22 de Marzo
Escucho el timbre de mi casa sonar tres veces seguida, me paró rápido–Yo abro –grito–Mamá si abres te mataré –vuelvo a gritar, desde que le dije que hoy vendría un chico del instituto enloqueció, pero se que sabe que es solo un compañero, pero ella tiene ese pequeña ilusión de que en realidad es mi novio y por vergüenza se lo ocultó–Lejos –le digo cuando veo que esta parada detrás de la puerta–Mamá vete –Le insisto.
–Solo quiero saludar.
–No.
–Tal vez saludar con la mano, sin hablar.
–Estas demente mujer.
–¿Solo sonreírle? –niego–A mi habitación, encerrada ¿No?
–Todo es más sencillo cuando nos entendemos.
–La próxima lo haremos a mi modo, recuerda que yo soy la madre, adulta, yo mando aquí –me dice moviendo sus manos de una forma extraña.
Cameron vuelve a tocar el timbre, miro a mi madre, ella solo me mira–Me las pagarás –Susurra y se va.
Acomodo mi cabello y abro la puerta–No hay tanto sol como para usar lentes.
–No importa el sol, los lentes me quedan perfectos, no tiene que haber motivo para usarlos.
–Si estaríamos en invierno ¿También las usarías?
–Si me quedan perfectas en verano, en invierno también me quedarían geniales –Sonríe –¿Me dejarás entrar? ¿O haremos el trabajo a fuera?
Me corro a un lado, para dejarlo pasar–"El éxito es la suma de pequeños esfuerzos repetidos día tras día" –lee el cuadro que está en la pared.
–¿Alguna vez viste "Bajo la misma estrella"? –niega–Hay un chico que tiene cáncer y la madre para ayudarlo o contenerlo, lo que sea, cuelga por toda la casa cuadros con frases motivadoras, mi madre pensó que eso sería lindo, así que entra a google, elije frases y las cuelga, cada dos días cuelga entre tres o cuatro frases nueva.
–Eso es imposible, porque si no tu casa– Se queda en silencio mirando el living–Wow, es verdad.
–Te lo dije –Lo miro–Si quieres puedes llevarte uno, no creo que se de cuenta –Me siento –No traes mochila.
–No la necesito.
–¿Tus apuntes?
–En google.
–Espera, tuviste cinco días para buscar información y no lo hiciste.
–Existe google Emma –me dice sentándose a mi lado–Te enseño a usarlo, si quieres es sencillo, solo haces clic ahí, escribes, reproducción sexual de insectos, aprietas en la lupa y pum mágicamente aparece la información, no es tan complicado.
–Te llevo menos de cinco segundos, porque no te tomaste ese tiempo y sentabas tu enorme trasero diez minutos en una silla y buscabas información, así venías, comprábamos los que teníamos, organizabamos todo y listo.
–No te enojes duende –me dice.
–Disculpa –Lo miro seria.
–Te perdono.
–¿Qué? Nono, retráctate.
–¿No quieres que te perdone?
–No quiero que me digas duende.
–Pero si eres un duende, en realidad te quedaría mejor pitufo porque tienes el cabello azul, eres pequeña.
–Y tu eres Shrek.
–Soy muy apuesto para ser un ogro.
–Para mi eres un ogro.
–Pitufa.
–Ogro.
–Me caes mal.
–Lo mismo digo –contesto seria –¿Empezamos?
Cameron agarra su celular y escribe–Tenemos que poner esta imagen –dice riendo y me muestra.
–Puedes tomarte el trabajo en serio.
–No seas aburrida pitufa.
–Estoy cansada.
–¿Qué hiciste a noche? –Pregunta sonriendo.
–Mire Enredados en Disney y luego me dormí.
–Menos mal que eres una chica mala.
–Ayer era mi descanso de ser mala –le contesto, el viernes tuve quimio y me quedé toda la tarde en el hospital, la verdad que me debilitó mucho, estuve a punto de cancelar lo de hoy con Cam, pero cuando me desperté temprano no me sentía tan mal.
–Pero ni mi hermana de nueve años se pasa un sábado acostada mirando Disney por la noche Emma.
–Pues yo si ¿Tu fuiste a la fiesta?
–Un rato, no fue la gran cosa, tu amiga estaba allí.
–¿Heather? ¿Estaba ebria?
–Obvio.
Me río –Me mando audios muy divertidos.
–No entiendo porque la gente cuando se alcoholiza hace esas cosas.
–Porque a veces hay cosas que no nos animamos a decir y cuando perdemos el sentido de todo, lo hacemos –lo miro–Me vas a decir que nunca hiciste algo así.
–Nunca –sonríe– No me gusta tomar.
Lo miro, escuche muchos rumores de que el padre de Cameron era alcohólico, de hecho llegue a escuchar que una vez cuando el era más chico, el padre de lo mal que estaba quiso golpear a su madre, nunca supe si eso fue verdad, pero si sabia que no ve a su padre hace muchos años.
–Es raro.
–¿Qué cosa?
–Odio leer, pero tengo un amigo que es muy fanático de los libros y siempre me habla de ellos, tu coincides con el papel perfecto del chico popular, egocéntrico, playboy de las historias.
–¿Crees que soy un playboy?
–No, porque los chicos así en las historias tienen cualidades que tu no.
–Tampoco soy egocéntrico, popular, pues si, no lo niego ¿Apuesto? Obvio.
–Menos mal que no eres egocéntrico.
–Creerte apuesto, no es ser egocéntrico, es tener auto estima, yo creo que tu lo tienes y un alto autoestima.
–¿Por qué lo crees?
–Si tuvieras un bajo autoestima, no te atreverías a usar ese color de pelo o a caminar todos los días por el pasillo como si fueras la reina del instituto, pareciera que cuando caminas nadie puede hacerte daño, como si tu vida fuera perfecta –me mira–Mi hermana ama leer y tu coincides con el personaje de la chica perfecta.
–No me conoces.
–Ni tu a mi, pero la vida es así, siempre todos sacamos conclusiones de las personas aunque no sepamos nada de su vida.
–Tienes razón, no eres tan idiota como creía.
–Gracias, tu eres tan perfecta como pensaba.
Me río–No soy perfecta y no quieras usar esos tontos halagos conmigo.
–Mejor, lo perfecto aburre.
–Lo cliche aburre.
–Pero todos aman en cliche, aunque digan odiarlo.
–Puede ser.
–¿Hacemos el trabajo? –pregunta.
Niego –Quiero dormir –Bostezo.
–Genial, yo también estoy cansado de la fiesta ¿Dormimos aquí o en tu habitación?
Lo miro–Yo voy a ir a dormir en mi cama y tú en la calle.
–No seas mala pitufa, solo dormiremos, al menos que tu quieras otra cosa.
–Vete Cam.
–Oh no –Dice mi mamá entrando al living–Nadie se irá de aquí, acabo de hornear unas galletas deliciosas, en cinco minutos se las traigo con algo rico para tomar –Sonríe, la mataré–Un gusto soy Lucia, la madre de Emma.
–Cameron, un gusto –Le sonríe.
–Que lindo nombre ¿No es un lindo nombre? –me pregunta, niego–Para mi es lindo, cuéntame Cameron ¿Te gustan las galletas horneadas?
–Galletas de paquete, tu no sabes hornear –la miro, me mira seria.
–Me gustan señora.
–Genial, entonces las iré a buscar.
–No le creas que son horneadas, siempre compra el paquete, prende el horno un rato y después dice que ellas las hizo –Le digo una vez que mi madre desaparece de nuestra vista.
–No seas mala.
–Seguro te entretenga un rato con preguntas, piensa que eres mi novio y que te tengo oculto por vergüenza le advierto– Por cierto no vayas a decir nada de que voy a fiestas.
–¿Qué recibo a cambio?
–¿Qué?
–A cambio de guardar tu secreto ¿Qué recibo?
–¿Qué quieres?
–Mi madre me viene insistiendo hace meses que quiere conocer a mi novia.
–Tu no tienes novia.
–Pero le dije que si tenía.
–Qué tontería.
–Quiero que mañana por la noche cenes en mi casa como mi novia.
–¿Tienes dinero para el psicólogo? Si quieres puedo prestarte algo, porque ni loca haré eso.
–Es eso o tu madre se enterara que su niña, consume alcohol como si su vida dependiera de eso.
–Solo una cena.
–Solo una.
–Nada de besos y esas cosas.
–Solo se amable y tenemos un trato.
–Okey –suspiro.
–Llegaron las galletitas.
–¿Por qué gritas?
–¿Por qué eres tan mal humorada? ¿Contigo también es así Cam?
–Conmigo es súper dulce señora –Le contesta, lo miro, mi madre sonríe.
–Quiero vomitar.
–No seas así Emma –Me dice seria.
–No ma, quiero vomitar –La miro y salgo corriendo al baño, escucho como corre tras de mi, se agacha conmigo y sujeta mi cabello.
–¿Traigo agua? –Escucho la voz de Cameron preocupado.
–Quiero que se vaya –le susurró a mamá.
–No Cam, gracias, si quieres puedes irte –Le dice ella amablemente –Luego Emma te llamará para seguir con el trabajo.
–No quiero irme, las ayudo, no tengo problema en serio.
–Vete –Insisto–Sácalo de aquí mamá.
Mi madre se para–Ven Cam, ya vuelvo cariño –me dice.
No los miro, solo me quedo sentada en el piso del baño esperando a que otra vez saliera todo mi estúpido almuerzo de mi, ni siquiera se para que como si siempre me pasa lo mismo, estoy tan cansada de esto.
Solo tengo tantas ganas de dormir.
---------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------
Segundo capítulo de una nueva historia
¡Hola! Bueno en este capítulo tenemos un poco más de Emma y Cam ¿Que piensan de ellos? ¿Como creen que saldrá todo en la cena?
Si les gusto el capítulo, voten y comenten que amo cuando lo hacen...
Hasta el próximo capitulo.
Besos Cam
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro