Die motherfucker die
Piece of shit, fucking lowlife
My vengeance will be pure and so sweet
Now I'm watching you bleed

Todo salió de maravilla con las audiciones de la semana, habiendo entre ellos reclutado a los Skull Cats, quienes se la pasaban en el estudio de grabaciones.

Se preparaban para grabar su primera canción de manera profesional, algo que los tenía eufóricos. Sabían que esta oportunidad no se las iba a dar nadie más, estaban más que contentos de aprovecharla, nada podría salir mal.

O eso es lo que pensaban, Rocky, Mandy y Jason.

Sin embargo, Dana no estaba conforme con esto y había intentado buscar por donde sea cosas sobre Astrid. Quería hundirla y ella poder empezar a salir con la jefa de región. Le gustaba mucho, quería que fuera suya.

Pero no sabía cómo hacerlo, la ponía intranquila hacer algo en contra de la gótica, de cierta manera sabía que esa chica no era mala, pero ¿Por qué ella podía tener la suerte de estar con alguien cómo Fer?

A pesar de esto jamás pudo notar cómo Mandy la veía siempre y suspiraba al estar cerca de ella.

Era de cierta manera triste, las dos corriendo en círculos por no tener a quien quisieran.

Dana jamás pudo conseguir el video del que hablaron sus compañeros, y de cierta manera dio gracias a ello, sabía que dé haberlo conseguido, habría hecho alguna estupidez.

Por su parte era una mañana común y corriente para la jefa de la región, quien estaba en esos momentos en su laptop checando unas cuantas cosas de la empresa, algunas entregas de maquetaciones, inversiones a BandCamp y conciertos que se aproximaban de bandas conocidas.

La mujer checó varias bases de datos de los ingresos que recibieron gracias primero a Spotify, YouTube, y ventas físicas o digitales. Esto le ocasionó cierto regocijo ya que habían superado la meta e incluso generaron el doble de lo que se había planeado.

Esto complació de gran manera al señor Mcallister, quien ovacionó a Fernanda en la junta de esa semana, señalándola como un genio.

Su puerta se abrió, su amada pareja ingresó a su oficina y se dirigió al baño de su amada para lavarse las manos. Estuvo pintando con grafito todo ese día, de hecho, cuando pintaba con esa herramienta usaba jeans, playera de alguna banda y tenis o zapatos de suelo, para no ensuciar ninguno de sus vestidos.

Era una de las ilustradoras más solicitadas por parte de las bandas, quienes ovacionaban su arte como uno de los mejores dentro de la escena, al haber visto la maravilla de portada que hizo para Beyond the Light.

—¿Cómo va tu día princesita? —Se acercó a su amada para sentarse en el brazo de la silla a la par de que besó la coronilla de Fernanda.

—Hasta eso bien, las ventas y los ingresos están perfectos este mes, es excelente para ser sincera —tomó la mano de su pareja para besarla, ganándose un ligero sonrojo de la gótica.

—Eso es excelente amor— sonrió la dibujante mientras Fernanda regresó a checar algo en su laptop.

Recibió un correo de alguien anónimo alzando la ceja, algo que también le llegó a Astrid al sentir la vibración de su celular sacándolo de su bolsa.

—¿Qué será? —preguntó Lowllet para voltear a ver a su amada pareja.

—Ni idea amor, deja lo abro—dijo Fernanda quien se dispuso hacerlo, pero era detenida por Astrid.

—Mejor yo lo hago amor, no vaya a joder tu computadora —dijo sonriendo.

Al hacerlo se leía una leyenda en el correo:

"Lo que se encuentra uno en internet, parece que la gran ilustradora no siempre fue una madre modelo ni mucho menos una gran pareja"

Con ello apareció un "meme" muy famoso que surcaba el internet, pero este tenía dos imágenes de Astrid; de un lado decía "Para mi prometida" y era una foto de ella en ropa común, jeans y playera, mientras que del otro lado decía "Para mi ex-novio". Era un retrato de sus antiguo sets de su "OnlyFans" donde aparecía en lencería blanca con medías claras mostrando su busto.

—¡¿Qué mierda es esto?! —preguntó muy enojada Fernanda azotando la mano en su escritorio.

Los ojos de Astrid se llenaron de lágrimas intentando no llorar de manera tendida por lo sucedido, se sintió frustrada y enojada, no sabía quién buscaria joderla de esa manera.

En ese momento entro una muy pálida Alina, seguida por Alastor y Arthur, ambos intranquilos.

—jefa...parece que...—dijo la chica azabache.

—¿También lo recibieron? —cuestionó la jefa con ojos llenos de furia.

—Si jefa, lo mandaron a toda la oficina, pero al detectarlo el sistema de seguridad de Mason, detuvo él envió solo se le escapo los que nos llegaron a nosotros, y a ustedes —mencionó Alastor viendo a su patrona.

—¿No le llegó a nadie más en todo el edificio? —preguntó Astrid.

—Parece ser que no señorita Lowllet, solo a los correos de nosotros — contestó Alina.

Esto tranquilizó a la pareja.

—Nosotros ya eliminamos lo que nos llegó —dijeron los tres chicos al mismo tiempo.

—Gracias —la voz de Fernanda era tajante.

Un ligero toque se escuchó en la puerta de Fernanda.

—¡Adelante!

Era Mason un chico de no más de veintidós años, con ojos azules y cabello pintado de verdad, era el jefe de sistemas, Fernanda lo había contratado de manera personal al ver sus calificaciones en el MIT de Boston.

—Jefa, fue enviado de una de las cabinas de grabación —dijo el ingeniero en sistemas.

Astrid en ese momento alzó la cabeza, sabía que solo había una banda ahí en esos momentos y sabía de ante mano la que había hecho eso era Dana.

Desde que la "psychobilly" comenzó a trabajar ahí tenía muchos conflictos con ella, la portada, los colores entre otras cosas.

Era para llevarle la contraría sin embargo siempre que veía a Fernanda esta intentaba bromear con ella o buscar tiempo a solas, sin embargo, la pelinegra siempre le decía no de manera amable a sus chistes o que eran muy tontos.

Esto se ganaba un gran palpitar de parte de la gótica que sabía que Fer lo hacía para mostrar su respeto hacia ella. Pero esto ya era personal, sabía por qué lo estaba haciendo Dana y hoy le iba a poner un alto a sus desplantes, con ello volteó a ver a su amada.

—Yo me encargo de esto... —su voz era decidida.

—No Astrid esto no se queda así, ellos violaron tu privacidad y te quisieron humillar públicamente —el enojo de la jefa de región era muy marcado.

Si algo se sabía es que la integridad no sólo de su pareja sino de cualquier persona en toda la torre de Sony se debía respetar, era una de las reglas de oro de la jefa Lancaster. Ella estaba muy en contra de la discriminación contra la comunidad LGTBQ+, las contra culturas y cualquier cosas que hiciera menos a otra sin un motivo.

—¡No Fernanda! No todo el tiempo puedo esconderme detrás de ti, tengo que saber cómo defenderme —el visaje de Astrid era severo, la bajista entendió que estaba enojada.

—Iremos las dos —dijo en un tono muy final la jefa de región, sabiendo con esto Astrid que es lo que más lograría.

—Está bien —murmuró la gótica.

Con ello la pareja comenzó a dirigirse al elevador donde entraban y se dirigían hacia el piso de los cuartos de grabación.

Fernanda les había ordenado a sus subordinados que le dijeran a sus amigos donde estaban si llegaban.

Astrid se notó muy nerviosa, sin embargo, sabía que tenía que poner un alto, no podía dejar que siguieran queriendo pasar por encima de ella. No siempre iba a esta Fernanda protegiéndola, no todo el tiempo podía estar ahí su amada prometida, tenía que tener el suficiente valor para cuidarse ella misma porque igual lo tenía que hacer por Annie.

Llegaron al piso deseado, donde buscaron en que estación de grabación se encontraba la banda de psychobilly.

Estaban en el cuarto número tres, y sin molestarse en tocar las dos chicas entraron haciendo que la grabación se detuviera.

—Vete de aquí —le dijo al ingeniero de sonido Fernanda quien sin pensarlo dos veces obedeció la orden de la jefa, desapareciendo del lugar.

—¡jefa hermosa! ¿Qué podemos hacer por ustedes? —dijo de manera hipócrita Dana.

Era recibida por una cachetada de Astrid que dejó a todos perplejos, viendo como le había volteado el rostro a la vocalista, dejando la marca en su mejilla.

—¿Me quieres decir que mierda es esto? —mostró muy molesta su celular la gótica.

Los demás miembros de la banda se veían confundidos ante lo sucedido, no entendían que pasaba, solo sabían que Astrid estaba enojada y que el rostro de Fernanda mostraba de igual manera mucho enojo.

Sin embargo, alcanzaron a ver las cosas y vieron que era una imagen donde parecía que se humillaba a Astrid.

—No sé de qué hablas... —murmuró Dana muy nerviosa intentando desviar la mirada del celular de la chica.

—¡No te hagas estúpida mocosa! —Astrid le gritó, sacando un poco de su centro a Fernanda, ella jamás la había visto así de enojada, no era usual que su pareja se molestara, al menos no de esa manera —. Nuestro jefe de sistemas detecto que había sido enviado desde acá, y para su buena o mala suerte, ustedes son los únicos agendados para grabar el día de hoy.

Esto desde luego puso muy intranquila a Dana, sabía que ella no había hecho esa gran estupidez, les hizo caso a sus amigos para no afectarlos y sin embargo podrían estar próximos a perder el contrato si Fernanda tomaba partido por su pareja sin investigar.

Ella sabía que no lo había hecho, no se iba a prestar a eso, estaba muy segura de ello, ya estaba cambiando para ser una chica buena.

—¿Qué carajos hiciste Dana? —gruñó Rocky levantándose de una silla, acercándose a la chica con ganas de cachetearla, pero era detenido por el bastón de Fernanda, quien movió la cabeza en modo negativo.

Este desplante puso en alerta a la bajista.

—No hice nada...de verdad...—contestó la asustada chica, no sabía cómo iba a salir de esta, siempre todos le echaban la culpa de lo malo sin haberlo hecho ella.

—Siempre es lo mismo Dana, lugar que llegamos lugar donde causas conflicto...—señaló Jason azotando su mano en la mesa.

Se notó una clara frustración en los muchachos de la banda, al parecer no había sido la primera vez que la vocalista había hecho una cosa así.

Sin embargo, su rostro mostró duda en cada momento, como si de verdad estuviera siendo sincera.

—No sé por qué lidiamos contigo...eres una niña mimada que no valora nada— era la ácida voz de Rocky —. Siempre friegas las oportunidades, no te toleramos.

—Chicos...ustedes son mis amigos...saben que...—lloriqueo la chica de lentes.

—¿Sabemos qué? Sólo te hablamos porque no tenemos otra vocalista, estamos contigo porque nos acostumbramos a tu presencia...pero no eres nuestra amiga...—dijo Rocky de manera visceral —. Por algo tus papás te dejaron sin nada...porque nunca fuiste alguien de valiera la pena.

Las lágrimas salierón por parte de la vocalista.

Astrid y Fernanda se voltearon a ver entre ellas, no habían esperado esto, que la chica fuera atacada por su banda de manera tan agresiva y brutal.

Una cosa era lo que había hecho, que no mostraba su madurez y tenía caprichos, pero era muy diferente cuando los que pensabas tus amigos te decían cosas de esa manera, era un sentimiento horrible.

—¡Por algo Archie te dejo! Eres una mocosa tóxica y caprichuda, que si no obtenía lo que quería se enojaba —la voz de Rocky era casi un grito.

—Chicos de verdad...no digan eso...

Estaba llorando a lágrima tendida alzando sus manos en son de defensa viendo como sus mangas se alzaban y se notaron varias cortadas en sus muñecas, algo que Fernanda conocía muy bien

Astrid vio sus ojos llorosos mostrando el mismo visaje que había tenido ella cuando perdió a Fernanda, su luz se estaba apagando.

Mandy no sabía que hacer, estaba muy confundida en esos momentos. Ella sentía muchas cosas por Dana, fue la que más la impulso con su talento y siempre estuvo ahí con ella, su cabeza era un mar de pensamientos.

Pero sabía que algo era cierto, adoraba a la vocalista y le dolía verla así, porque sabía que estaba diciendo la verdad.

—¡Chicos déjenla!

—¡Tú cállate! Sólo por qué te gusta dejas que haga sus estupideces —rugió de manera violenta Jason.

Esto tomó por sorpresa a Dana volteando a ver a una muy sonrojada Mandy.

—No eres más que una chica que usamos Rocky y yo por su voz y su cuerpo, nadie de verdad te ve como alguien de valor, y lo muestras más haciendo este tipo de estupideces, por eso buscamos ya no estar tanto tiempo contigo más que para ensayar —señaló Jason.

Esto hizo que Mandy sintiera dolor en su pecho, era cierto que ellos siempre la usaron para desahogo sexual y le dolía ver como Dana se dejó hacer eso.

Intentó ayudarla, pero siempre decía que ellos eran amigos de ambas, que no pasaba nada, incluso cuando le pegaban si estaban de malas, todo era jugando según la percepción de Dana.

La chica rubia se dio cuenta de eso, ellos a excepción de Mandy se mantenían alejados de ella, ya no salían con las chicas si ella estaba cerca, no la abrazaban como antes ni mucho menos buscaban cuidarla, siempre se regresaba ya sola o con Mandy de las fiestas.

A la gótica le recordaron a Loui y a Chad, sus antiguos amigos góticos que solo buscaron usarla, aquellos aberrantes tipos que la vendieron sus nudes sin darle dinero, como si fueran sus proxenetas.

—De verdad perdón, pero yo no fui chicos, entiéndalo son mi única familia...son lo único que tengo en esta vida...no fregaría esto por nada —sollozó Dana.

—¿Familia...? ¡Jamás! No vales la pena. Eras nuestro juguete, te follábamos y te dejábamos tirada como te merecías y ahí iba la tonta de Mandy a intentar ayudarte...

Se escuchaba una fuerte cachetada en el rostro de Rocky por parte de Fernanda dejándole roja la mejilla.

—Hizo mal Dana, pero no la vas a humillar de esa manera pedazo de basura— dijo la emperatriz enojada.

Astrid se acercó a Dana quien estaba llorando por lo que le habían dicho sus amigos, la abrazó y la vocalista hundió su rostro en el pecho de la dibujante sollozando mientras que Fernanda encaró a Rocky

Ambas muy en su interior le creían a Dana.

—No vuelvas a hablarle así a una mujer en mi presencia, ten las suficientes bolas puestas para decirme algo así a mi —la emperatriz estaba fúrica, nadie debía ser tratado de esa manera.

—Señorita Lancaster, usted no se meta. Esto es problema de nuestra banda — dijoJason parándose enfrente de Fernanda intentando amedrentarla.

—¡Ni se te ocurra niño ponerle un pelo encima a mi prometida por que juro que te mato!

La furia de Astrid se notó pero no soltó a Dana mientras acariciaba su cabeza para calmarla a la par de que Mandy se intentó poner en medio de Fernanda y de los otros chicos para que no hicieran alguna tontería.

—Niño, piensa muy bien tu siguiente frase y movimiento, no me asustas y jamás lograras amedrentarme. Sólo que si considera tu carrera terminada en estos momentos —la voz de Fernanda era ácida, mientras sus ojos pareciese que echaban chispas.

—Si es así entonces no veo que nos detenga que les hagamos algo a ustedes —dijo enojado Jason.

Con ello Rocky quitó del camino a Dana aventándola para que nada pudiera estar entre él y la joven bajista.

Se cuadró ante ella, subió su mano buscando darle un golpe a la jefa de región mientras que el otro tipo se paró atrás de Lancaster para no dejarla mover.

La apertura de la puerta de la cabina los detuvo.

—Fernanda te estuvimos buscando por...todos lados tus compañeros nos mandaron... —era Michael llegando con Robert y vieron la escena —¿Qué carajos?

En ese momento notaron como lloraba Dana y era consolada por Astrid mientras que Mandy estaba en el suelo y Fernanda siendo amedrentada por los dos chicos.

En un fugaz movimiento Michael ya estaba entre Fernanda y Rocky mientras que Robert había empujado lejos de Lancaster al otro sujeto.

—¿Qué mierda tienen en la cabeza? —dijo Michael molesto siendo el quien encaró al agresor —. Pensaron que podrían venir amedrentar a mi hermana a su trabajo y que no pasaría nada.

En ese momento no habían notado la llegada de Erick, quien primero quitó a Fernanda del peligro y después ayudo a Mandy a levantarse para poner a todas las chicas detras de él.

—Ustedes no se metan y listo, esto es entre Dana y nosotros, ella hizo una estupidez y tiene que pagar por ello —dijo Jason intentando llegar a donde estaba la vocalista, pero era detenido por el cuerpo de Robert.

—Ni se te ocurra niño que aquí te dejo rompo la cara — dijo el guitarrista.

Fernanda vio a sus amigos y se sintió aliviada, sabía que ese día irían a buscarla, para ayudarla a checar unas bandas nuevas, por ello no había tenido duda de encarar a los tipos que resultaron ser unos abusadores.

—Tu amiga se metió en problemas que no le importan, así que no es nuestra culpa si se puso en...

No acabó de decir la oración Rocky cuando el puño de Michael conectó con su quijada, siendo muy potente el golpe por su entrenamiento de artes marciales que lo noqueó.

Jason se sorprendió al ver lo que había pasado y se hacía para atrás levantando sus manos en manera de rendición intentando salir del estudio, pero su camino era tapado por Isthar que había llegado un poco tarde.

—¿A dónde vas niño? ¿Ya te dio miedo? —no lo dejó pasar mientras que detrás de ella venía Mason, el jefe de sistemas.

—¡Jefa puedo buscar el dispositivo que mando eso! —dijo feliz levantando la mirada de su celular, pero captando la escena con un tono de sorpresa.

—¡Hazlo! Vamos a llegar a fondo de eso —ordenó Fernanda.

Con ello apretó un botón en su celular el chico de gafas y le señaló que lo tenía el chico aún despierto de los psychobillies.

—Quítenle su celular amigos —dijo Fernanda a sus amigos quienes no dudaron en hacerlo.

Lo sometieron haciéndolo poner la contraseña y buscando en el correo encontrando efectivamente el meme en el mismo.

—Así que este fue el problema —dijo Michael solo enfocándose en la foto con ropa de Astrid por respeto a su amiga mientras que los otros tres chicos de Beyond entendían las cosas.

—Arthur que seguridad ponga en custodia a estas ratas, llama una patrulla.

—Claro que sí jefa .

Con ello salió disparado el joven.

—Dana, Mandy, por favor díganme que no viven con ellos —la vio Astrid.

Las dos chicas se sonrojaban y solo asintieron.

—No tenemos dinero...necesitábamos estar con ellos en el departamento de Jason para poder tener donde quedarnos.

La voz de Mandy parecía derrotada.

—Robert e Ishtar, ayúdenme acompañándolas a recoger sus cosas de ahí, y los veo en la casa en unas dos horas —dijo Fernanda a lo que sus amigos asentían —, iré a la estación a asegurarme que sean procesados.

Las dos chicas no entendían bien las cosas, solo veían a Fernanda.

—Hablaremos esto en una comida chicas. No están solas —mientras que se volteó Fernanda a Jason —. Me das asco, incriminar a una chica por un capricho...eres una mierda.

Le golpeó la nariz con su puño izquierdo, pero casi cayéndose por su pierna sin embargo fue sostenida por su mejor amigo.

Al llegar seguridad todos salieron del sitio, mientras que Robert y Sayumi iban con las chicas, Erick y Michael se quedaron con Astrid y Fernanda donde le contaron todo a los chicos.

—Vaya...esos bastardos...—dijo enojado Erick.

—Lo bueno es que Arthur pudo detenerlo a tiempo —dijo Astrid abrazando a su futura esposa.

—Si menos mal, ahora vamos a mi oficina, tenemos que esperar a los azules y de ahí a la casa, para ver cómo le ayudamos a las chicas —dijo Fernanda siendo secundada por todos.

Astrid por su parte estaba tranquila y agradecida por la sororidad que estaba teniendo su Amada mostrando que era una excelente ser humano su amada, brindando su apoyo a dos chicas desamparada.

—Eres la mejor Fer —sonrió la gótica mientras besó a su amada.