Jungkook vivía entre osos negros, era incómodo, sobretodo estar cerca de Jeon Yugyeom, su perfecto hermano alfa de oso negro americano, le molestaba escuchar lo genial que era, sus logros en deportes, artes y académicos, era quien pasaba más tiempo con su padre Vernon y a quien Nayeon admiraba, él siempre se quedaba callado en las cenas y desayunos familiares. Por más que se esforzaba su padre alfa no podía verlo, sólo su padre Seungkwan era quien le animaba siempre, le gustaba estar a su lado, era muy comprensivo, el único que sabia que estaba en una relación de casi tres años con Taehyung, nadie más lo sabía y aunque le molestaba, había una buena razón.

-Tae vendrá esta tarde.-dijo en el desayuno.

-Esta bien.-asintió Seungkwan con una sonrisa.

-Hijo, deberías de pasar menos tiempo con Tae, es un omega y las personas pueden pensar mal.

Todos en la mesa se quedaron en silencio anticipando la pelea.

-¿Y eso que tiene de malo? .-gruño Jungkook.

Vernon suspiro.-Kook, cuando llegue el momento deberás buscar un omega que se adapte a tu alfa.

Jungkook comenzó a reír.-Eso lo decidirémos mi alfa y yo.

-Como familia de osos negros debemos de...

-¡Pues te aviso que yo no soy un maldito oso negro, soy un oso panda!-grito al momento de levantarse.

-Jungkook....no me refiero...

No dejo que su padre dijera algo, simplemente se levantó y se fue, estaba harto de ellos, no quería escuchar pestes sobre su linaje, uno al cual no pertenecía. Estaba fuera de lugar y no ayudaba en nada que su padre parecía ignorar que no era un alfa oso negro, su padre Seung le había explicado que la relación de su padre con su familia de origen no era la mejor, pero eso no le importaba a Jungkook, él sólo quería saber que lo estaba haciendo bien para su padre. 

Llegó a la escuela caminando como lo hacía todos los días, su hermano siempre ofrecía llevarlo pero se negaba por completo, estar a solas con él no era buena idea, siempre terminaban peleando por cualquier estupidez. Se sentía atrapado en su propia casa, ignorado por su propia familia y frustrado porque sentía que Taehyung no merecía que ocultara su relación, pero este lo entendía, también tenía sus razones para ocultarlo. 

Cuando estaba llegando a quienes se encontró fue a Jimin y a Yoongi, ellos estaban cerca de los casilleros, sabía que siempre llegaban juntos, Taehyung era traído por Jin quien pasaba por él cada mañana, estaba pensando seriamente en conseguir un auto y poder recogerlo, esa era una de sus metas. 

-Hola ¿No ha llegado Tae?.-preguntó acercándose a sus amigos. 

Jimin negó con seriedad, tomó sus cosas y se fue sin despedirse, Yoongi que estaba recargado en el casillero suspiro dejando caer la cabeza hacía atrás.

-¿Paso algo?.-preguntó confundido, ellos nunca actuaban de esa manera. 

-No lo sé, desde su celo actúa de esa manera, es serio y parece molesto la mayor parte del tiempo, le he insistido para que me diga la razón pero es en vano. 

-Vaya, el pollito esta enojado y el gran tigre no sabe que hacer con ello.-negó con una mueca. 

-Kook ¿Puedo hacerte una pregunta?.

-Claro.-sonrió en grande.-Soy mejor amigo de Namjoon eso me hacer ser alguien muy sabio. 

Yoongi levantó una ceja.-Le encuentro muchas fallas a esa lógica, pero bueno, eres quien me puede ayudar, ¿Reaccionas a los celos de Taehyung?

El pelinegro miró a su amigo con los ojos entrecerrados.-¿Por qué estas hablando del celo de Tae? 

-Olvidaba lo celoso que eres, no hablo de Tae, sólo responde, tú alfa reacciona a sus celos si o no. 

-Ammm, es complicado de explicar, normalmente reacciono demasiado al olor de Tae antes del celo, sé que su celo esta cerca con sólo olerlo, huele mucho a cereal, pero Taehyung nunca me ha dejado que pase los celos con él, como mi aroma le calma, él normalmente se lleva.-se acercó para susurrarle al oído.-Le dejo mi ropa interior y una camisa. 

Yoongi negó .-Iugh, que asco, malditos enfermos. 

Jungkook rio y se encogió de hombros.-Las cosas que uno hace por los omegas, ¿Por qué preguntas eso?

-No pude reaccionar al celo de Jimin, de hecho nunca he reaccionado a un celo suyo. 

-Oh.-dijo borrando la sonrisa burlona de su rostro.-Eso es...muy sorpresivo ¿Y en los tuyos?

-Tampoco.-mordió su labio inferior.-¿Sabes lo que eso significa?

-Ammmm....no.-negó con una mueca. 

-Claro que no lo sabes, eso significa que si mi estúpido alfa no puede despertar en sus celos, no puedo marcarlo, no puedo hacerlo mi omega y no podremos tener bebés, en pocas palabras Jimin y yo no seremos una familia.

Los ojos de Jungkook se agrandaron, trago en seco encontrando el significado oculto de sus palabras, Taehyung era hermano de Jimin, era un cisne, por ende él un alfa al igual que Yoongi, de una especie completamente diferente, podría no reaccionar a los celos de Taehyung. Ambos alfas sintieron una enorme incomodidad en sus interiores, el rumbo al que los llevaban sus pensamientos era horrible. 

Taehyung estaba leyéndole uno de esos poemas de un libro que él le había regalado hace días, lo consiguió en una tienda de segunda mano y aparentemente para su novio era el mejor regalo del mundo, le encantaba la sencillez de Tae, se conformaba con poco, siempre y cuando esto tuviese un significado especial. 

Se encontraban en el parque al que frecuentemente asistían después de clase, entre los árboles se ocultaban, leían, comían o simplemente dormían abrazados. Era la gloria para dos adolescentes como ellos, Taehyung tenía una voz preciosa, por eso Jungkook cerraba los ojos y se imaginaba cada una de sus palabras, sus libros favoritos para escuchar eran los de acción. 

-¿Te gustó?.-dijo cerrando el libro. 

El pelinegro asintió, le besó los cabellos oscuros aspirando su dulce aroma, era dulce y delicioso, lo adoraba, eso también indicaba que sólo faltaban unos cuantos días para que Tae tuviese su celo. Bajo sus besos hasta su cuello, ahí lamió ligeramente haciendo reír a Tae quien se removió entre su cuerpo. 

-¿Cuándo me dejarás pasar un celo a tu lado?.-pregunto en forma de berrinche.-Quiero consentir a mi omega.

-Tu lo que quieres es sexo.-bufo volteándose, se sentó a horcajadas en el regazo del alfa y junto sus frentes.-Es lamentable verme en ese estado.

-Por videollamada no te ves nada mal.-susurro llevando sus manos a la estrecha cadera, Taehyung contaba con unas curvas bien formadas.-Además yo te haría disfrutar más que esas cosas que compras por internet.

-¡Cállate!.-gruñó dándole un golpe en el hombro derecho.-No digas esas cosas, no tenemos donde hacer esas cosas, el olor y el humor son demasiado notorios. 

-Sólo el primer día, lo hacemos y después tomas los supresores, no hay problema.-se encogió de hombros.

Llevaban tiempo hablando de aquello, no era la primera vez que alguno sugería algo así, eran jóvenes enamorados que necesitaban explorar esa parte de su relación, tenían miedo, pero creían que nada malo sucedería, entonces hicieron el plan perfecto. 

-Pero compra protección.-dijo Taehyung de inmediato.

-La primera vez no pasa nada.-rio negando.

-¿Cómo que no pasa nada? ¿No haz visto ese drama donde un chico queda en cinta en un campamento de verano? no me voy a arriesgar.-suspiro con un puchero. 

-Pero ¿Cómo consigo esas cosas?

-Revisa si tu hermano tiene o en una farmacia.

-Tú me vas a ayudar.

Dos días después de esa conversación los planes no habían cambiado, así que decidieron ir a una farmacia alejada de la escuela y pedir aquello que les daba demasiada vergüenza. Se encontraban en la fila, ambos con lentes de sol y gorras, sus mejillas rojizas y temblorosos, cuando fue su turno Jungkook aclaró la garganta, el dependiente le miró con una mano en el botón de asaltos. 

-¿Puedo ayudarlos en algo?

-Ammm.-susurro Jungkook acercándose.-Tienescondonesparaalfa

-¿Qué?.-entrecerró los ojos.

-Tienes condones para alfa.-dijo carraspeando. 

-Oh condones, si, ¿Texturizados o normales?

Ambos se miraron, Taehyung se encogió de hombros.-Texturizados.-respondió Jungkook sin saber realmente que significaba aquello. 

-Bien.-dijo el trabajador tomando una caja azul pequeña, la marcó.-Son tres dólares. 

Pagaron, tomaron la bolsa y salieron corriendo. 

La casa de Jeon Jungkook estaba sola a partir de las diez de la mañana, los jueves, sus padres llegaban a las ocho de la noche y sus hermanos a las siete, habían planeado saltarse las clases e ir a la casa a hacerlo, el celo de Taehyung estaba comenzando, no había tomado supresores, a diferencia del celo de Jimin este era más....

Ni siquiera podía cerrar la maldita puerta de la entrada, Taehyung estaba sobre él besando sus labios de una manera tan excitante que hacía que se olvidara hasta de su propio nombre, nunca lo había visto de esa manera, era impresionante, Jungkook estaba sintiendo como su alfa perdía el control. Lo tomó de la cintura y lo subió para que enredara sus piernas alrededor de su cadera, subió las escaleras, entro a su habitación gritando porque Taehyung le estaba mordiendo la oreja de una manera tan agresiva que parecía que se la iba a arrancar. 

Lo lanzó a la cama y comenzó a sobarse la oreja. -¡Estas loco!

-¡Alfa!.-gruño con el entrecejo fruncido, sus labios hacían un puchero. 

Era tierno y salvaje, el aroma a cereal se esparció por toda la habitación, sus ojos se nublaron, quedando de un negro profundo, Taehyung al verlo imponente frente a él dejo que sus ojos se tornaran violeta, su vientre dolió, anunciando el despertar de su celo. En  menos de lo que se imaginó Jungkook comenzó a desvestirse, sus marcados músculos del pecho quedaron frente a sus ojos, se acercó sin dejar de mirarlo, y olisqueó su piel, el olor a bambú fresco era lo predominante, Jungkook lo tomó de los cabellos y acarició.

-No sabes cuanto espere esto, omega.-susurro con voz ronca, no siendo él quien hablaba sino su alfa. 

Taehyung se hincó y rodeo con sus brazos el cuello de su alfa, comenzó a besarlo de manera tranquila, la tentación de tocarse fue mucho más fuerte que cualquier impulso racional, sus partes animales estaban liderando el encuentro, y ellos lo disfrutaban, porque sentían en sus corazones que era correcto, tal vez apresurado, pero correcto.

Para Jungkook fue un deleite mirar el cuerpo desnudo de su novio, este le observaba con las mejillas encendidas, mientras que él con sus manos y labios recorría cada parte de su cuerpo,  cuando tocó aquel espació pequeño, se dio cuenta de la humedad, estaba repleto de lubricante que le impregnaba con su aroma, no lo soportaba, tenerlo frente a él sin reclamarlo ponía a su lobo ansioso. 

-Mi tierno cisne.-suspiro entre su cuello relamiendo el lugar en donde iría una marca en un futuro.-¿Estas listo?

Taehyung miró el cuerpo de su alfa y trago en seco, era muy grande, no creía que tuviera lugar en su cuerpo, balbuceo y negó. Jungkook sonrió, se acercó a besarlo metiendo su lengua, la cual acariciaba el interior de su boca de una manera tan dominante que Taehyung acepto todo, sintió como sus dedos se introducían en su interior, cada uno teniendo el privilegió de dilatar esa pequeña y mojadita entrada, estaba perdido en jadeos que salían desde su pecho. Necesitaba mucho más.

-Ya...te quiero...alfa...ya.-farfullo tropezando con las palabras.

Jungkook abrió sus piernas no sin antes besar el interior de sus muslos, llevó su boca a probar aquel lubricante y en ese instante en el que sus papilas gustativas chocaron con el sabor dulce de su omega, se alfa se volvió completamente loco, se separó y fue adentrándose a su cuerpo con total lentitud, a pesar de traer puesto el perservativo aún podía sentir el calor de su interior, era exquisita la manera en la que era apretado, escuchó los pequeños sollozos de Taehyung, se agachó para besarlo, con el fin de distraerlo del dolor, muchas veces soñó con ese encuentro, pero nada podía compararse a la realidad, de tenerlo bajo su cuerpo, cálido y jadeante. Se movió con lentitud, dando estocadas pequeñas y profundas, veía cada gesto de Taehyung quien estaba con los ojos cerrados jadeando, maravilloso. 

-Omega.-ronroneo en su cuello besándolo con fervor. 

-Mi alfa.-respondió Taehyung con voz seductora.-Quiero montarte.

No se negó, al contrario tomo aquello como una oportunidad de ver la magnificencia de Taehyung, salió de su cuerpo y le ayudó a posicionarse sobre él, en aquella posición Taehyung sentía todo más intenso, movió sus caderas  circularmente para después dar pequeños saltos, Jungkook le guiaba tomando su cadera con fuerza, cuando sus ojos se conectaron supieron que no podían parar, no había vuelta atrás, el nudo se estaba formando y las sensaciones en sus cuerpos se intensificaban, Jungkook se sentó y lo abrazó con fuerza, sin dejar de moverse, penetro con fuerza su interior, llegando  a tocar aquel punto que hizo gritar al omega cisne, entonces sucedió, la boca de Jungkook fue a parar a cuello de Taehyung, justo arriba de su hombro izquierdo, lamió antes de enterrar sus colmillos, al tiempo que llegaba al clímax y se formaba el nudo, el interior de Taehyung se expandió causándole dolor, sin embargo, aquella opresión hizo que él mismo se viniese. La unión estaba formándose, de repente ya no eran ellos dos personas cuyos latidos de sus corazones vibraban separados, eran un alfa y un omega que compartían un mismo corazón, el desborde de energía fue tal que sucedió, unas orejitas negras aparecieron en el cabello del alfa y unas alas negras se extendieron al momento que Taehyung gritaba, la sangre salía de la marca recién hecha, ahora ambos eran alfa y omega. 

Cansados durmieron abrazados, disfrutando de su nueva unión. 

SeungKwan y Vernon llegaron a casa aquella noche cansados, querían comer algo para dormir toda la noche, sin embargo al entrar, un fuerte olor a cereal y bambú les golpeo con fuerza, sus ojos se abrieron y se miraron espantados, esperando que no fuera lo que pensaban. 

Pero lo fue y al cabo de una hora tenían a un alfa de oso panda terriblemente enojado que abrazaba al omega de cisne que lucía asustado por Vernon, el alfa que se sobaba el brazo mordido por su hijo, este le había atacado por instinto cuando creyó que querían hacerle daño a su omega. 

-¡¿Me puedes decir qué mierda hicieron?!.-gruñó ferozmente haciendo temblar al pequeño omega.-¿Se dan cuenta de lo que hicieron? ¿Creen que llevar una marca a los dieciocho años es lo mejor? ¡Respondan!

Jungkook entrecerró los ojos.-Eso no te importa. 

-¡¿Qué no has terminado de entender?! ¡Mi casa, mis malditas reglas! les dimos la confianza Jungkook ¿Ahora qué le diremos a los Park?

-Vienen en camino.-suspiró SeungKwan entrando a la sala. Al escuchar esto Taehyung sollozo asustado. -Estoy muy decepcionado de ustedes, me prometieron que no me tendría que preocupar por esto.

Vernon miró a su esposo de tiernas mejillas y abrió la boca molesto.-¡¿Lo sabías?!

Seung suspiró.-Lo descubrí hace poco, hablé con ellos, les expliqué lo complicado que era una marca o un cachorro, pero ya veo que no me hicieron caso.

-No debiste ocultarle esas cosas a tu alfa.-dijo en un tomo que atemorizo a los omegas. 

-¡No le hables así!.-gruñó Jungkook 

Vernon levantó una ceja.-¡Guarda silencio alfa!.-dijo usando su voz de mando que hizo que Jungkook agachara la cabeza. 

La puerta fue tocada, SeungKwan tomó una enorme bocanada de aire antes de abrir, no dijo nada, Park ChanYeol entró y sin pensarlo dos veces tomó a Jungkook del cabello e hizo que se levantara. 

-¡¿Qué le hiciste a mi cachorro?!.-gruño erizando la piel del alfa más joven.

Baekhyun se acercó a su pequeño cisne y miró su cuello, negó con tristeza.-TaeTae, lo que hiciste no estuvo bien bebé. 

Vernon evitó que ChanYeol le arrancara la cabeza a Jungkook, los cuatro padres miraron a los chicos con una mueca, aunque estaban molestos y decepcionados no podían hacer nada, porque romper la marca simplemente mataría al más débil de los dos y el restante moriría de dolor. 

-Taehyung se quedará los dos días de celo que le faltan.-gruño ChanYeol con los brazos cruzados.-Son demasiado jóvenes para permitir que vivan juntos, así que cada uno vivirá en su casa ¿Entendido? se verán en la escuela y eso debe de ser suficiente. 

-¿Y los celos?.-preguntó SeungKwan preocupado. 

-Ya pensaremos en algo.-suspiró BaekHyun.-Muy bien chicos, quisieron tener una vida de adulto, pues ahora esta la realidad de las uniones, desde este momento están conectados para siempre, si no es que alguno rompe la marca, hay algunos beneficios como que ahora pueden comunicarse mediante el lazo, sus animales les pedirán cachorros, obviamente eso no va a suceder, pasando el celo iremos con un ginecólogo Tae... son demasiado jóvenes ¿Al menos usaron protección?

-Tengo pastillas del día siguiente.-intervino Seungkwan haciendo que todos le mirara.-¿Qué? 

-Los usamos.-asintió Taehyung siendo la primera vez que alguno de los dos hablaba.-Compramos en una farmacia condones texturizados. 

Los padres de los chicos les miraron con la boca abierta, Jungkook se acercó al oído de Tae.-Creo que esa fue mucha información. 

-Perdón.-sonrió con disculpa.-Pero vamos, no son los mejores padres que digamos, prácticamente dejaron que Minie y yo creciéramos con alfas. 

ChanYeol negó.-Lo hicimos porque se supone que esto no debía de pasar, los omegas aves sólo pueden ser atractivos de marcar para un alfa de la misma categoría, para otros alfas no son candidatos para llevar crías, algo extraño debió de pasar aquí, es muy raro. 

-Lo veremos con un especialista.-asintió Vernon.-Aunque siento que eso tiene que ver con que Kook es un oso panda, no es cien por ciento carnívoro, a diferencia de otros alfas.

-Oh tal vez son predestinados.-sugirió BaekHyun.-Sea como sea ahora tenemos trabajo por hacer, Taehyung prepárate, porque gracias al cagadero que acabas de hacer tu hermano tiene prohibido pasar tanto tiempo a solas con Min. 

Y fue ahí que todos vieron y sintieron el miedo del omega cisne, porque nada le daba más terror que su Minie enojado y Jimin sin Yoongi resultaba en la tercera guerra mundial. Estaba acabado. 

💜