El traqueteo del autobús era constante, al igual que los ronquidos del extraño que viajaba cinco asientos por delante de él. 

Miró la hora, hace sólo dos horas que habían salido, faltaban siete horas más, no iba a haber paradas, solo un recorrido nocturno en aquel horrible bus. 

Taehyung miró al techo y recordó con nostalgia su cama, le encantaría volver a estar en ella, junto a JungKook, abrazados, o consumando su amor. Pensó en la última vez que se habían acostado juntos, justo antes de salir de casa. Resopló. Ahora estaba incómodo y excitado. 

Miró a su novio, que estaba a su lado, y se sorprendió al verle con los ojos abiertos y mirando al techo. 

- No puedes dormir- susurró. 

- Me sorprende que haya gente que pueda dormir aquí- susurró, a su vez, de mal humor- esto no es a lo que estoy acostumbrado, hyung- finalizó la frase con un puchero. 

- No te entiendo... 

JungKook y él nunca habían sido de viajar en transportes lujosos, incluso no era la primera vez que iban en bus a algún lugar, aunque sí de noche. 

- Estoy acostumbrado a que llegues por las noches y podamos hablar de nuestras cosas, que te quejes conmigo de las cosas malas de tu trabajo y yo quejarme contigo, cenar juntos viendo una serie y luego irnos a la cama. Me cuesta mucho dormir o sentirme bien sin que tú y yo... 

Taehyung entendió en el acto lo que quería decir, miró por encima de los asientos y vio que todos estaban vacíos, salvo el del hombre que dormía unos cinco asientos por delante y los tres primeros. 

- Podemos intentar algo aquí- propuso Taehyung en un susurro- todos duermen, apenas hay gente, estamos en última fila. 

JungKook se quedó pensativo, mirando a su novio, quien le proponía tener sexo dentro de un autobús de larga distancia con varias personas dentro del mismo que podrían oírles o verles. Se meterían en un lío si lo hacían. 

Con lentitud y sin hacer ruido, reclinó su asiento hacia atrás y Taehyung le imitó. Tragó saliva y, sintiendo su corazón a mil, se bajó los pantalones del chándal que llevaba, junto con la ropa interior y llevó la mano de Taehyung hacia su entrepierna. 

En el momento en el que los largos dedos del chico tocaron su miembro, JungKook sintió como mil corrientes eléctricas corrían alrededor de su cuerpo. Quiso gemir, pero sólo acarició la cara del chico mientras era conducido por el ansiado camino del placer. 

Dejó de masturbarle y lamió sus propios dedos para comenzar a introducirlos uno por uno. Decir que hacerlo sin lubricante era difícil era quedarse corto, la entrada del menor era muy estrecha. 

- ¿Prefieres que pare?- preguntó en un susurro apenas audible- no quiero dañarte.

JungKook negó con la cabeza y Taehyung sacó su dedo índice para salivar la entrada del chico y volver al introducirlo. Ésta vez pasó entero y JungKook cerró los ojos mientras sentía como Taehyung acariciaba su interior. Sí, eso era lo mejor del sexo con Taehyung, que el chico era capaz de acariciar su interior, no sólo le metía los dedos para dilatar su entrada. Sintió como Taehyung introducía el segundo con gran dificultad, forzando su entrada. Se tapó la cara y Taehyung paró.

Le miró y negó con la cabeza, en gesto de que continuara.

- Jamás voy a continuar algo que sé que te hace daño...

JungKook se deleitó en aquella mirada. Amaba la forma en la que Taehyung le miraba, le hacía sentir como si él fuera único e insustituible en este mundo. Y, cuando le miraba así, le hacía sentir de ese modo.

Taehyung sacó lentamente los dedos del interior de JungKook y éste le sujetó la mano. Sin romper el contacto visual, JungKook llevó su propia mano a su boca y la llenó de saliva, luego la dirigió a su entrada y después empujó los largos dedos de Taehyung dentro de él. Con más maña que fuerza pasaron y JungKook sonrió cuando sintió los dedos de su pareja acariciar su interior.

- Hyung...- gesticuló JungKook.

Taehyung comenzó a mover los dedos en círculos, en tijeras, a meterlos y a sacarlos y la respiración del menor se fue haciendo cada vez más acelerada.

El mayor sacó sus dedos de la entrada del menor y éste se giró, dándole la espalda, con una pierna flexionada hacia arriba. Taehyung ensalivó su miembro y la entrada de JungKook y, con delicadeza, entró en él.

A medida que iba entrando en él, JungKook se iba agarrando a su asiento, mordiendo su sudadera y gimiendo mentalmente el nombre de Taehyung.

Cuando terminó de entrar en él, Taehyung se quedó quieto pero JungKook demandó el vaivén. Así pues, lentamente, Taehyung comenzó a moverse.

Pronto quedó claro que aquella no era la mejor de las posturas, Taehyung no podía penetrarle correctamente, su miembro se salía a cada rato y JungKook no se sentía tan bien como en otras ocasiones.

Con un suspiro de hastío, JungKook se dio la vuelta, pasó una pierna por encima de la cintura de Taehyung y comenzó a moverse. Pero, en aquella postura, era Taehyung quién salía perjudicado, apenas podía moverse y para nada lo estaba disfrutando. Pero parecía que JungKook estaba un poco más contento con la postura, así que prefirió no decir nada, hasta que su novio notó la falta de ganas.

- ¿No lo estás disfrutando?- susurró, apenado.

- Es la postura... pero tú...

- Lo que me excita es que lo disfrutemos los dos.

Taehyung sonrió y echó un ojo por encima de los asientos. Todos seguían dormidos y el conductor pendiente de la carretera.

- Ponte encima mía- susurró Taehyung- túmbate encima de mí.

Taehyung se puso boca arriba y JungKook se tumbó encima del cuerpo del mayor. Taehyung se abrió de piernas y JungKook sintió en su entrada el miembro del mayor.

Con lentitud se dejó caer sobre el miembro del chico y se mordió el labio inferior. Ahora sí que sentía el falo de Taehyung por completo. Miró al mayor y a juzgar por su expresión, él también sentía placer. Tenía los ojos cerrados y volvía a respirar agitadamente.

Comenzó a moverse sobre el chico y el cuerpo del mayor tembló. Se abrió más de piernas y enterró por completo el miembro del mayor en su interior.

- Has pervertido... a tu dongsaeng... hyung...

- Tú ya eras... un pervertido...

JungKook sonrió y siguió moviéndose, despacio, con cuidado para que sus cuerpos no chocasen e hicieran ruido.

- No sé... si debo... preguntarte esto... hyung...- murmuró JungKook al oído de Taehyung.

Taehyung sonrió, ambos adoraban esos juegos en el sexo, pero en aquellas circunstancias, era arriesgado, como poco.

- Dime... Kookie...

- Mi hyung... ¿estás así de duro por mí?

- Sí... Kookie, sí- murmuró.

- Entonces córrete dentro de tu dongsaeng...- susurró- quiero sentir... lo caliente que estás... vamos hyung... mientras te monto... córrete... sé que me tienes ganas... vamos...

Taehyung, que se sentía a punto, se agarró a la cintura de JungKook y comenzó a mover sus caderas velozmente pero procurando no golpear la piel del menor con su cadera para no hacer ruido. En el momento en el que lo hizo, sintió como el cuerpo de JungKook se tensaba y el chico escondía su cabeza en el cuello de Taehyung.

- Hyung... vas a hacer que me corra... me corro, hyung...

Y, en el momento en el que JungKook alcanzó el final, Taehyung también lo hizo.
Con un suspiro, JungKook se quedó tumbado sobre el cuerpo de su pareja y, a los segundos, sintió como Taehyung salía de él pero seguían abrazados. Con cariño y mimo, Taehyung le colocó la ropa su pareja, se la colocó a si mismo se giraron y, abrazados, se quedaron dormidos el resto del viaje.