Entre las estrellas
"Helga are algo muy riesgoso, pero pase lo que pase quiero que sepas, que estás en buenas manos."
"Criminal! Párale con tus juegos Arnoldo y nada más dimeee......"
Arnold tomó a Helga de la mano y la jalo por el pasillo. "Shhhhh....." le señaló que no hiciera ruido mientras recorrían los pasillos cercas de los salones. En el momento que empezaron a bajar al siguiente piso un profesor los miró.
"Por aquí Helga sígueme." Le murmuro Arnold mientras bajaban los escalones.
"Hey ustedes!" Gritó el profesor que los miraba afuera del salón sin permiso.
"En que líos me metes cabeza de balón!" Le murmuro Helga molesta.
Arnold metió a Helga en un cuarto de armario que estaba muy reducido y oculto abajo de las escaleras.
"No cabemos a qui y...hay algo resbaloso en el suelo, creo que es jabón." Le dijo Helga intentando en hacer espacio para el.
"Si podemos Helga, agárrate de mi para que no te resbales."
Arnold se apretó en el cuartito con Helga asiéndole señales que no hiciera ruido y cerró la puerta. Helga se sujeto del cuerpo de el para no caer en el suelo.
El maestro que los había mirado los buscaba por el area, el no podía imaginarse que ellos estuviesen escondidos en el pequeño armario ya que estaba siempre lleno de cosas y muy compacto como para que dos personas cupieran.
Arnold podía observar al maestro por una pequeña rejilla del armario que estaba en la puerta. Helga tenia todo su cuerpo apretado al de el desde los pies asta la cabeza. Muy apenas podía respirar, pensando que Arnold sentiría su respiración agitada.
Arnold tenía toda su atención en el maestro que caminaba muy cercas a ellos. Mientras tanto Helga estaba con sus ojos fijos en el. Helga tenía su cabeza abajo de su mentón, podía observar muy bien cada parte de su cuello y el sudor de nervios que le rodaba por la piel. Pero lo que más la cautivaba, era su rico aroma de su cologne en su pecho. Quería forrarse en el.
Oh por todos los cielos porque me expongo a esto!? Me siento como una bomba lista para explotar en todo su cuerpo. Pensaba Helga mientras se mordía el labio de la ansiedad.
Arnold no podía disfrutar esos segundos apretado con ella, ya que toda su cautela estaba en el maestro que seguía vigilando el área.
"Ya se fue Helga..." murmuro el.
"Mmm....quien?" Le contestó ella con su voz suave y distraída.
"Helga? Ya se fue el maestro, ahorita que salgamos del armario no hagas nada de ruido, ya mero llegamos."
"Ugh...a donde?" Pregunto Helga suavemente estando abismada en el.
"Shhhhh.... sígueme." Arnold abrió el armario y agarrándola de la mano la jalo por un último pasillo que conducía a una salida de una sola puerta. Arnold empujó la puerta y salió corriendo de la escuela con Helga.
De regreso en la cafetería Phoebe buscaba a Helga. Pensó en acercarse a la mesa en donde estaba Gerald y preguntarle si el sabía algo de ella. Gerald seguía sentado con los amigos.
"Gerald as mirado a Helga?"
"Si. Se fue a afuera de la cafetería para hablar con Arnold."
"Pero ya la busque afuera de la cafetería y no está." Comentó Phoebe.
"Yo creo que Arnold se la robó." Dijo Raúl
"Nadie te pregunto a ti Raúl, estoy hablando con mi novia." Le contestó Gerald "Vamos a buscarlos juntos, ya le llamaste a Helga?"
"Si...y no me contesta."
Gerald sacó su celular y le marcó a Arnold.
"Que extraño tampoco Arnold contesta."
"En donde crees que estén Gerald, estoy preocupada."
"No se pero deben de estar a qui cercas....que tan lejos pueden ir."
Lejos de la escuela Arnold y Helga pararon a descansar abajo de un árbol con amplia sombra, estaban exhaustos por la corrida. Arnold se sentó recargándose del troncó soltando un respiro de agotó.
"Criminal! cabeza de balón, en que....estabas....pensando!? Le pregunto Helga faltándole el aire por el recorrido.
"No te quieres recostar a qui a mi lado?" Le pregunto Arnold con una sonrisa coqueta.
"Estas loco!!" Oh claro que quiero me muero de las ganas. penso Helga.
"Nada más sugería ya que estabas tan ansiosa en hacerlo cuando estábamos en la terraza de FTi."
"Si cabeza de balón pero eso era diferente y fue en otra época olvidada."
"Pero te acuerdas muy bien y me acabas de confirmar que si querías hacerlo."
"Hacer que!?" Pregunto Helga mirándolo molesta.
Ay mi Helga siempre está a la defensiva conmigo tengo que hallar la manera en poder comunicarme con ella sin que se moleste. Pensó Arnold mientras seguía recargado en el árbol.
"Está bien Helga, mejor hablemos sobre algo más."
"Porque me trajiste a qui cabeza de balón?"
"Porque....quería estar a solas contigo Helga."
"Para que exactamente?" Pregunto Helga con una actitud dudosa sobre el.
Arnold se levantó y se acercó a ella causando que Helga diera un paso a tras.
"Que tal si vamos a comer un mantecado, yo invito." Le propuso Arnold con una mirada tierna.
"Traes dinero contigo?"
"Por supuesto Helga, traigo mi cartera."
"En ese caso vamos cabeza de balón que voy a pedir la malteada más grande con triple chocolate y mucha crema dulce. Espero que no te me pongas tacaño con el dinero por si de repente se me antoja algo más."
Arnold sonrió "Tu puedes pedir lo que tú gustes mi dama."
"Tu dama!!" Helga lo miró molesta, pero en ver los ojos verdes sinceros de Arnold sonrió. "Esta bien te lo paso por esta vez, vamos Romeo ahorita que estoy de buenas."
Arnold iba caminando a lado de Helga por la banqueta de las calles. A pesar que Helga intentaba en caminar más rápido que el, Arnold seguía estando a su lado.
"Que eres mi protector o qué?" Pregunto Helga con un tono sarcástico.
"Si tú quieres. Puedo serlo." Contestó Arnold dándole un pequeño empujón con su brazo.
Helga seguía humedeciendo sus labios de los nervios que sentía. Nunca se había imaginado que su pequeña plática con Arnold en la cafetería se fuera a convertir en un viaje sorpresa a los helados.
"Me estabas apretando fuerte en el armario Helga."
"Oh si, oh será que eres muy debílucho Arnoldo."
"Quizás o tal vez querías apretarte muy bien a mi."
Las mejillas de Helga se enrojecieron "En tus sueño Cabeza de balón, yo me.....sujetaba fuerte para no resbalarme, te dije que había mucho jabón en el suelo."
Arnold se rio de ver a Helga temblorosa con las palabras.
"Gracias por aceptar en seguirme por la escuela Helga."
"No te hubiera seguido si supiera tu propósito cabeza de balón."
Se le acercó Arnold a su rostro.
"Por eso no te iba a decir que tenía planeado en hacer Helga."
"Que listo eres....oh eres un aprovechado."
Helga miró su celular y vio una llamada perdida de Phoebe.
"Te llamó alguien?" Pregunto Arnold
"Si Phoebe me marcó hace unos minutos. Le mandaré un mensaje para decirle que estoy bien."
Arnold también miró su celular y vio un texto de Gerald.
"En donde estás Arnold?" - Gerald
"Con Helga, afuera de la escuela. Te veo más al rato, yo te llamaré." - Arnold
"Que, te marco alguien también?"
"Fue Gerald me mando un texto, ya se lo contesté."
Helga se quedó en silencio por un minuto.
Arnold la observaba muy pensativa.
En que estará pensando mi Helga, espero que sea algo sobre nosotros, pensó Arnold.
"Arnold, tu empujaste a Andrés el otro día?"
Estupendo y yo pensé que estaba pensando sobre otra cosa. Ahora que le contestó. Si le miento y se da cuenta después por alguien más, no me lo perdonaría. Pero, de qué día estará hablando? Del día que me encontré aquel tonto en la cafetería o cuando el se me atravesó en el pasillo? Pensó Arnold.
"Cabeza de balón!!" gritó Helga desesperada por escuchar la respuesta de Arnold que tardaba tanto en contestarle.
"Ugh?" La miró Arnold indeciso.
"Tienes toda la carota de culpable. Porque lo hiciste? Ya confiésalo!"
"Estas hablando del empujón en......"
"Si Arnoldo cuando tú lo empujaste!!"
"Así...ese empujón..."
"Criminal cuantas veces lo as empujado!?"
"No Helga nada más....una vez. Pasó en el pasillo cuando iba a mi segunda clase. El se me atravesó en mi camino y no me dejaba pasar."
"Que te dijo Andrés?" Pregunto Helga, inquieta por saver.
"Te interesa tanto en saver que me dijo?" Le contestó Arnold un poco serio.
"Si...digo no, bueno....tengo curiosidad eso es todo."
Arnold puso su mano sobre su cabeza.
"Parece que no le gusto que te hiciera bromas pesadas, o algo así me reclamo, como si debiera de importarle tanto al tonto cara de........."
Helga se le quedó viendo con la ceja levantada.
"Bueno el punto es, me dijo que no lo volviera a hacer y no me dejaba pasar."
"Por eso lo empujaste!?"
"Pues si...le dije muchas veces que me dejara pasar y el no accedía, que más podía hacer? Aparte, nada más fue un pequeño empujón no fue para tanto."
Helga se quedó callada mirando para adelante en su camino.
"Quien te contó que lo había empujado?"
"Phoebe, parece que el profesor Simmons le contó porque estaba preocupado que tú habías cambiado en estos años."
"Oh ya veo.....pues nada más eso pasó Helga."
"Esta bien.....gracias por decirme la verdad Arnoldo.....en realidad....tú nunca me hiciste una broma pesada.....y fue muy generoso de tu parte que ayas tomado la culpa, como lo hiciste ese día en el salón para que...no me viera mal en frente de toda la clase."
Arnold la miró cálidamente "Por ti, hago lo que sea con tal de no verte sola en una situación así."
Helga sonrió suavemente mirando al suelo mientras se mordía su labio.
Finalmente llegaron al lugar donde vendían los helados. Helga se acercó al aparador y ordenó.
"Quiero una malteada de triple chocolate con crema y cerezas."
"Yo quiero lo mismo." Dijo Arnold sacando su cartera. Helga miró la cartera de Arnold con un tono de color pálido y media rota.
Después de pagar agarraron sus malteadas y se sentaron en una mesa afuera.
Helga le pregunto. "Porque es, que cada vez que ordenó mi malteada tú siempre terminas ordenando lo mismo?"
"Es que cuando tú lo ordenas se escucha delicioso."
Helga se enrojeció del comentario.
"Hace años que no hacíamos esto." Comentó Arnold mientras le daba un probada a su helado.
"Hace casi tres años cabeza de balón."
Arnold se quedó muy pensativo. "Helga perdóname."
"De que?" Pregunto ella probando la nieve.
"De......no haberte invitado a salir desde antes......yo fui un verdadero torpe en...no haberte invitado desde hace mucho tiempo."
Helga lo miro triste con la mirada caída.
"Hey no te preocupes Arnoldo no es como si no tuviese otros amigos con quien salir."
"Quien te invitaba Helga."
"Aveces Harold, antes que se convirtiera en el novio de Patty o salía con Stinky."
"Y Phoebe no te acompañaba?"
"Ella no es amante del helado." Contestó Helga rápidamente chupando la cuchara.
En ese momento Arnold se acordó de lo que escucho a Helga decir durante la mudanza en el cuarto de Phoebe.
"Dijiste Helado o....mantecado, Helga?"
"Que, a que te refieres!? Yo dije helado, mantecado." Afirmó Helga mientras de dio otra probada grande a la malteada.
Arnold sonrió discretamente viendo a Helga disfrutar su helado.
Helga me dijo mantecado, estoy casi seguro que se refería a mi. Me imagino que no se dio cuenta que me dijo así. Lo pensaba el.
"Arnold puedo ver tu cartera?"
"Mi cartera....porque quieres verla?" Le extraño la pregunto a él.
"Nada más pásala Arnoldo."
"Como tú digas Helga." Arnold saco su cartera entregándosela a ella.
Helga la abrió con mucha confianza y miró una foto pequeña. Eran los papás de Arnold con un bebé entre sus brazos.
"El bebé eres tú?" Pregunto Helga.
"Si había cumplido un año, fue la ultima foto que me tomé con mis padres."
Helga se quedó pensativa en la foto.
Que felices se miraban su papás juntos a él. Será correcto si le pregunto a Arnold sobre sus padres.
"Ya no supiste nada de ellos?" Pregunto Helga muy insegura por abrir el tema de sus papás.
Arnold soltó un suspiro profundo.
"No, ya no supe nada."
"Lo siento mucho Arnold." Le dijo Helga con una mirada compresiva. Su tono de voz suave le brindaba a Arnold un alivio al doloroso recuerdo de la partida de sus padres.
"Gracias Helga."
"Porque utilizas una cartera tan vieja y....."
"Era de mi padre cuando era adolescente. Mi abuelo la encontró cuando yo era un niño y la e cuidado todo este tiempo."
"En ese caso aunque este viaje es la mejor cartera para traer siempre contigo."
Le contestó Helga regresándole la cartera en sus manos.
Arnold POV
Esto era justo lo que necesitábamos, un tiempo nada más para nosotros dos, para poder hablar bien, sin sentirnos presionados por el tiempo o las personas que nos rodean. Sin distracciones ni rumores a nuestro al rededor.
Quería decirle tantas cosas que tenía en mi corazón, pero también quería que ella se sintiera cómoda en mi presencia. La había mirado tan ansiosa y molesta conmigo en estos días, que se me hacía impossible en poder comunicarme bien con ella. La miraba comer la malteada y se miraba encantadora. Mi Helga tiene un excelente apetito, ya casi se termina su helado y yo muy apenas iba a la mitad.
Se le miraban unos labios tan rosados y tiernos, quería probarlos con el sabor de crema dulce en su boca.**
Helga levantó su mirada viendo a Arnold sonriéndole mientras el comía su helado lentamente.
"En que estás pensando Arnoldo?"
"En....lo bien que me siento contigo Helga y....tú cómo te sientes?"
"Asta ahorita bien." Contestó Helga tranquilamente.
Arnold se agarraba las manos por abajo de la mesa preparándose para lo que le iba a decir.
"Helga, ayer por la noche no tuve la oportunidad en poder expresar...mis sentimientos......por ti. Y....."
Helga se levanto de la mesa repentinamente. "Podremos ir a otro lado cabeza de balón?"
"Que tienes en mente?" Le pregunto Arnold.
"El otro día mire que abrieron un planetario nuevo muy cercará de aquí, están dejando entrar gratis por estos primeros días, quieres ir?"
Arnold le sonrió "Por supuesto vamos"
Durante el camino Helga le pregunto a Arnold que había hecho durante el verano. Arnold le explicó cómo estuvo trabajando con Gerald en la florería unos días y después como su abuelo lo mantuvo ocupado todo el verano con labores en la casa de huéspedes.
"Primero mi abuelo me dijo que pintara, después que pusiera tapiz nuevo en los pasillos y ahora me tiene remodelando el sótano.....está quedando muy bien."
"Y tú abuela como a estado?" Le pregunto Helga mientras seguían caminando.
"Ella está igual de siempre, pero en estos días me a estado enseñando técnicas de defensa propia avanzadas y me deja todo adolorido del cuerpo."
"Tú saves karate verdad?"
"Artes marciales si, mi abuela me empezó a enseñar cuando estaba en el cuarto año."
"Debe de ser padre aprender a defenderte así." Comentó Helga con la mirada baja. "Me sentí tan.....inmóvil cuando me asaltaron que si hubiera sabido artes marciales les hubiera dejado la cara partida a todos ....nada más en acordarme, me da cólera." Helga levantó su puño cerrado del coraje.
"Quizás tú no lo hiciste, pero yo lo hice por ti."
"Tú y Andrés." Le confirmó Helga.
Arnold puso una cara de desagrado.
"Supongo que el ayudó, tengo que darle crédito por eso. Pero cuando quieras Helga, te puedo enseñar todo lo que yo se sobre defendía propia."
Helga dirigió su mirada hacia el. "Ni te preocupes de enseñarme Arnoldo. La temporada de basketball ya empezará la próxima semana y no tendrás tiempo de enseñarme."
"Pero la temporada únicamente dura dos meses, y después que termine podré enseñarte por las tardes en el sótano de la casa. Tiene clima y está quedando muy amplio."
"Mmmm...déjame lo pienso, como quiera tenemos dos meses."
Arnold y Helga llegaron a la plaza del planetario. Como era temprano casi no había personas.
El planetario era pequeño pero tenía mucho paras ver. "Que abra aquí" Arnold empujó una puerta que conducía a un cuarto oscura y fresco lleno de luces pequeñas dando la apariencia de estrellas, con el mundo flotando dando vueltas en medio. Al rededor habían asientos largos y cómodos para que las personas se sentaran como si estuvieran sentados en medio del universo.
"Mira Helga asta el piso parece lleno de estrellas, como si estuviéramos caminando en el espacio."
"Esto es radiante, wow nunca había mirado algo así, parece que estamos parados en el universo. Ni los asientos se ven de los oscuro que está."
"Si asta el mundo se ve real, como si lo tuviéramos a nuestro alcance para agarrarlo."
"Mmm....a Phoebe le fascinará en ver esto."
"Le dire a Gerald que la traiga, como una cita sorpresa."
"Buena idea cabeza de balón. Mira a quien están los asientos." Helga se sentó admirada por lo que tenía enfrente de sus ojos. Arnold parado en medio de su universo.
Helga POV
Mis ojos no podían ver tanto resplandor.
Miraba a mi bello príncipe caminando hacía mi entre las estrellas, era como mi sueño hecho realidad. El era mi sol en mi universo, la luz hermosa que brillaba en mi oscuridad. No podía ver algo más hermoso en mi vida. Arnold se sentó a lado mío a una corta distancia. Pero yo lo quería en mis brazos, quería saltar en el y besarlo asta morir. Todo este momento que he pasado con el a sido lo mejor y lo peor de mi vida. Es un verdadero martirio en tenerlo tan cercas a mi y no poder tocarlo. Ya quería volver a oler su bello aroma de su cuerpo como cuando estábamos en el armario. Así quería estar, pegada a el sin que nada nos separara.....
Sentía los latidos de mi corazón tan fuerte en verlo, no podía entender como había aguantado en estar tan tranquila enfrente de el, cuando en realidad no podía ni respirar por tenerlo enfrente de mi.... Será que realmente le gusto. Tengo miedo en exponer mis sentimientos a una ilusión. Una horrenda broma de mi mente traicionera. Oh mi encantador tesoro de amor....como podré confesarte lo que guardo dentro de mi. Y si te confieso, que me dirás? Como me mirarás? Será que yo realmente soy digna de ser feliz a tu lado. Oh no, se me está acercando....con su pelo de sol resplandeciendo, sus ojos verdes llenos del brillo de las estrellas, su camiseta roja abierta luciendo su playera blanca que lo hace ver más divino todavía y esos pantalones.....desde cuando se le hicieron las piernas tan largas y......***
La mirada de Helga exploraba todo el cuerpo de Arnold. El a cambio, la miraba muy distraída y chapeandose. El decidió en acercarse más a ella y finalmente decirle cómo se siente. "Helga....quiero que sepas....que el beso que te di anoche fue....."
Helga no lo dejo terminar y lo agarro desprevenido de su camiseta roja jalándolo hacia ella plantándole un beso deseoso en sus labios. Arnold estaba pasmado, por un segundo se sintió sorprendido como cuando Helga le dio el beso en FTi, pero esta vez el savia lo que quería y la quería a ella.
Arnold POV
El beso de Helga era como una hola ardiente que empezaba en mi rostro abarcando asta mis pies. Yo la abrazaba fuertemente apretándola en mi cuerpo mientras sentía sus labios calientes probando mi aliento. Me ahogaba en ella, en sus dulces labios llenos de calor, no podía parar de besarla. Los besos de Helga me estaban cambiando, lo sentía en mi....ella me daba algo que jamás en mi vida había sentido, sus labios se están convierto en mi aducción. Helga....mi Helga. le dije entre besos. **
Helga POV
Mi mente paro de trabajar, mi corazón estaba en control y había estallado en el. No paraba de besarlo, me había soltado por completo llenándome de su sabor de miel. Mis brazos lo apretaban más fuerte hacia mi, con mis manos recorriendo por su pelo. Estaba en lo mas alto del universo prisionera en el..."Helga....mi Helga." Lo escuché decir. Mi sangre hirvió en mis venas en escucharlo decir mi nombre así.
Me apoye más en su cuerpo sin poder parar de besarlo. Arnold... mencione su nombre con cada aliento que rescataba de nuestros labios. Empecé a sentir sus manos recorriendo mi pelo apretando mi espalda. Su fuego quemaba mi piel, consumiéndome en el.**
Alguien tosió....causando que Arnold y Helga se detuvieran por completo. Helga se encontraba arriba de Arnold, mientras el se había dejado caer de espaldas en el asiento.
Notas de Autor:
Qué tal estuvo? 😁😁😁😁😁😁
Quien iba a decir que un planetario fuera tan romántico 😉
En realidad mire un planetario así en Mexico y de ahí agarre la idea.
Helga Finalmente se se dejó caer en sus brazos y de qué manera, literalmente. Ji ji...La verdad es que ni yo me lo esperaba. Pero esto está buenísimo.
Dejen un comentario.
Gracias por seguir apoyando la historia.
Hice otro dibujo es Arnold y Helga afuera de la cafetería.
Gracias a todos y asta la próxima semana. 🙋🏻♀️💕
Bạn đang đọc truyện trên: Truyen247.Pro