Ashley: Es la primera vez que me sacan de una clase y todo por tu culpa Matthew.

Matt: Ya has escuchado lo que dicen: siempre hay una primera vez. Y no fui yo quien te sacó de la clase.

Ashley: Sí, fuiste tú y tus malditos mensajes.

Matt: Yo no te dije que los leyeras durante la clase, pudiste esperar.

Ashley: ¡Maldito seas!

Matt: ¿Por qué los leías durante la clase?

Ashley: Porque me los enviabas durante clase, imbécil.

Matt: pues le hubieras dicho que la culpa era mía y con gusto hubiese tomado tu lugar.

Ashley: No lo habrías hecho.

Matt: Nunca sabrás que hubiese podido pasar si no lo intentas.

Ashley: A veces me aburres.

Matt: Entonces ¿Por qué sigues respondiendo mis mensajes?

Ashley: Porque a veces eres lo único que mantiene cuerda mi mente en un perturbador abismo de pensamientos.

Matt: Eso en poco se asemeja a lo que tú representas para mí.

Ashley: ¿Qué represento para ti?

Matt: No podría explicártelo.