñolienta. Miro el mensaje de Facebook que ha osado interrumpir mi siesta... Es el bilbaíno.

"Lo conseguí"

Me alegro por ti, pienso. Me ha despertado y aunque la salida en bici ha ayudado, todavía estoy molesta con Clara. Estar refunfuñando todo el día no es lógico, pero mi amiga es lo único que tengo realmente, si me molesto con ella, me molesto con el mundo en general.

"No me vas a preguntar el qué?"

"Venga, que Facebook es un chivato y me pone que lo has leído"

Sacudo la cabeza, me hace gracia el comentario. Me incorporo y le escribo:

"No vas a parar hasta que te pregunte, verdad?"

El móvil vibra en mis manos, deslizo el dedo sobre él y leo:

"No. Resulta que lo del dolor lo llevo ahí, ahí. Pero lo de llegar a mi casa, sin hacer un "Melendi" en el avión, conseguido"

Sonrío. Este tío no es normal. Escribo:

"Bien hecho ; )"

Dejo el móvil en el reposa brazos del sofá y voy a la cocina. Me sirvo un vaso de leche fría y, pormenorizadamente, esto es lo que pasa: Me apoyo en la encimera, me bebo mi leche fresquita pensando en lo extraño que es que el bilbaíno siga hablando conmigo sin conocerme de nada, el móvil suena, escucho el porrazo que da contra el suelo y voy corriendo al salón como si fuera a rescatarlo de una muerte segura, pero cuando llego, mi IPhone está, como bien había imaginado, en el suelo...

¡Joder, no!

Venga sí, haced como si ustedes no hubierais actuado así. Sí, claro, soy yo que soy muy exagerada con el IPhone... La esquina de la pantalla se ha rajado. ¡Me voy a cagar en la madre del bilbaíno y en toda su descendencia! ¡Joder! Le paso un dedo por la fisura en la pantalla como si se fuera a arreglar con mi "toque mágico"... Y, ¡uf! ¡Qué cabreo tengo!

Me fijo bien en la pantalla esperando ver un mensaje de Facebook, del bilbaíno, del culpable, pero no hay ningún mensaje de Facebook, es uno de WhatsApp. Es Clara:

"Es mi cumpleaños y no me has dicho nada. Por eso te he llamado egoísta. No tiene nada que ver con lo de la escritura. Sé que no eres egoísta, pero me ha dolido que no te acordaras"

El corazón se me encoje y suelto un sonido lastimero proveniente de mis pulmones... ¡Mierda! ¿Cómo he podido olvidarlo? Eso no se olvida. ¿Qué me pasa? La llamo y sé, incluso antes de hablar, que mi voz va a temblar...

—¡Felicidades! Perdóname —pronuncio en cuanto descuelga.

—No pasa nada, Espe...

—Sí que pasa, lo siento mucho. No sé cómo ha podido pasar. Nunca se me ha olvidado.

—Has tenido un año difícil sin Libertad, es normal.

Libertad era mi abuela. Creo que no os he dicho aún su nombre porque ni siquiera lo he pronunciado todavía en voz alta. No la quiero liberar. Suena absurdo, pero en alguna parte de mi atontada mente, pienso que no debo decir su nombre... Su nombre significa algo importante. La libertad es importante, si digo su nombre, quizás, le estoy dando la libertad para irse sin mí, para irse de mis recuerdos... Y entonces, sí que estaré realmente sola... Sé que es estúpido, sé que parece una superstición tonta e infantil. Pero, dadme un poco de respiro. Soy consciente de tener cosas raras, pero ¿quién no las tendría habiendo vivido mi vida?

—No lo justifiques —le respondo a mi amiga.

—Vale, eres idiota.

La escucho emitir una risita en voz baja y eso provoca que una leve sonrisa aparezca en mi cara.

—Eso me gusta más, Clara.

—Te quiero, estúpida. Más vale que me prepares algo bueno para celebrar mi cumple.

—Dalo por hecho. Te quiero, te quiero, te quiero.

—No me pelotees y hazlo.

Cuelga y me quedo seria mirando mi móvil.

Quizás sí que soy egoísta. A lo mejor uno no es o es egoísta completamente. Probablemente no lo soy en muchos aspectos y en otros sí. Lo más seguro es que la Espe de hace un año no lo fuera en muchísimos aspectos y la de ahora lo sea en muchos otros. No me gusta esta Espe, yo no soy así. Última vez que te comportas así, me digo, y menos con Clara.

Conozco a Clara, se ha mosqueado pero ya se le ha pasado, por eso me ha escrito. Le duran los mosqueos dos segundos, pero a mí no, yo me siento realmente mal. Tengo que recompensárselo de alguna forma, pero esto no hay Dios que lo arregle. Y de todas formas, sé que igual que ella perdona en dos minutos, yo voy a estar dándome la lata con esto tres meses.

¡Ya lo tengo! Le voy a hacer una fiesta. Sí. Voy a llamar a todas sus amigas, que también son mías, pero no tanto. ¡Ya veréis, va a flipar! Miro el móvil... Seguro que ha sido el karma. Por ser una gilipollas integral. Me lo tengo merecido, eso y más.

De pronto mi IPhone herido vibra y pego un respingo. No lo esperaba. Voy a Facebook y veo el mensaje de Alex. Es una foto de sus cinco perros. Todos están con cara de felicidad, mirando a la cámara con sus ojillos muy abiertos. Sonrío. Ahora me siento mal por haberme cagado en él y en todos los suyos. El móvil ha vibrado por el mensaje de Clara y se ha caído porque soy una estúpida que lo ha dejado donde no debía.

Le escribo:

"Son preciosos, se les ve contentos de verte."

¿Qué hará con los perros cuando está fuera? ¿Siempre se los deja a sus padres? Porque a los militares los destinan muy lejos, ¿no?

"Verdad? Bueno, como llevas lo del dolor? Te has dado cuenta ya que es imposible escapar de él?"

"jaja no"

No escribe y la curiosidad me llama así que le digo:

"Oye, dijiste que eras militar. Te destinan lejos?"

"Te refieres a la guerra?"

"Sí o a algún otro lugar"

"Bueno, ahora mismo estoy aquí. Si me llaman voy, pero no lo harán en un tiempo"

"Ah, entonces es algo parecido a lo mío. Yo trabajo dos días de mañana, dos de tarde, dos de noche y descanso cuatro"

No sé por qué le estoy contando esto, supongo que por explicarme. Añado:

"Debe ser algo parecido a los turnos, cierto?

"; )"

"jajaa voy a interpretar esa carita como un sí. Venga, ve a descansar que estarás cansado del viaje y resacoso por otras cosas"

"Adiós, Esperanza"

"Adiós, Alex"

Justo ahora mismo que lo estoy despidiendo me doy cuenta que para ser tan cotilla no he bicheado su Facebook. Lo intenté cuando lo acepté ayer antes de ir a ver la película, pero tenía fotos bloqueadas.

Lo busco entre mis amigos, pincho en su nombre y ya estoy viendo su muro. La foto de la moto negra sigue en su perfil, tal y como he estado viendo hasta ahora cada vez que hablamos. En la foto de biografía están sus perros. Es una foto de todos en un campo verde... Es precioso. Los campos y bosques del norte son hermosos.

Voy bajando y leo algunas publicaciones. Casi no debe meterse en Facebook, la mayoría son de temas relacionados con el ejército o el deporte. Debe ser muy deportista, dijo que le gustaba nadar. Me voy a las fotos y pincho. Tiene muy pocas y no sale en ninguna claramente. Hay varias en las que está lejos, con la moto o nadando. En las que está lejos se le ve de espaldas o perfil, pero por mucho que amplio en mí móvil, no se le ve definido, es algo borroso. En las fotos con la moto tiene el casco puesto y en las que está nadando, no se le ve la cara tampoco.

Lo que está clarísimo es que está buenísimo. Puede ser el más feo del mundo, pero tiene un cuerpazo... ¡Joder! ¡Cómo está el bilbaíno! ¡Vaya con Alex! Como se lo enseñe a Clara, primero deja a Javi y después, deja de tener dudas sobre lo malo o bueno que puede ser hablar con desconocidos. ¡Ja! Clara no deja a Javi por nada del mundo. Pero oye, tampoco es ciega. ¿Qué persona cierra los ojos ante este adonis? Es moreno y grande. No sé cuánto medirá, pero parece muy alto y está bastante marcado, nada exagerado, pero está fuerte... Supongo que su profesión lo exige.

Por alguna razón, la imagen de un chico moreno viene a mi mente. Ya os lo he mencionado antes, pero qué vergüenza me da que él se cuele en mis recuerdos. Es algo extraño, después de tantos años y aún puedo rememorar la escena nítidamente. Él saliendo de la piscina, sacudiendo la cabeza y haciendo que su pelo negro se quede revuelto...

Con lo descarada que era mirándolo y él nunca me llamó la atención por hacerlo. El chico era mayor que yo, podría haberlo hecho, me podría haber reñido. Sin embargo, muchas veces se quedaba mirándome el muy idiota, sin apartar la vista hasta que yo lo hacía o me veía obligada a hacerlo porque mi entrenadora sí que me reñía.

Como la tonta que soy, noto el calor subiendo a mis mejillas. Respira Espe, te encuentras a ese chico por Sevilla y te da un telele. Suspiro, porque ante tal imagen hay que suspirar. ¡Puf! ¡Qué barbaridad!

Volviendo a las fotos de Alex... Lo peor es que tampoco tiene ninguna foto hecha para lucirse, pero sí se puede apreciar, nadando o con ropa, que está tremendo. Todas las fotos parece que se la han hecho. No tiene las típicas fotos que se hace la gente a sí misma. Bueno, yo también tengo muy pocas y las que tengo son con Clara, los compañeros y compañeras del trabajo y, por supuesto, las fotos típicas cuando hemos salido de fiesta.

Hmm... Aun así es raro. ¿Por qué no se le ve en ninguna foto la cara? Igual es súper feo. Me rio de mi chiste. ¡Qué mala persona soy! Con lo simpático que parece Alex. Bueno, quizás no se le puede ver la cara por el trabajo. Cierro Facebook y también el mundo extraño de hablar con desconocidos.

Debería ir organizando lo de Clara para el fin de semana que viene, así que abro el WhatsApp y hago un grupo: "Fiesta para Clara". Sí, me he quebrado la cabeza con el nombre.

Meto a todas las amigas de Clara, su prima y a quien sé que ella querría ver. A todas les parece genial la idea, así que en poco tiempo me han confirmado casi todas. Quedaremos el viernes que viene... Hace tiempo que no salgo. ¿Me habré vuelto ermitaña?



Horas más tarde, recibo un WhatsApp de Javi, el novio de Clara.

"jajjaa Le has mandado flores y un libro? Pero tú que eres? Su novia?"

Me rio y le contesto:

"Qué? ¿Aun habiéndome olvidado de su cumple, mi regalo ha sido mejor que el tuyo, eh?"

"No hay quien compita con vuestro amor jaja, no se me ocurriría ponerme en medio"

Me rio, pero pronto me pongo seria y le escribo:

"Lo siento, Javi. Sabes que nunca me he olvidado"

"Que no te machaques más. Te queremos"

Me muerdo el labio, Javi siempre sabe qué decir. Se merecen el uno al otro.

"Y yo a ustedes"

Y, entonces, me doy cuenta de lo difícil que es hacer que sólo Clara esté en mi vida, lo difícil que es alejarse para no sufrir... Porque sí, quizás mi amiga es la que más me importa en este momento, pero también quiero a otra gente, como, por ejemplo, a la propia familia de Clara. Si a ellos les llegara a pasar algo, yo también sufriría, los conozco desde que soy una niña...

La madre de Clara se llama Antonia y es la mujer con más temperamento del mundo. En cambio, el padre, Manuel, es un trocito de pan. El hermano pequeño, Tomás, tiene ya dieciocho años y sigue encaprichado conmigo. ¿Y qué decir de los abuelos maternos de mi amiga? Rafael y Olivia me han invitado tantas veces a su campo que no puedo olvidarlos. Por otro lado está Javi, ¿qué persona en su sano juicio no lo querría? ¿Y las que han sido nuestras amigas? Aunque he estado alejada... ¿Ya no quiero ni un poquito a Tamara, Estefanía, Claudia y Raquel? ¿Ya se me ha olvidado todo lo que he vivido con ellas? De acuerdo, no han estado en este último año, pero tampoco es que yo lo haya permitido.

Quizás Alex tiene razón y es imposible escapar del dolor, igual no estoy haciéndolo tan bien como para alejarme de él, a lo mejor es capaz de alcanzarte incluso cuando no lo ves...

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro