Chào các bạn! Vì nhiều lý do từ nay Truyen2U chính thức đổi tên là Truyen247.Pro. Mong các bạn tiếp tục ủng hộ truy cập tên miền mới này nhé! Mãi yêu... ♥

Capítulo XIII

Su visión lo desoriento un poco, intento reconocer el lugar en el que se encontraba. Tras el golpe inicial se tranquilizó y recuerdos de lo ocurrido lo abrumaron. Cada segundo que vivió se sintió tan real, desde Fluffly mirándolo y luego estaba él, aquel hombre de ojos esmeralda, le preocupo que él lo conociera, no tenía ni idea de quien se trataba y estaba seguro de nunca haberlo visto en su vida.

―¡Yuuri! ―se topó con Viktor, cada parte de su ser le mostraba una preocupación sincera.

―Viktor, ¿Qué sucedió? ―preguntó, seguía un tanto desconcertado, necesitaba ordenar sus pensamientos.

―No te preocupes por eso ahora, lo importante es que tu estas bien ―sentenció Viktor con una sonrisa aliviada, se acercó abrazándolo fuertemente, este abrazo no era nada similar a uno anterior, en este Viktor le demostraba su lado frágil, un profundo miedo, Yuuri no sabía su origen.

―Estoy perfectamente ―susurró y palmeo la espalda del ruso de manera afectiva ―no me iré a ningún lado.

―Eres un idiota ―los ojos turquesa de Viktor se teñían del más profundo reproche, era como ver a un niño ―me asustaste, te desmayaste y no despertabas.

―Lo siento ―acaricio su mejilla de manera amable ―intentare no hacer eso de nuevo.

―Más te vale.

Ambos se sonrieron, el corazón de Yuuri se aceleró, no era por nerviosismo, el sentimiento era desconocido, no existía manera de describirlo, su falta de experiencia lo dejaba vulnerable en ese aspecto y con Viktor a su lado todo le era mucho más difícil de explicar.

El ambiente que los rodeaba se rompió al escuchar el sonido de la puerta abriéndose, pronto se vio rodeado de un abrazo por parte de Pitchit, su amigo lucía preocupado por su salud, él, al contrario de Viktor se encargó de ponerlo al corriente de todo lo ocurrido desde su desmayo.

Su boca hablo sin parar sobre Fluffly siendo enviado de nueva cuenta a Grecia, cosa que lo entristeció, pero era preferible a la opción de ejecutarlo. Al parecer no se tenía ningún indicio del individuo que se infiltro en Hogwarts, Pitchit ni Viktor mencionaron el detalle de que al parecer conocía a Yuuri, los dos querían consultarlo primero con él, obtener su aprobación.

―Quiero decirlo ―dijo mirando a cada uno.

―¿Estás seguro? ―Viktor lo trataba como alguien de porcelana, sabía que era su manera de mostrar preocupación.

―Si ―asintió, se apresuró a justificar su respuesta, ellos se la merecían ―sinceramente es por un sentimiento egoísta. No tengo idea de quien pueda ser ese hombre, nada en mi mente lo recuerda, pero tengo demasiada curiosidad por saber que tiene que ver conmigo y si de alguna manera el ministerio puede ayudarme a responder esa pregunta, cooperare con ellos.

―En ese caso, estoy de acuerdo con tu decisión ―Viktor ladeo un poco su cabeza ―este Yuuri me gusta demasiado, agradezco que me permitas observarlo de cerca.

―Tú... ―murmuró sonrojado, Pitchit contuvo su risa.

―¿Están incomodando al paciente? ―una voz tenebrosa rompió con la tranquilidad que los rodeaba, Yuuri reconoció a la enfermera, esta se encargaba de lanzar miradas reprobatorias en dirección a Pitchit y Viktor.

―En absoluto ―dijo Yuuri, todos en Hogwarts sabían sobre la fama que cargaba sobre sus hombros la enfermera, así que mejor no meterse con ella ―me encuentro perfectamente.

―Pues, de todos modos, la hora de visitas está a punto de acabar.

―Espero que conmigo se haga una pequeña excepción.

El director Celestino poseía una sonrisa, junto a él la profesora Minako clavaba su vista en Yuuri, mostraba una clara preocupación, una pequeña espina de culpabilidad se instaló, había preocupado a personas que apreciaba, no quería imaginarse que le esperaría al salir de la enfermería.

―Cinco minutos ―la voz firme de la enfermera no titubeo, ni siquiera porque se tratará del director. Esta se giró a observar a Viktor y Pitchit ―ustedes se marchan.

―No ―Viktor hablo de manera desafiante ―no quiero separarme del lado de Yuuri.

―Lo tendrás que hacer jovencito, podrías ocasionar que su situación empeore.

―Yo nunca haría algo para lastimar a Yuuri, nunca, es demasiado importante para mí ―el cariño y sinceridad con el que Viktor envolvió sus palabras ocasiono un corto circuito en su sistema, la sensación era nueva, no lograba compararla.

―Tranquilo Viktor ―Pitchit fue el que respondió por él ―estoy seguro que podremos venir a ver a Yuuri más tarde.

―Quiero estar junto a él.

―Viktor ―atrajo su atención ―estaré bien, podre esperar por ti.

―¿Estás seguro? ―de nueva cuenta se vio abrumado por la atención que Viktor colocaba sobre él, se limitó a asentir lentamente. El ruso soltó un suspiro dramático, se inclinó y beso su mejilla, lo inspeccionó rápidamente, probablemente asegurándose que no tuviera un rasguño ―vendremos más tarde.

―Adiós Yuuri ―la sonrisa de Pitchit era una clara insinuación de burla, ignoró ese hecho y se limitó a despedirse de ellos.

Su vista los siguió hasta que se hubieron perdido por la puerta, en cierto modo se encontraba desprotegido, apreciaba que la profesora Minako se mantuviera ahí, le brindaba una seguridad que necesitaba. Se dispuso a encarar al director, sabía que existían preguntas que le serian realizadas, así que no tenía caso retrasarlo.

―Hace mucho que en Hogwarts no tenemos un alumno con tantos problemas ―comento un tanto despreocupado el director Celestino ―me recuerdas a un viejo estudiante.

―¿Perdón? ―dijo confundido.

―No es nada importante ―el director se acercó hasta quedar en la orilla de la cama ―solo vengo a hacer lo rutinario, en estos casos, hacer preguntas.

―Lo entiendo.

―Pero sé que no confías en mi ―la afirmación era cierta, aun así, el tono que empleo el director denotaba cierto toque de humor ―por lo tanto, traje a la profesora Minako, ella hará las preguntas y solo seré un buen oyente. Adelante.

El hombre dio un paso a la izquierda dejando expuesta a su profesora, tanto ella como él se desconcertaron. La cabeza de Yurui se comenzaría a quejar en cualquier momento, este día solo ocasionaba que extrañara su vida tranquila y calmada.

Su profesora fue la primera en reaccionar, con dramatismo lo abrazó y lloró un poco, Yuuri se limitó a guardar silencio, nunca sabría cómo actuar frente a una persona con lágrimas en los ojos. Ella se separó y lo observó reprobatoriamente.

―Me entere por Pitchit de algunas cosas, ¿Por qué aceptaste ese plan loco? Tú y él suelen tener ideas descabellas, pero pensar que irían por Fluffly es demasiado, incluso para ustedes.

―Debo admitir que no reflexionamos sobre los peligros y Viktor se ofreció a acompañarnos.

―Eso no es justificación ―la profesora Minako poseía unos ojos castaños expresivos, los cuales se teñían de la más clara molestia ―se pusieron en peligro, no solo hablo de Fluffy, sino de la persona que logró penetrar las defensas, ¿Qué tal si se topaban con él?

―De hecho, estuvo frente a frente de nosotros ―murmuró.

Antes de ella reaccionara se apresuró a explicarle lo acontecido. El director tuvo un acierto al hacer que solo hablara con la profesora Minako, sus palabras fluyeron con mayor confianza, se olvidó de la presencia del director y la enfermera, ahora solo importaba soltar sus dudas referentes a ese hombre.

―¿Estas perfectamente seguro de lo que me dices Yuuri? ―su profesora frunció el ceño ―tal vez escuchaste mal.

―En absoluto, dijo mi nombre ―hablo con convicción.

―Terminaron las visitas ―la voz de la enfermera resonó potente en la enfermería.

―Pero... ―su profesora intento refutar.

―Les pediré que se marchen, el paciente ya tuvo suficiente carga emocional por el día de hoy, necesita descansar.

―Vamos profesora Minako ―Yuuri se sobresaltó al escucha la voz del director, se había mantenido tan silencioso ―tenemos que acatar las órdenes como cualquier otro alumno.

―Bien ―suspiro resignada ella, le dio una última mirada ―le informaremos a tus padres del incidente.

Con esa última frase se olvidó de respirar. No era necesario observarse para saber que su rostro se transformó en una mueca de preocupación, quería respuestas, pero no acosta de la preocupación de sus padres, ellos que creían que Yuuri no corría ningún riesgo en Hogwarts, quería que siguieran pensando aquello.

La presencia del director y la profesora Minako desapareció después de segundos, él aún seguía analizando las posibles consecuencias que sucederían a partir de ahora.

El remolino de sentimientos comenzaba a asfixiarle, aborrecía los momentos en los que su mente exageraba los hechos, está siempre le jugaba malas bromas, Yuuri debía admitir que ese era uno de sus peores problemas, en especial porque no solía compartir sus temores o preocupaciones abiertamente, dejaba que estos lo consumieran, solo se detenían hasta que Pitchit lo descifraba y le brindaba apoyo.

Los primeros indicios del anochecer se hicieron presentes con los rayos del atardecer desapareciendo. Yuuri desvió sus pensamientos al calcular el tiempo transcurrido desde el incidente, se tranquilizó por varios minutos, desvariando entre tema y tema, pregunta y pregunta, siendo cuidadoso para evitar la imagen mental de su familia.

La enfermera reviso sus signos vitales y sonrió con satisfacción, ese gesto lo tomaba con positividad, pronto saldría de la enfermería, su lugar menos preferido, odiaba la soledad que se aspiraba en el ambiente.

―Sera mejor que duermas ―la enfermera lo observo a través de unos anticuados anteojos ―mañana podrás marcharte.

―Gracias ―le brindo una diminuta sonrisa.

Pronto se encontró observando el techo, sus manos permanecían a sus costados y su respiración era controlada. Poco a poco el sueño lo venció y cerro sus ojos. Era reconfortante vaciar su mente por algún tiempo, porque si, Yuuri escasamente tenia sueños.

El susurro incesante pronunciando su nombre lo despertó. Talló sus ojos adormilados e intento alcanzar sus lentes.

―No necesitas verme ―sus movimientos se congelaron instantáneamente ―me duele que me olvidaras Yuuri.

―¿Quién es usted? ―su vista era borrosa, pero el brillo de esos ojos esmeralda fueron perfectamente reconocibles.

―Ya te lo dije, un conocido ―el hombre sonrió de lado.

―¿Cómo es que estas aquí?

―Eres demasiado preciado como para solo marcharme ―este encogió los hombros despreocupado, camino lentamente hasta llegar frente a él, acerco su rostro peligrosamente ―me escondí y arriesgué para poder hablar contigo a solas.

―¿Por qué?

―Ya te lo dije Yuuri ―pronuncio su nombre de manera delicada y con un toque de ternura ―eres importante, no solo para ellos, para mí también.

―¿Ah?

―Como odio que no recuerdes nada ―respondió frustrado el hombre ―yo me opuse, pero en ese entonces solo era un chiquillo al que ignoraban.

―Eso no responde nada.

―Escúchame Yuuri ―sus dos manos fueron a parar a su rostro, obligándolo a que lo observara, contenía el miedo que comenzaba sufrir ―tu confiabas en mí, te ayude y tú ahora me ayudaras, tu familia fue la culpable de que te alejaran de nuestro lado. Nosotros solo ayudamos.

Lo aparto bruscamente, no podía seguir escuchando esas palabras. No se encontraba seguro de nada, pero confiaba enteramente en su familia, si le oculto algo del pasado tuvo que existir una buena razón, si lo alejaron de aquel hombre debió haber sido por su propia seguridad. Nadie le quitaría esos pensamientos, mucho menos este hombre frente a él.

―Lo siento ―dijo, su voz sonando fría ―no puedo creer en tus palabras, muchos menos si hablas mal de mi familia.

―Has cambiado, no, ellos te cambiaron ―aprecio la mueca de dolor del hombre, sus ojos verdes resplandecieron heridos.

―Las personas no cambian, solo se transforman, es parte natural de la vida ―Viktor caminaba hacia ellos, a su lado Yurio y Mila, los tres completamente alerta.

―Has traído al equipo ruso ―se burló el hombre, se levantó con elegancia ―aunque, yo debería ser el celoso en esta habitación.

―Por lo que a mí respecta, solo puedo apreciar cómo estas intentando hacer daño al cerdo ―Yurio le gruñó, su postura agresiva demostraba la total desconfianza en el hombre.

―Y este equipo ruso está muy dispuesto a hechizarte si no te alejas de Yuuri ―era la primera vez que Mila no tenía un ápice de broma, todo en ella gritaba seriedad.

―Siempre has sido bueno haciendo amigos, eso no ha cambiado ―el hombre lo observó de reojo ―vendremos por el obscurial, díganle al ministerio que se prepare, no planeamos seguir inclinado nuestra cabeza.

―Y por nuestra parte no volveremos a perder la paz ―Viktor ladeo la cabeza ―no permitiré que vuelvan a quitarme algo preciado, no queremos guerra, ustedes son los que la quieren.

―No, queremos libertad.

―Libertad a base de sangre, a base de matar ―la expresión que Yurio adoptaba mientras hablaba era una desconocida hasta ahora.

Yuuri no sabía nada de la vida de sus amigos, ni siquiera de Viktor al ser alguien famoso. Nunca se preocupó por conocer sus pasados, asumió erróneamente que vivieron tranquilamente, pero, las tres personas paradas frente a él eran el claro ejemplo de dolor.

―Pequeños sacrificios ―la voz descuidada del hombre lo molesto, ¿Cómo se atrevía a hablar tranquilamente y restarle importancia a la muerte?

―¡Mataron a mi madre idiota! ―Yurio exclamó, cada parte de su cuerpo temblaba de furia y tristeza.

No existía mentira en Yurio, y Yuuri solo atino a apretar los puños. Si alguien robo sus memorias prefería no recuperarlas, ya no importaba el pasado, solo el presente, y su yo actual no permitiría que hirieran de esa forma a un amigo. Rápido y sigiloso tomo su varita, la alzó contra del hombre.

Petrificus totalus ―lanzó el hechizó.

El sonido golpeando contra el suelo fue lo único que se escuchó.

La habitación se quedó en silencio, Yuuri asimilaba lo que acaba de ocurrir, apretaba fuertemente la varita, como si su vida dependiera de ello.

―Ve por un profesor ―ordenó Viktor a Yurio ―rápido.

―Está bien ―él le dirigió una breve mirada antes de dar la vuelta y correr.

―Mila, ¿puedes asegurar al hombre?

―Con mucho gusto ―ella asintió lentamente. De la manera menos femenina del mundo alzó al hombre sobre su hombro y lo arrastro lejos de su vista.

―¿Yuuri? ―Viktor murmuró lo suficientemente alto para que escuchara.

―Te oigo.

―¿Sabes que es un obscurial? ―la pregunta lo tomo desprevenido, negó con la cabeza ―en ese caso yo te puedo dar una introducción.

―¿En serio? ―se esforzaba por seguir el hilo de la conversación.

―Tuve una hermana que fue uno ―la sonrisa de Viktor no contrastaba con la tristeza de sus ojos, deseaba abrazarlo, brindarle apoyo ―murió joven, fue usada como arma. Mi país sufrió una corta época de guerra, un par de magos conservadores que deseaban hacerse con el poder ―encogió los hombros ―en ese entonces nuestros padres habían muerto, mi hermana tenía ocho y yo seis. Fuimos acogidos por un par de hombre, debimos haber sospechado que algo andaba mal, pero éramos niños. Nos trataron bien las primeras semanas; un día mi hermana fue apartada de mi lado, cuando nos reunimos de nueva cuenta la luz de sus ojos se había extinguido, puedo recordar cada sonrisa fingida que me regalaba, se esforzaba por cuidarme y yo fingia no percatarme de aquello, nunca supe que le hicieron y eso me duele.

―¿Qué sucedió después? ―esa historia no era una que contaran los periódicos y así estaba bien, Yuuri comprendía que existían secretos demasiados dolorosos para compartir.

―Retuvo su magia, tenía miedo de lastimar a alguien con ella ―Yuuri tuvo un breve momento de déjà vu, era similar a sus sentimientos pasados ―sin querer se convirtió en un ser capaz de hacer mucho daño si no se controlaba, dentro de ella se instaló un obscurus. Aquellos hombres no fueron salvadores, fueron demonios. Destruyeron a mi hermana y casi hacen lo mismo conmigo. A los diez años planeaban convertirme en un obscurial, ella me salvo sacrificándose, murió protegiéndome.

Los pies de Yuuri dieron contra el frio suelo, unos cuantos pasos rápidos lo acercaron a Viktor. Sostuvo su rostro entre sus manos, quería absorber la tristeza que derramaba, el único modo que encontró fue abrazándolo, sosteniéndolo y demostrando que ya no se encontraba solo.

―Tu hermana fue muy valiente ―susurró amablemente.

―Evalina, su nombre era Evalina.

Se aferró a él, no comprendía del todo el dolor, nunca vivió algo similar, así que solo le quedaba imaginarlo. Imaginar como la persona que más amas muere por ti, la impotencia de no haberla ayudado, de dejarla cargar sola el dolor, de vivir engañado.

―Viktor ―rompió el abrazo para volver a encararlo ―no me iré a ningún lugar, no importa las cosas que ese hombre sepa de mí, yo estoy plenamente seguro de la persona que soy ahora y yo no planeo convertirme en algo que él desea o espera, ¿lo comprendes?

Los ojos azules mostraron entendimiento, lo supo, sonrió brindándole confianza.

La puerta los interrumpió, se vieron rodeados por varios profesores, incluyendo a los directores de Durmstrang y Beauxbatons. Yuuri fue acorralado por su jefe de casa y la profesora Minako, mientras que Viktor fue alejado por el director Yakov. Yuuri busco con urgencia su mirada, al hacerlo intento comunicar cada pensamiento que cruzaba por su mente, el guiño despreocupado que le brindo supo que logro captar su mensaje, suspiró aliviado.

La curiosidad que horas anteriores lo sofocaba se había extinguido, solo necesitaba descansar y hablar con su familia, ya no le molestaba el que supieran lo que estaba sucediendo, ya no quería mentir más, lo entendió gracias a Viktor, así que Yuuri le pagaría con la misma moneda, le contaría su secreto.


-------------------------------------------------------

*NOTA: Un Obscurus es la energía reprimida de un niño (conocido como obscurial ). Descrito como una fuerza "oscura" y "parasitaria". 

*NOTA: Un obscurial es un joven o que ha desarrollado un obscurus , como resultado de haber suprimido su a través de abusos psicológicos o físicos, generalmente por temor a ser perseguidos por muggles.

Si alguien creyó que Viktor no sufrió, lamento desilusionarlos, él paso una infancia difícil y aquí se descubre una parte de ello, retrase un poco la primera prueba, porque quiero desarrollar esto para que lo que venga tenga sentido, pero no se preocupen, no me he olvidado del torneo.

¿Tienen curiosidad por saber el pasado de Yuuri y Viktor más a fondo? ¿También a que levantamiento se refiere Viktor? 

He tenido semanas intensas, ya inicie tramites para ingresar a la universidad y estoy estudiando para el examen de admisión, me siento entusiasta sobre ello, creo que he mezclado bastante bien Wattpad con mi vida de estudiante y personal, así que me siento satisfecha. Debo agradecer el apoyo que me brindaron por mi retraso anterior, fue reconfortante :D  

¡Nos leemos en el siguiente capítulo!



Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro