2/5

Min Yoongi estaba seguro de algo, su alfa era un completo idiota,  no podía sacar de su mente el beso que había tenido con Jimin, fue especial, algo que nunca antes había experimentado, un calor abrasador, uno que le decía a gritos que era lo correcto.

Pero su alfa parecía no querer comprenderlo, Yoongi definitivamente no se iba a quedar atrás, no iba a permitir que su alfa idiota tigre le alejara de Jimin, porque este era su omega, lo supo desde que eran niños, lo amaba, lo quería demasiado para verle marcado por alguien más.

El problema tenía que ser atacado de inmediato, tenía un plan, uno que no era bueno o malo, simplemente un experimento. Fue entonces que acepto salir con Wendy, quería demostrarle a su alfa que Jimin era la única opción.

Se arregló sin esmero, estaba mal, usar de esa manera a Wendy no era correcto, ella le había demostrado en más de una ocasión que estaba esperando mucho más de él que una amistad, cosa que no podía corresponder. 

Llegó al centro comercial, había viajado en autobús, le dijo a Wendy que no llevaría su motocicleta porque esta estaba siendo arreglada, cosa que era mentira, en realidad no quería que ella ocupara el casco que había comprado especialmente para Jimin. Al llegar se sentó en una de las bancas a esperar, comerían helado, era una de las cosas que la chica quería hacer. 

Su alfa no estaba presente, sin embargo, no tardaría en hacer su entrada triunfal cuando se diera cuenta que no estaría oliendo el aroma a cereza y leche de coco de Jimin, no, sería el de otra omega, quería llevarlo al borde, hasta que comprendiera que ningún otro omega sería capaz de tranquilizarlo. 

Esa mañana le había dicho a Jimin que no pasarían el día juntos como siempre lo hacían, eso debido a que tenía asuntos pendientes que atender con su padre alfa, se sentía realmente mal al mentirle, pero sabía que no había forma que Jimin se enterara de sus verdaderos planes, porque había sido muy cuidadoso. 

-Hola Yoongi.-saludo la rubia que se acercó a él con una sonrisa.

Kang Wendy era una chica muy atractiva, una omega jaguar con muchos talentos, era buena en deportes, en las clases de física y una líder nata, desde niños ellos habían convivido y se conocían muy bien, Yoongi siempre pensó que ella sería una maravillosa omega, y no se equivoco, la chica era bellísima, con unos ojos oscuros y expresivos, los rasgos de su rostro eran finos, delgada y pequeña, delicada cuando no estaba en la cancha, ahí se convertía en una mujer astuta y feroz. Siempre pensó que era muy linda y que haría una buena pareja con Hoseok, no con él. 

Se levantó y la saludó con una sonrisa, llevaba un vestido rojo que resaltaba su color de piel y la hacía ver más exótica.-Hola, ¿Tuviste problemas para venir? lamento no haber ido por ti.

-Vamos Yoongi ¿Desde cuando necesito que hagas eso?.-bufo. 

Eso le relajó aún más.-Yo quería ser amable contigo. 

-Tengo ganas de helado, es mejor que vayamos.-sus mejillas se colorearon de un tenue rosado. 

El olor de Wendy era muy específico, olía a canela, empalagoso para su gusto, pero encantador para Hoseok quien decía que ella tenía más de un aroma, eso le parecía extraño, no comprendía a su mejor amigo. 

-Me sorprendió cuando dijiste que te gustaba este helado, la verdad no es de mis favoritos, pero Hobi los ama.-sonrió con dobles intensiones, porque además de darle una lección a su alfa, esa salida la usaría para hablar de su amigo zorro.

-¿De verdad?.-dijo con una mueca.-No soy muy unida a Hoseok, no sé que cosas le gustan. 

Caminaron a los helados en un incómodo silencio.-Deberías de conocerlo, es muy bueno, diría que el mejor alfa que he conocido, actualmente esta ensayando a unas chicas que se presentarán en el próximo festival. 

-¿Al grupo de omegas que bailan kpop?.-preguntó con una ceja alzada.-Escuche que son malas. 

Yoongi bufó.-No hay nada que sea difícil para Hobi, vamos. 

Entraron a la heladería, Wendy adoraba ese lugar porque servían unos helados a base de leche de almendra, su sabor y olor favorito.-Voy a pedir uno de almendras y chocolate ¿Y tu Yoongi?

-De cereza y coco.-asintió mirando los sabores. 

La persona que les atendía, tomó su orden y les dio los helados, se sentaron en una mesa para dos cerca de la puerta, probaron sus helados en silencio. 

-¿Normalmente qué haces cuando sales con Jimin?.-preguntó Wendy rompiendo con el silencio. 

-Ammm depende del humor de mi cisne, normalmente tiene hambre, pero a veces quiere cosas dulces y otras saladas, vamos al cine al aire libre, paseamos por el campo, vamos a pequeños viajes de carretera, no lo sé, a veces sólo vemos películas en casa o dormimos juntos. 

Wendy le miró con una mueca ligera.-¿Tu cisne? ¿Consideras a Jimin tu omega?

-Jimin es mi omega.-dijo con tristeza bajando la cabeza.-Me gusta. 

-Yoongi.-susurro.-¿Sabes lo de la naturaleza de los cisnes? ellos eligen a sus alfas siempre y cuando sean de su especie...

-¿Y qué importa?.-gruñó.-Todos parecen muy conscientes de decir eso pero ¿Qué importa? Jimin es mi omega y punto, nadie nos separará, ni siquiera mi estúpido alfa. 

-Lo siento.-dijo apenada.

-Perdón, lo sé.-suspiro.-Pero no lo acepto, Wendy, cuando encuentras a una personas que sabes que es invaluable, no quieres dejarla ir, aunque las circunstancias no estén a nuestro favor, yo lo amo, creo que jamás podré enamorarme de alguien que no sea Jimin.

Wendy mordió su labio inferior, sus ojos estaban cristalinos, casi se pone a llorar al escucharlo.-¿Y si lo intentas?...me gustas Yoongi, desde que éramos niños, siempre me has gustado, es una confesión idiota pero creo que lo has notado ¿No?

-¿Qué te gusta de mi?.-preguntó entrecerrando los ojos.

-Tienes lindos ojos, tu mirada siempre es profunda, me hace preguntarme qué es lo que pasa por tu mente, tus labios, son lindos, me gusta tu color de piel, que eres inteligente sin llegar a ser chocante y que tienes una enorme capacidad para imponerte, me gusta que a veces eres tierno, que hagas cosas que me hacen reír y que siempre tienes algo que decir para hacerme sentir bien.

Yoongi suspiro.-No quiero lastimarte, porque eres una chica hermosa y linda, siempre tienes esa sonrisa en tu rostro que ilumina a todos y tus ojos son muy atemorizates cuando te enojas, eres buena en los deportes y en la escuela, eres la chica perfecta, pero aunque tengo en cuenta todo esto, no se compara a Jimin.

Entonces unas pequeñas lágrimas se derramaron de los ojos de Wendy quien negó.-No es justo.-Yoongi sentía como el omega de Wendy estaba sufriendo, pensaba que era porque la rechazaba hasta que las siguientes palabras salieron de su boca.-Siempre me gustaste, eres genial, pero, aunque debería de estar emocionada por sentarme a tener una cita contigo o dolida porque hablas e otro omega, la realidad es que no siento nada. 

-¿Por qué lloras Wendy?.-preguntó preocupado. 

-Alguna vez has sentido que la vida y el destino es injusto, porque no te deja elegir.-susurro.-Yo no puedo elegir.

-No entiendo ¿De qué estas hablando?.-alargó la mano para tomar la suya, eso lo le gusto a su alfa quien gruño. 

"Ella tiene alfa"

Los ojos de Yoongi se abrieron confusos.-Wendy ¿Tienes un lazo?

-Jung Hoseok.-suspiro.-Aquel bailarín de sonrisa de ángel, que baila en los vestidores y que usa perfume caro, a veces come frutillas de camino a la escuela, siempre deja en el bote de basura los embaces vacíos, sus ojos son castaños y su cabello rojo es fácil de reconocer en el centro comercial cuando elige gorras. Jung Hoseok es mi predestinado. 

Yoongi la soltó como si su mano fuese lava ardiente.-¿Preestinado?

-Lo supe desde un principio, mi omega lo ha reconocido como su alfa desde que somos niños, pero me he mantenido firme, no quiero estar con alguien sólo porque el destino me lo dice, quiero enamorarme de alguien porque lo he elegido, me gustas, pensé que contigo podría hacerlo, pero diablos Yoongi, estas enamorado de Jimin. 

-Lo que le estas haciendo a Hobi es cruel, él está perdidamente enamorado de ti, siempre habla de ti, de lo hermosa que eres, de lo inteligente que eres, siempre admirándote en silencio, con miedo a acercarse porque cada vez que lo hace te vas, ahora entiendo por qué Hobi estaba tan triste, estas  hiriendo a su alfa.-negó con tristeza.

-No quiero eso.-suspiro antes de hacer un puchero.-Quiero saber qué se siente estar con alguien que te gusta. 

-El destino nunca se equivoca, si los ha juntado es por algo, te lo voy a demostrar, cierra los ojos. 

Confundida Wendy hizo caso, limpio sus lágrimas y espero, escucho los movimientos de Yoongi y como este se acercaba a ella, de repente sintió sus labios sobre los suyos, abrió los ojos espantada, por un segundo se encontró perpleja, al siguiente cerro los ojos. El beso que ambos compartieron era extraño, inadecuado, el omega de Wendy lo repudió desde el primero momento y llamo a Hoseok, el alfa de Yoongi grito por el cisne. Ambos se separaron y se miraron avergonzados.

-No eres Hoseok.-bufo frustrada.

-No eres Jimin. Si yo supiera que mi predestinado esta ahí afuera iría a buscarlo, más si es Jimin, estas haciendote daño sin razón alguna, Wendy, la mejor opción es Hobi. 

-Esta es una rara cita.-dijo incomoda. -Muy rara. 

-¿Quieres ir a jugar baloncesto?

-Esta bien.

Cuando llegó a casa después de un día loco y raro se dio cuenta de algo, su alfa no quería a Jimin como un cachorro, sin embargo, este no estaba actuando como debería, se frustro, lo único que quería hacer era llamar a Jimin, pero cuando abrió los mensajes no se imagino ver aquello, la foto de él con Wendy estaba en el grupo, de inmediato trato de llamar a Jimin, este no contestó, pero no se rindió. 

Estaba molesto y muy triste, no sólo por Jimin sino también por Hoseok y aquel malentendido. Después de tres horas Jimin respondió.

-¿Qué?.-dijo arisco. 

-Jimin puedo explicarte.-suspiro.-No es lo que piensas y...

-¿Por qué tienes qué explicarme? somos amigos Yoongi, yo no tengo por qué saber con quien sales, sólo me molesta que le hayas hecho eso a Hobi sabiendo lo que siente por ella. 

-Jimin..

-No, ¿Es por el beso? olvidalo, nosotros no somos nada más que amigos. 

-Sabes que eso no es verdad, nos queremos y...

-Creo que es momento de que aceptemos la realidad, no podemos estar juntos, lo siento y nos vemos después.

Jimin colgó la llamada y Yoongi lloró de frustración, porque estaba seguro de que a la mañana siguiente se enfrentaría a algo que no quería...A su mejor amigo herido y a la tristeza de Jimin, su omega cisne. 

-¡Todo es tu culpa alfa idiota!