Al siguiente día Hadarah llegó a sus aposentos cansada y golpeada, miró a Rümeysa esperando que su madre y la reina no estuvieran ahí.

—¿Ya está mi vestido aquí? —bostezo mirando a sus hijos dormir.

—No he visto a Ayşe desde ayer.

—Que raro, ve por ella, quiero bañarme, desayunaremos en el jardín.

—Te acompaño —dijo Eugenia haciendo reverencia a Hadarah y ambas salieron

Buscaron en sus aposentos que compartía con Nihal, en los baños, la cocina, el harén y en el jardín, ambas suspiraron cansadas y se dirigieron al cuarto de costura, la puerta estaba  abierta y se sorprendieron al ver a la joven tirada en el suelo.

—Por Díos, Ayşe ¿que te paso? —dijo Eugenia tapandola con sus ropas rotas.

—Despierta Ayşe —Rümeysa limpió una lágrima de su ojo al ver la sangre en sus piernas —la han violado.

—No es posible —negó la castaña viéndo como Ayşe se levantaba y comenzaba a llorar.

—No me hagan daño —gritó en repetidas ocasiones.

—Somos nosotras Ayşe —Rümeysa trato de tranquilizarla.

—¿Que te paso?

—Un guardia, me violó, me desgracio la vida —sollozo —me van a matar.

—Nada te pasará, te ayudaremos —dijo Eugenia  abrazandola

—Pero tienes que  decirme quién fue —dijo con enojó  la rubia y Ayşe negó temerosa.

Ambas jóvenes llevaron a Ayşe a los baños y la ayudaron a limpiarse, Ayşe miraba la sangre salir con rapidez por el agua, deseaba que así mismo saliera ese horrible momento de su cabeza.

—Vamos a ocultar esto, buscaremos a ese desgraciado en cada rincón del palacio, lo haremos pagar Ayşe te lo prometo—dijo Rümeysa abrazando a la menor —Eugenia te pido que no digas nada nunca.

—No lo haré—dijo la joven negando.

Días después María se marchaba con su corte, Hadarah y Rümeysa las miraban irse con pena.

—Valide, su majestad ha mandado a llamar a otra criada, mandaremos a Nilüfer—dijo Murhan y Mahidevran lo miró mal.

—Bien, quiero que estés despierto para que se lleven el cuerpo—dijo dándose la vuelta—iré a ver a mi hija—dijo yéndose dejando a Hadarah con Mahidevran.

—¿Que me ves kadin?—alzó una ceja Hadarah y Mahidevran iba a hablar pero Kamanha se adelantó y le dijo que no lo hiciera.

—Quiero un toldo en el jardín, iré con mis hijos, Ayşe —la joven asintió pero antes de hablar sintió un leve mareo—¿Que tienes Ayşe? ¿ya comiste?

—Aún no sultana—suspiró ella.

—Bien, pide más comida para que te sientes con nosotras

—No puedo sultana—negó

—Es una orden Ayşe—la miró y ella asintió con pena.

—Tengo que deshacerme de Hadarah—dijo Mahidevran

—¿Pero como? Tiene a la valide de su lado

—Yo tengo dos príncipes, tengo más ventaja

—Ella es Haseki, es imposible tocarla.

—Algo se nos ocurrirá,  yo tengo que ser valide, yo tengo que ser más que ella, no puede pisotear me—bufo mirando a Gevherhan—Kamanha, vamos a encontrarle un buen esposo a Gevherhan.

—Es una niña

—Aziz sultán se caso a la edad de cinco años, claro que no se fue con su esposo hasta los dieciocho, es por conveniencia—dijo con una pequeña sonrisa.

—Deja que aprenda a caminar almenos—suspiró la rubia

—Bien, pero hay que buscar aliados.

—Siéntate aquí Ayşe —dijo Hadarah viéndo a sus hijos

—No sultana, me castigarán

—No te harán nada mientras yo este viva—le sonrió y Ayşe bajo la cabeza—¿Que pasa Ayşe? Llevas días rara.

—Debe de ser el cansancio —dijo Rümeysa mirando a Ayşe.

—Ve con la doctora —murmuró viendo como Kamanha paseaba a Gevherhan—¿esa hatun quiere más a Gevherhan que Mahidevran?

—Y eso que tuvo dos niños—dijo Rümeysa sin importancia—¿Cuándo quitarás del camino a Mahidevran?

—Todo a su tiempo, no sólo ella se irá—sonrió y Ayşe cayó desmayada a un lado de ellas.

¿les gusto?

Dedicado a AnailiHernandez y a shieldsugar