40*
Nadie la llegó a conocer, nadie.
Ni siquiera yo lo hice.
Releo sus letras sin descanso y todavía se me escapa su complejidad.
Ella era mi todo, y también era la nada.
Ella era la luz en mi oscuridad.
Es curioso.
Porque ella era su oscuridad tapando la luz del sol.
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