Su cercanía me encantaba, me tranquilizaba aún en momentos desagradables y eso era lo único necesitaba.

Justo en este momento no sabía que hacer, si lanzarme a sus brazos y besarlo como he esperado o alejarme y hacer como que nada pasó.

Al final no tuve que decidir nada él terminó dando un paso hacia atrás.

-Listo -mi voz salió en un susurro ronco- ahora yo voy a terminar el estudio

-Bien -trataba de evitar mi mirada, dolió, pero podía entenderlo, lo volví a incomodar.

-Bien -dí un paso al costado, no sé porqué me costaba tanto irme si mi interior gritaba por escaparse de ahí, con una sonrisa y pasos lentos empecé a caminar.

-¿Es necesario? -no supe identificar el tono de su voz, pero algo en ella me hizo detener al instante, no fue dicho en un volúmen alto por lo que no sabía si sí lo dijo o solo lo mal entendí, no sabía decirlo ya que no podía ver su rostro.

-¿Cómo? -no sabía como preguntar esto, como controlarme.

-¿Por qué... -aclaró su voz después de unos segundos en silencio- ¿Por qué es necesario limpiar el estudio?

-Ahí van a ser tus... -¿cómo podía decirlo sin que nos lastimara a los dos?- pláticas con Cat

-Oh -dio un paso más cerca del fregadero- espero quede limpio -no dijo más y comenzó a lavar los trastes.

No podía creer como mi estado de ánimo cambiaba drásticamente en unos cuantos segundos, solo con una palabra, una mirada y actitud dolían o podían alegrarme.

No dije nada, solo caminé hacia el estudio y me repetía una y otra vez que él no quiso decir eso, que su intención no es lastimarme y me aferraba a la idea de que era verdad.

Me coloqué los audífonos, solo quería despejar mi mente y ocuparla en otra cosa.

Las canciones pasaban, mi estado de ánimo crecía, de un momento a otro me encontraba bailando y cantando mientras sacudía, barría, trapeaba o agarraba algún objeto para usarlo de micrófono o pareja de baile.

Realmente no tenía idea alguna de cuanto tiempo llevaba limpiando, solo que cada cosa que iba terminando quedaba reluciente, eso me inspiraba a seguir y no me daba cansancio.

En una canción mi poca vergüenza desapareció y comencé a bailar al ritmo de la música, de un momento a otro la canción o más bien mi cuerpo dio un giro para ver hacia la puerta la cual no estaba cerrada, no como yo la dejé.

Sentí el calor subir por mi rostro, mis pies se congelaron y mi respiración se aceleró.

En la puerta parcialmente recargado en ella estaba ese ser maravilloso del que me enamoré, con esa mirada única que solo era para mí.

No pude evitar el nudo en la garganta que se me formó, ni la sonrisa más grande y sincera que he tenido en estos días, mi Magnus regresó.

Cuando estaba a punto de dar un paso esa mirada desapareció para darle paso a esa mirada fría que también era especial para mi y que tanto me dolía.

Sentí miedo, nervios y una desesperación grande por querer explicarme.

-Magnus -no sabía a ciencia cierta lo que quería decirle, solo que debía disculparme- yo... yo no...

-Ya cené -su voz con ese tono y mirada fría continúan estrujando mi corazón- me voy a dormir

- ¡No! -mis pies se movieron lo más rápido que pude y mi mano estaba a punto de alcanzarlo, pero del mismo modo en que se elevó cayó a mi lado- yo no... Perdón... lo que viste...

-No te preocupes -algo en ese tono de voz me decía que en verdad debía preocuparme- al menos tú sí puedes ser feliz

-Yo no... -sin verme caminó, no podía permitir que se fuera de mí- Magnus no fue mi intención

El hecho de que no volteara a verme me hizo sentir desesperado, lo herí y sin siquiera proponermelo.

Llegué hasta el pasillo y lo tomé del brazo para evitar que se fuera.

-¡DÉJAME! -no fue un grito de enojo, fue más de pánico- NO ME TOQUES

No pude reaccionar o procesar lo que sucedía a tiempo, de lo único que fui consciente fue del empujón que me dio Magnus.

-Lo... si-siento -y era una disculpa por todo, por ser un idiota, por no haber llegado a tiempo, por hacerlo sufrir, por molestarlo e incomodarlo- perdón

No contestó, volteó al instante y esa mirada me destrozó por completo, esa persona destruida por dentro era mi Magnus pidiendo ayuda, el amor de mi vida sufriendo y yo no he podido hacer nada.

No fue mucho el tiempo en que permanecimos callados y viéndonos, pero fue el necesario para darme cuenta que tenía que hacer más por él.

Sin darme tiempo de nada más salió disparado a nuestra habitación.

-Espera Magnus -corrí detrás de él evitando por todos los medios tomar su brazo y girarlo a mí, trataba no abrazarlo y pedirle perdón hasta quedarme sin voz.

No paré hasta terminar fuera del cuarto antes de que la puerta fuera cerrada bruscamente y un grito de Magnus- ¡Quiero estar solo!

No sabía que hacer, cada cosa que hacía para hacerlo sentir bien terminaba provocando todo lo contrario.

La visión comenzó a fallarme- No, otra vez no -el aire me estaba faltando, a tientas llegué al baño, debía tranquilizarme, no podía darme otro ataque por dos sencillas razones...

Una: Magnus necesita de mí, no puedo preocuparlo y no quiero despegarme de él.

Dos: no tenía a Magnus a mi lado, o al menos no como quería, solo él llegaba a tranquilizarme y sin él no sé si estoy pequeños ataques se puedan volver más fuertes.

Pensar no ayudó en nada, sentía que me iba a explotar en cualquier momento; con una rapidez descomunal levanté la tapa del inodoro y las arcadas empezaron, odiaba vomitar, lo odiaba con mi vida, pero justo ahora no podía parar.

Después de un rato terminé sentado a un lado del inodoro recargado en la pared, el dolor de cabeza continuaba, no tan fuerte, pero las pequeñas punzadas se sentían.
Mi respiración empezó a regularse solo para dejar salir mis sollozos ¿que debía hacer? ¿como puedo demostrale que lo amo? Traté de callar, de no hacer ruido, pero todo el ruido de mi interior llegaba a ser más fuerte.

-Déjame -su voz llena de miedo me hizo limpiar mi cara y levantarme al instante.

Corrí hasta llegar a nuestra habitación y me detuve justo antes de abrir la puerta ¿debería entrar?

- ¡NOO! ¡DÉJAME! -solo eso bastó porque sin darme cuenta ya me encontraba a un lado de él.

-Shh tranquilo mi amor -pasé mi mano por su cabello- aquí estoy - al llegar a su frente pude notar que tenía temperatura- no, no otra vez

Tomé las cosas que necesitaba y corrí al baño de nuestro cuarto, llené la pequeña cubeta y humedeci el trapo.

- Ya no más por favor -su sollozo me partió el corazón, llegué a su lado y coloqué el paño frío en su frente.

-Magnus -lo sacudí un poco- Magnus, mi amor, despierta -no quería dejarlo ni un segundo más sumergido en esa situación.

-¡NOOO! -sus ojos se abrieron al instante en busca de algo o alguien, su expresión aterrada y rota era algo que jamás pensé ver en él.

-Tranquilo -susurré y él volteó a verme- estás aquí, estás bien -sus hombros se relajaron- déjame retirar el paño -apunté en su frente, lo que menos quería era volver a incomodarlo, él solo asintió- ten -le tendí las pastillas que debía tomar en estos casos, pero él no tomó las de mi mano sino las del frasco en el buró.

-Te dije que quería estar solo -fue solo un susurro, pero fue suficiente para dejarme por los suelos.

-Cuando vuelvas a dormir me iré -forcé una sonrisa, él no tenía la culpa yo debía entender eso- vamos, debes descansar

-Dudo volver a hacerlo -suspiró.

- ¿Quieres que te lea algo? -jalé la silla del buró para sentarme en ella- ¿o te cuente una historia?

- Estás jugando ¿no? -bostezo, estaba cansándolo y era bueno mientras volviera a dormir.

-Depende si quieres o no -sonreí.

-Alec... -otro bostezo- eso no va a ayudar

Dolió escuchar mi nombre en sus labios, pero verlo bostezar y que sus ojos se empezaran a cerrar reconstruyó mi corazón.

Se acomodó mejor su rostro en mi dirección y miradas repentinas.

-Duerme mi amor -me recargue en la cama- no me iré de tu lado

Sus ojos se cerraron completamente y su respiración era acompasada, solo en ese momento me permití enredar mis dedos en su cabello.

Besé su frente y uní nuestras manos, no me importaba la hora, la posición o la comodidad, solo me importaba él.

-Te amo, mi amor

*****
Hola!
Aquí es donde me golpean 🙊

Lo lamento, mi cerebro ya está desarrollando el final y aún no vamos ni a la gente mitad 😅

Gracias a todos por los hermosos comentarios y su apoyo.

¡Bienvenidos a los nuevos lectores!

Solo espero me tengan un poco de paciencia y no eliminen la historia.

No sé que me pasa, pero tratare de hacer que mi cerebro procese mejor 🙈

¿que les está pareciendo la historia?

Pueden dejarme comentarios y sugerencias, yo los leo todos, en verdad.

Bueno...
¡Nos leemos en la próxima! 😍😍