EL QUE SALVARÁ AL HÉROE Y AL MUNDO - PARTE 2
PVO POPP
«Cuando KillVearn me ofreció ver a Dai, no dudé ni un instante en aceptar vincularme con su alma maligna.
Maam me pidió que no le creyera, pero ella no sabe que desde hace un mes adquirí la habilidad de utilizar magia astral de alto nivel.
El miserable de KillVearn invocó su poder oscuro y fue ahí que aproveché que estaba concentrado en el hechizo de vinculación de almas para liberarme e invocar mi magia astral.
En el mundo real mantenía a Piroro inmóvil mientras hacía el desdoblamiento de mi mente para materializarme dentro de la de él.
Ahí me encontré con varias rocas envueltas en cadenas que flotaban en un plano completamente negro.
El tiempo es crucial cuando uso la magia astral, porque mi cuerpo humano no tiene la capacidad suficiente como para soportar tanta carga de energía vital. Por ese motivo tuve que liberar la luz de mi insignia para iluminar las rocas y encontrar alguna que me permitiera ver a Dai.
Mientras lo buscaba me topé con una roca dorada. Por su dureza y por la cantidad exagerada de cadenas que la resguardaban, me imaginé que contenía algo muy importante que KillVearn no quería que nadie descubriera.
Sin perder tiempo usé un hechizo para destruir las cadenas, pero al tratar de hacer lo mismo con la roca, me frustré porque ninguno de mis hechizos consiguió hacerle el mínimo rasguño.
Estaba cansándome por la pérdida de energía, pero no quería irme sin haber encontrado a mi amigo y además algo me decía que tenía que ver lo que KillVearn escondía en esa roca.
Como último recurso puse mi mano sobre ella y concentré mi poder mental para adentrarme en su interior.
El resultado fue inesperado. La roca no era un contenedor, si no una piedra del destino.
Ya me habían hablado sobre ellas y sé que pueden mostrar el pasado, el presente o el futuro, y lo único que tenía que hacer, era decidir cuál de los tiempos deseaba ver.
No tenía que pensarlo demasiado. Desde que supe la verdad de la existencia de los caballeros del Dragón, y el motivo por el que Dai decidió sacrificar su vida, me propuse encontrar la manera de cambiar su cruel destino, por eso le pedí a la piedra que me mostrara un futuro donde mi amigo pudiera encontrar la felicidad eterna que los dioses les habían negado a sus predecesores.
Mi deseo fue escuchado y enseguida fui trasladado dieciséis años en el futuro.
Frente a mí estaba Dai. Su aspecto lógicamente era la de un adulto de veintiocho años. Su complexión musculosa lo hacían verse inclusive más poderoso que su padre Barán. También su altura era bastante, (quizás es más alto que yo, o tal vez somos de la misma estatura, pero como no me he visto en este lugar, no puedo afirmar nada). Su ropa seguía siendo similar a los atuendos que Leona le diera en el pasado y eso significaba que vivía con ella, (espero que como esposos).
Al parecer estaba en un campo a las afueras del reino de Papunika.
Por la pose de combate y su mirada decidida a darlo todo, me di cuenta de que una pelea estaba a punto de comenzar, y al mirar hacia atrás, me encontré con un gigantesco dragón rojo.
No sé si trataba de Velzar, pero haya sido él o no, pude constatar que es mil veces más poderoso que Vearn, cuando empezó a luchar contra Dai.
Los dos se atacaron con poderes que jamás había visto. Dai era capaz de usar su emblema a toda su potencia y aunque el tiempo que estaba durando el combate fue largo, no se notaba cansado.
Una manada de monstruos y dragones cubrieron el cielo. Nubes oscuras lanzaron rayos que destrozaban la tierra.
Varias explosiones se escucharon a lo lejos y aterrado vi cómo se destruían las casas de los aldeanos.
El grito de Dai me obligó a apartar la mirada de la devastación y aunque traté de usar mi magia para ayudar a mi amigo, me fue imposible invocar tan siquiera un Gira.
La frustración era grande y es que por más que gritaba e intentaba tocar a Dai o golpear al dragón, lo único que conseguía era traspasarlos.
El dragón lanzó varias llamaradas de fuego que lastimaron a Dai al grado de hacerlo caer en el suelo.
Estaba por lanzar otras más contra él cuando un halo de luz golpeó su cuerpo y sus alas se desvanecieron por la fuerza del ataque.
El dragón yacía en el piso respirando con dificultad y de pronto cayó sobre él un joven de aproximadamente quince años.
Su armadura se me hizo conocida y abrí la boca impresionado al notar que tenía un gran parecido con Hyunckel.
Una luz roja cubrió la espada del joven guerrero y usando una velocidad impresionante, empezó a cortar el cuerpo del dragón, sin embargo su piel es tan dura que no consiguió acertar en un punto vital.
Agitado, saltó hacia Dai y lo ayudó a levantarse.
Los dos se sonrieron y con un movimiento de cabeza que me dio a entender que estaban planeando su ataque final, adoptaron sus poses combativas y mientras Dai se transformaba en un dragón como su padre, el joven guerrero hizo brillar su puño con una luz que también reconocí.
Sin dar tiempo a que el enemigo recobrara sus fuerzas, se lanzaron sobre él y con el poder de Dai combinado con el "Puño de Luz arrollador" del muchacho, lograron destruir la capa de piel que cubría el corazón del dragón, poniendo punto final a su vida con un Giga Strash cruzado.
Una vez que comprobaron que su enemigo mortal había muerto, se abrazaron y palmearon su espalda.
-¡Hyun! -la voz de la mujer que tiene cautivo mi corazón estremeció mi cuerpo -.
Lentamente giré hacia ella y me quedé impresionado por la hermosura que adoptó con los años, (aun con la extraña manera de vestir que usaba ahora).
No recuerdo que Maam fuera de las mujeres que visten como monja, pero ni la larga túnica que cubre por completo su cuerpo, logró opacar su belleza natural. Se podría decir que tiene el estilo de las sacerdotisas, porque incluso lleva sobre su cabeza el gorro que suelen usar, (se parece mucho a su madre cuando luchó junto al maestro Aván). Lo único que no me gustó es el color negro que la hace ver más seria que de costumbre.
La emoción que siento al mirar a la Maam del futuro me hace mover mis piernas para acercarme a ella, pero me detengo en el momento en que un Hyunckel maduro se coloca a su lado.
Él tampoco ha cambiado mucho y por desgracia me doy cuenta de que nunca logró recuperarse del daño que sufrió durante la batalla contra Vearn, (el bastón que lleva en su mano y su lentitud al caminar me lo demuestran).
-¡Papás! -el joven guerrero gritó emocionado y corrió hasta llegar con ellos -.
Aquí es donde mi corazón terminó por romperse por completo.
Ya presentía este resultado en el momento en que vi que utilizó el poder de Maam, pero escucharlo reafirmar mis sospechas fue un duro golpe a mi alma.
-Yo...bueno... es que... ¿no me van a felicitar? -el muchacho tartamudeó tanto y estaba rojo como un tomate, que hasta yo me sentí mal por él -.
Como siempre Hyunckel no dijo nada y mantuvo su cara seria, pero Maam se acercó a su hijo para abrazarlo.
-Lo hiciste bien, Hyun.
Maam le dio un beso en la mejilla y se alejó para dirigirse a uno de los lugares donde se aprecia un incendio que consumía las casas de los aldeanos.
Hyunckel le dio una palmada en la espalda y tomó un rumbo distinto al de ella.
«Estaba impresionado... ¿Desde cuándo Maam es tan seria y más con un hijo suyo?»
-¡Tranquilo, Hyun! -Dai puso su mano sobre el hombro del chico y le sonrió cálidamente -sabes que para Maam es difícil verte combatir. Es por estos combates que tu padre quedó muy lastimado y su vida no ha sido sencilla desde entonces.
-Lo sé, pero no me gusta verla triste todo el tiempo... Ni una sola vez sonríe y menos a mi padre o a mí -expresó con dolor -.
-Es lógico que sea así. La lastima mucho ver al hombre que ama sufrir por sus limitaciones, y en tu caso, el seguir el mismo camino de guerrero que Hyunckel, es algo que odia más que nada.
-¡Ojalá, mi padre se recuperara!, si estuviera sano, nuestra familia sería feliz -cerró sus puños con demasiada fuerza que provocó que sus palmas sangraran -tal vez si yo no hubiera nacido, ellos no habrían tenido que casarse.
-No digas eso Hyun -Dai lo jaló para que lo viera de frente -tu nacimiento ha sido una bendición para el mundo y para mí... Es gracias a ti que he podido vencer a enemigos que en otro tiempo no hubiera podido derrotar a menos de que sacrificara mi vida. De no ser por ti, no tendría la hermosa familia que tengo con Leona.
-¡Tío! - el joven se conmovió hasta el punto del llanto -mis primos, tú y la tía Leona se merecen esa vida llena de paz y amor.
-También tus padres la merecen, por eso debemos encontrar una cura para Hyunckel. Verás que si la hallamos, tu madre volverá a sonreír.
Una ventisca rodea mi cuerpo y me lanza lejos de ellos.
Al abrir los ojos me veo de nuevo en la mente de KillVearn y su risa me indica que está despierto.
Rápidamente escapo de su mente y una vez que mi otro yo regresa a mi cuerpo, lanzo uno de mis nuevos hechizos; Mahyado y me apresuro a alejarme junto con una desmaya Maam, antes de que ese maldito se recupere»
Termino mi relato y observo cómo todos tienen la boca abierta, (sobre todo el pobre de Hyunckel).
Claramente omití las partes en que me sentí un fracasado sin futuro para que no me tengan lástima, pero el resto de la información ha sido demasiada para ellos.
-Estás de broma, ¿verdad? -Larhart es el primero en recuperarse y en animarse a preguntar -.
-¡No puedo aceptar que eso sea cierto! -la señorita Amy reaccionó como a mí me hubiera gustado hacerlo si pudiera, (golpeó la mesa con todas sus fuerzas) -.
-Bueno -habló Chiu con una sonrisa nerviosa en la cara - la historia no es tan descabellada... Todos hemos visto como la señorita Maam se preocupa por el guerrerito y si mal no recuerdo, en la batalla contra MystVearn, se la pasó colgada del cuerpo semidesnudo del malhumorado ese.
«Esa rata maldosa sabe dónde golpearme y es un golpe mil veces más doloroso que los ataques de Vearn»
Al observar con más atención, me encuentro con unas miradas que no quería ver.
La lástima es el peor sentimiento que alguien te puede dedicar y es justamente la que están sintiendo por mí el maestro Aván, la princesa Leona, Crocodine, Him, y la madre de Maam, (Merle no dice nada y afortunadamente tampoco me mira de esa manera tan cruel).
-Popp -la princesa ahora me habla con delicadeza -no deberías creer en una visión que encontraste en la mente de KillVearn. Sabes bien que es un traicionero y tal vez ideo un plan para herirte.
-¡Es cierto, Popp! -Crocodine la secunda -seguramente conoce tus sentimientos por Maam y decidió usarla para que bajes la guardia.
-Así es! -Him exclama y se cruza de brazos -aunque últimamente no te he visto babear por esa chica, recuerdo que antes demostrabas mucho interés por ella y es lógico que ese monstruo lo notó.
-Por favor, Popp -mi maestro también interviene -ve más allá de esa visión. Hay cosas que me hacen pensar que de ser cierta, no es el mejor futuro que Maam puede tener.
Mi maestro a veces no piensa lo que dice. Sus palabras fueron demasiado duras para Hyunckel y en cuanto las dijo, su cuerpo se estremeció.
-Me imaginé que algunos de ustedes no querrían creer en la veracidad de esa visión. Por eso me fui para confirmarla antes de tomar una decisión.
-¿Quién te confirmó que es cierta? -adivinó mi maestro que hablaba de alguien -.
-Son personas de mi total confianza y con un poder místico tan grande que ninguna visión falsa podría pasar por real si no lo fuera.
-¿Poder místico? -la princesa Leona se levanta para acercarse a mí -¿de quiénes hablas?... Merle no me contó que hubieras conocido personas así durante su viaje.
-Es porque ella nunca se enteró -Merle baja la mirada y comprendí que no es que no se hubiera dado cuenta. Más bien, jamás quiso incomodarme con preguntas a las que no podía darle respuesta -.
-Sean quienes sean, seguramente te mintieron. No puede existir un futuro como ese entre Maam y yo -Hyunckel por fin habló, y lo hizo con tanta determinación, que por primera vez sentí admiración porque aun sabiendo que es el gran amor de Maam, no quiere lastimarme con su triunfo -.
-No sólo existirá porque es una visión real -le respondo lo más animado que puedo -también está el hecho de que Maam te ha amado desde hace mucho tiempo y todos en esta sala lo sabemos.
-Si me ama tanto como dices, ¿por qué tuviste que borrar justamente los recuerdos que tiene contigo?... ¿qué más te dijeron esos seres con poderes místicos, como para que necesitaras quitarte del camino?
«¡Maldito tonto!... no me esperaba que me cuestionara de esta manera y aunque quisiera revelar lo demás, no puedo, ni debo hacerlo»
El resto evalúa las palabras de Hyunckel y cuando llegan a una conclusión, vuelven a mirarme, pero esta vez con duda.
-Antes de que se les ocurra decir que Hyunckel tiene razón, permítanme recordarles que si no fuera porque Merle me pidió confesar que estaba enamorado de Maam cuando la hirieron por mi culpa, ella jamás se habría sentido con la obligación de intentar amarme de una manera distinta a la de una hermana mayor.
Mis lágrimas querían surgir ante esta verdad y aunque nunca oculto mi sentimentalismo y lloro constantemente, demostrarles lo doloroso que es no ser correspondido por la mujer que amo es la peor humillación que alguien puede tener y no estoy dispuesto a que sigan teniéndome lástima.
-Sin esos recuerdos tu relación con Maam podrá darse al fin, porque ya no existirá en su corazón la presión de mi confesión... Con su unión nacerá el guerrero que Dai y este mundo necesitan - me fuerzo a sonreír y afortunadamente consigo hacerlo casi con sinceridad -ese joven es nuestra esperanza y todos debemos luchar para que cuando esté aquí, tenga una vida mucho más feliz que la vi en esa visión.
En el rostro de todos se dibujó el desconcierto, pero poco a poco eso cambió porque se dieron cuenta de que tengo razón.
-¡Lo siento tanto, Popp! -la princesa Leona puso su mano en mi hombro y volvió a mirarme como no me agrada que lo hagan -tenía la esperanza de que ustedes terminarían juntos, pero yo... -sus ojos se cristalizaron -yo quiero que todos los humanos tengan la paz que tanto anhelan y también quiero que Dai esté bien.
Los demás asintieron a las palabras de la princesa y aunque no se atrevieron a decir otra cosa, sé que piensan lo mismo.
-No te preocupes, princesa -me puse de pie para poder limpiar sus lágrimas -nunca llegué a creer que Maam se enamoraría de mi porque la conozco mejor que nadie en esta sala y sé cuánto ama a Hyunckel. Por eso no quería que me acompañara a buscar a Dai... Ser caritativa es una desventaja porque no deseaba lastimarme, pero ahora sabemos que al final ganará el amor y gracias a eso tendremos una luz de esperanza para todos.
La princesa lloró aún más fuerte y luego se echó a correr fuera de la sala.
El incómodo silencio y el ambiente deprimente que había en el lugar me desesperó y para terminarlo me puse a reír.
Todos me miraron como si estuviera loco, pero al menos ya no estaban tristes.
-¡Tranquilos muchachos! -los miré con las manos en mi cintura mientras dibujaba en mi rostro una gran sonrisa -soy un hombre muy guapo y además joven. Aún no pienso casarme y dudo que lo haga pronto... Si quieren compadecer a alguien, mejor compadezcan a Hyunckel... Si mis cuentas no fallan. Cuando Maam cumpla dieciocho, el pobre ya tendrá la soga del matrimonio bien sujeta a su cuello.
La exclamación fue general por la sorpresa de saber que en sólo unos meses tendrían que prepararse para la boda de los dos tórtolos.
La señorita Amy no soportó esa información y al igual que la princesa, salió de la sala llorando a mares.
Merle se levantó para seguirla y como vi que también había rastros de lágrimas en sus ojos, me apresuré a ir tras ella, pero cuando salí al jardín, apareció frente a mí una luz dorada que luego se materializó en una mujer hermosa, con una túnica blanca de sacerdotisa, (de escasa tela, por cierto), cabello largo y negro, ataviada con diversas joyas y brazaletes de oro.
-¡Buenas noches, cariño! -me saludó con su voz sensual y usando su magia se teletransportó hacia a mí para abrazarme -¿qué tal te fue con ese plan que ideaste para que la niñita te olvide?
-¡Bi... bien! -como siempre me puse nervioso porque esta mujer es más voluptuosa que Maam y la poca ropa que cubre su cuerpo es una distracción para cualquier hombre -¡oye, deja de abrazarme así!... si alguien nos ve, quedaré como un verdadero pervertido.
-Ya es tiempo de que tus amigos me conozcan -afianzó más su abrazo y sus pechos se aplastaron en el mío provocándome un gran sonrojo -mis hermanas consideran que ya no tiene caso permanecer ocultas porque el futuro que quieres obtener necesita de nuestra magia y sabiduría para cuando nazca el pequeño de esa niña.
-Está bien, puedes mostrarte ante ellos -peleaba para liberarme, pero hasta en fuerza es más poderosa que Maam y mis intentos fueron en vano -¿quieres soltarme?... de por sí tengo mala fama y si me ven así contigo, esa rata molesta querrá darme otra golpiza.
-¿Y qué puede reclamarte si ya eres mío? -acarició mi mejilla y después me besó -.
Corresponder un beso no es sencillo cuando en tu mente y corazón habita otra persona.
Muchos piensan que para los hombres no es importante a quién le damos nuestro primer beso, pero cuando me enamoré de Maam, ansiaba poder tener esa experiencia con ella, sin embargo el destino no lo quiso de ese modo y es esta mujer quien obtuvo lo que deseaba compartir con mi verdadero amor.
-Cada día besas mejor e incluso siento que no tardarás en amarme más que a esa niña torpe que no supo valorarte -habló sin despegar demasiado sus labios de los míos, y antes de soltarme volvió a besarme con pasión -¡y bien!, ¿les contaste sobre ambos futuros?
-Por supuesto que no -crucé mis brazos y la miré molesto por haber hablado en voz alta sobre ese asunto -.
-Esa niña tiene razón... la felicidad del caballero Dragón, es mucho más importante para ti, que la de ella -aunque Maam no le cae bien, está molesta por mi decisión -si se cumpliera el otro futuro, tú serías el que tendría lo que tanto desea.
-Y Dai moriría definitivamente y jamás podría ser feliz con la princesa Leona... ¿acaso piensas que voy a permitir que mi mejor amigo tenga ese triste destino?... Dai es la primera persona que confió en mí. Lo quiero como a un hermano y por él soy capaz de renunciar a mi propia felicidad.
-Si tus amigos nos ayudan, podemos cambiar el destino del caballero del Dragón. De esa forma tú también serías feliz.
-¡Olvídalo!, prefiero morir, a tener a mi lado una mujer que está conmigo por lástima -no quería hablarle duramente, pero si de verdad le gusto, ¿por qué quiere que cambie de idea? -.
-¿Estás seguro de que sería por lástima?... creo que no viste la diferencia entre un rostro feliz y uno triste.
-Astrid, tú no la conoces como yo. A ella le gustan los hombres muy guapos y yo no entro en ese estándar. Incluso dudo que yo te guste como tanto pregonas... con el futuro que escogí para ellos, tú y yo podremos estar juntos, ¿no se supone que eso era lo que querías?, ¿o es que ya viste mejor al guerrero inmortal y descubriste que es él quien te atrae?
-Soy la menor de mis hermanas. La edad de ese guerrero sería el equivalente a la de un hombre seis años mayor sobre la mía, aunque yo haya vivido más siglos... En este mundo tú y yo seríamos de la misma edad y además no me estoy fijando en el físico a pesar de que te estás convirtiendo en un hombre bastante atractivo. Lo que amo de ti, es tu carácter... Me haces sonreír y me siento bien cuando estás conmigo.
«O sea que para todas las mujeres soy un payaso que las divierte... ese no es un halago»
-No eres un payaso. Tienes un carácter amable y divertido. En el mundo donde nací, no hay risas, ni sentimientos.
-Odio cuando lees mi mente, eres igual que Merle... ¿qué ya no puedo tener libertad para pensar sin que alguien me espíe?
-Tú quisiste ser más fuerte y para eso nos vinculamos en cuerpo y alma. Si tanto te molesta, no debiste desear tener más poder.
Astrid me dio la espalda porque mis palabras ocasionaron que se sintiera mal y seguramente la hice llorar, (no sé por qué últimamente tengo la habilidad de hacer llorar a las mujeres).
Avergonzado por mi falta de tacto, me animé a abrazarla por la espalda.
-¡Perdón, Astrid!, tienes razón. Sin ti jamás habría obtenido el poder necesario para ayudar a Dai, por eso será un honor estar contigo en tu mundo.
-¿Lo harás, aunque nunca más vuelvas a verla a ella y a tus amigos? -giró para que quedáramos de frente y pasó sus brazos detrás de mi cuello -.
-Cumpliré la promesa que te hice. Lo único que espero es que no te arrepientas de haberme pedido ser tu compañero de vida. Todos saben que soy muy débil, torpe y sin atractivo.
Me reí para hacerla reír también, pero Astrid me miró con seriedad y luego sostuvo mi rostro entre sus manos.
-Tienes muy baja autoestima y no te das cuenta de lo mucho que vales... Sé que tus amigos e incluso esa niña, conocen tu valor y quizás debería hacerte entender que te necesitan para tener un futuro hermoso, pero si piensas que es mejor el otro, ya no insistiré en que cambies de opinión porque te quiero conmigo para siempre.
Astrid vuelve a unir su boca con la mía y aunque sigo teniendo a Maam dentro de mi corazón, he decidido que es tiempo de olvidarla y por primera vez le correspondo con la misma pasión que me demuestra con cada beso que me da, (después de todo, Maam se casará con Hyunckel y le dará un hijo poderoso y yo tengo que aceptar que nunca estuvimos destinados a estar juntos).
Esa noche di un gran paso para crear el futuro que Dai merece tener, pues aseguré el nacimiento del que salvará al héroe y al mundo.
Continuará...
*****
Hola de nuevo!!
Espero que este final de capítulo no haya sido molesto. Seguramente pensaban que me enfocaría en Merle y en un momento también lo pensé de esa manera, pero con lo que he notado del personaje de Popp, siento que le gustan las mujeres con mucho carácter y la dulce Merle no es así, (aunque presiento que el autor tenía planeado que fuera su pareja por la importancia que le dio y porque Maam estaba más pegada a Hyunckel en casi toda la batalla contra Vearn).
Aún no termino de ver toda la serie de TV, pero ya estoy más familiarizada con ella, (eso no significa que no tenga errores argumentales y por eso les pido comprensión).
Reitero que es una historia sin orden cronológico y tal vez el siguiente capítulo sea uno de los que debería ser de los primeros, sin embargo estoy abierta a sugerencias y puedo poner la secuencia de este, (de todas formas tengo que detallar lo anterior porque si se dan cuenta, hay cosas que dicen que causan dudas y que pasaron durante el viaje).
Por último, quiero agradecer a dos personas que me animan con sus comentarios.
Estefanía, ya te he agradecido muchas veces, sobre todo porque me has apoyado en mis otras historias y eres quien solicitó este fanfic. Tal vez sientes que tus ideas no son buenas, pero gracias a ellas he podido desarrollar la trama.
Elizabeth Palomi, mil gracias por dejar tus comentarios. No lo parece, pero para un escritor, (novato como yo, o profesional), es muy importante saber que hay alguien a quien le agrada lo que escribimos. Sin esa retroalimentación, sería imposible desear continuar porque no hay nadie a quien le interese leernos y eso desmotiva. Es por eso que valoro el tiempo que te tomas en dejar tu comentario. Ojalá que te siga gustando el desarrollo de la trama, pero si hay algo que no te gustó, (Astrid, por ejemplo), no dudes en indicarlo. Al ser un fanfic, es posible jugar con la historia porque nada está definido.
Gracias también a aquellos lectores que pasan por aquí. De corazón espero que estén disfrutando este trabajo.
Hasta otro momento!!
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