La camioneta de Chunk avanzaba a paso veloz por las atestadas calles de Royal Woods, contemplando el caos que seguía cobrando forma gracias a Luccio y sus Agentes Rebeldes, por donde pasaran, siempre habían criaturas del "Plano Sobrenatural" destruyendo todo a su paso y sembrando la muerte, celebrando como nunca hubieran hecho. El castaño contemplaba con bronca no poder ayudar a toda esa gente, sus Camaradas de Armas hacían todo lo posible, pero cada vez que derribaban y destruían a uno de ellos, dos venían para ocupar su puesto, así que, por ahora, debían concentrarse en la tarea de desactivar las bombas que el enemigo había dejado por la Ciudad. El amigo de Luna miró al joven que acompañaba a la castaña, no le tenía confianza, para nada, sus ojos expresaron disconformidad y comenzó a formular una serie de preguntas con respecto a su paradero.

- Nunca te vi en ninguna parte, ni siquiera con Luna. Pero, ¿quién eres?.- Preguntó con un tono de voz frío.

- Me llamo Dimitri Sasha Ginovaef-Yoshikage, conocido como "Agente Oriente".- Se presentó y eso llevó a que cambiara de expresión, casi ahogando una risa.-

- Jajajaja, sí, sí y yo soy el Oso Yogi.- Se burló Chunk del castaño, pero al ver que llevaba una katana, decidió lanzar otra pregunta.- Sí, dime, ¿eres de Japón o Rusia?. No, tienes más pinta a esos personajes del anime que llevan katanas y se pelean por cualquier cosa.

- Si está para burlarse, le advierto que allí afuera hay una guerra, así que más le vale llevarme hacia la Estación Central de Trenes inmediatamente o haré que lo lamente.- Sentenció Dimitri y sus palabras parecieron, de golpe, hacer efecto en la mente de Chunk, ya que había "tejido" un encantamiento para que el hombre le hiciera caso y así llevarlos directamente hacia el objetivo. 

- Claro, por supuesto.- Dijo el grandote con un tono de voz tranquilo, llevando a que Luna se le acercara al oído.

- ¿Qué pasó? ¿Qué le hiciste?.- Quiso saber ella, susurrándole al mismo.

- Tranquila, es solo un hechizo de unos minutos, nada más que eso. Volverá a la normalidad fácilmente.- Respondió el castaño, cuando, de repente, escucharon la voz del grandote, quien les pidió su atención.

- Chicos, tenemos un problema muy grande.- Avisó éste y al frenar en una esquina, allí, delante suyo, una inmensa cantidad de personas estaba atestando el lugar, quedando la Estación Central a metros de distancia.

- ¡Carajo! ¡A este ritmo nunca llegaremos!.- Bramó Luna y miró el reloj, quedándoles unos 10 minutos.

- Tal vez sí podamos. Chunk, cruza esa vereda.- Le guió Dimitri, siendo éste la única vía que tenían para llegar al objetivo.

- Mmmmmm, está bien, solo espero que la Policía no me vaya a hacer una multa.- Pidió el grandote y subió hacia aquel lugar asignado.

- Trataremos de recortar el camino desde la vereda, si no, el loco de Luccio hará volar ese lugar por los aires.- Temió Dimitri, conociendo muy bien la personalidad de aquel ex-amigo suyo.

Mientras tanto, en la Casa Loud, la "División Halcón", cuya labor eran las comunicaciones, intentaban trazar un "Triángulo" que les permitiera hallar la posición de Luccio Johannes. Marciano les había indicado que no se atrevieran a seguirle el paso, pero no desde la vía virtual, así que llevó a que Irina diera la orden de rastrear las llamadas que tuvieron anterioridad horas después. Los jóvenes operadores buscaban repetidores por los alrededores, teniendo uno cerca de la Escuela de Royal Woods.

- Disculpen, ¿creen que podrán encontrar a ese sujeto con ese sistema?.- Se acercó Lisa, cruzada de brazos y mirando con seriedad la maquinaria.

- Es uno de nuestros más sofisticados sistemas de rastreo.- Le informó Emile, uno de los operadores de radio y comunicaciones.

- Mmmmm, veamos.- Comenzó Lisa a pensar y sacó una libreta, en donde trazó una serie de cálculos, buscando la respuesta final al objetivo que tenían pendiente ante sus ojos.

- Veo que tenemos a una pequeña genio en este lugar.- Se acercó Irina y apoyó su mano en los hombros de la niña.- Debo felicitarte por ello, nos serías de grande ayuda en "La Central".- Le invitó ésta a unirse.

- Se lo agradezco, pero aquí está mi familia y mi hogar; quizás más adelante.- Prometió la castaña y fue entonces que halló un patrón que podría servirles a todos ellos.- Escuchen, puede que esto sea de utilidad.- Les mostró aquel papel y de ahí se lo entregó a Irina y a Emilie.

- ¿Funcionará?.- Preguntó aquel joven francés rubio.

- Probemos.- Dio Irina por iniciada esa "Prueba" y entonces comenzaron con trazar aquel "Triángulo", tomando por base las dos llamadas telefónicas hechas en las cabinas de la Escuela de Royal Woods y aquella fábrica de pesticidas.- 

- Tenemos dos lados del Triángulo, sin embargo, aún no podemos hallar el próximo "Eco" que haya hecho Johannes para contactar a Dimitri.- Informó otro de los operadores y movieron las palancas de aquella maquinaria.

- No debió utilizar varias antenas, él, tal vez, empleó la señal de la cabina telefónica de la fábrica y de ahí se habrá "movido" en otra dirección para evitar que lo descubran. Esa debe ser su jugada.- Teorizó Lisa y no podía ser un error.

- Luccio es alguien que no se muestra muy a menudo, sino que goza de estar en las sombras y atacar rápidamente para desaparecer. Por eso mismo nunca pudimos dar caza con él y sus Agentes son tan leales que prefieren pagar con las máximas condenas antes de traicionar a su "Líder de Guerra".- Sostuvo Irina muy seriamente.

- Se nota que el poder lo corrompió para hacer este desastre.- Escuchó la voz de Lincoln y ella asintió con la cabeza.

- Por desgracia.- Apuntó ésta y viendo que esa desgracia, aquella "mancha" nunca se iría del "Cuerpo de La Central".- Johannes fue uno de los mejores Agentes de toda la Historia, pero, misteriosamente, comenzó a practicar artes oscuras, buscando un camino alterno y que lo llevara hacia el poder, además de considerar que el Mundo es una prisión de la ignorancia y que debe ser destruida, así que tejió este "Culto del Alba" para que los más necesitados, incluso de su propia calaña, se unieran a sus filas como Soldados para traer el caos al Mundo. Una vez, casi lo deteníamos pero se nos escapó, fingiendo su muerte para volver renovado y ahora lo tenemos de vuelta, pero esta sera la última vez que Johannes Luccio se vuelve a escapar y siembra el caos. Tengo confianza en Dimitri y en todos ustedes, haremos Justicia.- Contó Irina sobre aquel Pasado del Agente traidor, viéndose imágenes del mismo y su corrupción junto al enfrentamiento que tuvo hasta su regreso.

La escucharon con atención, no estaba mintiendo, podía sentirse el odio que le tenía aquella rusa al "Enemigo Número 1" de todo el Mundo, por lo que no debía bajar la guardia, una escoria como Johannes no podía respirar el mismo aire que los demás en el Planeta, por lo que daba por sentado que él debía pagar por sus crímenes, ser llevado a la Justicia pero, conociendo su "Historial", él una persona que no tenía escrúpulos a la hora de luchar y demostraba tener una feroz resistencia cuando quisieran apresarlo. Por lo que, para Dimitri, iba a ser una tarea muy complicada el detenerlo. Mientras que la maquinaria continuaba buscando la posición del enemigo, Irina fue hasta las ventanas y lanzó una plegaria a Amaterasu y a Dios para que el castaño y su novia pudieran detener aquel desastre.

- Perdón, Señorita Irina.- Le llamó Lincoln.- Pero no debería temer, ese chico podrá derrotarlo.- Auguró el albino con total seguridad.

- Sí, aunque no lo conozcamos, también tenemos fe de que va a ganar.- Se unió Rita con su marido para demostrar confianza en esos momentos tan difíciles para Royal Woods.

- No pueden darse por vencidos, si ustedes son los que combaten a los distintos enemigos del "Plano Sobrenatural"; ¿por qué rendirse ahora?.- Añadió Lincoln junto a sus hermanas.

Irina los escuchó atentamente, tenían razón, no podían estar engañándola, a pesar de que "La Central" había sido una víctima de las jugadas atroces de Luccio y su gente, ellos tenían que levantar cabeza y mirar hacia el Futuro si querían conservar su integridad. Fue entonces que, dirigiéndose hacia sus compañeros, ordenó que redoblaran los esfuerzos por localizar la posición del villano pero, en esos momentos, escuchó la voz de uno de los operadores, quien llamó su atención en ese preciso momento.

- ¡Jefa, tenemos algo!.- Exclamó el joven y conectaron uno de los Relés para obtener la conversación que se estaba escuchando en ese preciso momento y justo cuando Dimitri y Luna iban llegando hacia la Estación Central de Trenes junto a Chunk.

- "Ahhhh, ¿así que "La Central" y la Jefa Irina me han pillado en esta "charla"?. Bueno, parece ser que nuestros caminos han "convergido" de alguna manera, pero me temo que esto se acabó. Y supongo que me deben estar escuchando ahora".- Oyeron la voz de Luccio desde los alto-parlantes.

- ¡Luccio, maldito hijo de puta, cuando te pesque, voy a mandarte a colgar al Monte Taigeto!.- Bramó la peli negra en esos momentos, pero el sujetos se echó a reír como el demente que era.

- "¡Jajajajajaja! ¿Eso cree?. Yo no le tengo miedo a nadie, pero ustedes sí que han jugado sucio: Meterse en el "Juego de los Agentes del Destino" es considerado algo muy pero muy importante para mí y que me quieran descubrir, lo considero una trampa absoluta".- Se burló y hablaba, a la vez, con un tono de voz serio y frío.

- Hablas como si fueras a seguir las reglas, pero tú eres el que ha soltado a las criaturas del "Plano Sobrenatural" y llenado de bombas toda Royal Woods.- Le habló Razim al rival, quien sonrió malvadamente desde su Cuartel General.

- Y ese es el motivo por el cual hay que moverse más a fondo y que la diversión continúe, ¿no creen?. Precisamente eso es lo que yo quería: Que la gente se mate afuera, viéndolo por ustedes mismos, allí ya no hay orden, sino caos y la única manera en la que yo gobierne es a través de los conflictos. Por eso, el terrorismo es una buena herramienta que puedes emplear, si no eres un loco y así es como lo demuestro.- Sostuvo el peli negro desde su escritorio, mirando el reloj y viendo que quedaban solo dos minutos para que el castaño llegara y desactivara la bomba en el objetivo plantado.- Pronto verán el Futuro que le tengo preparado a este Mundo.- Sostuvo con seriedad y de ahí tanteó por el control remoto que detonarían las bombas.

- ¡Ni se te ocurra! ¡Te estamos triangulando para hallarte!.- Bramó Irina.

- ¡Jajajajajaja, ya lo veo y es por eso que voy a aumentar aún más la dificultad de esto!. Bueno, ellos me lo están haciendo por mi lado.- Apuntó Luccio al caos que había por las calles, mirando, a través de una pantalla, como Dimitri, Luna y Chunk trataban de llegar hacia la Estación Central y al ver que solo quedaba un minuto, decidió tomar su celular y disfrutar del fracaso que iba a gestarse en ese momento.

Colgó la llamada y volvió su atención en aquel "Show". Y pensar que esa persona que estaba corriendo hacia ese sitio fue su amigo, aquel que lo guió por diversos caminos y que ahora era su enemigo, al cual deseaba matar, pero no, no era el momento de saciar esa sed de sangre, sino de que debería esperar. Miró las runas de "Tomino", las cuales brillaron de un intenso color rojo sangre, como el propio fuego del Infierno y que ansiaba entablar combate contra la de Dimitri en esos momentos. Se contuvo y de ahí vio que el chico estaba llegando, pero, al ver su reloj, sonrió malvadamente y tomó su celular, justo cuando estaba por arribar, luego de un gran esfuerzo por abrirse camino entre la multitud junto a Luna y Chunk. Marcó el número y esperó a que atendiera.

Parecía como si el Mundo se estuviera deteniendo, pero cuando llamó al número de Dimitri, el chico escuchó el timbre del celular, tomándolo y apretando en el botón verde, en el cual atendía la llamada del oponente.

- "Me has decepcionado, Dimitri y yo creía que podrías llegar, pero, como dije, si perdías en llegar hasta la bomba, la haría activar, así que...veamos cuántas personas puedes salvar en estos momentos".- Le desafió Luccio, haciéndole entender a su enemigo que había fracasado.

- No...¡No...No puedes hacer esto, estoy a unos metros de la cabina!.- Se negó en aceptar aquello, pero el peli negro activó la cuenta regresiva.

- "Solo tienes tres minutos".- Advirtió y cuando eso sucediera, vendría lo peor.

Una vez que colgó la llamada, Dimitri vio que no tendría tiempo para desactivar, con la ayuda de un par de Agentes que estaban por allí, empezaron a sacar a todas las personas habidas y por haber en la Central de Trenes, provocando que muchas de éstas se aglomeraran en las puertas, intentando salir todas a la vez, pero resultaba complicado. Luna observaba todo desde afuera junto a Chunk, el castaño, por su parte, salió de allí y puso rumbo hacia las calles.

- ¡Muy bien, ya casi estamos, eso es, con calma, gente. Vamos...!.- Pero, en ese momento, un eco silencioso se hizo presente, seguido de un temblor y una poderosa explosión que arrasó el interior del edificio, provocando que el techo saliera volando por los aires junto a la fachada, tirando al castaño a las calles, herido, sangrando. El griterío fue aumentando y desde la azotea de su Cuartel General, Luccio miraba complacido el daño que había hecho, mientras que las primeras columnas de humo negro y leguas de fuego se alzaban hacia los Cielos.

Se fue levantando con dificultad, sentía su cuerpo pesado, una herida sangrante bajaba por su cabeza, el líquido rojo, la sangre caía al piso. Alzó la mirada y ésta estaba borrosa, viendo el cuerpo sin vida de una mujer que había caído en la explosión y luego, más adelante, más muertos y heridos junto al fuego que estaba consumiendo la Estación Central de Trenes de Royal Woods. Había fallado, les había fallado a aquellas personas, a pesar de que hizo todo lo que pudo, no podía dejar de sentirse culpable por lo que había visto y sentido en carne propia. Intentó ponerse de pie hasta que vio a Luna y Chunk quienes le ayudaron, los ojos verde-esmeralda del joven se quedaron impactados ante semejante rastro de destrucción dejado atrás y para cuando se levantó, el celular comenzó a vibrar.

- "Jejejejeje, bonito espectáculo, ¿no, Dimitri?".- Preguntó Luccio desde la otra línea.

- Maldito hijo de puta.- Le maldijo  casi como un susurro.

- "Ohhhh, pero vamos, la fiesta está en su punto más álgido. ¡Ah, ya sé!. Vamos a tener un "Baile", ¿por qué no vienes?!. Trae a tu querida novia contigo y de ahí nos veremos cara a cara, para un verdadero duelo. Te dejo mi ubicación".- Sentenció el rival, harto de tanta calma y de ahí pasaba su posición.- "Te estoy esperando, ven a por mí".- Finalizó y de ahí colgó la llamada.

Un nuevo mensaje llegó a su casilla, allí se podía ver una imagen del lugar en el que se escondía aquella persona. Lo estaba esperando, quería verlo y él no se iba a andar con rodeos. Por lo que fue moviéndose en dirección hacia el Cuartel General de Luccio, acompañado por Luna y Chunk.

- Dimitri, estás muy herido, debes esperar.- Pidió Luna, pero el joven la tomó de las manos y la besó en los labios.

- Ese tipo ha causado esto, ahora ha llegado la hora de ponerle fin a esta locura.- Respondió el castaño, mientras que no se soltaban por ningún segundo.

- ¿Recuerdas lo que dije?.- Preguntó ella y él alzó una ceja.- Si tú vas, yo voy contigo y no me importa lo que pase, quiero ayudarte.- Fue el pedido que ésta hizo y él no se podía en negar su ayuda en el combate final.

- Que así sea, cariño: Vamos a la batalla contra ese desgraciado de Luccio y su gente.- Finalizó Dimitri y con Chunk partieron hacia la zona asignada para desatar la última pelea que definiría todo en el Mundo y su Futuro.

[Solo nos quedan dos capítulos, el que viene será la pelea contra Luccio y su gente, por lo que vayan preparándose para ello y el capítulo 20 es el epílogo. Mando saludos y agradecimientos para Raginhard, LeoneEpsilon, LucasAbad0, Caballero del Viento, El Caballero de las Antorchas, Sitx20, AnonimousReader98 y los demás.

Buen inicio de semana para todos ustedes, amigos y hasta la próxima

Próximo capítulo: "Ajuste de Cuentas".].