REINO DE NOTTINGHAM, INGLATERRA:

Después de que los dejara allá a la luz de la luna y hablando sobre sus desgracias, hasta el punto de llamarse "trío de miserables", había logrado dormir un poco antes de despertarse justamente al alba, Kendall se encontraba mirando el techo, pensando en su batalla interna contra sus pensamientos y visiones de su hermano, también pensaba en Nessa y quería encontrarla, sin embargo se obligaba a cambiar de pensamiento y a decirse a si mismo que debía centrase por el momento en dos cosas: Jacob y su equipo, no dejaría que nada le pasase a ellos y cumpliría la promesa que le hizo a Herzel de acabar con su vida, si su demonio interno lo dominaba y cedía ante el poder de Lilith. 

Ese era el problema de los mestizos o híbridos, que en muchas ocasiones una parte de ellos los gobernaba completamente, o se volvían extremadamente poderosos y se ganaban enemigos gracias a ellos y Kendall entendía un poco sobre qué era tratar con una bestia interna a pesar de no ser mestizo, aún se acostumbraba a su nueva faceta de vampiro, si bien el Brujo Maestro no se había vuelto a meter en su mente y no había tenido ataques repentinos o sed de sangre, no se acostumbraba a ver sus colmillos largos o ese destello rojo de cuando se transformaba completamente o presentía el peligro.

-¿Sigues pensándolo Kendall?-. Le preguntó Kindle que estaba a la cabecera de la cama, mirándolo atentamente.

-Si, sigo pensando en todo lo que ha pasado, si Jacob no se hubiera ido...-. Kindle lo miró entre curioso y enojado, como si Kendall leyera la mente de él se anticipó a decir. -No es que esté culpando a mi hermano, claro que no... Es solo que, los dos éramos muy unidos, si no se hubiese ido, si él estuviese al lado de mi hija, seríamos una gran familia, el trío de los McQuoid y mamá estaría orgullosa-.

-Es verdad, una verdad triste pero deberías saber que a tu hermano no le simpatizaba mucho tu ex esposa-. Ante eso Kendall lo miró con interés, traspasándolo con la mirada, Kindle bajó a su hombro para confesarle lo que había visto. -Jacob probablemente sabía que tu ex esposa era mundana y por eso el roce entre los dos-.

-Vaya, eso explica muchas cosas-. Una punzada en la cabeza lo hizo llevarse las manos a la cabeza, una visión le había llegado a su mente, era una visión sobre las fuerzas del mal y su gobernante, millones de fuerzas demoniacas, retornados, vampiros, centauros caminaban al son de una danza macabra para perturbar la paz de ambos mundos, cuando su mente expulsó abruptamente ese pensamiento comenzó a respirar agitadamente, se levantó torpemente mientras salía de la habitación con Kindle siguiéndolo. -Debo avisarles...-.

BOSQUES DE ESCOCIA:

El cuarteto había abandonado la casa de manera rápida y silenciosa, Zowie ya le había confesado la verdadera razón por la cuál se había peleado con Ramsey, aquello simplemente era muy infantil por parte de Zowie pero era tan orgulloso como para admitirlo, y Ramsey simplemente lo dejó pasar porque sabía a ciencia cierta sobre los sentimientos del ángel rebelde hacia su pequeña gracias a Mercy que se lo había hecho saber. Iban caminando normal cuando de un momento a otro, un fuerte dolor hizo que Nessa se tambaleara y quejase por ello.

-Pequeña/Nessa-. Ramsey y Zowie se acercaron a ella con preocupación pero Ramsey fue más rápido, Zowie sin pensarlo sacó algo de su traje  para ofrecerle un chocolate que gustosamente recibió, Mercy le sirvió un buen vaso de jugo de uva que había guardado de la casa abandonada que habían dejado antes. -¿Estás bien?-. Hablaron al tiempo mientras Nessa desocupaba rápidamente el jugo y Mercy servía otro vaso lleno, en ese momento la pequeña e imperceptible tensión entre Zowie y Ramsey desapareció, ahora era cuando menos debían estar peleados entre ellos, por más ambiente de paz y tranquilidad que hubiese, las cosas no acabarían allí.

-Algo-. Respondió casi sin voz y maldiciendo mentalmente por el dolor de cabeza que tenía en ese momento. -Tuve una visión acerca de alguien con apariencia mundana y una corona, dirigía innumerables tropas del mal-. Hablaba apresuradamente y con la respiración algo agitada mientras seguía con los ojos cerrados, las imágenes se hacían cada vez más claras y el dolor más intenso. -Tiene tropas de toda clase: demonios, vampiros, centauros corruptos, espectros, mundanos malditos y caídos en combate que de alguna forma han vuelto a la vida-.

-Retornados-. Confirmó Ramsey mientras sacaba sus navajas para afilarlas bajo la atenta mirada del dueto, Nessa poco a poco recuperaba el color y sus ojos volvían a ser los grises de siempre y desaparecía el tono azul blanquecino. -Las cosas andan mal, no sabemos qué planee con exactitud la persona que Ness vio en su visión, solo sé que si tiene gente retornada y demonios a su favor hay dos probabilidades: una, que tenga algo sumamente poderoso que le permita manipular y hacer magia que por más Gran Maestro ocultista que haya sido... Está fuera de mis cabales y segundo, que haya hecho alianzas con gente que tiene el mismo propósito de perturbar la paz-. 

-Tienes un punto Ramsey, pero hay algo que debes saber-.  Habló Zowie acercándose a él y cruzando los brazos aumentando el ambiente de misterio. -Ese mundano del que habla Nessa no es un mundano cualquiera-. Ramsey lo miraba atentamente mientras volvía a guardar las navajas con determinación. -Ese mundano es Zigor Bastián-...

ALGÚN LUGAR MÁGICO DE ESCOCIA:

Scorpius y Kobus, ya habían realizado los rituales en cuatro de los casi 30 lugares que indicaba el DMB que debía visitar, sentían como sus habilidades y conexión con su animal espiritual que aún no se manifestaba de forma física y tampoco Scorpius había mostrado su forma de guerrero como hacía Kobus al fusionarse con Jawzahr, sin embargo Kobus no lo presionaba con eso, tarde o temprano se revelaría la forma del animal espiritual de su mejor amigo. Siguieron caminando bajo la atenta mirada de Zigor Bastián que tenía un caballo (que parecía más una cabra) casi descarnado, la cara del animal dejaba que se apreciara un poco el cráneo, tenía cuernos de carnero con las puntas de fuego, piedras del infierno en ciertas partes del cuerpo, se podían apreciar sus costillas, no tenía una cola prominente y sus patas eran lava pura. Sonrió de lado antes de hablar.

-Falta poco para vernos, mis queridos aprendices-. Scorpius y Kobus seguían con el ritual para adquirir los poderes, al hacer cada ritual a las entidades mágicas, estas aceptaban el ritual recompensando a la persona con poderes.

-Bueno, nos faltan casi 26 lugares para el poder máximo-. Habló Kobus antes de guardar el libro en su mochila, Scorpius solamente asintió antes de seguir caminando con firmeza, seguían una ruta trazada por alguien más, alguien a quien tarde o temprano iban a conocer, en lo que respectaba a Kobus, había cambiado totalmente cuando se robaron el libro del instituto, Kobus actuaba de una manera diferente a la persona que solía ser antes, ya no solo era al chico curioso y ansioso por saber sobre el mundo mágico, ahora era alguien codicioso en busca de poder y con un nuevo amigo. Se detuvieron a descansar en una cueva para retomar el rumbo al día siguiente en el alba. -Scorpius-.

-¡¿Qué?!-. Respondió algo agotado y sonando despreciable aunque esa no fuese su intención, solo estaba agotado, Kobus lo miró extrañado. -Perdón, no quise responder así-.

-Te veo algo serio y distraído, ¿Todo en orden?-.

-No en realidad-. Respondió algo apenado. -La verdad no sé qué pasa con mi animal espiritual o porqué no se ha manifestado, hemos hecho cientos de rituales, aprendido cientos de cosas y dominado más poderes que cualquier estudiante egresado de Mexerth, pero me frustra bastante no tener aminal espiritual-.

-Relájate hermano, mi antiguo maestro o mentor me dijo que no todos tenemos un animal como guía espiritual o que simplemente no necesitamos alguno, como puede ser tu caso, así que no desesperes-. Scorpius simplemente asintió, pensaba que seguramente Kobus creería que lo que tenía era envidia pero él se lo había tomado bastante bien.

REINO DE NOTTINGHAM, INGLATERRA:

Por otro lado en Nottingham, la tensión de había adueñado de la sala de reuniones real, el escuadrón se encontraba reunido y pensativo por los que les había dicho Kendall acerca de las visiones sobre Bastián y su enorme ejército de no muertos acompañado de seres de otras especies que fueron corrompidos por el Brujo Maestro haciendo uso de sus poderes oscuros y los demonios como ofrenda de Lilith a cambio de lealtad, el maldito de Bastián sí que sabía como sacar provecho de la corona. Además, Herzel había anunciado al pueblo que debía hacer un aviso, revelaría la verdad sobre su especie.

-¿Estás completamente seguro de tus visiones?-. Preguntó Herzel calmadamente y acompañado de su esposa que comenzaba a mostrar cambios físicos luego de la luna de miel y entrega de mando.

-No mentiría sobre eso y menos con un lunático por ahí haciendo de las suyas-. Aseguró Kendall manteniendo una mirada firme, de nuevo se pusieron pensativos. -Es grave lo que está sucediendo. -En ese momento un guardia entró interrumpiendo la reunión que tenían ellos.

-Siento interrumpir su majestad, pero el pueblo lo espera para su gran anuncio-. Entre ellos se preguntaron cuál anuncio y de nuevo miraron a Herzel, este le hizo una seña al guardia para que se acercara y decirle algo a lo que él asintió y salió en compañía de Clara mientras retomaban la reunión.

-En este caso debemos redoblar esfuerzos, preparar más tropas para proteger no solo a Nottingham, sino a toda Inglaterra, hablaremos después del anuncio-. Dieron por finalizada la reunión y cada quién tomó un rumbo distinto, Herzel fue a reunirse con Clara mientras se moría de los nervios por dentro a pesar de mantener una cara inexpresiva, se reunieron para salir al balcón, ella lo detuvo para darle un beso y pegarse más a él. -¿Sucede algo amada mía?-.

-Solo quiero saber si... ¿Estás seguro de querer hacer esto?-.

-Si, Nottingham debe saber quién les gobierna-. Dicho esto ambos salieron siendo recibidos por el bullicio de su querido pueblo, del pueblo donde nacieron y llevan toda su vida y que ahora, gobernaban juntos. Con solamente alzar una mano el pueblo se calló, los demás miembros del escuadrón estaban en la primera fila supervisando todo como guardias de honor. -Pueblo de Nottingham, como su rey es mi deber darles a conocer en manos de quién depositan su confianza para tomar las riendas de este pueblo, comenzaré diciendo que no soy un humano como cualquiera de ustedes-. Los pueblerinos comenzaron a murmurar entre ellos señalando a Herzel, Clara miraba preocupada la situación. -Entiendo que tengan desconfianza en momentos de guerra y crisis, pero es necesario que sepan que... ¡No soy un humano o mundano como ustedes!-. Mientras que él se iba transformando, Clara aparecía detrás de él para darle apoyarlo, cuando logró la transformación completa se acercó de nuevo al balcón para hablar mientras el pueblo, menos una persona hacían caras de confusión y rabia. -Habitantes de Nottingham, ninguno está en obligación de seguir mi mandato si así lo desea, sin embargo recuerden a qué nos enfrentamos...-. 

-Es nuestro deber como reyes de este pueblo, velar por la seguridad de sus habitantes y hacerlos sentir seguros-. Intervino Clara y todos se quedaron sorprendidos, sus rostros cambiaron. -El rey tiene razón, nadie será obligado a vivir bajo este mandado, pero recuerden quién los ayudó antes de la partida del rey Hans, recuerden quienes lucharon por sus tropas y recuerden, quienes jamás se han rendido por su pueblo-.

-Qué motivador-. Dijo algo irónico Mel ganándose un codazo de parte de uno de los mellizos y sin que se lo esperara Kendall se abrió paso entre la multitud antes de levantar su espada, apuntar en dirección a Herzel y finalizar con una inclinación, clavando su espada en el suelo, después de eso, los mellizos hicieron con sus armas antes de inclinarse, los ángeles silenciosos de siempre hicieron lo mismo y por último Mel, pero cuando se agachó tomó aire para decir algo al pueblo. -¡Si he de morir junto a un colega, protegiendo a su pueblo y protegiendo al mundo, que así sea y larga vida a los reyes!-.

-¡Larga vida a los reyes!-. Finalizó el pueblo alzando sus puños al cielo, Crowley veía todo con una sonrisa, estaba orgulloso de su muchacho a pesar de que no era su padre de sangre, los del escuadrón no se rendirían y así mostraban su apoyo incondicional al rey, Herzel ya no tenía nada que temer, aún...

BOSQUES DE ESCOCIA:

Ramsey después de haber escuchado a Zowie, tenía la sobreprotección y la ira disparadas al mil, comenzó a caminar en círculos bajo la mirada de todos, Mercy tenía su reproductor encendido tratando de escapar de las pesadillas y de la realidad, Nessa lo miraba fijamente tratando de controlar sus emociones, Zowie simplemente suspiró antes de poner sus brazos en jarras y sin que nadie se lo esperara, Ramsey lanzó una de sus navajas que se clavó en la mesa.

-¡Maldita sea!-. Soltó antes de cogerla y guardarla ponerse a jugar con ella. -Debí suponerlo, la desaparición de él, los rumores, las advertencias de mi padre, ¿Cómo fui tan tonto?-. Nessa se acercó a él y le tocó el hombro suavemente haciendo que lo viera.

-Tranquilo Ramsey, ninguno sabía nada sobre él-. Medio sonrió mientras la escuchaba atentamente. -Pudo haber sido cualquiera en su tiempo, ahora de lo que debemos preocuparnos es de encontrar la manera en que todos estemos en paz y acabe esta maldita guerra-.  Los tres la miraron con preocupación y algo de determinación, los cuatro se unirían más que nunca. -Buscaremos juntos la manera de derrotar a Zigor Bastián-. Un rugido por parte de Falkor hizo que se pusieran en guardia y salieran de la fortaleza con sus armas en alto, Nessa se subió al lomo de Falkor para ver mejor, las pupilas de ella se contrajeron y cambiaron por unas similares a los de Falkor para ver mejor. -Oh mierda-.

-¿Qué sucede?-. Preguntaron los tres al tiempo mientras cada quien iba invocando sus poderes y adoptando su típica pose de lucha, Zowie estaba sujetando su hacha de hielo con la mano derecha, la otra la tenía en un puño cerrado a un costado de su cuerpo mientras miraba con determinación al frente, tenía las piernas brevemente inclinadas. Mercy sujetaba su tridente apuntando al frente, una pierna al frente inclinada y la otra levantada como si fuese a correr y una mirada de furia y determinación.

 Ramsey estaba con sus brazos cruzados en X mientras  mostraba sus navajas curvas y sonreía, también tenía una pose como de querer correr hacia el peligro como lo habían hecho innumerables veces y por último estaba Nessa con su arco al frente mientras sacaba tres flechas de trueno, de nuevo se enfrentarían a las tropas de Bastián que Nessa había logrado vera miles de kilómetros de distancia...

REINO DE NOTTINGHAM, INGLATERRA:

Nottingham alzaba sus armas de nuevo, una vez más las calles estaban inundadas de guardias y campesinos para proteger el pueblo de las amenazas externas, por suerte habían aceptado a Herzel y Clara como sus reyes y mandatarios. Durante el tiempo que se quedaran en la ciudad y antes de seguir rumbo a Londres, el cuál  les tomaría casi dos días en llegar, Herzel a cada miembro del escuadrón les había asignado una zona de la cuidad a vigilar, en especial después de los rumores de que habían visto "muertos vivientes" merodeando las entradas de la ciudad, él también participaba en las rondas por los barrios y varias veces había sorprendido a gente robando, pero Herzel era tan comprensivo que no castigaba a todos los ladrones que encontraba, pero si les deja advertencias de que si volvía a verlos, no sería tan blando con ellos.

-Aparentemente no hay novedad-. Dijo Kendall escudriñando con la vista el lugar, todo estaba extrañamente tranquilo, Herzel que revisaba el otro costado lo miró extrañado, llevaba guantes ya que su piel había comenzado a cambiar y sus uñas poco a poco daban paso a garras.

-No debemos dar nada por sentado-. Respondió Herzel, a lo lejos escucharon escucharon un llanto, ambos se miraron y asintieron antes de comenzar a caminar sigilosamente hacia el lugar de donde provenía el lamento, era una casa de aspecto lúgubre y aterrador. Apenas entraron, vieron a una joven en una de las esquinas, Kendall se anticipó y trató de llamar su atención para saber si estaba bien, la joven lo mira fijamente a los ojos para advertirle sobre el peligro.

-Una de esas cosas está cerc...-. Herzel al entender las señales le pide a la mujer que guarde silencio mientras va desenvainando su espada lentamente y Kendall imita el movimiento.

-Hay que sacarla de...-. Antes de que siguiera hablando uno de los retornados se le abalanzó encima con la intención de apuñalarlo con una estaca, eso hizo que perdiera su espada, la casa estaba inundada de retornados. -Es una trampa-. Decía forcejeando con el espectro antes de invocar un aura de magia y transformarse mientras Herzel aniquilaba a los enemigos con su espada y ayudaba a su compañero, Kendall sin más opción invocó una clase se aura mágica para quitarse el espectro y mandarlo lejos para así poder coger su espada y derrotarlo, siguieron así hasta que ya no divisaron más, se quedaron viendo la escena horrenda de aquellos cuerpos blanquecinos casi grises con cicatrices moradas y sangre color negra como petróleo como el cabello.

-¿De dónde habrán salido?-. Preguntó Herzel guardando su arma y agachándose para examinar los cuerpos, mientras Kendall hacía lo mismo, en especial con la mujer a la que habían matado porque habían varias cosas que cambiaban completamente, una de ellas era el color de sangre y el aspecto físico. 

-Hay algo que no me cuadra, camarada-. Dijo Kendall mientras señalaba a los retornados y a la pobre mujer que por desgracia solo había sido un señuelo para atraerlos a esa trampa.

-¿Lo dices por el aspecto físico de la persona y esos seres?-. Preguntó Herzel con la expresión más seria de lo habitual, su compañero asintió pero ambos tenían un rostro de preocupación, Herzel suspiró antes de hablar. -Temo decirte esto Kendall, pero estamos ante una gran amenaza, antes de que entrara al escuadrón yo  lo había visto cuando aún el padre de Clara estaba con vida, en una cuidad no muy lejana del pueblo cuyo rey nos había pedido ayuda y también había sido maldecido, las personas "muertas" se levantaban, influenciadas por alguien más-.