Profesor: Bueno chicos, es hora de entrenar. Primero vamos a ver sus habilidades individuales, como dominan su poder y tienen control sobre él y luego veremos otro día sus habilidades colectivas y trabajo en equipo.

David (molesto): ¡Eh! ¡¿Porque otro día?!

Profesor: Es simple. Primero, ya son casi las 4 de la tarde. Además estuvieron en coma por casi 2 meses. Pero bueno, hoy es domingo, significa que mañana...

Diego (triste): Ahg, hay clase...

Ibai (impresionado): ¡¿Tenemos que ir a clase?!

Andrea: Efectivamente, ya el colegio sabe que ustedes despertaron así que hoy se van a sus casas y mañana tempranito se despiertan para ir a clase.

Los 4 chicos (con los ánimos bajos): Está bien.

Profesor: Bueno, pero eso no importa ahora. Hoy vamos a ver sus poderes. Empecemos con él, tal vez sea más rápido... Chicos, vengan a la arena de Juan Pablo.

Diego (dándole ánimos a Salazar): ¡Ohh!, empezamos contigo, Sala. Tú puedes.

Salazar (nervioso): Bueno.

Profesor: Empecemos viendo lo que puedes hacer.

En ese momento Salazar empieza a flotar, formando pequeñas bolas de aire en sus manos.

(Todos los chicos se impresionan)

Ibai (impresionado): ¡Tío! ¡¿Cómo puedes hacerlo?!

Salazar: Pues la verdad, al igual que ustedes mi poder se activó por suerte para liberarme de mi camilla, pero impresionantemente logre darme cuenta de que yo controlaba las ráfagas que cree. Así que de camino aquí estuve practicando sin que se dieran cuenta.

Diego: ¡Wow! Loco, que inteligente.

Profesor: Muy bien, pero eso es muy básico. Tienen que ir más allá. Juan Pablo, necesito que estés muy pendiente de tu alrededor, voy a activar los juguetes que tiene la arena.

Seguido de esas palabras el profesor se acerca a un panel de control ubicado al centro y frente a la arena, en el presiona un botón rojo. Salazar se puso en una pose de batalla para ver que sucedía pero al pasar 2 minutos no pasaba nada y se aburrió de tener una pose ridícula. Mientras se quejaba con el profesor de repente de la parte de atrás, un pilar sale rápidamente y lanza una flecha directamente hacia Salazar, que logra esquivar en el último momento.

Salazar (molesto y asustado): ¡¿Que verga te pasa, boludo?!

Profesor (evitando reirse): Hey, cálmate. Recuerda que soy mayor... Te dije que estuvieras atento.

Salazar: Loco ¡Eso no quiere decir que vos me intentes matar lanzando una flecha a mi cuello!

Profesor: Decidieron aceptar mi entrenamiento. ¿Acaso creen que ser héroes es fácil? Les harán cosas mucho peores que lanzarles pequeños dardos.

Diego: Bueno, cálmense los dos. Sala, es verdad. Tenemos que ser fuertes y estar preparados para todo. Profesor, déjeme entrenar primero.

Majito: Hey, Diego ¿Estás seguro? No quiero que te pase nada malo

Diego (abraza a Majito): No te preocupes, Majito. He enfrentado cosas peores.

Emily e Ibai (intrigados): ¿Qué?

Diego avanzó al centro de la arena y le dio la mano a Salazar mientras salía.

Salazar: Suerte, loco.

Diego: Siempre y nunca a la vez ¿Recuerdas?

Salazar (riendose): Sí loco.

Diego se ubicó en medio de la arena y el profesor presiono el mismo botón del panel para que su prueba comenzara. Diego se puso en posición, se calmó y empezó a regular su respiración. Durante unos segundos todo estuvo en completo silencio hasta que el mismo pilar de la parte de atrás se levanta y lanzo una flecha hacia Diego, pero este la esquivo con facilidad. Después salieron otros 2 pilares y el primero crece más, formando un triángulo con Diego en el centro.

Diego se percata del encierro y se preocupa un poco. De los pilares salían muchas flechas que Diego esquivaba, cuando rodaba, se alejaba o se movía hacia los lados, los pilares rotaban siguiendo el triángulo para que Diego se quedara en el centro. Muchas flechas ya habían empezado a impactarle, haciéndole cortes por los brazos, piernas, incluso en su cara, manos y pies.

Majito (preocupada): ¡Profesor! ¡Deténgase! ¡Diego está saliendo lastimado!

Profesor (preocupado): ¡Diego, voy a detener la maquina!

Diego (esquivando las flechas): ¡No! ¡No lo haga, yo puedo hacerlo!

Profesor: ¡Diego, ni siquiera has usado tus poderes!

Diego: ¡Déjenme seguir intentando!

Majito (asustada y Preocupada): Amor, no sigas si no puedes. ¡Por favor detente!

Diego haciendo caso omiso decide seguir con el entrenamiento, mientras todos miran preocupados ven como Diego empieza a soltar vapor. El profesor emocionado le grita.

Profesor: ¡Eso es, lo estas logrando!

Todos se emocionan, Diego empieza a reír, ve y siente como las llamas empiezan a rodear su cuerpo. En ese mismo momento, Diego se cubre de llamas y sus movimientos mejoran. Empieza a esquivar más rápido y las flechas que tocaban su cuerpo se quemaban.

Profesor (emocionado): ¡Excelente! ¡Avanzaste a la siguiente fase de tu entrenamiento!

Todos (impresionados): ¡¿Qué?! ¡¿Hay una segunda fase?!

Profesor: Obviamente, necesito que dominen todo lo que puedan sobre sus poderes. Así que mientras Diego pasa a la segunda fase, necesito que todos vayan a sus arenas y empiecen a entrenar. Andrea necesito que me ayudes.

Andrea (impresionada): ¡¿Ehh?! ¡¿Porque?!

Profesor: Necesito tu conocimiento para que me ayudes a liderar el equipo.

Chicos: ¡Eso, Andrea!

Ibai: Usa tu conocimiento friki para dirigirnos.

Diego: Porque enserio, te vamos a necesitar para eso.

Andrea (feliz e irritada): ¡Agh!, está bien. Pero no soy friki, ¡¿Ok, David?!

David (se ríe): ¿Cómo sabias que iba a decirlo?

Todos (decepcionados): Ahh, que evidente.

Profesor: Bueno Diego, vamos a ver cómo te va en el nivel 2.

Diego (emocionado): Bueno ¡Empecemos esto!

Con eso los pilares desaparecen mientras los chicos se iban hacia sus campos de batalla. Otros 4 pilares aparecieron, todos con diferentes hoyos de distintos tamaños y ubicaciones, formando un cuadrado. Diego se ríe y con sarcasmo dice "Ojala el próximo no sea un pentágono". En ese momento de un pilar de uno de los hoyos salió una manzana que golpeo Diego en la cabeza.

Diego (molesto y adolorido): ¡¿Que rayos?!

Profesor: Durante este nivel tienes que aprender a controlar tus llamas. Tienes que aprender a usarlas a tu favor y no en tu contra. También es importante que no todo el tiempo todo tu cuerpo este en llamas cuando las uses, eso es de las cosas más importantes.

Diego: Eso no explica la manzana.

Profesor: Tienes que aprender a prevenir o interceptar todo tipo de cosas.

Diego (sin seguir entendiendo): Bueno, sigamos con el entrenamiento.

El profesor presiona un botón azul y los pilares se vuelven a activar. De un hoyo diferente sale disparada una piña que Diego golpea, encendido en llamas, haciendo que se rompa.

{Pensamiento de Diego}: Bueno, tengo que controlar las llamas.

Diego se calma y empieza a respirar lentamente, haciendo que las llamas alrededor de su cuerpo se desvanecieran. Después de otro hoyo una manzana sale disparada otra vez y Diego la hace explota lanzando una bola de llamas hacia ella, esta vez solo su mano se enciende.

Diego (emocionado): ¡Ohh, eso fue genial!

Profesor: Efectivamente, por el día de hoy estás listo. Descansa, trata tus heridas y ve a darle un abrazo a Majito que está preocupada por ti. Voy a vigilar a los demás.

Diego: Jaja, gracias profesor.

Diego rápidamente sale de la arena y Majito va corriendo hacia sus brazos, cuando lo abraza Diego se desploma y admite su cansancio.

Majito (siendo sarcástica): Ay amor, no me digas que después de esas cosas impresionantes quieres que tu angelito te consuele y te prepare un descanso.

Diego (siguiéndole la corriente): Sí, quiero que mi angelito me ayude a... {un dolor paralizante recorre su cuerpo y lo aturde}... Mejorarme....

Majito (ríendose): eso te paso por bobo.

Continuara.....