Capítulo 20. Ni un minuto más
Un pequeño grito y después un sollozo es lo que despierta a Gretel de su aturdimiento de por fin haber encontrado a Julia, pero que lamentablemente fue en esa situación. Sigue el sonido del llanto y en una de las mesas ve a una pequeña, una chica de hermoso cabello negro y de unos 14 años o talvez menos, la niña se sujeta con fuerza a la mesa intentando no llorar mientras que a su espalda un horrible hombre la viola de forma aterradora, eso fue lo último que Gretel vió, no soportó más, llegado a ese punto no le importó a qué iba, lo único que abarcaba su mente eran esas dulces niñas aterradas, y se prometió que ninguna iba a pasar ni un solo minuto más ahí.
Con su vista ubica al ángel que está al fondo intentando apartar la vista, para él también es difícil la escena, pero cuando voltea a ver a Gretel y descifra en su rostro la determinación de ya terminar, el ángel se ve asustado y con gestos le pide que no lo haga, pero ya es tarde ella ya sabe qué hacer y nadie la va a detener.
Con paso decidido avanza hacia la aterradora escena, y sin miedo toma la botella en la mesa y la estrella con fuerza, para causar el mayor daño posible, en la cabeza del hombre. Después vienen unos cuantos minutos de vacilación en los cuales los demás no saben qué pasó, Gretel usa esos minutos para sujetar la pistola en el cinturón del hombre, antes de que él caiga ruidosamente y que de su herida demasiada sangre emane.
— Agáchate y en cuanto puedas corre— le dice Gretel a la niña que aún tiene lágrimas en todo su rostro. La pequeña asiente todavía temblando y se pone abajo de la mesa.
En cuanto la niña está a salvó, Gretel se dirige a los hombres que corren hacia ella y levantando la pistola comienza a disparar, uno a uno van cayendo conforme se acercan.
No pasó mucho tiempo antes de que los hombres sacarán sus armas también y respondieran al fuego. Las niñas asustadas corren a la entrada, y Gretel se tranquiliza al saber que al menos ellas estarán bien, ese sentimiento la acompañó aún después del dolor que sintió en su costado cuando una bala la alcanzó.
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En la orilla del río de la muerte
Presente
Micah grita de dolor mientras se tambalea y se sujeta el costado justo donde Gretel fue herida.
La muerte en ese momento entiende lo fuerte del vínculo entre los dos, ella puede ver el dolor en la expresión de Micah. Y cuando su luz se apaga y Micah lentamente camina directo al río, se da cuenta que el tiempo se acabó.
~ Isa 💕
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