| 2 Semanas antes del viaje|

Senjuro- Se está recuperando poco a poco, señorita Hanae. -Dijo el sonriendo mientras que caminaba sosteniendo la mano de la chica.

Hanae- Es un alivio, no quería pasar más tiempo en cama.

Senjuro- Si progresa rápido, logrará entrenar con mi hermano.

Hanae- Si, eso es mi objetivo. -Sonrio ella mientras que caminaban en el pasillo que daba al patio trasero.- Que lindo esta el día. -Suspiro ella sonriendo.

Senjuro- Si. -Mencionó el observando enfrente con una sonrisa.

Hanae- Tanjiro deberá de estar entrenando. -Dijo ella recordando al pelirrojo.

Senjuro- El joven Tanjiro es muy fuerte como para entrenar a tal grado con sus heridas, usted aún no se ha recuperado completamente, el es un hombre admirable. -Le dijo sorprendiendo a la chica quien sonrio soltando una leve risa mientras llevaba su mano libre hasta cerca de su boca.- ¿Que sucede?.

Hanae- Tal vez porque el es un hombre, yo solamente soy débil, es por eso que no me he recuperado de mis heridas.

Senjuro- Se equivoca, señorita Hanae, usted es una mujer fuerte... otra mujer hubiera muerto con esas heridas incluso mi hermano me dijo que ella es una llama ardiendo que intenta intensificar su llama a tal grado de ser la más grande y poderosa llama eterna.

Hanae- ¿Enserio eso dijo?.

Senjuro- Si, usted solo esfuercese en recuperarse primero para luego blandir su espada en el entrenamiento arduo que le espera.

Hanae- ¿Ya haz entrenado con el señor Kyojuro?.

Senjuro- Si, aun así... tener espada y derrotar demonios no es lo mío. -Dijo el dejando a Hanae en su futon.- Sólo me dedico a limpiar, cocinar y ayudar en casa.

Hanae- Eres un chico muy trabajador. -Dijo ella mirando a Senjuro.- Cielos, solo pasaron semanas aquí y ya me encariñe de ti.

Senjuro se sonrojo para sonreir al ver y escuchar las palabras de la chica hermosa enfrente de el.

Senjuro- Yo i-igual, señorita...

Hanae- Tienes 12, yo 15 nos llevamos solamente 3 años, tratame solo de Hanae.

Senjuro- Pero... y-yo ya estoy acostumbrado.

Hanae- Tranquilo, solo tomate tu tiempo.

Senjuro- E-Esta bien, H-Hanae.

Hanae- ¿Ves?, no fue difícil.

Senjuro- Al parecer si...

Al pasar el día Hanae decidió levantarse de su cama para así caminar hasta el patio, ella miró detrás observando que Sara estuviera dormida, para asi ponerse sus zapatos y caminar sobre la tierra.

Ella suspiro para así tomar el mango de su espada sacándola de su funda, cuando lo hizo miro seriamente enfrente para así lanzar el filo de su espada golpeando en el aire.

Pero inmediatamente se quejo, pero ignoro ese dolor, tenia que practicar leve para así ir avanzando poco a poco.

Bajo la luz de la Luna practicaba levemente incrementando la dificultad moviendo su cuerpo, sabia que sus heridas ya eran leves así que no había problema.

Los días fueron pasando hasta que una noche Kyojuro salió de su habitación para así sorprenderse al ver a la rubia blandir su espada en el aire mientras que hacía movimientos con su brazo luego giraba su cuerpo a otra dirección bajando su espada con fuerza, al igual que la ponía vertical.

Kyojuro sonrio al ver la motivación de su nueva estudiante, ya que estaba decidido en entrenar a la Ishikawa.

Luego, vio como la rubia cayó de rodillas sin poder respirar, el inmediatamente se acercó a ella preocupado.

Kyojuro- Lo hiciste bien. -Le dijo sorprendiendola.

Hanae- S-Señor Kyojiro, n-no fue mi intensión despertarlo.

Kyojuro- No te preocupes, vamos levántate.

Ella miro la mano del hombre enfrente ella y la tomó siendo jalada fácilmente por el.

Kyojuro- Regla 1: nunca debes de presionar tus pulmones o si no causadas un dolor muscular en ellos. Regla 2: Siempre mantén tu respiración concentrada, respira hondo y sacalo haz eso tres veces y luego concentra tu respiración.

Hanae asintio escuchando atentamente a Kyojuro quien le indicaba lo que debe de hacer, luego ella empezó a hacerlo aunque con errores pero los restauraba.

Pasaron días en ese proceso en donde Kyojuro sonreia con cada logro que ella hacía, Hanae sonreia por la gran motivación que su Maestro quien daba.

Hanae- Ahora... -Murmuro respirando hondo para así sacar el aire esta vez con una flama en el, así su espada fue rodeada por un fuego y logró hacer un giro con el haciendo un círculo alrededor de ella en forma vertical.

Kyojuro- ¡Así se hace!, ¡estuviste esplendida, lo hiciste perfecto!, ¡te felicito!. -Dijo cruzados de brazos sentado a lado de Senjuro quien tenia en sus piernas a Sara quien aplaudia viendo a Hanae.

Hanae- Gracias, Señor Kyojuro. -Sonrio ella con la respiracion agitada aunque se tambaleó ella fruncio el ceño cerra sus ojos concentrando en no desmayarse o caer.

Cuervo- ¡Misión!, ¡Mision!. -Exclamó un cuervo y era el de Kyojuro.- ¡Deben de dirigirse al oeste, muchas personas desaparecidas a causa de un tren maldito!, ¡Kruak!. ¡Personas desaparecidas a causa del tren Infinito!, ¡Se les solicita al Pilar de la llama, Kyojuro Rengoku ir personalmente con Hanae Ishikawa para resolver el problema!.

Kyojuro- ¡Bien, entiendo!.

Hanae miro a su maestro quien estaba motivado aunque apenas ayer salió de su misión pero ya estaba preparado para otra más, Senjuro sonrio encogiendo sus hombros ante la mirada sorprendida de su compañera.

Hanae sonrio para soltar una risa que contagio a Senjuro.

Pero poco a poco su risa desapareció al igual que la de Hanae quien confundida miro la triste aura de Senjuro.

Kyojuro- Estaremos bien, no debes de preocuparte.

Senjuro- ¿Y si en esta mision mueren?.

Hanae- No moriremos, te prometemos que volveremos con ustedes.

Kyojuro- ¡Ustedes son muy importante para nosotros, así que no debes de preocuparte que nosotros somos muy fuertes más ahora que Hanae logro dominar la respiracion de la llama!.

Hanae- ¡S-Señor Kyojuro!, aun no se si la logro dominar aún... -Dijo ella mirando al suelo pero en eso siente una mano en su cabeza.

Kyojuro- No pienses negativamente, piensa positiva ya que tu progreso va incrementando. ¡Bien, hay que preparanos!.

Hanae asintio para así sacarse sus zapatos para entrar al pasillo y tomar a Sara en sus brazos ayudando a Senjuro con ella.

Cuando se prepararon Hanae se puso su haori blanco y lila.

Kyojuro- ¿Estas lista, Hanae?.

Hanae- Si, en un momento salgo. -Aviso ella para asi mirar al suelo aunque escucho la puerta abrirse.

Kyojuro- Sabía que no estabas cambiandote, solo estabas pensando.

Hanae no se dio vuelta para prestar atención a su maestro solo pensó en su misión.

Hanae- Es posible... que un demonio fuerte este detrás de esto.

Kyojuro- Es posible como dices, pero no imposible de vencer. -Dijo sonriendo.

Hanae- Siempre es muy motivador, ¿no, Maestro?.

Kyojuro- ¡Como tu maestro debo de enseñarte a ser positiva y siempre estar motivada a cualquier situación!, ¡por cierto, sonríe más!.

Hanae- ¿Eh?.

Kyojuro- Así te veras más hermosa. -Le dijo sonriendo sonrojando a la rubia quien sintió sus orejas calientes.

Hanae- Si. -Afirmó sonriendo.

Kyojuro- Vamos, debemos a informar a mi padre sobre nuestra salida.

Hanae- P-Pero... creo que a su padre no le caigo bien...

Kyojuro- ¿Y que importa?. -Dijo sorprendiendo a su alumna quien sonrio al saber que el la ayudaba y defendía, se sentía protegida por aquel hombre de aura amable.

Ellos pasearon por el pasillo para llegar a la habitación de Shinjuro.

Kyojuro- ¡Con permiso, padre!. -Dijo el con una sonrisa, para deslizar la puerta y dejar entrar a la chica y luego volver a cerrarla esta vez ya dentro.

Hanae se sento a lado de Kyojuro manteniendo sus piernas dobladas y sentándose en ellas.

Shinjuro- ¿Que quieren?.

Hanae- N-Nosotros v-venimos... a despedirnos.

Kyojuro- Ya nos vamos, padre.

Shinjuro- Como sea. -Dijo el aun estando leyendo acostado de lado en su cama.

Hanae miro a su lado con tristeza y Kyojuro la miró, el solamente la tomó de la mano.

Kyojuro- Solo venimos a despedirnos, porque nos vamos.

Shinjuro- Que bien, llevense a esa bebé con ustedes, es muy llorona.

Hanae solo se sorprendio iba a decir algo pero Kyojuro la detuvo tomándola de la mano con algo de fuerza llamando su atención.

Kyojuro- No padre, podría ser peligro para una bebé de 3 años estar en una misión.

Hanae- Senjuro la cuidara, S-Señor Rengoku...

Shinjuro- Si, si, ya entendí. -Dijo y Kyojuro se levantó con una sonrisa jalando con el a Hanae.

Kyojuro- Nos vamos, hasta luego padre.

Hanae- Hasta luego, Señor Rengoku.

Así ambos se retiraron de la habitación, Hanae solamente veía el suelo pensando en como aquel hombre podía tratar a dos seres de luz de esa manera tan cruel.

Kyojuro- Tranquila, tal vez andaba bebiendo.

Hanae- No puedo creer que... -Ella detuvo a Kyojuro quien la miró.- Que su padre lo trate así a usted, usted que es un hombre dulce, amable, generoso, tan lindo con las personas, al igual que con Senjuro, el es un niño apenas y ya lo está maltratando... -Dijo ella sin cree en como era aquel padre de los hermanos.

Kyojuro solo miro serio sin su sonrisa a Hanae quien estaba mirandolo con tristeza y preocupación, el se acerco a ella tomándola de los hombros y envolviendola en un abrazo.

Kyojuro- ¿Que importa?, por lo menos llegaste tu y Sara a darnos alegría.

Hanae- ¿Que?...

Kyojuro- El se volvió así después de la muerte de mi madre, nos dejó a la suerte, aún así yo al ser el mayor debía de ayudar, proteger y amar a Senjuro. Pero llegaste tu y nos alegraste los días, tomaste el puesto de mi madre... e hiciste sonreír a Senjuro de una forma que había olvidado ya.

Hanae- S-Señor Kyojuro... -Ella sonrio sacando lágrimas para abrazar al hombre de cabellos amarillos.- Y haré mi mayor esfuerzo para ser más atenta y hacer que sus días sean de felicidad.

Kyojuro- No es necesario, con tu presencia y la de Sara son más que suficientes.

Hanae- Entiendo...

Kyojuro- Es hora de irnos.

Hanae- Si. -Ella se separó de él y aún tomados de las manos se dirigieron a la salida en donde Senjuro jugaba con Sara en sus brazos.

Senjuro- Hanae, Kyojuro. -Sonrio el mirando a los Cazadores.

Hanae- Ya es hora, Senjuro.

El mencionado solo bajo la mirada borrando su sonrisa.

Kyojuro- Prometemos que volveremos sanos y salvos.

Hanae- Que solo será un simple demonio que causa molestias grandes a los humanos.

Senjuro- ¿Lo prometen?...

Kyojuro asintio con una sonrisa Senjuro solo saco lágrimas para así abrazar a su hermano mayor.

Senjuro- Vuelvan a casa, por favor... -Dijo el llorando en el abdomen de su hermano quien lo abrazo.

Haeae sonrio para así ver como Kyojuro abrió su brazo permitiendole unirse a ese momento, ella con gusto se acercó rodeando sus brazos a Senjuro teniendo cuidado de no aplastar a Sara quien veia confundida la situación.

Sara- Mamá...

Hana solo sonrio para así besar la frente de Sara y luego la de Senjuro quien se sonrojo y sorprendio.

Hanae- Volveremos.

Kyojuro- Te lo prometemos.

Senjuro sonrio para asentir abrazando por última vez a los dos Cazadores.

Senjuro- Buena suerte.

Kyojuro- ¡Si!.

Hanae- Hasta luego. -Dijo ella y con kyojuro se alejaron mientras que veian como Senjuro se despedía con Sara en su brazo derecho.

Sara- Adiós, Mamá... -Murmuro ella mirando a la mujer rubia y sorprendiendo a Senjuro quien sonrio.

Senjuro- Mamá volverá.

Fue una promesa dada por ambos.