Muchas veces es más sencillo temerle a lo desconocido que intentar ver más haya de lo que nuestros ojos nos permiten. La autoprotección es algo instintivo en toda persona, aún si eso significa mentirse a uno mismo.

Él es excéntrico, sarcástico y testarudo. Un diamantito en bruto, que muchas veces es más bruto que diamante. Sin embargo, por ahí dicen que la intención es lo que cuenta.

En el basto mundo de Cíbola, los humanos son la raza más prolifera. La más débil, pero con la dualidad de ser la más adaptable. En cuanto la pólvora y el arte de la forja llega a sus manos, los problemas no tardan en aparecer y multiplicarse como gremlins ante el agua.

La Sociedad de las 13 Casas se ha encargado desde hacía 700 años de mantener el orden entre las especies mágicas, pero después del asalto y avance humano, aquel delicado balance finalmente se rompe y entra en crisis. Especialmente cuando los miembros principales de las casas centrales desaparecen.

Por supuesto, solucionar todo ese desastre recae en los hombros del ser más desinteresado y cuestionable que podría considerarse como candidato: El último heredero del Clan Dragón.

"Porque incluso los peores defectos pueden llegar a convertirse en grandes virtudes"