Las palabras no eran suficiente para explicar el sentimiento de Baji, la noche que pasaron juntos sería un recuerdo inolvidable, despertar y ver al contrario fue como un sueño, tanto que tuvo miedo de tocar su rostro y despertara de tal fantasía, pero de tanto verlo el de lunar termino despertando y riendo por la mueca de sorpresa que tenia el pelinegro. Kazutora había tocado la mejilla pálida y fría del contrario, haciéndolo estremecer por su calidez hasta tomar por completo su mejilla en su mano, le gustaba sentir como poco a poco su calor se incrementara en el rostro del azabache, además de que sus mejillas se tornaban rojizas.

Kazutora estuvo mucho tiempo siendo cortejado por Baji, por lo que no había tanta sorpresa, podía controlar sus reacciones, no se ponía tímido cuando era visto por tanto tiempo cuando estudiaba, Baji siempre se sentaba a verlo por lo que se acostumbro a su presencia, también los pequeños detalles como flores siendo colocadas en su cabello. De vez en cuando iban al bosque cuando el sol se escondía y el azabache aprovechaba en conseguir la flor más bonita para decorar el largo cabello de su amante, esta vez Kazutora no podía aguantar y solo reía bobamente.

—Esta noche habrán estrellas.— Habló mientras acaricia la cabeza de su animal, estaban sentados en las hierbas mientras observaba el cielo.

Baji permanecía al lado de Kazutora, recostado levemente en su hombro mientras rodeaba su brazo con el suyo, no importaba cuanto tiempo estuvieran juntos, su corazón seguía latiendo con tanta fuerza como si fuera la primera vez, al oír su voz abrió sus parpados y observó el cielo, poco a poco iba oscureciendo e iban brillando diminutos puntos, como estaban en el bosque era muy notable, no había alguna luz que las opacara, era un vista hermosa.

—¿Quieres quedarte y verlas?— Susurró despacio, estaba tan cómodo que no quería hacer algún ruido.

Kazutora asintió mientras soltaba un risita, mientras acariciaba a su felino, también estuvo haciendo un pequeño anillo de flores, con gentileza agarró la mano del contrario y le colocó el anillo en su dedo anular, esta acción hizo que Baji dejara su reposo y reaccione de una forma eufórica, el de lunar hizo un ademán de silencio, ambos estaban un poco avergonzados viendo sus rostros rojos.

—¿La inmortalidad no te da miedo?— Preguntó tratando de que ambos estuvieran calmados, Kazutora sentía su pecho latir de forma desenfrenada.

—Al comienzo fue doloroso, pero te llegas acostumbrar.

—Yo solía tener miedo, pero apareciste e hiciste que cambiara de pensar.— Entrelazo su mano con la del azabache y siguió observando el cielo, se sentía tan cursi que comenzó a sudar un poco por los nervios.

—Si estas a mi lado no importa nada, podemos explorar el mundo y aburrirnos juntos.

—Solo seremos nosotros dos, no tendrás ninguna descendencia. ¿Estas de acuerdo?

—No me interesan los niños, pero si tú llegas a querer uno no me importaría ser tu conejillo de indias.— Después de todo su pareja era un brujo, no le sorprendería que descubriera como engendrar una vida en un hombre. —O podemos robarnos un niño.

—No seas idiota.— Negó con gracia, no le importaba pasar su eternidad con las ocurrencias del contrario, le gustaba.

—No importa que suceda, no habra otra persona que pueda amar, me costó siglos tenerte, ni loco te dejaré escapar....Hasta crearon cuentos de mis cortejos.- Refunfuñó.

Esta vez Kazutora carcajeo, le hacia gracia los cuentos que inventaba los pueblerinos sobre como era enamorado por el vampiro. Esa noche se la pasaron observando las estrellas mientras estaban acorrucados, teniendo al gran animal como cojín.

Permanecieron juntos, los días la pasaban en cama, las tardes Kazutora exploraba los alrededores y en las noches ambos iban a ciudades o pueblos a divertirse, convivir con otras personas también era agradable, siempre estaban juntos sin despegarse un segundo, creando nuevas historias que los pueblerinos contaban a sus niños.

⌠ •❅──────✧Fin.✧──────❅• ⌡

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No quiero alargar esta historia, espero que les haya gustado :D.